34 SABER ALTERNATIVODESARROLLO PERSONALEL IMPACTO DEL TRAUMA ENN ESTOS TIEMPOSEde conflicto que vivimosestá cada díamás presente la noticiade los efectos devastadoresde la falta de entendimientoy la resolución violenta de lasdiferencias en la formación delcarácter y el bienestar de laspersonas.Cada día tenemos noticias desgarradorasde guerras, actosterroristas, abusos sexuales,muertes por violencia de género,negligencias y malos tratosa niños,… ¿Cómo influye todoesto en una persona y en la sociedad que estamos construyendo?.En este pequeño artículo me voy a centrar fundamentalmenteen los efectos organísmicos.El trauma es el resultado de la exposición a un acontecimientoestresante inevitable que sobrepasa los mecanismos deafrontamiento de la persona.Según Janet: “Cuando las personas se sienten demasiadosobrepasadas por sus emociones, los recuerdos no puedentransformarse en experiencias narrativas neutras (Janet 1919).El terror ”se convierte en una fobia al recuerdo que impide laintegración (síntesis) del acontecimiento traumático y fragmentalos recuerdos traumáticos apartándolos de la concienciaordinaria”, dejándolos organizados como percepciones visuales,preocupaciones somáticas y reactuaciones conductuales(Janet 1894)La persona traumatizada se vuelve miedosa no sólo del traumaen si, sino de sus reacciones al trauma. Las señales físicas (sensaciones)que una vez aportaron información esencial se vuelvenpeligrosas ya que están asociadas al trauma y funcionancomo recuerdos vívidos que activan la alarma del organismo.Cuando nos enfrentamos a un peligro nuestro organismo poneen marcha nuestros mecanismos de reacción rápida paraenfrentarnos a él, defendiéndonos agrediendo, o huir y evitarlo.Lo peculiar de una situación traumática es que no podemoshacer ni una cosa ni otra; hemos de permanecer en la situaciónde peligro y no podemos hacer nada por evitarlo. Estopuede ocurrir ante una catástrofe natural o después de habertenido una pelea con el agresor y comprobar que no podemosdefendernos; en estos casos seguir defendiéndonos pondríaen peligro nuestra vida. Pensemos en el comportamiento dedos perros peleándose. Cuando uno ya es claramente vencidopor el otro, el que está siendo vencido asume la derrota y sequeda paralizado, como muerto, patas arriba. Esta respuestade parálisis está determinadabiológicamente, es una respuesta“de defensa pasiva”útil para la supervivencia, yaque si el perro vencido siguierapeleando, el otro lo mataría.Lo mismo ocurre en losseres humanos, cuando lasrespuestas de “defensa activas”ya no son eficaces, elorganismo pone en marchamecanismos neurobiológicospara frenar la defensa y activarrespuestas de “defensapasivas”, más adaptativoscara a la supervivencia encasos extremos. Esto es automático y fuera del control voluntariode la persona. <strong>Saber</strong> esto es particularmente importantepara las personas que han padecido traumas y se sienten culpablespor no haber hecho nada activo.Veamos las implicaciones neurofisiológicas. Cuando reaccionamosal peligro, nuestro organismo ha de activarse poniendo enmarcha toda nuestra energía para la acción: elevar el ritmo cardíaco,la respiración, el metabolismo,… Todo ello requiere laactivación de la rama Simpática de nuestro Sistema NerviosoAutónomo (encargado de activar los sistemas neurovegetativosque no están influidos conscientemente). En el caso de un peligroque no podemos evitar y cuando el tratar de defendernosllega a poner en peligro nuestra vida, el organismo pone en marchauna respuesta de supervivencia pasiva: quedarse paralizadosde terror. Ello requiere la activación de la otra rama delSistema Nervioso Autónomo, la Parasimpática; que normalmenteactiva los mecanismos de relajación y recuperaciónenlenteciendo el funcionamiento del sistema (ritmo respiratoriolento, tasa cardiaca,…). En la experiencia traumática esto seproduce de manera que la persona se siente “paralizada, entumecidao sin fuerza en los músculos, con hormigueo en las
SABER ALTERNATIVO35EL ORGANISMO Y LA PSIQUEextremidades, dolores en las piernas y/ocaderas, …”; en casos extremos, la personavive como flotando o no sintiendo elcuerpo y con un sudor o frío intenso queviene de dentro del cuerpo (InmovilidadTónica).Esta respuesta de defensa pasiva es, además,una forma de sobrevivir físicamente,un mecanismo de anestesia natural (porsecreción de endorfinas) que facilita nosentir el dolor (y no sentir el cuerpo). Además,implica una forma de escapar lamente cuando el cuerpo no puede hacerlo:la persona niega lo que está ocurriendo(no es a mi, no soy yo) o “se va”mentalmente a otra parte. Estos mecanismosson conocidos como estados alteradosde consciencia o disociación.Las implicaciones de todo esto son quedebido a que las respuestas (sensaciones)del organismo son tan dolorosas el procesamientocerebral superior (procesamiento cognitivo o procesamientocortical), encargado de asimilar la experiencia y darleun significado lingüístico y adaptativo (útil para la vida) quedaninhibidos, o sea, el cortex no funciona. Esto es vivido como unterror “sin palabras”: La persona no es capaz de narrar lo queestá viviendo; y de esta manera, el recuerdo traumático permanecealmacenado en el organismo como “recuerdos somáticosy sensoriales” que siguen “flotando libremente” y sobrevienenen los momentos más inesperados para la persona, siendo activadospor cualquier estímulo presente (externo o sensación corporalinterna) y sin conexión lógica con la realidad actual.El abordaje y tratamiento adecuado de estas vivencias y recuerdostraumáticos requiere una terapia en la que primero la personaaprenda habilidades de “contención” de las emocionesintensas y habilidades de “enraizamiento” en el propio cuerpo.La persona ha de ser capaz de “sentir y estar en su cuerpo” sinverse en peligro de desbordarse. Estorequiere desarrollar la capacidad deOBSERVAR las sensaciones y ponerlesun nombre; lo que en si mismo es unamanera de empezar a poner el procesamientocortical (cognitivo) en contactocon el procesamiento de carácter somáticoy sensorial. Esto le ayudará a Regularla intensidad de lo que siente sincreerse en peligro de desbordarse o enloquecery de vivirse como “un yo que tieneuna experiencia en su cuerpo” en lugarde “ser” esa experiencia en el cuerpo. Enesencia, esto implica una reeducacióndel sistema nervioso de la persona y laestabilización de sus mecanismos dealerta.Otras técnicas útiles para aprender aestabilizar las emociones intensas ymodular el nivel de hiperactividad del sistemanervioso son la relajación, el yoga,el tai chi, la visualización guiada o el registro de situacionesangustiosas a lo largo del día (de forma que identifiquemos losestímulos activadores de la angustia).Una vez que la persona se siente “al control” de sus sensacionesy emociones es la etapa de revisar los recuerdos dolorososen la relación terapéutica con el objetivo final de lograr teneruna “narración constructiva” de lo vivido en el pasado y experimentarlo que antes eran recuerdos revividos como recuerdosrecordados. Es la etapa de exploración de los recuerdos y revisiónde los significados.La persona severamente traumatizada necesitará finalmenteencontrar una “misión personal” a lo que personalmente vivió.Salvador Fernández.Psicoterapeuta, Analista Transaccional Certificado, Nivel II EMDR.Director ALECES