BOLETIN EXTERNO 4.pdf - Hospital Militar

Crónica de VidaHospitalMilitar CentralSer HospitalarioLA FELICIDADun estado natural25 AÑOS DE LA ASOCIACIÓN DAMASPROTECTORAS DEL SOLDADO“Viven para servir a una nueva vida con esperanza”John Jairo Arenas Vargas, “un paisita” de Montenegro,Quindío muy conocido en el Hospital MilitarCentral, de contextura pequeña, no mide másde metro y medio pero su grandeza se refleja en sugran corazón y en su sonrisa… que reparte gratis atodos sin excepción. Lleva más de 28 años en la Institucióny tiene en su hoja de vida profesional doscarreras: Una como “trapiólogo”, así la llama, esaque le dio la bienvenida a la Entidad en el área deservicios generales, realizando oficios varios y en laque se desempeñó durante 13 años, la otra como“sargento vice plomero”, en el área de mantenimiento,dos actividades que lo enorgullecen porqueesos años le enseñaron a valorar y amar más sutrabajo. En ese trayecto se graduó como bachiller,“levantó a sus 3 hijos, quienes son lo que más amaen la vida y también le dio una carrera a su esposa,quien se fue a buscar suerte en otro país” peroexpresa que “Dios la lleve”. Así es John Jairo, tienepaz interior y es absolutamente feliz, han pasadomuchos años pero aún recuerda que desde sus 7años era muy alegre, vendía empanadas y buñuelosen la estación del tren, así trascurrió su infancia ycuando llegó a la mayoría de edad prestó el serviciomilitar en el año 81, allí estuvo 2 años, los que le sirvieronpara ser mejor persona y hacer amigos quele encaminaron su destino al Hospital Militar Central.No olvida las recomendaciones que le dieronel General Mora y el Capitán en ese entonces “Santos,Cardona José Hermes”, quienes le brindaron laoportunidad de trabajar en la Institución.“No aspira a manjares y lujos, sueña con devolversepara su tierra natal, Montenegro, Quindío”, a disfrutarcon su familia el resto de su vida, con el deseoclaro de seguir repartiendo felicidad a todos los quelo rodean y a recoger lo sembrado, bienestar y tranquilidad.Mientras llega ese día seguirá desde el servicio deurgencias del Hospital Militar Central, diciéndole atodos los usuarios una frase que el construyó; “Somosun equipo a su servicio, ayúdenos a ayudarles”siempre con una sonrisa, siempre dispuesto a servir.Veinticinco años es un tiempo valioso donde se haedificado y consolidado esta Asociación que ha sidodireccionada acertadamente por las señoras de losComandantes de las Fuerzas Armadas de Colombia yque cuenta actualmente con 76 voluntarias esposasde militares en actividad, en uso de buen retiro y esposasde oficiales honorarias que vienen del extranjeroen misiones, hoy en día bajo el liderazgo de la señoraHanna Ramírez de Navas.Como símbolo de la asociación y de los soldados caídosen combate, se realizó una escultura inspirada enla original de “Lest we forget”, del artista Timothy P.Shmalz, obra de arte que tiene su aval y un significadomuy importante como es la búsqueda de la pazen nuestro país : “Esta obra no será terminada hastacuando las minas no afecten más a nuestros soldadosy civiles de Colombia”, elaborada en resina y broncey; pintada por nuestros héroes, la cual se comercializacon el fin de adquirir recursos para esta noble causa.Las Damas Protectoras del Soldado están allí para brindarlea él y a su familia apoyo, pues ellas los acompañandesde la crisis del suceso hasta que nuevamentese recuperan y vuelvan a la vida y a la sociedad.Una asociación legalmente constituida que busca através de diferentes actividades recaudar fondos económicospara cumplir con muchos sueños, el proyectomás inmediato es lograr adquirir la sede del Hogar dePaso, para la que las familias que vienen de diferentespartes del país a visitar a los soldados, tengan un lugara donde llegar.Es importante destacar los talleres artesanales dondelos soldados están elaborando diferentes artículoscomo agendas, tarjetas navideñas y carteras, con unsignificado grandioso donde con retazos de camufladoy elementos sencillos logran productos bellísimosy creativos desarrollando todo su talento y lo más importante,que llevan la identidad de un buen soldado,símbolo de la Patria. Productos que se pueden adquiriren el tercer piso, norte del Hospital Militar Centralen la sede de las Damas Protectoras del Soldado. Informaciónen los teléfonos 348 6868 - extensión 1415.e-mail asociaciondamasprotectorasdelsoldado@hotmail.comAdemás, a través de una alianza con Cafam, Caja deCompensación Familiar se logró un stand para comercializarlos productos.Así mismo, se está desarrollando el primer “Taller deSillas de Ruedas”, donde los soldados han aprendidono sólo a hacerlas, sino también a repararlas cambiándolesla lona, las llantas (según el terreno) y demáselementos que se han deteriorado para que le sirvana otros compañeros que las necesitan, entre otras actividadesestán los “Cultivos Hidropónicos y PollitosFelices”, donde a través de convenios con el Sena hanaprendido esta labor y tienen el acompañamientopara desarrollarlos de la mejor manera.En educación la Asociación tiene alianzas con diferentesinstituciones donde se les permite a los soldadoscapacitarse según sus aspiraciones y se les otorga becascon las cuales acceden a estudiar e instruirse endiferentes oficios.Por último, no podemos concluir sin dejar de exaltar lainvaluable labor que realizan las señoras integrantesde las Damas Protectoras a favor de los Soldados deColombia.10 Nuestro reto, la excelencia en salud Noticias HMC11