UNIVERSIDAD DE PLAYA ANCHA FACULTAD DE ... - Mauroyberra.cl
UNIVERSIDAD DE PLAYA ANCHA FACULTAD DE ... - Mauroyberra.cl UNIVERSIDAD DE PLAYA ANCHA FACULTAD DE ... - Mauroyberra.cl
-Yo tampoco hubiera reparado -dijo [el abogado] al final-. Siempre oídecir que los indios eran rastreadores excelentes -añadió con unasonrisa.Durante su último año de estudios en la Universidad de Nuevo México,Chee había tomado la decisión de no molestarse jamás antesemejantes tópicos. Pero raras veces conseguía atenerse a sudecisión.-Soy un navajo -dijo-. En nuestro lenguaje, no existe la palabra “indio”.Tenemos nombres concretos. Utes, hopis, apaches. Un blanco es unbelacani; un mexicano es un nakai. Y así sucesivamente. Algunosnavajos son muy buenos rastreadores. Y otros no lo son. Eso seaprende estudiando, como el derecho. (en Vendaval..., p.71).Hay aceptación, en cambio, cuando Chee se da cuenta que a pesarde haber estado tres años en la universidad, todavía no sabe distinguir a unsueco de un inglés o a un judío de un libanés. Sólo entonces “... accedió areconocer que aquello que decían los blancos de que “todos los indios eraniguales” contenía una parte de verdad.” (en Vendaval.. ., p. 236). Su propiaexperiencia modificó su punto de vista.La incomprensión hacia aspectos de la cultura de los blancos semanifiesta en la confrontación de formas esenciales de ver el mundo. Porejemplo, la cuestión de la venganza. La hermana del asesinado Paulingconversa con Chee:- [...] No permitiré que el asesino se largue como si tal cosa.-A veces ocurre precisamente eso -dijo Chee.-No -dijo la señora Pauling con súbita vehemencia-. No saldrán bienlibrados, ¿lo entiende usted?-Pues, no demasiado -contestó Chee.-¿Sabe usted lo que significa “ojo por ojo y diente por diente”?-Lo he oído decir.-¿No cree en la justicia? ¿No cree que hay que nivelar cuentas?-¿Por qué no?- contestó Chee, encogiéndose de hombros.” (enVendaval..., p. 135-136).Y es que en la cultura navaja, los comportamientos transgresores seentendían porque las personas habían sido poseídas por los “oscuros64
vendavales” (el título de la novela, su traducción por lo menos, es Vendavalde tinieblas) que las hacían perder el control transitoriamente. De ahíentonces queSegún la mentalidad de Chee, la idea de castigarlas hubiera sido unalocura semejante a la del acto inicial. Sabía que era la actitud habitualde la cultura blanca, pero jamás se había enfrentado con ella de unamanera tan directa. (en Vendaval..., p. 136).Estas formas de conflicto interculturales llegan a resultados másdramáticos cuando se trata de decisiones tomadas a nivel institucional, o deEstado y con consecuencias que implican a toda la comunidad tribal. Ya que,estos arbitrios e intervenciones, cada vez postergan y subordinan más la vidacultural de estas minorías étnicas. Sin embargo, debemos ser más precisos.Estos contextos no recrean solamente un conflicto de oposición binaria a lamanera cultura de los blancos versus cultura de los no blancos, sino quedentro de esta última también se producen conflictos y choques, dotando altema de mayor heterogeneidad cultural. Ya mencionamos el histórico -eincluso mítico, como se verá- odio entre las tribus hopi y navaja. Laintervención del hombre blanco, mediante sus instituciones, no ayuda aapaciguarlas; todo lo contrario. Chee, enfrentado a un caso de vandalismocontra un molino de viento ubicado en ex-territorios navajos concedidosahora por concesión del gobierno a los hopi, se permite la siguiente reflexión:Chee tomó el café, estudió a los restantes clientes del comedor ypensó en la sequía, en el paradero de Dedos de Hierro Musket y enlos antagonismos étnicos. Aquél (sic), en concreto, formaba parte deuna abstracción incluida en las leyendas guerreras de los hopi: losenemigos matados por los Dioses Gemelos de la Guerra hopis erannavajos, de la misma forma que los enemigos matados por el PuebloSagrado navajo eran indios utes, kiowas o taos. Sin embargo, la largalucha por las tierras de la Reserva de Utilización Conjunta habíaconferido cierta realidad a la abstracción en las mentes de algunos.Ahora, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos había dictadofinalmente sentencia, los hopi habían ganado y nueve mil navajosperderían los únicos hogares que sus familias podían recordar. Y la65
- Page 28 and 29: CAPÍTULO IISOBRE EL CONCEPTO DE HI
- Page 30 and 31: y la hibridación interculturales.
- Page 32 and 33: modernidad que definió un proyecto
- Page 34 and 35: modernidad, sino muchas veces se en
- Page 36 and 37: delincuente, y una sociedad más co
- Page 38 and 39: El siglo XIX da al nacimiento de la
- Page 40 and 41: hasta la policía puede ser respeta
- Page 42 and 43: las recién citadas palabras de Gub
- Page 44 and 45: El local cerrado es el sitio guarda
- Page 46 and 47: 29). Y más exactamente, hacia su m
- Page 48 and 49: seguirá una evolución que no arri
- Page 50 and 51: altura al género. Quisieron iguala
- Page 52 and 53: mundo” (citado por Franken, 2003:
- Page 54 and 55: que tomar bien en serio, y no un ju
- Page 56 and 57: expresividad genérica, en el lengu
- Page 58 and 59: que ese testimonio se haga crítica
- Page 60 and 61: 4.1. Arthur Upfield y su detective
- Page 62 and 63: sanguínea que por medio del estudi
- Page 65 and 66: elatos y descripciones tendientes a
- Page 67 and 68: pensamiento, como sin duda ya lo sa
- Page 69 and 70: estaba hablando del pasado, de viej
- Page 71 and 72: consigues, nos van a poner verdes!
- Page 73 and 74: 4.2. Tony Hillerman y su detective
- Page 75 and 76: aspirante a yataalii, cantor y homb
- Page 77: También, estos espacios reflejan e
- Page 81 and 82: sus investigaciones en su conocimie
- Page 83 and 84: principalmente su método de acceso
- Page 85 and 86: de la siguiente manera, tras ser ac
- Page 87 and 88: corruptos agentes de la DEA. Tambi
- Page 89 and 90: de este grupo, que comenzó a novel
- Page 91 and 92: (Linchamiento..., p. 46). Nuevament
- Page 93 and 94: del desfile, y es aquí donde enfre
- Page 95 and 96: como sucede al final de la novela,
- Page 97 and 98: La relación entre el equipo de det
- Page 99 and 100: BIBLIOGRAFÍAObras literariasHiller
- Page 101 and 102: García-Corales, Guillermo & Mirian
- Page 103 and 104: Sobre Arthur Upfield:(Citado 26 de
- Page 105 and 106: Pero, para efectos de nuestra hipó
- Page 107: del canon de lo policial y de una r
vendavales” (el título de la novela, su traducción por lo menos, es Vendavalde tinieblas) que las hacían perder el control transitoriamente. De ahíentonces queSegún la mentalidad de Chee, la idea de castigarlas hubiera sido unalocura semejante a la del acto inicial. Sabía que era la actitud habitualde la cultura blanca, pero jamás se había enfrentado con ella de unamanera tan directa. (en Vendaval..., p. 136).Estas formas de conflicto interculturales llegan a resultados másdramáticos cuando se trata de decisiones tomadas a nivel institucional, o deEstado y con consecuencias que implican a toda la comunidad tribal. Ya que,estos arbitrios e intervenciones, cada vez postergan y subordinan más la vidacultural de estas minorías étnicas. Sin embargo, debemos ser más precisos.Estos contextos no recrean solamente un conflicto de oposición binaria a lamanera cultura de los blancos versus cultura de los no blancos, sino quedentro de esta última también se producen conflictos y choques, dotando altema de mayor heterogeneidad cultural. Ya mencionamos el histórico -ein<strong>cl</strong>uso mítico, como se verá- odio entre las tribus hopi y navaja. Laintervención del hombre blanco, mediante sus instituciones, no ayuda aapaciguarlas; todo lo contrario. Chee, enfrentado a un caso de vandalismocontra un molino de viento ubicado en ex-territorios navajos concedidosahora por concesión del gobierno a los hopi, se permite la siguiente reflexión:Chee tomó el café, estudió a los restantes <strong>cl</strong>ientes del comedor ypensó en la sequía, en el paradero de Dedos de Hierro Musket y enlos antagonismos étnicos. Aquél (sic), en concreto, formaba parte deuna abstracción in<strong>cl</strong>uida en las leyendas guerreras de los hopi: losenemigos matados por los Dioses Gemelos de la Guerra hopis erannavajos, de la misma forma que los enemigos matados por el PuebloSagrado navajo eran indios utes, kiowas o taos. Sin embargo, la largalucha por las tierras de la Reserva de Utilización Conjunta habíaconferido cierta realidad a la abstracción en las mentes de algunos.Ahora, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos había dictadofinalmente sentencia, los hopi habían ganado y nueve mil navajosperderían los únicos hogares que sus familias podían recordar. Y la65