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Uno de los autores, Oliver Culmann,comentó que el propósito de su trabajofotográfico fue “saber si la escuela es unaforma de imponer un modo de pensamientoo al contrario, si es el medio paradarle a los niños el bagaje intelectual quemás tarde les permitirá ser libres. Las s itua -cio nes que encontramos fueron tan va ria -das, y a veces tan contradictorias, quelle gados al término de este trabajo, com -pro bamos que allí donde esperábamosobtener respuestas, encontramos a menu donuevas preguntas. Estas dudas y cues tio -namientos forman parte de este reportaje.Los mundos que atravesamos y de loscua les hablamos aquí, son los de nuestrasimpresiones y nuestros recuerdos”.Añadió que de esta investigación gráficasurgieron paradojas y hallazgos comola gran rebelión de la niñez y la juventudsobre valores debilitados que ya no aceptan,confundiendo su derecho humanocon su derecho a lo inhumano. “Quizádos sean las principales causas de esas re -ALUMNO CASTIGADO. ESCUELA PÚBLICA FUNDAMENTAL ENNOVAKCHOTT, MAURITANIA.PATIO DE RECREO DE LA ESCUELA KANATAMAT, SCHEFFERVILLE, GRAN NORTE, CANADÁ.be liones en las escuelas: La falta de ubica -ción de las claves del éxito social de los ni -ños y jóvenes, y el miedo al miedo”,concluyó.Culmann y Jacob reflejan lo anterior ensus imágenes, por ejemplo las dedicadas aun pueblo de Camerún, en el que registra -ron la emulsión obligada de esa culturacon el pensamiento impuesto por unasher manas católicas de Francia, que en vezde conseguir ayudar a los habitantes de laregión, conocieron de los nativos la rebelióna lo nuevo, a lo occidental.Los fotógrafos afirman que para losmu chachos de hoy, como de todas las épo -cas, la escuela sigue siendo el sitio idealpa ra el aburrimiento, sólo piensan en loque no pueden hacer y no piensan enlo que sí pueden, pero antes deben saberque la razón es la única arma para enfren -tarse al mundo de la ambición, el engañoy el desencanto. Y allí viene el primer signode rebelión, porque si es algo naturalque el hombre y la mujer quieran convertirsus sueños en realidad, la escuela impo -ne la concepción de que los sueños sonenemigos de la razón. Entonces, ¿qué ele -men tos podrán tener los niños y jóvenespara tener éxito en la sociedad, si al mismotiempo que poseen muchos conoci -mientos no les interesa emprender nada?En su paso por México, Culmann y Ja -cob advirtieron que en la mayoría de losca sos se recurre al control del alumno através del miedo, por ejemplo como el deser reprobado, y que descubrir, existir yentender son verbos que entran en acciónen los niños, pero por miedo y no por iniciativa.Los fotógrafos describen la rebelióncontra el miedo, y contra el miedo al mie -do: se nos enseña a abrirnos camino sinmiramientos; se acepta el juego de la competenciadisfrazada de esperanza, y se nosquiere inculcar el deber por el deber. Am -bas rebeliones no traen libertad. Al contrario,la destruyen y la corrompen porquela verdadera libertad es aquella basadaen la responsabilidad hacia uno mismo ylue go a la sociedad donde nos ha tocadovivir.Un reto entonces para las escuelas esque el maestro aliente los sueños de losalumnos de manera realista según el en tor -no en el que se desarrollan. Los mundos dela escuela, representan un trabajo sin res -puesta, pero sí de reflexión sobre la ins ti tu -ción escolar y las libertades del ser. (AS)b18 el BiBliotecario