2.8.1. TRATAMIENTO EMPÍRICO ANTISECRETOREn los últimos años y hasta la incorporación <strong>de</strong> la <strong>de</strong>tección y tratamiento <strong><strong>de</strong>l</strong>H. pylori, el tratamiento empírico ha sido la estrategia más utilizada. Estaestrategia tiene un coste bajo, permite el alivio rápido <strong>de</strong> los síntomas y, enmuchos casos, su remisión. También optimiza y evita la realización <strong>de</strong>endoscopias. Entre sus riesgos se ha <strong>de</strong> <strong>con</strong>si<strong>de</strong>rar la posible <strong>de</strong>moradiagnóstica <strong>de</strong> patología orgánica en un pequeño grupo <strong>de</strong> <strong>paciente</strong>s y elretraso <strong>de</strong> un tratamiento efectivo <strong>de</strong> erradicación <strong><strong>de</strong>l</strong> H. pylori en aquellos<strong>paciente</strong>s que presenten una úlcera péptica.1aEsta estrategia <strong>con</strong>templa el tratamiento <strong>con</strong> inhibidores <strong>de</strong> la bomba <strong>de</strong>protones (IBP), anti-H2 o procinéticos. Los resultados <strong>de</strong> una revisiónsistemática han mostrado que los IBP, comparados <strong>con</strong> los anti-H2 y <strong>con</strong> losantiácidos, presentan una mayor eficacia en la resolución <strong>de</strong> los síntomas 109,110 , <strong>con</strong> unos RR calculados a partir <strong>de</strong> los datos originales <strong>de</strong>,respectivamente, 1,62 (IC <strong><strong>de</strong>l</strong> 95 %: 1, 40, 1,87) y 1,48 (IC <strong><strong>de</strong>l</strong> 95 %: 1,30-1,68). Un 40 % <strong>de</strong> los <strong>paciente</strong>s mejoraron <strong>con</strong> anti-H2 y antiácidos y un 20 %adicional mejoraron <strong>con</strong> los IBP. No se en<strong>con</strong>traron diferencias entre anti-H2y antiácidos, entre IBP (omeprazol) y procinéticos (cisaprida), ni entre losdistintos IBP. La mayor eficacia <strong>de</strong> los IBP en algunos casos podría ser<strong>de</strong>bida a que muchos <strong>de</strong> los <strong>paciente</strong>s incluidos presentaban síntomas <strong>de</strong>reflujo gastroesofágico o una úlcera péptica 111, 11 2 . No obstante, la bajacalidad <strong>de</strong> los estudios disponibles y las diferencias <strong>de</strong> criterio en la inclusión<strong>de</strong> los <strong>paciente</strong>s y su diagnóstico restan aplicabilidad a estos resultados. Lafutura actualización <strong>de</strong> esta revisión <strong>con</strong> un metaanálisis <strong>de</strong> datosindividuales 110 podría facilitar la interpretación <strong>de</strong> estos resultados.Los ECA realizados posteriormente a esta revisión han comparado los anti-H2(ranitidina) y procinéticos (cisaprida), sin en<strong>con</strong>trar diferencias significativasentre ambos tratamientos 113 . No obstante, los posibles efectos adversoscardíacos <strong>de</strong> la cisaprida restan relevancia a estos resultados. En cuanto a lacinitaprida, no existen datos suficientes que permitan <strong>con</strong>ocer su eficacia eneste <strong>con</strong>texto.2bA pesar <strong><strong>de</strong>l</strong> cuestionado valor <strong>de</strong> los diferentes subgrupos <strong>de</strong> síntomas <strong>de</strong> la<strong>dispepsia</strong>, algunos estudios tienen en cuenta la posible causa subyacente ala hora <strong>de</strong> seleccionar el tipo <strong>de</strong> tratamiento empírico 114, 11 5 . Los Anti-H2 ylos IBP serían <strong>de</strong> elección ante los síntomas que sugieren relación <strong>con</strong> lasecreción ácida (tipo ulceroso) y los procinéticos, cuando sugieren untrastorno <strong>de</strong> motilidad (tipo dismotilidad). En este sentido, los resultados <strong>de</strong>un reciente ECA 116 <strong>con</strong> cuatro diferentes opciones <strong>de</strong> tratamiento empírico(<strong>con</strong> omeprazol, <strong>con</strong> procinéticos, a partir <strong>de</strong> los síntomas guía <strong>con</strong> anti-H2 o<strong>con</strong> procinéticos) <strong>con</strong>cluyen que los síntomas guía podrían ser utilizados a lahora <strong>de</strong> escoger la terapia empírica25
A pesar <strong>de</strong> que no existen estudios sobre la duración óptima <strong><strong>de</strong>l</strong> tratamiento<strong>con</strong> IBP, en general éste se realiza durante 4 semanas. Al finalizar esteperíodo se ha <strong>de</strong> valorar si los síntomas han remitido, en cuyo caso seinterrumpirá el tratamiento. Si no existe mejora o ésta es solamente parcial, eltratamiento se prolongará durante otras 4 semanas. Cuando los síntomas no3, 6.mejoran tras 8 semanas <strong>de</strong> tratamiento, es necesario investigarLas medidas higiénico-dietéticas y el tratamiento sintomático en el<strong>paciente</strong> <strong>con</strong> síntomas <strong>de</strong> <strong>dispepsia</strong> pue<strong>de</strong>n ser beneficiosos.La estrategia inicial mediante el tratamiento empírico <strong>con</strong> IBP se hamostrado eficaz en cuanto a la mejoría <strong>de</strong> los síntomas.ALos síntomas guía podrían ser útiles para la elección <strong><strong>de</strong>l</strong> tratamientoempírico (antisecretores para la <strong>dispepsia</strong> tipo ulceroso y procinéticospara la <strong>dispepsia</strong> tipo dismotilidad).C2.8.2. INVESTIGACIÓN DE LA EXISTENCIA DE LESIONES MEDIANTEENDOSCOPIA2bLos resultados <strong>de</strong> una revisión sistemática Cochrane <strong>con</strong> un RR calculado apartir <strong>de</strong> los datos originales <strong>de</strong>: 1,08 (IC <strong><strong>de</strong>l</strong> 95 %: 0,99-1,17) 110 , otrasrevisiones 117 , algunos ECA realizados posteriormente 116, 118 y estudiosobservacionales 119 no apoyan la superioridad <strong>de</strong> estrategias basadas en laendoscopia inicial frente al tratamiento empírico en los <strong>paciente</strong>s <strong>con</strong><strong>dispepsia</strong> no investigada. No obstante, la heterogeneidad <strong>de</strong> los estudios y subaja calidad dificultan la interpretación <strong>de</strong> estos resultados 117 . A<strong>de</strong>más, estosestudios no son representativos <strong>de</strong> la práctica clínica actual, ya que el papel<strong><strong>de</strong>l</strong> H. pylori ha modificado en los últimos años el <strong>manejo</strong> <strong>de</strong> este problema <strong>de</strong>salud.La estrategia mediante la endoscopia inicial en la <strong>dispepsia</strong> noinvestigada no se ha mostrado más eficaz que el tratamiento empírico.BEn <strong>paciente</strong>s que no acepten la incertidumbre diagnóstica(fundamentalmente cáncer <strong>de</strong> estómago), la endoscopia inicial podríaestar indicada.26
- Page 2: INSTITUTO GUATEMALTECO DE SEGURIDAD
- Page 5 and 6: Los grados de recomendación son cr
- Page 7 and 8: Las GPC ayudan a los profesionales
- Page 9 and 10: 2.11.3. Medidas higiénico-dietéti
- Page 11 and 12: GUÍA DE BOLSILLO de Enfermedad Pé
- Page 13 and 14: GUÍA DE BOLSILLO de Enfermedad Pé
- Page 15 and 16: GUÍA DE BOLSILLO de Enfermedad Pé
- Page 17 and 18: GUÍA DE BOLSILLO de Enfermedad Pé
- Page 19 and 20: 1 INTRODUCCIÓN1.1. ANTECEDENTESLa
- Page 21 and 22: 1.3. OBJETIVOS1.3.1. Proporcionar i
- Page 23 and 24: 2 CONTENIDO2.1. DEFINICIÓN Y TERMI
- Page 25 and 26: Así mismo, la incidencia del cánc
- Page 27 and 28: Los trastornos psicológicos y psiq
- Page 29 and 30: 2bA partir de la historia clínica,
- Page 32 and 33: Estos modelos, construidos mediante
- Page 36 and 37: 2.8.3. INVESTIGACIÓN DE LA INFECCI
- Page 38 and 39: Estos aspectos ya fueron señalados
- Page 40 and 41: 2.9. Técnicas y/o pruebas diagnós
- Page 42 and 43: Es necesario evitar la toma de fár
- Page 44 and 45: 2.10.2.2. Si existen escalas de pun
- Page 46 and 47: Algoritmo 2. Manejo del paciente co
- Page 48 and 49: El profesional sanitario puede ayud
- Page 50 and 51: Se disponen de pocos ECA que compar
- Page 52 and 53: Actualmente no se conoce cómo sele
- Page 54 and 55: Algoritmo 3. Paciente con dispepsia
- Page 56 and 57: 2.12.2. PAUTAS PARA LA ERRADICACIÓ
- Page 58 and 59: Como tratamiento erradicador de seg
- Page 60 and 61: En la úlcera gástrica2.12.7. ÚLC
- Page 62 and 63: 2.12.9.11. Si una vez finalizado el
- Page 64 and 65: Algoritmo 4. Paciente con úlcera d
- Page 66 and 67: 3 INFORMACIÓN PARA EL USO RACIONAL
- Page 68 and 69: Subgrupo Efectos Adversos Contraind
- Page 70 and 71: Subgrupo Efectos adversos Contraind
- Page 72 and 73: 4 AnexosIDESCRIPCIÓN DE LA REVISI
- Page 74 and 75: Valor diagnóstico de la dispepsia.
- Page 76 and 77: IINIVELES DE EVIDENCIA Y GRADOS DE
- Page 78 and 79: Estudios de historia natural y pron
- Page 80 and 81: DiagnósticoGrado derecomendaciónA
- Page 82 and 83: IIIDEFINICIONES DE ENTIDADES Y TÉR
- Page 84 and 85:
IVPRUEBAS PARA LA DETECCIÓN DEL HE
- Page 86 and 87:
VSIGNIFICADO CLÍNICO DE LOS HALLAZ
- Page 88 and 89:
VIFACTORES FACILITADORES Y BARRERAS
- Page 90 and 91:
VIIIINFORMACIÓN PARA PACIENTES¿QU
- Page 92 and 93:
¿QUÉ TRATAMIENTO HE DE REALIZAR?E
- Page 94 and 95:
XDIRECCIONES DE INTERÉS EN INTERNE
- Page 96 and 97:
XI REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS© Ma
- Page 98 and 99:
26. Kay L, Jorgensen T. Epidemiolog
- Page 100 and 101:
54. Hansen JM, Bytzer P, Schaffalit
- Page 102 and 103:
84. Breslin NP, Thomson AB, Bailey
- Page 104 and 105:
114. Ghosh S, Kinnear M. Dyspepsia
- Page 106 and 107:
142. Delaney BC, Wilson S, Roalfe A
- Page 108 and 109:
173. Soo S, Moayyedi P, Deeks J, De
- Page 110 and 111:
202. Delaney B, Moayyedi P, Forman
- Page 112 and 113:
228. Fischbach LA, Goodman KJ, Feld