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Anticuerpos Anti-Péptido Citrulinado Cíclico en Artritis Reumatoide ...

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<strong><strong>Anti</strong>cuerpos</strong> <strong>Anti</strong>-Péptido <strong>Citrulinado</strong> Cíclico <strong>en</strong> <strong>Artritis</strong> <strong>Reumatoide</strong>, <strong>Artritis</strong> Psoriática y Otras EnfermedadesBasados <strong>en</strong> lo anterior, un gran número de nuevosanticuerpos se han investigado <strong>en</strong> un int<strong>en</strong>to por <strong>en</strong>contrarel “Marcador Ideal” capaz de permitir no sólo el diagnóstico precoz de la <strong>en</strong>fermedad, sino que también facilitar eldiagnóstico difer<strong>en</strong>cial con otras artropatías inflamatoriase idealm<strong>en</strong>te t<strong>en</strong>er valor pronóstico y es aquí donde aparec<strong>en</strong> los <strong><strong>Anti</strong>cuerpos</strong> <strong>Anti</strong>-Péptido <strong>Citrulinado</strong> Cíclico(<strong>Anti</strong>-CCP).Orig<strong>en</strong> de los anticuerpos <strong>Anti</strong>-Péptido<strong>Citrulinado</strong> CíclicoLa historia del desarrollo de los <strong>Anti</strong>-CCP se remonta a1964, cuando Ni<strong>en</strong>huis y Mand<strong>en</strong>a describieron un patrónde inmunofluoresc<strong>en</strong>cia perinuclear característico sobrelas células de la mucosa bucal de paci<strong>en</strong>tes con AR, designando a esta proteína desconocida como “Factor Perinuclear”, y a los anticuerpos capaces de detectarla, comolos anticuerpos anti-factor perinuclear (APF). (3) Luego,<strong>en</strong> 1976 Young continuó con esta línea de investigación,describi<strong>en</strong>do la pres<strong>en</strong>cia de un nuevo patrón de fluoresc<strong>en</strong>cia, esta vez <strong>en</strong> relación a los filam<strong>en</strong>tos epiteliales, al<strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tar el suero de paci<strong>en</strong>tes con AR a tejido esofágicode rata, describi<strong>en</strong>do los llamados anticuerpos antiqueratina (AKA). Ambos autoanticuerpos demostraron ser muyespecíficos para AR; sin embargo, su baja s<strong>en</strong>sibilidad(cercana al 50%) y la falta de estandarización de ambastécnicas contribuyeron para que la determinación de estos(3, 4)autoanticuerpos no se expandiera.Posteriorm<strong>en</strong>te, <strong>en</strong> 1995, Sebbag demostró que tantolos APF como los AKA compartían el mismo determinanteantigénico que correspondería a una proteína de agregación filam<strong>en</strong>taria conocida como Filagrina pres<strong>en</strong>te <strong>en</strong>los tejidos epidérmicos, proponi<strong>en</strong>do <strong>en</strong>tonces el nombrecomún de anticuerpos anti-filagrina (AFA). (3-5)La Filagrina es una proteína agregante de filam<strong>en</strong>tosque participa <strong>en</strong> la hidratación celular y forma parte delepitelio al asociarse con filam<strong>en</strong>tos de keratina. Es producida durante los últimos estadios de la difer<strong>en</strong>ciaciónde las células epiteliales y sintetizada como una proteínaprecursora fosforilada llamada profilagrina, que conti<strong>en</strong>ede 10 a 12 repeticiones de filagrina homólogas, pero noidénticas, las cuales son liberadas por proteólisis durante(1, 3, 4, 6)la difer<strong>en</strong>ciación celular.Aun así, el determinante antigénico mayor de losAFA no estaba claram<strong>en</strong>te definido hasta que, <strong>en</strong> 1998,Schellek<strong>en</strong>s comprobó que los AFA no se dirigían contratoda la molécula completa de filagrina, sino contra ciertosLafragm<strong>en</strong>tos específicos caracterizados por la pres<strong>en</strong>cia de(3, 4)residuos de citrulina.citrulina es una forma modificada de la arginina ycorresponde a un aminoácido universal <strong>en</strong> la economía corporal, pero no tradicional, ya que no se incorpora a la cad<strong>en</strong>apolipeptídica durante el proceso de síntesis, sino que se g<strong>en</strong>eraa partir de una modificación postraduccional de la argininapor acción de la <strong>en</strong>zima peptidil arginina deaminasa (PAD),que convierte la peptidilarginina <strong>en</strong> peptidilcitrulina. (3)Entonces, el blanco antigénico de todos los autoanticuerpos ya descritos eran estos residuos peptídicoscitrulinados, d<strong>en</strong>ominándose <strong>en</strong>tonces al conjunto deautoanticuerpos (AKA, APF y AFA) como <strong><strong>Anti</strong>cuerpos</strong><strong>Anti</strong>-Péptido Cíclico <strong>Citrulinado</strong> (<strong>Anti</strong>-CCP), que correspond<strong>en</strong> actualm<strong>en</strong>te a los autoanticuerpos más específicam<strong>en</strong>te relacionados con AR, de forma que su pesquisa <strong>en</strong>un título significativo (sobre 200 UI medidos por ELISA)t<strong>en</strong>dría una s<strong>en</strong>sibilidad aproximada del 70% con unaespecificidad cercana al 98% para AR. (3-6)Posteriorm<strong>en</strong>te el mismo autor demostró que la citrulinización de los péptidos involucrados era estrictam<strong>en</strong>t<strong>en</strong>ecesaria para que las moléculas de filagrina fues<strong>en</strong> reconocidas por los <strong>Anti</strong>-CCP, de forma que al ser expuestosa moléculas no citrulinadas, como la profilagrina, los<strong>Anti</strong>-CCP no exhibían reactividad, pero sí con la filagrinamadura, ya que <strong>en</strong> este proceso los polipéptidos que formanla profilagrina son desfosforilados y alrededor del 20% de(3, 4)las argininas son citrulinadas por la <strong>en</strong>zima PAD.Finalm<strong>en</strong>te, Schellek<strong>en</strong>s estudió mediante técnicas deELISA los fragm<strong>en</strong>tos citrulinados de la filagrina medianteel uso de motivos comunes o públicos de la molécula,obt<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do <strong>en</strong> sus <strong>en</strong>sayos una s<strong>en</strong>sibilidad del 76% conuna especificidad del 96% para AR; éstos son los llamados<strong>Anti</strong>-CCP de primera g<strong>en</strong>eración (<strong>Anti</strong>-CCP1). Posteriorm<strong>en</strong>te, mediante la técnica del ciclado, g<strong>en</strong>eró libreríasde péptidos cíclicos, con lo que mejoró la especificidadde la técnica, llegando a alrededor del 98%, si<strong>en</strong>do estosanticuerpos de segunda g<strong>en</strong>eración (<strong>Anti</strong>-CCP2) los más(1, 3, 4)utilizados <strong>en</strong> la actualidad.Relación de <strong>Anti</strong>-CCP y el Epítope Compartido<strong>en</strong> la Patogénesis de la ARComo ya fue m<strong>en</strong>cionado, la citrulinación es un proceso biológico que involucra la conversión <strong>en</strong>zimática(desiminación) de los residuos de arginina cont<strong>en</strong>idos <strong>en</strong>las proteínas, pero lo que no hemos com<strong>en</strong>tado son loscambios fisicoquímicos que se produc<strong>en</strong> <strong>en</strong> estas moléculas y que consist<strong>en</strong> <strong>en</strong> un pequeño cambio <strong>en</strong> la masamolecular del péptido y la pérdida de una carga positiva(arginina) hacia una carga neutra (citrulina), pese a lo cualel péptido manti<strong>en</strong>e sus características polares. (4)Reumatología 2007; 23(4):142-150143


Nicole Jadue A.Esta modificación le permite al péptido citrulinadot<strong>en</strong>er una estructura más flexible, dado que carece de ciertas interacciones intramoleculares, de forma que pierdeparte de su configuración estructural (se despliega),haciéndose más susceptible al clivaje proteico por otras<strong>en</strong>zimas que permit<strong>en</strong> la g<strong>en</strong>eración de nuevas interacciones, pero esta vez intermoleculares. Esta nueva estructuradel péptido podría ser reconocida como extraña por el sistema inmune cuando es pres<strong>en</strong>tada por ciertas moléculasdel complejo mayor de histocompatibilidad humano claseII, reconocidas por conferir una mayor susceptibilidad aldesarrollo de AR, dado que pose<strong>en</strong> el llamado “Epítope(4, 7, 8)Compartido”.Estas moléculas del MHC clase II, principalm<strong>en</strong>te alelosdel HLA DR4, compart<strong>en</strong> una secu<strong>en</strong>cia aminoacídicaconocida como “Epítope Compartido” (QKRAA, QRRAAo RRRAA) que estaría ubicado <strong>en</strong> la tercera región hipervariable de la cad<strong>en</strong>a beta de las moléculas DRB1, DR6y DR10, de modo que las moléculas del HLA que pose<strong>en</strong>esta secu<strong>en</strong>cia se caracterizan porque uno de sus bolsillosde unión peptídica conocido como P4 adquiere carga positiva, haci<strong>en</strong>do que los péptidos que pose<strong>en</strong> arginina no seunan a él, dado que sus cargas se repel<strong>en</strong>. En cambio, lospéptidos citrulinados, que, como ya vimos, pose<strong>en</strong> carganeutra pero manti<strong>en</strong><strong>en</strong> sus características polares, se un<strong>en</strong>mucho más efici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te con moléculas HLA DR4 <strong>en</strong>comparación con péptidos no citrulinados y de este modopued<strong>en</strong> ser pres<strong>en</strong>tados a Linfocitos T (LT). (7-9)Es aquí donde se ha planteado que los péptidoscitrulinados actuarían como pot<strong>en</strong>ciales “Péptidos Artritogénicos”, ya que <strong>en</strong> ciertas condiciones (ambi<strong>en</strong>tes proinflamatorios) podrían ser reconocidos como extraños porel sistema inmune, de forma de estimular a LT capaces degatillar la activación de Linfocitos B (LB) con producciónde <strong>Anti</strong>-CCP dirigidos contra los péptidos citrulinados(8, 9)pres<strong>en</strong>tados por la molécula del HLA-II a los LT.En el otro extremo, <strong>en</strong>contramos a las moléculas delHLA que carec<strong>en</strong> del epítope compartido y se caracterizanporque el bolsillo P4 ti<strong>en</strong>e carga negativa, de forma que laarginina se une efici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te y al ser pres<strong>en</strong>tada a los LTse reconoce como propia, g<strong>en</strong>erando la selección negativade los LT autorreactivos con el consecu<strong>en</strong>te desarrollo de(8, 9)tolerancia periférica y aus<strong>en</strong>cia de autoinmunidad.Entre los int<strong>en</strong>tos por explicar por qué los péptidoscitrulinados actuarían como péptidos artritogénicos seha planteado que existiría cierto mimetismo molecular<strong>en</strong>tre la secu<strong>en</strong>cia aminoacídica del epítope compartido(QKRAA) con la glicoproteína número 10 del Virus deEpstein-Barr y también con algunas proteínas de choquetérmico de la Escherichia coli, por lo que esta secu<strong>en</strong>cia ledaría a la molécula que la posee la capacidad de pres<strong>en</strong>tarantíg<strong>en</strong>os propios como extraños y des<strong>en</strong>cad<strong>en</strong>ar la respuesta inmune que da inicio a la <strong>en</strong>fermedad. (7-9)Pero ¿cómo se produce la citrulinización de péptidos<strong>en</strong> el espacio articular? Se sabe que para la acción de la<strong>en</strong>zima PAD son necesarias elevadas conc<strong>en</strong>traciones decalcio intracelular con valores de hasta 100 veces el valornormal de una célula viva, de forma que es frecu<strong>en</strong>te lacitrulinización de proteínas <strong>en</strong> el contexto de procesosinflamatorios donde la pres<strong>en</strong>cia de células necróticas ycuerpos apoptóticos permit<strong>en</strong> elevar los niveles de calciointracelular con la consecu<strong>en</strong>te activación de PAD, permiti<strong>en</strong>do <strong>en</strong>tonces la detección de proteínas citrulinadas. (9)D<strong>en</strong>tro de las proteínas citrulinadas <strong>en</strong>contramos ala filagrina, vim<strong>en</strong>tina y la proteína básica de la mielina,si<strong>en</strong>do muy improbable que alguna de éstas sea el autoantíg<strong>en</strong>o citrulinado específico para AR, debido a que ninguna se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra <strong>en</strong> el tejido sinovial, a m<strong>en</strong>os que éstasllegaran a la articulación <strong>en</strong> el contexto de un proceso(3, 8, 9)inflamatorio.Todo lo anterior ha permitido establecer un modelofisiopatológico del desarrollo de la AR <strong>en</strong> donde individuos con una predisposición g<strong>en</strong>ética para AR sufr<strong>en</strong> procesos inflamatorios de las articulaciones por difer<strong>en</strong>tesmotivos (traumático, infeccioso, etc.), lo cual conduce ala llegada de células inflamatorias que conti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong>zimasPAD. Una vez <strong>en</strong> la articulación y finalizado el ev<strong>en</strong>toinflamatorio, estas células son eliminadas por apoptosis oremovidas por el sistema monocito-macrofágico; no obstante, cuando la apoptosis es masiva o existe un defecto <strong>en</strong>el clearance de los detritus celulares podría existir liberación de proteínas citrulinadas y <strong>en</strong>zimas PAD activas alespacio sinovial capaces de citrulinar otras proteínas de lasinovial como la fibrina y el fibrinóg<strong>en</strong>o, permiti<strong>en</strong>do la(8, 9)detección de proteínas citrulinadas intraarticulares.En la mayoría de los casos este proceso sería autolimitado y sin traducción fisiopatológica, pero aquellos sujetos predispuestos <strong>en</strong> virtud de sus moléculas HLA tipo IIserían capaces de pres<strong>en</strong>tar estas proteínas citrulinadas alinfocitos T, g<strong>en</strong>erando una respuesta aberrante de linfocitos B con producción de autoanticuerpos y complejosinmunes capaces de perpetuar la actividad inflamatoria,convirtiéndose <strong>en</strong> un proceso inflamatorio crónico que(8, 9)facilitaría el desarrollo de la <strong>en</strong>fermedad.En otros casos se ha logrado definir la exist<strong>en</strong>cia de unpolimorfismo <strong>en</strong> el g<strong>en</strong> de la PAD tipo 4 que se caracterizapor la g<strong>en</strong>eración de un RNA m<strong>en</strong>sajero de gran estabilidadque da orig<strong>en</strong> a una PAD4 de mayor vida media, capaz deproducir grandes cantidades de proteínas citrulinadas que<strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes con factores de riesgo (pres<strong>en</strong>cia de epítopecompartido) podrían facilitar la síntesis de <strong>Anti</strong>-CCP y de(10, 11)esta forma iniciar el desarrollo de la <strong>en</strong>fermedad.144 Reumatología 2007; 23(4):142-150


<strong><strong>Anti</strong>cuerpos</strong> <strong>Anti</strong>-Péptido <strong>Citrulinado</strong> Cíclico <strong>en</strong> <strong>Artritis</strong> <strong>Reumatoide</strong>, <strong>Artritis</strong> Psoriática y Otras EnfermedadesSe sabe que los <strong>Anti</strong>-CCP son producidos localm<strong>en</strong>te<strong>en</strong> la sinovial inflamada, dado que su proporción es <strong>en</strong>tre1,4 y 7,5 veces mayor <strong>en</strong> el liquido sinovial con respecto asu pres<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el plasma, pero es importante destacar quela pres<strong>en</strong>cia de proteínas citrulinadas <strong>en</strong> el espacio articular es un f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o común a cualquier situación que implique inflamación de la sinovial y no es específica de AR, yaque también pued<strong>en</strong> ser detectadas <strong>en</strong> otras <strong>en</strong>fermedadesarticulares inflamatorias (artritis reactiva, artritis psoriática) o <strong>en</strong> patología articular no inflamatoria (osteoartritis),por lo que la sola pres<strong>en</strong>cia de péptidos citrulinados <strong>en</strong> lasinovial inflamada no es sufici<strong>en</strong>te para gatillar la producción de autoanticuerpos, ya que es la respuesta humoralaberrante de LB autorreactivos a la pres<strong>en</strong>cia de estos pép(10, 11)tidos, lo que caracterizará a los paci<strong>en</strong>tes con AR.Con respecto al papel patogénico de estos autoanticuerpos, se los ha m<strong>en</strong>cionado como los principales responsables de perpetuar el proceso inflamatorio y, de estaforma, participar <strong>en</strong> el desarrollo de erosiones <strong>en</strong> las arti(1, 8, 12, 13)culaciones afectadas.<strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> ARLos <strong>Anti</strong>-CCP, al igual que el FR, están pres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong>más del 80% de los paci<strong>en</strong>tes con una AR establecida, porlo que compart<strong>en</strong> similares valores de s<strong>en</strong>sibilidad, perolo que los hace tan atractivos es su alta especificidad, deforma que <strong>en</strong> los grupos controles, tanto de población sanacomo portadores de otras <strong>en</strong>fermedades reumatológicas yarticulares distintas de la AR (Síndrome de Sjögr<strong>en</strong>, LupusEritematoso Sistémico y <strong>Artritis</strong> Idiopática Juv<strong>en</strong>il, <strong>en</strong>treotras), el número de paci<strong>en</strong>tes con anti-CCP no superan el1% y 5%, respectivam<strong>en</strong>te, mi<strong>en</strong>tras que la positividad delFR <strong>en</strong> los mismos grupos controles alcanza valores muchomayores, del ord<strong>en</strong> del 10% <strong>en</strong> población sana y 20% <strong>en</strong>(1, 9, 11)las patologías controles distintas de la AR.Esta alta especificidad y su baja preval<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> población sana les permite a los <strong>Anti</strong>-CCP poseer una mayorcapacidad de discriminación con respecto al FR <strong>en</strong> eldiagnóstico difer<strong>en</strong>cial de una AR respecto a otras <strong>en</strong>fermedades inflamatorias articulares y de otras <strong>en</strong>fermedades reumatológicas, apoyando su uso como herrami<strong>en</strong>tade discriminación <strong>en</strong> el diagnóstico difer<strong>en</strong>cial de estaspatologías. (1)En cuanto a AR específicam<strong>en</strong>te, el hecho de que cercadel 40% de los paci<strong>en</strong>tes con AR clínica sean seronegativos pero posean <strong>Anti</strong>-CCP (+) les otorga a estos anticuerpos un pot<strong>en</strong>cial interés diagnóstico adicional. (1)Para la AR los <strong>Anti</strong>-CCP2 ti<strong>en</strong><strong>en</strong> una mayor s<strong>en</strong>sibilidad que los <strong>Anti</strong>-CCP1 (77% versus 68%) con una especificidad similar (95% versus 96%) para el diagnóstico deAR respecto de otras <strong>en</strong>fermedades articulares y de 99%(2, 14)con respecto a población sana, sin patología articular(Tabla 1).TABLA 1.PRESENCIA DE ANTI-CCP DE 1ª Y 2ª GENERACIÓN EN OTRAS ENFERMEDADESREUMATOLÓGICAS Y AUTOINMUNES(adaptada de “Diagnostic and predictive value of anti-cyclic citrullinated protein antibodies in rheumatoid arthritis:a systematic literature review”. Ann Rheum Dis 2006; 65: 845-851.Enfermedad <strong>Anti</strong>-CCP1 <strong>Anti</strong>-CCP2LupusNº paci<strong>en</strong>tes Porc<strong>en</strong>taje de Nº paci<strong>en</strong>tes Porc<strong>en</strong>taje de<strong>Anti</strong> CCP (+) <strong>Anti</strong> CCP (+)Eritematoso Sistémico 89 2% 567 9%Síndrome de Sjögr<strong>en</strong> 39 3% 521 5%Virus Hepatitis C 16 6% 219 1%Granulomatosisde Weg<strong>en</strong>er 0 0 % 67 1%EspondilitisAnquilosante 147 1% 181 3%Artropatía Psoriática 48 2% 424 8%Polimialgia Reumática 0 0% 49 0%Reumatismo Palindrómico 0 0% 63 44%Reumatología 2007; 23(4):142-150145


Nicole Jadue A.En cuanto al uso de los <strong>Anti</strong>-CCP como factorespredictores <strong>en</strong> el desarrollo de la AR, se ha demostradosu pres<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> muestras séricas de donantes de sangremuchos años antes del inicio de los primeros síntomasarticulares, lo que sugiere que la producción de estos anticuerpos sería un proceso temprano <strong>en</strong> la etiopatog<strong>en</strong>ia dela <strong>en</strong>fermedad; por lo anterior, su pres<strong>en</strong>cia es consideradacomo uno de los factores más importantes <strong>en</strong> predecir eldesarrollo de AR <strong>en</strong> población sana con factores de riesgo(1, 8, 9)(anteced<strong>en</strong>tes g<strong>en</strong>éticos, epítope compartido, etc.).Lo mismo es aplicable al estudio de artritis indifer<strong>en</strong>ciadas, de forma que el seguimi<strong>en</strong>to de aquellos cuadrosarticulares indifer<strong>en</strong>ciados con <strong>Anti</strong>-CCP (+) evolucionaron a AR <strong>en</strong> el 75% de los casos durante el primer año y(1, 2, 8)<strong>en</strong> un 93% de los casos a los tres años.Respecto de los <strong>Anti</strong>-CCP como marcadores pronósticos, los difer<strong>en</strong>tes estudios han demostrado que supres<strong>en</strong>cia se correlaciona con una evolución tórpida de laAR, de forma que se han relacionado con el desarrollo delesiones erosivas, pres<strong>en</strong>cia de compromiso radiológico,un curso clínico rápidam<strong>en</strong>te progresivo con mayor actividad de la <strong>en</strong>fermedad y gran pérdida funcional <strong>en</strong> comparación con los paci<strong>en</strong>tes que son <strong>Anti</strong>-CCP (-) para lasAR seropositivas. En el caso de las AR seronegativas,la pres<strong>en</strong>cia de <strong>Anti</strong>-CCP (+) también se ha relacionadocon el desarrollo de <strong>en</strong>fermedad erosiva, considerándosela pres<strong>en</strong>cia de estos anticuerpos como el predictor indep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te más importante <strong>en</strong> el pronóstico de la <strong>en</strong>fer(1, 12-16)medad.En cuanto al efecto del tratami<strong>en</strong>to sobre los anti-CCPno exist<strong>en</strong> muchos estudios y la mayoría de los resultadosson controversiales e incluso discordantes, pero de formag<strong>en</strong>eral se acepta que el tratami<strong>en</strong>to conv<strong>en</strong>cional con eluso de drogas modificadoras de la <strong>en</strong>fermedad (DMARD)e incluso el uso de <strong>Anti</strong>-TNF no modificarían los valores de los anticuerpos y que, incluso <strong>en</strong> aquellos estudiosque han demostrado disminuciones significativas del nivelde los <strong>Anti</strong>-CCP de hasta un 25%, este efecto sería sólotemporal, por lo que su determinación no sería útil <strong>en</strong> laevaluación de la respuesta al tratami<strong>en</strong>to. (1)Hasta ahora sólo hemos discutido las v<strong>en</strong>tajas de losanti-CCP <strong>en</strong> AR, pero el principal problema actual es sureci<strong>en</strong>te asociación, con porc<strong>en</strong>tajes de preval<strong>en</strong>cia nodespreciables, con otras <strong>en</strong>fermedades inflamatorias articulares, como la <strong>Artritis</strong> Palindrómica (forma abortiva dela AR) y la <strong>Artritis</strong> Psoriática (PsA), <strong>en</strong> donde el diagnóstico difer<strong>en</strong>cial de ambas <strong>en</strong>tidades con respecto a la ARse hace crítico <strong>en</strong> la medida <strong>en</strong> que se requiere iniciar terapias agresivas y definir el <strong>en</strong>foque clínico y pronóstico dela <strong>en</strong>fermedad articular. (1)<strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> PsALa <strong>Artritis</strong> Psoriática es una <strong>en</strong>fermedad articularinflamatoria y crónica <strong>en</strong> la cual existe una artritis axialo periférica que se asocia con la pres<strong>en</strong>cia de psoriasis yque ha sido considerada como una forma de espondiloar(9, 17)tropatía.Se estima que <strong>en</strong>tre un 8% al 15% de los paci<strong>en</strong>tescon psoriasis desarrollarían este cuadro articular, el quetambién puede pres<strong>en</strong>tarse <strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes sin evid<strong>en</strong>cia depsoriasis cutánea <strong>en</strong> un porc<strong>en</strong>taje no bi<strong>en</strong> definido y quees particularm<strong>en</strong>te frecu<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la población infantil, <strong>en</strong>donde el anteced<strong>en</strong>te de psoriasis familiar adquiere vitalimportancia. (17)En g<strong>en</strong>eral, se sabe que <strong>en</strong> un 65% de los casos la<strong>en</strong>fermedad cutánea antecede al compromiso articular, <strong>en</strong>un 15% ambas afecciones se pres<strong>en</strong>tan de manera conjunta y <strong>en</strong> el 15% a 20% restante la <strong>en</strong>fermedad articularprecede <strong>en</strong> años al inicio del cuadro cutáneo. (17)Además, se ha definido que la pres<strong>en</strong>cia de la PsA nose relaciona con la ext<strong>en</strong>sión de la <strong>en</strong>fermedad cutánea, suseveridad ni el tipo de compromiso cutáneo.Clínicam<strong>en</strong>te se caracteriza por ser una afección muyheterogénea que posee un amplio espectro de manifestaciones y variadas formas de pres<strong>en</strong>tación que varían nosólo <strong>en</strong>tre paci<strong>en</strong>tes, sino también <strong>en</strong> un mismo afectadodurante el curso de la <strong>en</strong>fermedad. Es tan diverso el tipode compromiso articular que el diagnóstico difer<strong>en</strong>cial conotras <strong>en</strong>fermedades articulares como la AR, principalm<strong>en</strong>te(8, 9, 17)<strong>en</strong> sus estadios iniciales, puede ser muy difícil.Se describ<strong>en</strong> al m<strong>en</strong>os cinco tipos de pres<strong>en</strong>tacionesclínicas: la pres<strong>en</strong>tación mono u oligoarticular asimétrica(más frecu<strong>en</strong>te), la forma clásica con compromiso aisladode interfalángicas distales (con o sin dactilitis y/o <strong>en</strong>tesitis),la espondilitis anquilosante con compromiso axial clásico,la artritis mutilante y una forma poliarticular simétrica queti<strong>en</strong>de a ser erosiva y que <strong>en</strong> algunas condiciones puedeser muy difícil de difer<strong>en</strong>ciar de una AR. (17)Originalm<strong>en</strong>te, los criterios de Moll y Wright excluíana los paci<strong>en</strong>tes con FR (+) como portadores de PsA, pero<strong>en</strong> las últimas décadas se considera que la pres<strong>en</strong>cia delFR no es un criterio absoluto de exclusión, principalm<strong>en</strong>tecuando la clínica y los hallazgos radiológicos son altam<strong>en</strong>te suger<strong>en</strong>tes y aún más cuando se ha logrado demostrar que el FR puede ser positivo <strong>en</strong> una amplia gama decondiciones, incluso <strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes con psoriasis cutánea(12, 17)pero sin artritis.En los últimos años, varios grupos han reportado lapres<strong>en</strong>cia de <strong>Anti</strong>-CCP (+) <strong>en</strong> portadores de PsA con unapreval<strong>en</strong>cia que varía según el estudio <strong>en</strong>tre el 5,6% al15,7%, lo cual es estadísticam<strong>en</strong>te significativo <strong>en</strong> com146 Reumatología 2007; 23(4):142-150


<strong><strong>Anti</strong>cuerpos</strong> <strong>Anti</strong>-Péptido <strong>Citrulinado</strong> Cíclico <strong>en</strong> <strong>Artritis</strong> <strong>Reumatoide</strong>, <strong>Artritis</strong> Psoriática y Otras Enfermedadesparación con la preval<strong>en</strong>cia de los <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> poblaciónsana. (16)Lo que dificulta aún más la interpretación de estos<strong>Anti</strong>-CCP (+) <strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes con PsA es que <strong>en</strong> la mayoría de los casos los afectados exhib<strong>en</strong> una <strong>en</strong>fermedad decurso progresivo, con poliartritis simétrica, mayor númerode articulaciones comprometidas y un curso clínico tórpido con desarrollo de <strong>en</strong>fermedad erosiva, haci<strong>en</strong>doinevitable su comparación con los paci<strong>en</strong>tes afectados poruna AR clásica que cursan con <strong>Anti</strong>-CCP (+), más aúncuando el análisis detallado de cada caso permitía concluir que más de la mitad de los afectados cumplían concuatro o más de los criterios de la ACR para el diagnósticode AR; pero, al mismo tiempo, pres<strong>en</strong>taban característicasclínicas y radiológicas clásicas de la PsA, haci<strong>en</strong>do quela coexist<strong>en</strong>cia de ambas <strong>en</strong>fermedades (AR y PsA) fuerauna alternativa plausible pero estadísticam<strong>en</strong>te muy difícil(12, 14, 16)de ocurrir y demostrar.Por otro lado, así como los paci<strong>en</strong>tes con PsA y <strong>Anti</strong>-CCP (+) se caracterizarían por el desarrollo de cuadros depoliartritis simétrica, los paci<strong>en</strong>tes con PsA y <strong>Anti</strong>-CCP (-)exhib<strong>en</strong> cuadros clínicos de compromiso axial o aislado deinterfalángicas distales, dactilitis, <strong>en</strong>tesitis o espondiloartritis que no necesariam<strong>en</strong>te ti<strong>en</strong><strong>en</strong> un curso tan agresivo.¿Podríamos arriesgarnos a decir <strong>en</strong>tonces que la pres<strong>en</strong>ciade <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> PsA t<strong>en</strong>dría un valor pronóstico similar alque se le ha atribuido <strong>en</strong> AR?Se ha especulado que la alta positividad de los <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> PsA podría ser un falso positivo, causado porreactividad de los anticuerpos ante epítopes no citrulinados exist<strong>en</strong>tes d<strong>en</strong>tro del substrato peptídico empleado <strong>en</strong>los tests de ELISA, pero esto fue desm<strong>en</strong>tido <strong>en</strong> el estudiode Vander Cruyss<strong>en</strong>, qui<strong>en</strong> demostró que la reactividad delos <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> PsA era verdaderam<strong>en</strong>te dirigida contramotivos citrulinados del péptido testeado mediante el usode antíg<strong>en</strong>os citrulinados sintéticos y péptidos que cont<strong>en</strong>ían arginina <strong>en</strong> lugar de citrulina como controles. (9)Otro de estos estudios comparó la preval<strong>en</strong>cia de <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes con psoriasis que pres<strong>en</strong>taban o carecíande compromiso articular, así como también <strong>en</strong> sujetos conAR temprana y población sana como grupos control.Los resultados obt<strong>en</strong>idos muestran que un 74% de lospaci<strong>en</strong>tes con AR temprana fueron positivos para <strong>Anti</strong>-CCP, un 7% de los paci<strong>en</strong>tes con PsA fueron también<strong>Anti</strong>-CCP (+), sólo un 0,7% de los paci<strong>en</strong>tes con psoriasis sin compromiso articular resulto ser anti-CCP (+) yfinalm<strong>en</strong>te un 2% de la población sana resultó ser <strong>Anti</strong>-CCP (+). (17)De este modo, la difer<strong>en</strong>cia <strong>en</strong>tre los paci<strong>en</strong>tes conPsA respecto de los psoriáticos sin compromiso articularresultó ser estadísticam<strong>en</strong>te significativa; sin embargo,la preval<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el grupo de PsA fue manifiestam<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>or con respecto al grupo de AR temprana, por lo quelos <strong>Anti</strong>-CCP mant<strong>en</strong>drían su capacidad para ori<strong>en</strong>tar eldiagnóstico difer<strong>en</strong>cial <strong>en</strong>tre ambas <strong>en</strong>tidades. (17)No hubo correlación <strong>en</strong>tre los títulos de <strong>Anti</strong>-CCP yel número de articulaciones s<strong>en</strong>sibles o inflamadas. Tampoco, <strong>en</strong>tre la pres<strong>en</strong>cia de cambios radiológicos y/o compromiso funcional tanto <strong>en</strong> el grupo de AR temprana como<strong>en</strong> el de PsA, a difer<strong>en</strong>cia de lo ampliam<strong>en</strong>te demostrado<strong>en</strong> otros estudios de AR y <strong>Anti</strong>-CCP.Vander Cruyss<strong>en</strong> también evaluó la pres<strong>en</strong>cia de FRy <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes con PsA. Al respecto, el 7,8%de los paci<strong>en</strong>tes con PsA t<strong>en</strong>ían <strong>Anti</strong>-CCP (+) <strong>en</strong> títulosignificativo (necesario para alcanzar una especificidad> 98,5%) y nuevam<strong>en</strong>te los afectados se caracterizaronpor un mayor número de articulaciones comprometidasy erosionadas a la radiología, pese a pres<strong>en</strong>tar concomitantem<strong>en</strong>te algunas de las características clínicas clásicasde PsA definidas por McGonagle. Nuevam<strong>en</strong>te, esta preval<strong>en</strong>cia de 7,8% resultó ser muy superior a lo esperado(1,5%) para un test con tan elevada especificidad para AR(95%). (9)Como ya fue m<strong>en</strong>cionado, el análisis detallado de todala evid<strong>en</strong>cia exist<strong>en</strong>te y las características clínicas y radiológicas particulares de los paci<strong>en</strong>tes con PsA hac<strong>en</strong> muyimprobable que la alta preval<strong>en</strong>cia de <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> estegrupo clínico resulte sólo de la concomitancia de ambas<strong>en</strong>fermedades. (9)Otra hipótesis plausible sería que paci<strong>en</strong>tes con PsAy <strong>Anti</strong>-CCP (+) sufrieran de una superposición de ambas<strong>en</strong>fermedades, pero con el desarrollo de una forma preclínica de AR, principalm<strong>en</strong>te cuando se sabe que la pres<strong>en</strong>cia de los <strong>Anti</strong>-CCP puede anteceder <strong>en</strong> años al inicio de(8, 9, 17)las manifestaciones clínicas de la AR.Otro estudio, <strong>en</strong> un int<strong>en</strong>to por determinar el papelespecífico de los <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> PsA, evaluó su preval<strong>en</strong>cia, curso clínico y la pres<strong>en</strong>cia de asociaciones g<strong>en</strong>éticassimilares a las exist<strong>en</strong>tes para AR. Al respecto, un 5,6% delos PsA fueron <strong>Anti</strong>-CCP (+), 0% de los controles sanos y97% de las AR. (8) A su vez, el FR fue positivo <strong>en</strong> el 8,7%de los paci<strong>en</strong>tes con PsA, 5% de los controles sanos y el100% de los paci<strong>en</strong>tes con AR. Con respecto a los paci<strong>en</strong>tes con PsA y FR (+), éstos se caracterizaban por serpoblación de mayor edad, no se relacionaron con la pres<strong>en</strong>cia del epítope compartido, tampoco con el desarrollode <strong>en</strong>fermedad erosiva, con el número de articulacionescomprometidas ni con el uso de DMARD y sólo el 5% deellos t<strong>en</strong>ía ambas pruebas positivas (<strong>Anti</strong>-CCP y FR). (8)La pres<strong>en</strong>cia de <strong>Anti</strong>-CCP (+) <strong>en</strong> PsA, <strong>en</strong> cambio, fuesignificativam<strong>en</strong>te relacionada con la pres<strong>en</strong>cia de epítopecompartido (HLA-DRB1*0101 o HLA-DRB1*0104) (P


Nicole Jadue A.0,005), con el desarrollo de una <strong>en</strong>fermedad erosiva si<strong>en</strong>dosuger<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> las radiografías de manos y/o pies (P < 0,05),un elevado número de articulaciones comprometidas (P


<strong><strong>Anti</strong>cuerpos</strong> <strong>Anti</strong>-Péptido <strong>Citrulinado</strong> Cíclico <strong>en</strong> <strong>Artritis</strong> <strong>Reumatoide</strong>, <strong>Artritis</strong> Psoriática y Otras EnfermedadesPor otro lado, estudios realizados <strong>en</strong> otras <strong>en</strong>fermedades infecciosas crónicas como la infección por el virus dela hepatitis C (VHC) han apoyado el uso de los <strong>Anti</strong>-CCP<strong>en</strong> el diagnóstico difer<strong>en</strong>cial de la etiología de las manifestaciones articulares.En este caso, el objetivo fue evaluar la preval<strong>en</strong>cia de<strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> una población infectada por el VHC, paralo cual fueron separados <strong>en</strong> dos grupos: aquellos infectados que pres<strong>en</strong>taban síntomas articulares y otro grupo quecarecía de ellas, para luego compararlos con una población afectada por AR establecida. (19)En cuanto a los resultados, los paci<strong>en</strong>tes con VHC yartralgias mostraron mayores porc<strong>en</strong>tajes de positividadde FR (54%) con respecto a los infectados sin artralgias(27%), pero siempre con valores m<strong>en</strong>ores a los paci<strong>en</strong>tescon AR (87%). Con respecto a los <strong>Anti</strong>-CCP, sólo un 5%de los paci<strong>en</strong>tes con VHC y artralgias resultó ser <strong>Anti</strong>-CCP (+) con respecto al 0% de positividad obt<strong>en</strong>ido <strong>en</strong> elgrupo de VHC sin artralgias <strong>en</strong> comparación con el 78%de los paci<strong>en</strong>tes del grupo con AR. (19)En esta oportunidad, los <strong>Anti</strong>-CCP sí podrían ser considerados como un marcador serológico ori<strong>en</strong>tador <strong>en</strong> eldiagnóstico difer<strong>en</strong>cial de patología articular <strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tescon infección por VHC, por lo que podrían ser empleadospara discriminar la etiología de una artritis al m<strong>en</strong>os <strong>en</strong>este grupo de paci<strong>en</strong>tes. (19)ConclusionesEn conclusión, los <strong>Anti</strong>-CCP son significativam<strong>en</strong>temás preval<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes con AR respecto de otraspatologías (reumatológicas y articulares) y mucho mássignificativos aún cuando se compara su preval<strong>en</strong>cia conrespecto a la población sana y es <strong>en</strong> esta característica, sualta especificidad, donde radica su actual uso clínico <strong>en</strong> eldiagnóstico difer<strong>en</strong>cial de estos cuadros.Dada su estrecha relación con el epítope compartidoy la participación de los <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> la patog<strong>en</strong>ia de laAR, se logra compr<strong>en</strong>der por qué su positividad es el másimportante factor predictor del desarrollo de <strong>en</strong>fermedaderosiva <strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes con AR tanto seropositiva como seronegativa, como <strong>en</strong> predecir el desarrollo de una AR <strong>en</strong>paci<strong>en</strong>tes que cursan con artritis indifer<strong>en</strong>ciadas.En los últimos años se ha demostrado que la positividad de los <strong>Anti</strong>-CCP <strong>en</strong> PsA es significativam<strong>en</strong>te mayorque la obt<strong>en</strong>ida <strong>en</strong> población sana, así como también <strong>en</strong>paci<strong>en</strong>tes con psoriasis pero sin compromiso articular.Además, los afectados por PsA que pose<strong>en</strong> <strong>Anti</strong>-CCP (+)frecu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te desarrollan una <strong>en</strong>fermedad poliarticularcon un curso clínico agresivo y desarrollo temprano delesiones erosivas, haci<strong>en</strong>do necesario el uso de DMARD<strong>en</strong> forma precoz.Todo esto ha planteado la posibilidad de que los <strong>Anti</strong>-CCP posean, al igual que <strong>en</strong> AR, algún valor pronóstico<strong>en</strong> el desarrollo de la <strong>en</strong>fermedad o bi<strong>en</strong> particip<strong>en</strong> <strong>en</strong> lafisiopatog<strong>en</strong>ia de la misma. Pero por otro lado existe laposibilidad de que se trate de concomitancia de ambas<strong>en</strong>fermedades articulares. Son necesarios más estudiosclínicos y poblacionales para definir tal condición.Finalm<strong>en</strong>te es importante com<strong>en</strong>tar que los <strong>Anti</strong>-CCPtambién han sido usados como una forma de ori<strong>en</strong>tar eldiagnóstico etiológico de manifestaciones articulares <strong>en</strong>paci<strong>en</strong>tes con <strong>en</strong>fermedades infecciosas crónicas u otras<strong>en</strong>fermedades autoinmunes <strong>en</strong> que la baja especificidaddel FR hace inaplicable su uso. Al respecto, los estudiosson escasos y sus resultados, contradictorios, de modo quese sugiere que la interpretación de estudios serológicos <strong>en</strong>el diagnóstico difer<strong>en</strong>cial de patología articular <strong>en</strong> paci<strong>en</strong>tes con <strong>en</strong>fermedades sistémicas se haga con extrema precaución y basados principalm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la clínica más que <strong>en</strong>los resultados de laboratorio.REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS1. Zedman A, Van V<strong>en</strong>rooij W, Pruijn G. Use and significance of anti-CCPantibodies in rheumatoid arthritis. Rheumatology 2006; 45:20-25.2. Avouac J, Gossec L, Dougados M. Diagnostic and predictive value of anticycliccitrullinated protein antibodies in rheumatoid arthritis: a systematicliterature review. Ann Rheum Dis 2006; 65:845-851.3. Gómez A. <strong><strong>Anti</strong>cuerpos</strong> anti-PCC: nuevos autoanticuerpos <strong>en</strong> la artritisreumatoide. 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