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2 | LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA | 18 DE DICIEMBRE DE 2011especialNavidad❜❜Aunque hoy resulta incontestable la celebración el 25 de diciembre, la historia nosmuestra como esta fiesta se ha consolidado tras un período de incertidumbreLa felicidad de saberseunidosLa reunión de la familia enlas calles, los comercioso el hogar marca unatradición que solo hahecho que fortalecerse enlos dos últimos mileniosEscena de un montaje belenístico de La Morana.(●) Foto OratioLa celebración navideña no siempre estuvotan clara, pero siempre existió. Aunquehoy resulta incontestable la celebración delnacimiento de Jesús en Belén el día 25 de diciembre,la historia nos muestra como estafiesta se ha consolidado a lo largo de los siglostras un periodo de incertidumbre queacaba en el año 345 d. C., fecha a partir de lacual la fiesta se celebra como en la actualidad.Hasta entonces, la referencia más cercanafue el festejo en honor a Saturno, Díosde la Agricultura. Dicha conmemoración -denominada Saturnal Romano- tenía lugaren los diferentes regímenes políticos de la civilizaciónromana.Mientras el Saturnal Romano suponía unasemana de banquetes, espectáculos y reunionesque daban inicio el 19 de diciembre,en el norte de Europa se celebraba la fiestadeYule. Coincidiendo con la fría estación invernal,los pueblos se unían para pedir a losdioses que el sol siguiera alumbrando la vida.Aún así, el nacimiento de Cristo ha sido yes interpretado de modo muy diferente enfunción de las diferentes culturas que pueblanel mundo y ha cambiado con el paso deltiempo. Más paradójico resulta aún comprobarque no fue la Iglesia Católica la instituciónque decidió celebrar la llegada al mundodel Salvador, sino que asumió la costumbrepagana de hacerlo a partir del siglo IV.Siendo cierto que los evangelios segúnSan Mateo y San Lucas dan pinceladas históricasy bíblicas para entender algunos delos tópicos de la Navidad, la propia Iglesiareconoce que estas celebración emana de lascostumbres consolidadas en Egipto.En el siglo XX, la Enciclopedia Católicaaclara que no tiene constancia de la celebraciónde banquete alguno coincidiendo con la«natividad» de Jesucristo. Así lo suscribieronen las culturas anglosajona y norteamericana.Todo porque, según parece, la propiaIglesia —a través de las Sagradas Escrituras—notiene constancia de la fecha exactadel nacimiento de Jesús, popularmente situadoel 25 de diciembre.Para acotar las fechas, según las evidenciashistóricas que tenemos, resulta fácil determinarque la «nativitas» de Jesús se produjoantes del año 4 a. C., puesto que ésta esla fecha en la que falleció el Rey Herodes elGrande, bajo cuyo mandato se presenta estehecho cristiano. A este respecto, el evangeliode San Mateo dice: «Herodes entonces,cuando se vio burlado por los magos, se enojómucho y mandó matar a todos los niñosmenores de dos años que había en Belén y entodos sus alrededores, conforme al tiempoque había inquirido de los magos». Si el regidortomó esa decisión, es de suponer queen ese momento, el Redentor tendría menosde dos años.Pasaalapáginasiguiente

DOMINGO, 18DE DICIEMBRE DE 2011 | LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA | 3especialEscena de un belén zamorano.(●) Foto Oratio«Lo envolvió enpañales y loacostó en unpesebre»NavidadViene de la página anteriorPor otro lado, el evangelio de San Lucasprecisa que, de entre los diferentes censosmandados realizar por César Augusto en estaépoca, es el del año 8 a. de C. el elegido porlas Santas Escrituras para el nacimiento. «…Yaconteció que estando ellos allí, se cumplieronlos días de su alumbramiento. Y dio a luzasuhijoprimogénito,yloenvolvióenpañales,y lo acostó en un pesebre, porque no habíalugar para ellos en el mesón», dicen lasEscrituras en referencia a José y María, participandodel censo en la ciudad de Belén bajoel gobierno de Cirinio.El protagonismo del rey cruelPeregrinaje de José y María por el desierto.(●) Foto OratioRoma, mano de hierro en Palestina. Resultainteresante conocer de qué manera administróel país el romano Herodes, el Grande,rey bajo cuyo gobierno tuvo lugar el nacimientoen la ciudad de Belén de Jesucristo, hijode María y José. Porque algunos de los gestospolíticos de este regidor nos ayudan a definiraquello que, con suma ambigüedad noscuentan las Sagradas Escrituras.«Rex et Amicus populi Romani». Con estasentencia (Rey y Amigo del pueblo Romano),fue nombrado Herodes el Granderey de Palestina, un territorio que era administradopor los romanos como un protectorado,en las condiciones establecidas por elgobernante correspondiente. Nos cuentanlos historiadores que, tras recibir el cargo, elromano Herodes regresó a Palestina paragobernar con mano de hierro estos territorios.A lo largo de su reinado, que tuvo lugarentrelosaños38y4a.deC.,Herodesbuscó la protección de sus decisiones en Roma.Primero fue Cayo Julio César, para mástarde recalar en Marco Antonio y Octaviotras el asesinato del Emperador. La condición:mantener la paz bajo su gobierno.Político ante todo, Herodes no perseguíala independencia, sino mantenerse al ladodel poder romano para dar continuidad a susprivilegios. Hecho histórico que certifica estafilosofía se desprende de la Tercera GuerraCivil. Herodes se sitúa del lado de MarcoAntonio, casado entonces con la egipciaCleopatra. Cuando Marco Antonio es derrotadoa manos de Octavio, que recibía elapoyo del Senado Romano, el «Grande»❜❜El monarca Herodesadministró Palestinapara los romanos conmano de hierrocambia de chaqueta y apoya a Octavio. Endos reuniones consecutivas (años 31 y 30 a.de C.), Herodes recibe de Octavio las mismasconcesiones que de sus predecesores ysuma varios territorios, como Gadara, Hiposo Gaza.La diversidad de sectas que dividían a lapoblación judía —esenios, saduceos y fariseos—provocó problemas a Herodes bajosu mandato hasta tal punto que Roma tuvoque intervenir en varias ocasiones.El hecho más célebre narrado en las SagradasEscrituras emana de la orden dadapor Herodes para asesinar a los niños menoresde dos años. Su intención fue la decontrarrestar los rumores que habían llegadoa sus oídos: varios magos -no se sabesi pertenecían a la realeza- llegados deOriente quieren ofrecer regalos al hijo deDios, que acaba de nacer y cuya presenciaamenaza su poder y turba su confianza.

2 | LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA | 18 DE DICIEMBRE DE 2011<strong>especial</strong>Navidad❜❜Aunque hoy resulta incontestable la celebración el 25 <strong>de</strong> diciembre, la historia nosmuestra como esta fiesta se ha consolidado tras un período <strong>de</strong> incertidumbre<strong>La</strong> felicidad <strong>de</strong> saberseunidos<strong>La</strong> reunión <strong>de</strong> la familia enlas calles, los comercioso el hogar marca unatradición que solo hahecho que fortalecerse enlos dos últimos mileniosEscena <strong>de</strong> un montaje belenístico <strong>de</strong> <strong>La</strong> Morana.(●) Foto Oratio<strong>La</strong> celebración navi<strong>de</strong>ña no siempre estuvotan clara, pero siempre existió. Aunquehoy resulta incontestable la celebración <strong>de</strong>lnacimiento <strong>de</strong> Jesús en Belén el día 25 <strong>de</strong> diciembre,la historia nos muestra como estafiesta se ha consolidado a lo largo <strong>de</strong> los siglostras un periodo <strong>de</strong> incertidumbre queacaba en el año 345 d. C., fecha a partir <strong>de</strong> lacual la fiesta se celebra como en la actualidad.Hasta entonces, la referencia más cercanafue el festejo en honor a Saturno, Díos<strong>de</strong> la Agricultura. Dicha conmemoración -<strong>de</strong>nominada Saturnal Romano- tenía lugaren los diferentes regímenes políticos <strong>de</strong> la civilizaciónromana.Mientras el Saturnal Romano suponía unasemana <strong>de</strong> banquetes, espectáculos y reunionesque daban inicio el 19 <strong>de</strong> diciembre,en el norte <strong>de</strong> Europa se celebraba la fiesta<strong>de</strong>Yule. Coincidiendo con la fría estación invernal,los pueblos se unían para pedir a losdioses que el sol siguiera alumbrando la vida.Aún así, el nacimiento <strong>de</strong> Cristo ha sido yes interpretado <strong>de</strong> modo muy diferente enfunción <strong>de</strong> las diferentes culturas que pueblanel mundo y ha cambiado con el paso <strong>de</strong>ltiempo. Más paradójico resulta aún comprobarque no fue la Iglesia Católica la instituciónque <strong>de</strong>cidió celebrar la llegada al mundo<strong>de</strong>l Salvador, sino que asumió la costumbrepagana <strong>de</strong> hacerlo a partir <strong>de</strong>l siglo IV.Siendo cierto que los evangelios segúnSan Mateo y San Lucas dan pinceladas históricasy bíblicas para enten<strong>de</strong>r algunos <strong>de</strong>los tópicos <strong>de</strong> la Navidad, la propia Iglesiareconoce que estas celebración emana <strong>de</strong> lascostumbres consolidadas en Egipto.En el siglo XX, la Enciclopedia Católicaaclara que no tiene constancia <strong>de</strong> la celebración<strong>de</strong> banquete alguno coincidiendo con la«natividad» <strong>de</strong> Jesucristo. Así lo suscribieronen las culturas anglosajona y norteamericana.Todo porque, según parece, la propiaIglesia —a través <strong>de</strong> las Sagradas Escrituras—notiene constancia <strong>de</strong> la fecha exacta<strong>de</strong>l nacimiento <strong>de</strong> Jesús, popularmente situadoel 25 <strong>de</strong> diciembre.Para acotar las fechas, según las evi<strong>de</strong>nciashistóricas que tenemos, resulta fácil <strong>de</strong>terminarque la «nativitas» <strong>de</strong> Jesús se produjoantes <strong>de</strong>l año 4 a. C., puesto que ésta esla fecha en la que falleció el Rey Hero<strong>de</strong>s elGran<strong>de</strong>, bajo cuyo mandato se presenta estehecho cristiano. A este respecto, el evangelio<strong>de</strong> San Mateo dice: «Hero<strong>de</strong>s entonces,cuando se vio burlado por los magos, se enojómucho y mandó matar a todos los niñosmenores <strong>de</strong> dos años que había en Belén y entodos sus alre<strong>de</strong>dores, conforme al tiempoque había inquirido <strong>de</strong> los magos». Si el regidortomó esa <strong>de</strong>cisión, es <strong>de</strong> suponer queen ese momento, el Re<strong>de</strong>ntor tendría menos<strong>de</strong> dos años.Pasaalapáginasiguiente

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