Neurociencia del consumo y dependencia de sustancias psicoactivas
Neurociencia del consumo y dependencia de sustancias psicoactivas Neurociencia del consumo y dependencia de sustancias psicoactivas
4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDENCIA DE LAS DIFERENTES CLASES DE DROGASefectos del etanol (Vogel-Sprott y Sdao-Jarvie, 1989). Los aprendizajes operantey asociativo pueden cumplir una función importante en el desarrollo de la toleranciaal alcohol y la intertolerancia a otras drogas. Actualmente se sabe que lamayoría de los mecanismos neuronales relacionados con el aprendizaje y lamemoria intervienen en el desarrollo y retención de la tolerancia (Kalant, 1998).También se produce tolerancia metabólica, cuya función es el favorecimiento deenzimas metabólicas en el hígado, con el resultado de que se requiere una mayordosis o un uso más frecuente para obtener los efectos psicofarmacológicos.De particular relevancia clínica es el desarrollo de cambios adaptativos en lafunción sináptica, en respuesta a la acción del etanol sobre los canales de iones(véase Capítulo 2), lo cual también contribuye a la tolerancia. La tolerancia y ladependencia del etanol pueden explicarse en parte por los cambios en las funcionesde los receptores GABA(A). La intertolerancia y la sensibilización (véaseCapítulo 3) también se han investigado intensamente durante los últimos años.La sensibilización a los esteroides neuroactivos (moduladores endógenos de losreceptores GABA-A) influye sobre la dependencia y la abstinencia del etanol, ypuede explicar las diferencias entre sexos en el efecto molecular del etanol(Grobin y colab., 1998). Los modelos animales de la dependencia del alcoholhan identificado genes receptores GABA-A como posibles mediadores de lasadaptaciones conductuales asociadas con la dependencia y abstinencia del etanol(Grobin y colab., 1998).La abstinencia del etanol se caracteriza por un síndrome lo suficientementesevero para ser fatal. La severidad de este síndrome está en función de la cantidadde etanol consumido, la frecuencia de uso y la duración del historial debeber. Los primeros síntomas de abstinencia son temblores severos, sudoración,debilidad, agitación, dolor de cabeza, náusea y vómito, además de ritmo cardiacoacelerado. Transcurridas 24 horas después de haber dejado de beber, puedeniniciarse convulsiones (Jacobs y Fehr, 1987). La abstinencia del alcohol puedecomplicarse por un estado conocido como delirium tremens, que se caracterizapor agitación severa, hiperactividad autonómica, alucinaciones y delirios. Sintratamiento, el síndrome de abstinencia dura de 5 a 7 días. Generalmente se usanbenzodiazepinas para reducir la severidad de la abstinencia del alcohol, debido asu acción sobre los receptores GABA-A.Adaptaciones neurobiológicas al uso prolongadoEl consumo crónico de alcohol puede inducir alteraciones en todos, o en la mayoría,de los sistemas y estructuras cerebrales. Tanto en animales como enhumanos, ocurren alteraciones específicas en la función y morfología del diencéfalo,las estructuras de los glóbulos medios temporales, lóbulo frontal basal,corteza frontal y cerebelo, en tanto que otras estructuras subcorticales, como elnúcleo caudado, parecen quedar relativamente intactas (véase Capítulo 2). Lasalteraciones neuropatológicas en las estructuras mesencefálicas y corticales secorrelacionan con deficiencias en los procesos cognitivos. En personas dependientesdel alcohol, la corteza prefrontal parece particularmente vulnerable a los71
NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDENCIA DE SUSTANCIAS PSICOACTIVASefectos del etanol. Debido a la función de las estructuras corticales en las funcionescognitivas y en el control de la conducta motivada, las alteraciones funcionalesen esta zona cerebral pueden desempeñar un importante papel en el inicioy desarrollo de la dependencia del alcohol (Fadda y Rossetti, 1998). Existeuna pérdida en el volumen cerebral y problemas funcionales que se agravan conel consumo continuado de alcohol, aunque pueden revertirse parcialmente trasun periodo de abstinencia completa. Luego del uso prolongado de alcohol, lasdeficiencias en las funciones de la corteza prefrontal, debidas a la lesión neuronal,es posible que comprometan la toma de decisiones y las emociones, induciendouna carencia de juicio y pérdida de control para reducir el uso de alcohol(Pfefferbaum y colab., 1998). Es necesario reexaminar estos problemas cognitivosdurante el tratamiento de la dependencia del alcohol.Tratamiento farmacológico de la dependencia del alcoholEl acamprosato (acetil-homotaurina de calcio) es un fármaco sintético consimilitud estructural a un aminoácido de ocurrencia natural. Dicho fármacoactúa centralmente y parece restaurar la actividad normal de las neuronas glutaminérgicas,las cuales se hiperexcitan como resultado de la exposición crónica alalcohol. El acamprosato está disponible bajo receta médica en Francia desde1989, y ahora ya se encuentra en muchos otros países del mundo. En general,los pacientes tratados con acamprosato representan un incremento significativoen el índice de tratamientos completados, en el tiempo transcurrido hasta laprimera vez que se vuelve a beber y en el índice de abstinencia o duración acumulativade la abstinencia, en comparación con los pacientes tratados con placebo(Mason, 2001).El antagonista opioide naltrexona también es efectivo para reducir la recaída,ayuda a permanecer abstinente y disminuir el consumo de alcohol (Streeton yWhelan, 2001).El disulfiram es un medicamento “disuasivo”, conocido porque hace desagradablela ingestión de bebidas, al alterar el metabolismo normal corporal del alcohol.El disulfiram inhibe el aldehído deshidrogenasa, la enzima que convierteel acetaldehído en acetato, lo que reduce la eliminación de acetaldehído del cuerpo.Los grandes niveles de acetaldehído producen una reacción desagradable(véase Capítulo 5) y hacen aversivo el consumo de alcohol (Kranzler, 2000). Noes clara la eficacia del disulfiram, pues es posible confundirla con la necesidad degraduar cuidadosamente la dosis o de mantener un alto grado de cumplimiento(Kranzler, 2000). Se piensa que algunas personas están protegidas naturalmentecontra la dependencia del alcohol porque, debido a una alteración genética, carecende una enzima funcional que metaboliza el acetaldehído (véase Capítulo 5);por consiguiente, cuando beben tienen una reacción adversa (conocida como“reacción de sonrojo”).72
- Page 42 and 43: 2. MECANISMOS CEREBRALES: NEUROBIOL
- Page 44 and 45: 2. MECANISMOS CEREBRALES: NEUROBIOL
- Page 46 and 47: 2. MECANISMOS CEREBRALES: NEUROBIOL
- Page 48 and 49: 2. MECANISMOS CEREBRALES: NEUROBIOL
- Page 51 and 52: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 53 and 54: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 55 and 56: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 57 and 58: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 59 and 60: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 61 and 62: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 63 and 64: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 65 and 66: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 67 and 68: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 69 and 70: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 71 and 72: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 73 and 74: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 75 and 76: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 77 and 78: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 79 and 80: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 81 and 82: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 83 and 84: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 85 and 86: NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDEN
- Page 88 and 89: Capítulo 4Psicofarmacología de la
- Page 90 and 91: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 94 and 95: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 96 and 97: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 98 and 99: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 100 and 101: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 102 and 103: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 104 and 105: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 106 and 107: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 108 and 109: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 110 and 111: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 112 and 113: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 114 and 115: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 116 and 117: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 118 and 119: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 120 and 121: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 122 and 123: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 124 and 125: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 126 and 127: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 128 and 129: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 130 and 131: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 132 and 133: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 134 and 135: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 136 and 137: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 138 and 139: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
- Page 140 and 141: 4. PSICOFARMACOLOGÍA DE LA DEPENDE
NEUROCIENCIA DEL CONSUMO Y DEPENDENCIA DE SUSTANCIAS PSICOACTIVASefectos <strong><strong>de</strong>l</strong> etanol. Debido a la función <strong>de</strong> las estructuras corticales en las funcionescognitivas y en el control <strong>de</strong> la conducta motivada, las alteraciones funcionalesen esta zona cerebral pue<strong>de</strong>n <strong>de</strong>sempeñar un importante papel en el inicioy <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> la <strong><strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia</strong> <strong><strong>de</strong>l</strong> alcohol (Fadda y Rossetti, 1998). Existeuna pérdida en el volumen cerebral y problemas funcionales que se agravan conel <strong>consumo</strong> continuado <strong>de</strong> alcohol, aunque pue<strong>de</strong>n revertirse parcialmente trasun periodo <strong>de</strong> abstinencia completa. Luego <strong><strong>de</strong>l</strong> uso prolongado <strong>de</strong> alcohol, las<strong>de</strong>ficiencias en las funciones <strong>de</strong> la corteza prefrontal, <strong>de</strong>bidas a la lesión neuronal,es posible que comprometan la toma <strong>de</strong> <strong>de</strong>cisiones y las emociones, induciendouna carencia <strong>de</strong> juicio y pérdida <strong>de</strong> control para reducir el uso <strong>de</strong> alcohol(Pfefferbaum y colab., 1998). Es necesario reexaminar estos problemas cognitivosdurante el tratamiento <strong>de</strong> la <strong><strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia</strong> <strong><strong>de</strong>l</strong> alcohol.Tratamiento farmacológico <strong>de</strong> la <strong><strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia</strong> <strong><strong>de</strong>l</strong> alcoholEl acamprosato (acetil-homotaurina <strong>de</strong> calcio) es un fármaco sintético consimilitud estructural a un aminoácido <strong>de</strong> ocurrencia natural. Dicho fármacoactúa centralmente y parece restaurar la actividad normal <strong>de</strong> las neuronas glutaminérgicas,las cuales se hiperexcitan como resultado <strong>de</strong> la exposición crónica alalcohol. El acamprosato está disponible bajo receta médica en Francia <strong>de</strong>s<strong>de</strong>1989, y ahora ya se encuentra en muchos otros países <strong><strong>de</strong>l</strong> mundo. En general,los pacientes tratados con acamprosato representan un incremento significativoen el índice <strong>de</strong> tratamientos completados, en el tiempo transcurrido hasta laprimera vez que se vuelve a beber y en el índice <strong>de</strong> abstinencia o duración acumulativa<strong>de</strong> la abstinencia, en comparación con los pacientes tratados con placebo(Mason, 2001).El antagonista opioi<strong>de</strong> naltrexona también es efectivo para reducir la recaída,ayuda a permanecer abstinente y disminuir el <strong>consumo</strong> <strong>de</strong> alcohol (Streeton yWhelan, 2001).El disulfiram es un medicamento “disuasivo”, conocido porque hace <strong>de</strong>sagradablela ingestión <strong>de</strong> bebidas, al alterar el metabolismo normal corporal <strong><strong>de</strong>l</strong> alcohol.El disulfiram inhibe el al<strong>de</strong>hído <strong>de</strong>shidrogenasa, la enzima que convierteel acetal<strong>de</strong>hído en acetato, lo que reduce la eliminación <strong>de</strong> acetal<strong>de</strong>hído <strong><strong>de</strong>l</strong> cuerpo.Los gran<strong>de</strong>s niveles <strong>de</strong> acetal<strong>de</strong>hído producen una reacción <strong>de</strong>sagradable(véase Capítulo 5) y hacen aversivo el <strong>consumo</strong> <strong>de</strong> alcohol (Kranzler, 2000). Noes clara la eficacia <strong><strong>de</strong>l</strong> disulfiram, pues es posible confundirla con la necesidad <strong>de</strong>graduar cuidadosamente la dosis o <strong>de</strong> mantener un alto grado <strong>de</strong> cumplimiento(Kranzler, 2000). Se piensa que algunas personas están protegidas naturalmentecontra la <strong><strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia</strong> <strong><strong>de</strong>l</strong> alcohol porque, <strong>de</strong>bido a una alteración genética, carecen<strong>de</strong> una enzima funcional que metaboliza el acetal<strong>de</strong>hído (véase Capítulo 5);por consiguiente, cuando beben tienen una reacción adversa (conocida como“reacción <strong>de</strong> sonrojo”).72