20 - BDSM Canarias

CUADERNOS DE BDSM - nº 20B D S M E N S E S I Ó N D E T A R D EP o r M a rHace unos años comencé a interesarme por el BDSM que hay en las películas. Yo nosoy una cinéfila, aunque lo parezca; en realidad yo me limito a ver todas las películasque puedo y sólo las que se que voy a disfrutar (no esperen de mi críticas a lo Cahiersdu Cinéma y sí muchas lagunas), pero tengo mi culturilla y en algo me defiendo.Cuando tecleé por primera vez “cine y BDSM” en google, me encontré listas depelículas que no se muy bien qué pintaban allí. He visto listas que incluyen a Saló, o los120 días de Sodoma (Pier Paolo Pasolini, 1975). Y a Irreversible (Gaspar Noé, 2002),esa película estremecedora de Monica Bellucci. También he encontrado listas donde seincluyen cosas gore como Hostel 1 y 2 (Eli Roth, 2005 y 2007) lo cual lo único que hacees confundir al personal. Porque imaginemos, si soy una novata que busca motivarsecon pelis que hablen de BDSM y me recomiendan Hostel, el chasco puede ser muygrande. ¿Sadomasoquismo, BDSM en escenas de tortura y mutilación? Y luego nosquejamos de dar mala imagen.Todo listado de cine y BDSM incluye la película que todo Dios ha visto y, no se por quéalaban tanto: Historia de O (Just Jaeckin, 1975). Se supone que verla es obtener el cumlaude en cine del lado oscuro pero yo nunca la recomendaré. No por mala o pedante,que lo es y mucho, sino por ese tonito pasteloso y la música dulzona que estuvieron demoda en el cine erótico de los setenta. Historia de O logró llenos absolutos del únicocine de mi pueblo en el año de su estreno, era una de las pelis imprescindibles de losaños del destape, hasta mis padres fueron a verla, se supone que era lo obligado para sermoderno; no se ustedes, pero a mi esas cosas me enternecen y me dan risa a partesiguales y cuando he visto Historia de O es lo que he pensado. De erotizarme nada denada.CuadernosBDSM es un proyecto sin ánimo de lucro y su distribución es libre y gratuita, sólo para PÙBLICO ADULTO.Los artículos pertenecen a sus autores. Está prohibido modificar los textos, así como comerciar con este material.Pag. 38