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- 178 _.y natural, el derecho de juzgar si el Gobierno que es llamado ásostener ó reponer debe ó no ser repuesto ó sostenido; es decir, siestá ó no en condiciones legales. Pero esta presunción desapareceante la contradicción ó la lucha de los partidos, cuando el únicopoder llamado por la Constitución á intervenir no ha sido requerido,ni se ha pronunciado á su respecto, y V. E. comprenderá entoncesla justicia con que el Señor Presidente insiste en que considere V. E.á los que se debaten en Corrientes en una perfecta igualdad de condicióny al General Cáceres, con absoluta prescindencia de la participaciónque en favor de uno ú otro asuma, como rebelde á la autoridadde la N ación, si persistiere en desobedecer las órdenes de sussuperiores.Réstame solo ahora decir á V. E. que el Señor Presidente se felicitade que ajustándose V. E. á las prevenciones cuyo cumplimientome ordena le reitere, el lamentable incidente que motiva esta comunicación,termine como era de esperarse, en el terreno pacífico de laley. En presencia de los hechos, la acción imparcial y tranquila delos Tribunales de la Nación, hará á cada uno, la justicia que le seadebida. Abandonada por otra parte, la Provincia de Corrientes ásus propios esfuerzos, y libre de influencias extrañas, volverá prontoal régimen Constitucional ya por el acuerdo de sus propios hijos, yapor la acción eficaz y benéfica del Gobierno General, que cuenta con lafuerza que le dá el derecho para asegurar la paz pública y hacerrespetar la autoridad que nace de la ley.Me es agradable saludar á V. E. con toda consideración.Firmado:-EDUARDOCOSTA.(ArchIvo de Golrierno, Parand.. -Tomo 62, folio fSS).