Movilidad social ascendente y descendente en las clases
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¿Por qué llamar<strong>las</strong> c<strong>las</strong>es de servicios? La d<strong>en</strong>ominación se impone, pese a la<br />
escasa conceptualización que <strong>en</strong>contramos <strong>en</strong> nuestro medio acerca de <strong>las</strong> c<strong>las</strong>es<br />
medias. Entre aquellos que realizaron aportes <strong>en</strong> este terr<strong>en</strong>o se destaca el sociólogo<br />
inglés Goldthorpe qui<strong>en</strong>, a comi<strong>en</strong>zos de los och<strong>en</strong>ta, apoyándose <strong>en</strong> el fuerte<br />
increm<strong>en</strong>to registrado <strong>en</strong> el sector servicios, retomó la categoría “c<strong>las</strong>e de servicios”,<br />
acuñada por el austromarxista Karl R<strong>en</strong>ner. Para Goldthorpe 1 , la c<strong>las</strong>e de servicios se<br />
distingue de la c<strong>las</strong>e obrera por realizar un trabajo no productivo, aunque la difer<strong>en</strong>cia<br />
más básica se ve reflejada <strong>en</strong> la calidad del empleo. En efecto, se trata de un trabajo<br />
donde se ejerce autoridad (directivos) o bi<strong>en</strong> se controla información privilegiada<br />
(expertos, profesionales). Así, este tipo de trabajo otorga cierto marg<strong>en</strong> de<br />
discresionalidad y autonomía al empleado, pero la contrapartida resultante de esta<br />
situación es el compromiso moral del trabajador con la organización, d<strong>en</strong>tro de un<br />
sistema claram<strong>en</strong>te estructurado <strong>en</strong> torno a recomp<strong>en</strong>sas y sanciones. Al trabajo inicial<br />
de Goldthorpe siguió un debate <strong>en</strong> los que participaron Urry, Gidd<strong>en</strong>s, Savage, Esping<br />
Anders<strong>en</strong>, <strong>en</strong>tre otros.<br />
Como señala R. Crompton 2 , muchos de estos autores reconocían la deuda que<br />
t<strong>en</strong>ían para con La Distinción (1979),, sin duda el mejor texto de la prolífica obra de P.<br />
Bourdieu. Allí, el sociólogo francés no sólo trazaba el mapa de los gustos de <strong>las</strong><br />
difer<strong>en</strong>tes c<strong>las</strong>es y fracciones de c<strong>las</strong>e, sino que exploraba la asociación (causal) <strong>en</strong>tre<br />
ocupaciones emerg<strong>en</strong>tes y nuevas pautas de consumo. En efecto, Bourdieu constataba el<br />
asc<strong>en</strong>so de un nuevo grupo <strong>social</strong>, tanto al interior de la burguesía como de la pequeña<br />
burguesía, que se correspondía con una todavía indeterminada franja de nuevas<br />
profesiones; básicam<strong>en</strong>te intermediarios culturales (v<strong>en</strong>dedores de bi<strong>en</strong>es y servicios<br />
simbólicos, patrones y ejecutivos de turismo, periodistas, ag<strong>en</strong>tes de cine, moda,<br />
publicidad, decoración, promoción inmobiliaria), cuyo rasgo distintivo aparecían<br />
resumido <strong>en</strong> un nuevo estilo de vida, más relajado, más hedonista, <strong>en</strong> contraste con la<br />
vieja burguesía austera y con la crispada pequeña burguesía consolidada. En fin, la<br />
descripción de Bourdieu t<strong>en</strong>ía puntos <strong>en</strong> común con aquella ofrecida ese mismo año por<br />
dos autores norteamericanos, que d<strong>en</strong>unciaban la emerg<strong>en</strong>cia de una “cultura del<br />
narcisismo” y la disociación de ésta con la lógica productivista del capitalismo; pero el<br />
1 J. Goldthorpe, “The service c<strong>las</strong>s revisited”, <strong>en</strong> VV.AA. Social Change and the middle C<strong>las</strong>ses,<br />
London, Sage, 1995.<br />
2 R.Cromptom, C<strong>las</strong>e y estratificación. Una introducción a los debates actuales, Madrid,<br />
Tecnos, 1994.<br />
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