Te prometo, encadenado o El corrido del sobrino ... - Dramared

ancherías. Todos ellos vienen de poblaciones así: chiquitas, muy pobres. Lo primeroque hacen es levantar esos poblados. Luego, uno se cansa de sus desplantesy sus torpezas. Hay que estar bien con los superiores, con la gente, el pueblo,no nos podemos descuidar, si no, se le vienen encima a uno, nos tiran por todoslados, y entonces, hay que negociar. Cuando comienzan a molestar como unapiedra en el zapato, hay que pararles el alto. Con sus propios métodos, con suspropias armas.ERNESTO: No va a suceder con él. No voy a permitir que eche todo a perder.dormida.En otro plano, El Don abusa sexualmente de Io que está completamenteEL LIC: Y ¿Cómo le vas a hacer, muchacho? ¿Te escucha? ¿Deja que leaconsejes? ¿Se da cuenta de sus errores? No. Para mí ya está perdiendo piso yno voy a dejar que por su culpa se me sigan echando encima. Gracias a sus pendejadas,me han dicho de todo: la prensa, el pueblo, el partido. Y no me gustaquedar como imbécil. Hazle entender que se tiene que llevar las cosas con muchocuidado y dejar que todo se calme.ERNESTO: Voy a resolver esto. De veras que lo voy a resolver.En la oficina del Don.12DON MARINO: ¿Y Juancho?DON: Muerto.DON MARINO: ¿Su familia?DON: Como carbónDON MARINO: Ya ni la chingas… ¿Y por qué mandaste ejecutar al agentegringo?DON: Se lo merecía ¿Y?DON MARINO: ¿?DON: Quería sacarme más lana.DON MARINO: ¿Qué hiciste con él?