Pacto en la Sangre - Iglesia Cordero de Dios

haber descendido de Abel. La sangre de Abel clamaba por venganza, pero la sangre de Jesúsclamaba por perdón.Así como la sangre de Abel trajo maldición al terreno donde vivió Caín, el pecado de Adán trajomaldición al mundo. La sangre de Cristo cortó esa maldición y nos dio de regreso todo el poder yautoridad. Así como la sangre de Abel declaró venganza por sus descendientes, la sangre deCristo declara redención para nosotros hoy.En Génesis 4 vemos el primer animal que fue sacrificado para Dios. En estos versículos vemosal cordero sangrando y el hombre también sangrando (Abel) y podemos ver brevemente uncuadro del cordero muriendo y sangrando (Jesús).El pecado tiene que ser tratado con sangre11 Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre elaltar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona.Levítico 17:11 RV 1960.Este versículo nos da a entender que la sangre de Cristo nos da vida y está viva en acción ennosotros eternamente. Lo que Jesús hizo en la cruz no solo perdonó nuestros pecados, sino quesu sangre derramada nos dio vida eterna con poder.Por el eterno poder del Espíritu Santo la sangre ha obtenido poder eterno de VIDA. El hombredebe sacrificar su vida pecaminosa y rendirse completamente a Dios para que el Espíritu de Diospueda vivir en él. La sangre de Jesús no se deteriora como algo que no es eterno, sino que eseficaz por la eternidad. Todas las cosas tienen un principio y un fin y pueden disminuir, aumentaro deteriorarse, pero lo que es eterno nunca se termina ni pierde su poder.Algo que no está bien de parte de nosotros es que a veces pensamos en el derramamiento desangre como un evento que pasó hace 2000 años en el cual miramos hacia atrás por fe parahacerlo realidad en nuestra vida, pero a veces nuestra fe flaquea y sentimos que no podemoshacer presente aquello que pasó hace tantos años. No tenemos experiencias del poder de lasangre en nuestras vidas.Tenemos corazones honestos pero equivocados, consideramos la sangre como algo inactivoque debe ser activado por fe. Necesitamos estimar la sangre como algo poderoso y eterno quesiempre y a cada momento esta activa y reconocer que nuestras debilidades no deben impedirel poder de la sangre en nosotros.Pensamos que si enfocamos nuestra fe en la sangre, Su poder se manifestará en nosotros.Aceptaremos que tenemos que pasar mucho tiempo en el trabajo y en nuestros deberes diariosdonde no podemos enfocarnos en activar nuestra fe, pero que aún así la sangre siguetrabajando activamente aun cuando estamos en el trabajo u ocupados con las cosas de la vida.Debemos descansar en el hecho de que a cada hora y en cada momento nuestra alma yespíritu siguen bajo la bendición de la sangre. Por la sangre, podemos recibir la bendición, elpoder y la vida.Así como la sangre fue sacrificada en la cruz, nosotros no podemos disfrutar plenamente de losbeneficios sin un sacrificio o entrega total de sí mismos.38 Y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. Mateo 10:38 RV 1960.Nuestro altar es la cruz. Debemos ver la santificación de la cruz como un lugar donde morir anosotros mismos y a resurrección de vida nueva en Jesús. Un nuevo comienzo.Derechos Reservados 2006©Alimenta Mis Ovejas, Inc 39