11.07.2015 Views

Nº 1 Español - Revista de Osteoporosis y Metabolismo Mineral

Nº 1 Español - Revista de Osteoporosis y Metabolismo Mineral

Nº 1 Español - Revista de Osteoporosis y Metabolismo Mineral

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

ONHONCH 3Bazedoxifeno, el SERM <strong>de</strong> 3 a generaciónpara el tratamiento <strong>de</strong> la osteoporosis postmenopáusicaOHISSN 1889-836X


SUMARIO Vol. 4 (Supl 1) Enero 20125Bazedoxifeno y osteoporosis:revisión sistemáticaGómez <strong>de</strong> Tejada Romero MJ,Corral‐Gudino LDirectorManuel Sosa HenríquezRedactora JefeMª Jesús Gómez <strong>de</strong> Tejada RomeroSociedad Española <strong>de</strong> Investigación Óseay <strong>de</strong>l <strong>Metabolismo</strong> <strong>Mineral</strong> (SEIOMM)Presi<strong>de</strong>nteJavier <strong>de</strong>l Pino MontesVicepresi<strong>de</strong>nteJosep Blanch RubioSecretariaMª Jesús Moro ÁlvarezTesoreraCarmen Valero Díaz <strong>de</strong> LamadridAvda. Capitán Haya, 60 (1ª planta)28020 MadridTelf: +34-917499512Fax: +34-915708911e-mail: seiomm@seiomm.orghttp://www.seiomm.org1723Coste <strong>de</strong> la osteoporosispostmenopáusicaDel Pino Montes JPapel <strong>de</strong>l bazedoxifeno enel tratamiento <strong>de</strong> la osteoporosispostmenopáusicaSosa Henríquez M, CanceloHidalgo MJEdiciónAvda. Reina Victoria, 47 (6º D)28003 MadridTelf./Fax 915 537 462e-mail: ediciones@ibanezyplaza.comhttp://www.ibanezyplaza.comMaquetaciónConcha García GarcíaTraducción inglésAndrew StephensImpresiónTintas y Papel, S.L.Soporte Válido32/09-R-CMDepósito LegalAS-4777-09ISSN 1889-836X® Copyright SEIOMMReservados todos los <strong>de</strong>rechos. El contenido <strong>de</strong> la revistano pue<strong>de</strong> ser reproducido ni transmitido por ningún procedimientosin la previa autorización por escrito <strong>de</strong>l titular<strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> explotación <strong>de</strong> la misma.Envío <strong>de</strong> originales:revista<strong>de</strong>osteoporosisymetabolismomineral@ibanezyplaza.comVersión on-line:http://www.revista<strong>de</strong>osteoporosisymetabolismomineral.com


-Este suplemento ha sido patrocinado por los Laboratorios Pfizer y Almirall.-La publicación refleja exclusivamente las opiniones y conclusiones <strong>de</strong> los autores firmantes.-Los principios activos y medicamentos que se mencionan <strong>de</strong>ben ajustarse a las indicaciones <strong>de</strong>la ficha técnica aprobada en España.


SUMMARY Vol. 4 (Supl 1) January 20125Bazedoxifen and osteoporosis:systematic reviewGómez <strong>de</strong> Tejada Romero MJ,Corral‐Gudino LComité <strong>de</strong> ExpertosPilar Aguado AcínJavier Alegre LópezMaría José Amérigo GarcíaAbdón Arbelo RodríguezMiguel Arias PacienciaEmilia Aznar VillacampaChesús Beltrán Au<strong>de</strong>raPere Benito RuizSantiago Benito UrbinaMiguel Bernard PinedaPedro Betancor LeónJosep Blanch i RubióJosé Antonio Blázquez CabreraJosé Ramón Caeiro ReyJavier Calvo CataláMª Jesús Cancelo HidalgoJorge Cannata AndíaAntonio Cano SánchezCristina Carbonell AbellaJordi Carbonell AbellóPedro Carpintero BenítezEnrique Casado BurgosSantos Castañeda SanzFi<strong>de</strong>ncio Cons MolinaSonia Dapia RobledaManuel Díaz CurielBernardino Díaz LópezAdolfo Díez PérezCasimira Domínguez CabreraAnna Enjuanes GuardiolaPedro Esbrit ArgüellesFernando Escobar JiménezJordi Farrerons MinguellaJosé Filgueira RubioJordi Fiter AresteJuan José García BorrásSergio García PérezJuan Alberto García VadilloEduardo Girona QuesadaCarlos Gómez AlonsoMª Jesús Gómez <strong>de</strong> Tejada RomeroMilagros González BéjarJesús González MacíasEmilio González ReimersJenaro Graña GilSilvana di GregorioDaniel Grinberg VaismanNuria Guañabens GayRoberto Güerri Fernán<strong>de</strong>zFe<strong>de</strong>rico Hawkins CarranzaDiego Hernán<strong>de</strong>z Hernán<strong>de</strong>zJosé Luis Hernán<strong>de</strong>z Hernán<strong>de</strong>zGabriel Herrero-Beaumont CuencaEsteban Jódar GimenoFernando Lecanda Cor<strong>de</strong>roPau Lluch MezquidaJosé Andrés López-Herce CidCarlos Lozano TonkinMª Luisa Mariñoso BarbaGuillermo Martínez Díaz-GuerraMaría Elena Martínez RodríguezJulio Medina LuezasLeonardo Mellivobsky SaldierManuel Mesa RamosPedro Mezquita RayaAna Monegal BrancosJosefa Montoya GarcíaMaría Jesús Moro ÁlvarezManuel Muñoz TorresLaura Navarro CasadoManuel Naves DíazJosé Luis Neyro BilbaoXavier Nogués i SolánJoan Miquel Nolla SoléJosé Antonio Olmos MartínezNorberto Ortego CentenoSantiago Palacios Gil-AntuñanoEsteban Pérez AlonsoRamón Pérez CanoJosé Luis Pérez CastrillónLuis Pérez EdoPilar Peris BernalConcepción <strong>de</strong> la Piedra GordoJavier <strong>de</strong>l Pino MontesJosé Manuel Quesada GómezEnrique Raya ÁlvarezRebeca Reyes GarcíaJosé Antonio Riancho MoralLuis <strong>de</strong> Rio BarqueroLuis Rodríguez ArboleyaMinerva Rodríguez GarcíaAntonia Rodríguez Hernán<strong>de</strong>zManuel Rodríguez PérezMontaña Román GarcíaInmaculada Ros VillamajóRafael Sánchez BorregoArmando Torres RamírezAntonio Torrijos EslavaCarmen Valdés y LlorcaCarmen Valero Díaz <strong>de</strong> LamadridAna Weruaga ReyJaime Zubieta TaberneroMETODOLOGÍA Y DISEÑO DE DATOSPedro Saavedra SantanaJosé María Limiñana Cañal1723Cost of postmenopausalosteoporosisDel Pino Montes JRole of bazedoxifen in thetreatment of postmenopausalosteoporosisSosa Henríquez M, CanceloHidalgo MJ


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-165Gómez <strong>de</strong> Tejada Romero MJ 1 , Corral-Gudino L 21 Departamento <strong>de</strong> Medicina - Universidad <strong>de</strong> Sevilla - Sevilla2 Servicio <strong>de</strong> Medicina Interna - Hospital el Bierzo - Ponferrada - LeónBazedoxifeno y osteoporosis: revisiónsistemáticaCorrespon<strong>de</strong>ncia: Luis Corral-Gudino - Medicina Interna - Hospital el Bierzo - c/Médicos sin fronteras, 7 -24411 Fuentesnuevas - Ponferrada (León)Correo electrónico: lcorral@saludcastillayleon.esResumenAntece<strong>de</strong>ntes: La osteoporosis se caracteriza por un <strong>de</strong>terioro <strong>de</strong> la microarquitectura ósea que pone alhueso en riesgo <strong>de</strong> sufrir fracturas. El bazedoxifeno es un modulador selectivo <strong>de</strong> los receptores estrogénicos<strong>de</strong> tercera generación que ha sido aprobado para el tratamiento <strong>de</strong> la osteoporosis postmenopáusica.Objetivos: Evaluar la eficacia <strong>de</strong>l bazedoxifeno en la prevención primaria y secundaria <strong>de</strong> las fracturasosteoporóticas en las mujeres postmenopáusicas.Estrategia <strong>de</strong> búsqueda: Se realizaron búsquedas en MEDLINE, Cochrane Central, registros <strong>de</strong> ensayos clínicosy libros <strong>de</strong> resúmenes para obtener ensayos controlados aleatorios publicados entre 2000 y 2011.Criterios <strong>de</strong> selección: Se seleccionaron ensayos clínicos aleatorizados dirigidos tanto a la prevención primariacomo secundaria <strong>de</strong> la osteoporosis. Se seleccionaron estudios que comparasen mujeres que recibíanbazedoxifeno frente a otros fármacos para la osteoporosis o placebo.Recopilación y análisis <strong>de</strong> datos: La selección <strong>de</strong> estudios y la extracción <strong>de</strong> los datos fueron realizadospor dos investigadores a la vez. Se realizó un meta-análisis <strong>de</strong> los resultados <strong>de</strong> fractura y <strong>de</strong> los efectossecundarios, estableciéndose el riesgo relativo. La calidad <strong>de</strong> los estudios se valoró en base a los criteriospropuestos por la colaboración Cochrane.Resultados principales: Se incluyeron cinco ensayos en la revisión (13.543 pacientes): 3 sobre prevenciónprimaria (5.622) y 2 sobre prevención secundaria (7.921). Sólo los estudios sobre prevención secundariavaloraban las fracturas como objetivo principal.Comparado con placebo, bazedoxifeno redujo el número <strong>de</strong> nuevas fracturas vertebrales <strong>de</strong>tectadas enel seguimiento a tres años en mujeres con osteoporosis: con dosis <strong>de</strong> 20 mg, el número <strong>de</strong> pacientesnecesario tratar (NNT) fue 56 (IC 95%, 34-146), y a dosis <strong>de</strong> 40 mg el NNT fue 63 (IC 95%, 37-231). Enel meta-análisis el riesgo relativo frente a placebo fue <strong>de</strong> 0,59 (IC 95%, 0,44-0,79). No hubo diferenciasen el número <strong>de</strong> fracturas vertebrales sintomáticas ni en el número <strong>de</strong> fracturas no vertebrales en los análisisprevistos al inicio <strong>de</strong>l estudio. No encontramos datos publicados sobre el efecto <strong>de</strong> bazedoxifeno enel número <strong>de</strong> fracturas en profilaxis primaria.Para los efectos adversos, el meta-análisis no confirmó el aumento <strong>de</strong>l riesgo <strong>de</strong> trombosis venosa profundaque mostraba el estudio <strong>de</strong> referencia (RR: 8,53). Sí hubo un aumento <strong>de</strong> episodios <strong>de</strong> rubor (RR:1,88) o calambres musculares (RR: 1,32). No se observó una reducción <strong>de</strong> la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> cáncer <strong>de</strong>mama o un aumento <strong>de</strong>l cáncer <strong>de</strong> endometrio o <strong>de</strong> la hiperplasia endometrial con el tratamiento conbazedoxifeno frente a placebo.Conclusiones <strong>de</strong> los autores: El bazedoxifeno es un fármaco eficaz en la reducción <strong>de</strong>l riesgo <strong>de</strong> fracturasvertebrales no sintomáticas en profilaxis secundaria. A<strong>de</strong>más ha <strong>de</strong>mostrado reducir la pérdida <strong>de</strong><strong>de</strong>nsidad mineral ósea y frenar el remo<strong>de</strong>lado óseo en la prevención primaria y secundaria <strong>de</strong> la osteoporosis.Son necesarios nuevos estudios que analicen el riesgo <strong>de</strong> fracturas no vertebrales y que comparenal fármaco frente a otros preparados <strong>de</strong> primera línea para el tratamiento <strong>de</strong> la osteoporosis parapo<strong>de</strong>r conocer la verda<strong>de</strong>ra potencia <strong>de</strong> su efecto antifracturario.Palabras clave: Bazedoxifeno. <strong>Osteoporosis</strong>. Fracturas óseas. Moduladores selectivos <strong>de</strong> los receptores <strong>de</strong> estrógenos. Prevenciónprimaria. Prevención secundaria.


6Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-16IntroducciónLa osteoporosis (OP) se caracteriza por un <strong>de</strong>terioro<strong>de</strong> la microarquitectura ósea tal que pone alhueso en alto riesgo <strong>de</strong> sufrir fracturas 1 . A falta <strong>de</strong>un tratamiento curativo, hasta el momento losesfuerzos terapéuticos van encaminados a disminuirese riesgo <strong>de</strong> fractura mejorando la calidad yla cantidad <strong>de</strong> tejido óseo.Diversos fármacos se están empleando condicho propósito. El objetivo es actuar sobre elremo<strong>de</strong>lado óseo, con una acción antirresortiva(tales como los bifosfonatos, calcitonina), osteoformadora(teriparatida y PTH 1-84) o ambas(ranelato <strong>de</strong> estroncio).Los MSRE (moduladores selectivos <strong>de</strong> losreceptores estrogénicos) son fármacos que tienenuna acción agonista/antagonista estrogénica segúnel tipo <strong>de</strong> receptores hormonales presente en cadatejido. Su investigación se inició en la búsqueda<strong>de</strong> una sustancia <strong>de</strong> acción antiestrogénica para laprevención y el tratamiento <strong>de</strong>l cáncer <strong>de</strong> mama,tamoxifeno, <strong>de</strong>l cual se <strong>de</strong>mostró que producía unefecto agonista <strong>de</strong> los estrógenos en tejido óseo;pero, pese a aumentar la <strong>de</strong>nsidad mineral ósea(DMO) 2 , no reducía el riesgo <strong>de</strong> fracturas 3 .A<strong>de</strong>más, su acción estimulante <strong>de</strong>l endometriolimitaba su uso clínico en la OP. Avances adicionalesen la biología molecular y en la farmacologíai<strong>de</strong>ntificaron un nuevo compuesto <strong>de</strong> estegrupo: raloxifeno, consi<strong>de</strong>rado entonces un MSRE<strong>de</strong> segunda generación. Su acción es agonistaestrogénica al actuar sobre los receptores <strong>de</strong>l tejidoóseo, disminuyendo la resorción propiciadapor la falta <strong>de</strong> dichas hormonas (entran <strong>de</strong>ntro,pues, <strong>de</strong>l grupo <strong>de</strong> fármacos <strong>de</strong> acción antirresortiva),habiendo <strong>de</strong>mostrado aumentar la DMO ydisminuir el riesgo <strong>de</strong> fracturas vertebrales 4 , aunqueno lo hace en las no vertebrales 5 . Esta acciónagonista la ejerce también en el tejido mamario,por lo que se le asocia un <strong>de</strong>scenso significativo<strong>de</strong>l cáncer <strong>de</strong> mama estrógeno-<strong>de</strong>pendiente 6 .Mejora el perfil lipídico al <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>r los nivelesséricos <strong>de</strong>l colesterol, siendo otra acción agonista 7 .Como acción antagonista, no produce estimulaciónendometrial 7 ; todo lo cual permite su uso enel tratamiento <strong>de</strong> la OP postmenopáusica. Sinembargo, presenta efectos adversos que limitan suuso, tales como aumento <strong>de</strong>l riesgo <strong>de</strong> tromboembolismoy <strong>de</strong> calambres en piernas 8 . Aunquemejora el perfil lipídico, no ha <strong>de</strong>mostrado reducirel riesgo <strong>de</strong> eventos cardiovasculares 9 , y estáasociado con un aumento <strong>de</strong> los síntomas vasomotores<strong>de</strong> la menopausia (sofocos, rubor, etc.) 8 .En los últimos años se han investigado nuevoscompuestos <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l grupo <strong>de</strong> los MSRE quepudieran mejorar a raloxifeno: son los llamadosMSRE <strong>de</strong> tercera generación. Dos <strong>de</strong> ellos, bazedoxifeno10 y lasofoxifeno 11 , han sido aprobadospara el tratamiento <strong>de</strong> la OP postmenopáusica.En este trabajo hemos realizado una revisiónsistemática centrándonos en los artículos publicadosy realizados con bazedoxifeno (BZD) para eltratamiento <strong>de</strong> la OP postmenopáusica, así comoen su tolerancia y su seguridad.El objetivo principal fue la evaluación <strong>de</strong> la eficacia<strong>de</strong>l BZD para la prevención primaria ysecundaria <strong>de</strong> las fracturas osteoporóticas enmujeres postmenopáusicas. Como objetivossecundarios se valoraron sus efectos sobre la <strong>de</strong>nsidadmineral ósea (DMO), los marcadores <strong>de</strong>remo<strong>de</strong>lado óseo (MRO) y los datos <strong>de</strong> toleranciay seguridad <strong>de</strong>l fármaco.Material y métodoEl objetivo <strong>de</strong> la revisión sistemática fue evaluar laeficacia <strong>de</strong> BZD en la prevención <strong>de</strong> nuevas fracturasvertebrales o no vertebrales en mujeres postmenopáusicascon o sin OP.La revisión fue realizada <strong>de</strong> acuerdo con lasguías para la realización <strong>de</strong> revisiones sistemáticasy meta-análisis <strong>de</strong>l consenso PRISMA 12 .Criterios <strong>de</strong> selecciónSe seleccionaron ensayos clínicos aleatorizados queincluyeran a mujeres postmenopáusicas. Se aceptóla inclusión <strong>de</strong> ensayos dirigidos tanto a la prevenciónprimaria como a la secundaria. Se valoraba lacomparación <strong>de</strong> grupos <strong>de</strong> tratamiento con BZD acualquier dosis frente a otros fármacos para el tratamiento<strong>de</strong> la OP (bifosfonatos, hormona paratiroi<strong>de</strong>a,MSRE o ranelato <strong>de</strong> estroncio) o placebo. Si seutilizaba calcio o vitamina D <strong>de</strong>bía administrarse atodos los grupos <strong>de</strong> tratamiento comparados. Comomedida <strong>de</strong> resultado más a<strong>de</strong>cuada para medir laeficacia <strong>de</strong>l fármaco, se valoró el la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong>fracturas vertebrales y no vertebrales. Como resultadosadicionales, se valoraron los cambios en las<strong>de</strong>terminaciones <strong>de</strong> DMO y en los MRO.Fuentes <strong>de</strong> informaciónLos estudios fueron i<strong>de</strong>ntificados mediante la búsquedaen la base <strong>de</strong> datos MEDLINE utilizadoPubMed (enero <strong>de</strong> 2006 a junio <strong>de</strong> 2011). No seestablecieron límites <strong>de</strong> idioma. Se utilizó lasiguiente estrategia <strong>de</strong> búsqueda: (("osteoporosis,postmenopausal" [MeSH Terms] OR ("osteoporosis"[All Fields] AND "postmenopausal" [All Fields]) OR"postmenopausal osteoporosis" [All Fields] OR"osteoporosis" [All Fields] OR "osteoporosis" [MeSHTerms]) OR ("bone <strong>de</strong>nsity" [MeSH Terms] OR("bone" [All Fields] AND "<strong>de</strong>nsity" [All Fields]) OR"bone <strong>de</strong>nsity" [All Fields])) AND ("bazedoxifeneacetate" [Supplementary Concept] OR "bazedoxifeneacetate" [All Fields] OR "bazedoxifene" [AllFields]). Se incluyeron estudios adicionales mediantela búsqueda en Cochrane Central y en los registros<strong>de</strong> ensayos clínicos (http://www.controlledtrials.com/mrct/)con el término “bazedoxifene”.Por último, se amplió la búsqueda a los resúmenespresentados en los congresos <strong>de</strong> más relevancia enel campo <strong>de</strong> la osteoporosis: American Society forBone and <strong>Mineral</strong> Research (ASBMR), EuropeanCongress on <strong>Osteoporosis</strong> and Osteoarthritis(ECCEO), International <strong>Osteoporosis</strong> Foundation(IOF) y American College of Rheumatology (ACR).El periodo <strong>de</strong> publicación se limitó a <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 2006hasta julio <strong>de</strong> 2011. La última búsqueda en las distintasfuentes se realizó el 21 <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 2011.


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-167Figura 1. Diagrama <strong>de</strong> flujo <strong>de</strong> la selección <strong>de</strong> los artículosBúsqueda bibliográficaBases (Búsqueda electrónica):PubMed:(n=75)Cochrane CENTRAL: (n=21)Metaregistro <strong>de</strong> ensayoscontrolados:(n=10)Límites: Sin límites(n=106)Búsqueda bibliográficaBúsqueda manual:Búsqueda <strong>de</strong> Libros <strong>de</strong> resúmenes: (2006-2010)ACR: (n= 0)ASBMR:(n=14)ECCEO:(n=14)Bibliografía <strong>de</strong> los artículos a texto completoseleccionados para análisis: (n= 0)(n= 28)Duplicados (n=10)Artículos valorados según su Título y Resumen(n=124)Citaciones excluidas en un primer análisis (n=104)Casos clínicos, cartas al editor o editoriales (n= 3)Revisiones literarias(n=48)Ensayos clínicos no focalizados en el tratamiento <strong>de</strong> la osteoporosis (n=29)Ensayos clínicos con mo<strong>de</strong>los animales (n= 4)Duplicados(n=20)Artículos valorados a texto completo(n=20)Citaciones excluidas tras el análisis <strong>de</strong>l texto completo (n=15)Resultados <strong>de</strong> los ensayos clínicos relacionados con la seguridad (n= 3)Artículos que no cumplen los criterios <strong>de</strong> inclusión (riesgo <strong>de</strong> sesgos) (n= 2)Análisis post Hoc <strong>de</strong> ensayos clínicos previos (n= 5)Análisis parciales <strong>de</strong> los resultados <strong>de</strong> ensayos clínicos previos (n= 1)Duplicados (n= 4)Artículos incluidos en el resumen cualitativo.Aplicación <strong>de</strong> los criterios para <strong>de</strong>tección <strong>de</strong>sesgos y aplicabilidad <strong>de</strong>l estudio(n= 5)Prevención primaria<strong>de</strong> la osteoporosis(n= 3)pacientesaleatorizados = 7.921Prevención secundaria<strong>de</strong> la osteoporosis(n= 2)pacientesaleatorizados = 5.622Selección <strong>de</strong> los estudiosDos revisores (MJ.G.T.R. y L.C.G.) examinaroncada título y resumen generado en la búsqueda, ei<strong>de</strong>ntificaron los artículos potencialmente elegiblesque fueron obtenidos a texto completo.Estrategia para la evaluación <strong>de</strong> la calidadLa vali<strong>de</strong>z metodológica <strong>de</strong> los artículos finalmenteseleccionados fue valorada <strong>de</strong> acuerdo al listado<strong>de</strong> preguntas propuesto en el manual <strong>de</strong> lacolaboración Cochrane versión 5.1.0 13 . Esta valoraciónconsiste en la <strong>de</strong>tección <strong>de</strong> seis sesgos: selección(sesgo por <strong>de</strong>fectos en la generación <strong>de</strong> lasecuencia <strong>de</strong> aleatorización y ocultamiento <strong>de</strong> lalista <strong>de</strong> asignación), realización (sesgo por <strong>de</strong>fectosen el cegamiento <strong>de</strong> los participantes en elestudio y <strong>de</strong>l personal sanitario que los atien<strong>de</strong>),<strong>de</strong>tección (sesgo por <strong>de</strong>fectos en el cegamiento <strong>de</strong>


8Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-16Figura 2. Valoración <strong>de</strong>l riesgo <strong>de</strong> sesgos <strong>de</strong> los artículos seleccionadosGeneración <strong>de</strong> la secuencia <strong>de</strong> aleatorizaciónOcultamiento <strong>de</strong> la lista <strong>de</strong> asignaciónCegamiento <strong>de</strong> participantes y personalCegamiento <strong>de</strong> la interpretación <strong>de</strong> los resultadosAbandono <strong>de</strong>l seguimiento (pérdidas)Publicación selectiva0% 20% 40% 60% 80% 100%Bajo Alto No valorablela valoración <strong>de</strong> los resultados), abandono o <strong>de</strong>sgaste(sesgo por presentación <strong>de</strong> resultadosincompletos) e información (sesgo por publicación<strong>de</strong> resultados <strong>de</strong> forma selectiva). Dos revisores(MJ.G.T.R. y L.C.G.) evaluaron la calidad <strong>de</strong>cada ensayo clínico elegible <strong>de</strong>biendo indicar siel riesgo <strong>de</strong> sesgo era alto, bajo o no valorable,<strong>de</strong> acuerdo con los criterios metodológicos propuestos.Recogida y análisis <strong>de</strong> los datosDos revisores (MJ.G.T.R. y L.C.G.) tabularon lainformación y los datos. Se generó un resumenque incluía información sobre los aspectos metodológicos<strong>de</strong>l diseño <strong>de</strong> los estudios, las características<strong>de</strong> los participantes y los resultados evaluados(fracturas, DMO, MRO, efectos adversos osecundarios). Para los datos <strong>de</strong> fracturas, se consi<strong>de</strong>rarontodas las fracturas informadas (ya fueransintomáticas o <strong>de</strong>tectadas en la radiología).Para los resultados referidos a la variación enla inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> nuevas fracturas se calculó elnúmero necesario <strong>de</strong> pacientes a tratar y su intervalo<strong>de</strong> confianza al 95%. En el caso <strong>de</strong> que al calcularel intervalo <strong>de</strong> confianza uno <strong>de</strong> los extremostuviera un valor negativo, se estableció sóloel límite inferior <strong>de</strong>l intervalo <strong>de</strong> confianza con elvalor positivo calculado 14 .Se realizó un meta-análisis <strong>de</strong> los resultados másimportantes utilizando el programa informáticoReview Manager (RevMan) Versión 5.1., <strong>de</strong>sarrolladopor el centro nórdico Cochrane (Copenhague),<strong>de</strong> la colaboración Cochrane, 2011. Para los resultados<strong>de</strong> fracturas o los cambios en la DMO o enlos MRO no se permitió la agrupación <strong>de</strong> los datos<strong>de</strong> las pacientes postmenopáusicas con OP (prevenciónsecundaria) con las <strong>de</strong> las pacientes sin OP(prevención primaria) en el meta-análisis. Esto era<strong>de</strong>bido a que se presuponía que los porcentajes <strong>de</strong>fracturas o los valores <strong>de</strong> los marcadores óseos o la<strong>de</strong>nsidad mineral previos a la inclusión en el estudiodiferirían entre ambos grupos <strong>de</strong> mujeres. Sí sepermitió el meta-análisis conjunto <strong>de</strong> mujeres con osin menopausia para los efectos secundarios relacionadoscon el fármaco. Se presupuso que la presenciao no <strong>de</strong> OP no influiría en los efectos secundarios<strong>de</strong>rivados <strong>de</strong>l bloqueo selectivo <strong>de</strong> losreceptores estrogénicos.ResultadosSe encontraron 134 artículos en la búsqueda sistemática<strong>de</strong> la literatura. Su proceso <strong>de</strong> análisis yselección se <strong>de</strong>scriben en la figura 1. Se seleccionaron5 artículos: un ensayo clínico en fase 2 15 ycuatro en fase 3 10,16-18 patrocinados por Wyeth(Pfizer). Cuatro <strong>de</strong> los artículos comparabanBZD 10,15-17 , y otro la combinación <strong>de</strong> BZD y estrógenosconjugados (EC) 18 . Tres <strong>de</strong> los artículosvaloraban a mujeres postmenopáusicas sin OPpero con factores <strong>de</strong> riesgo para <strong>de</strong>sarrollarla (prevenciónprimaria) 16-18 . En los tres estudios el resultadoprincipal estudiado eran los cambios en laDMO en la columna lumbar. Los otros dos artículos10,15 incluían mujeres con OP (prevención secundaria)y en ambos se valoraba el número <strong>de</strong> nuevasfracturas vertebrales, en el segundo comoresultado principal y en el primero como secundario.El número <strong>de</strong> fracturas vertebrales sintomáticasy el <strong>de</strong> fracturas no vertebrales eran valoradosen ambos como resultados secundarios. Un análisismás <strong>de</strong>tallado <strong>de</strong> otras características <strong>de</strong>l diseño<strong>de</strong> los artículos y <strong>de</strong> los participantes en losensayos clínicos figura en las tablas 1 y 2. Aparte<strong>de</strong> los artículos originales en los que se <strong>de</strong>tallanlos resultados en relación con la OP, tres <strong>de</strong> losensayos clínicos tenían publicados artículos adicionalescon los resultados sobre seguridad 19-23 . Endos <strong>de</strong> los ensayos clínicos se realizaron subanálisis<strong>de</strong> los resultados <strong>de</strong>l estudio según la gravedad24,25 o las características <strong>de</strong> los pacientes 26 (tabla1). El estudio <strong>de</strong> referencia sobre fracturas en prevenciónsecundaria se amplió 2 años 27,28 . En dichaprolongación se suspendió un brazo completo(raloxifeno) <strong>de</strong>l estudio original.


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-169Tabla 1. Características <strong>de</strong> los estudios incluidos en la revisión sistemáticaNº registro(Denominación)NCT00205777 NCT00481169 NCT00238745 NCT00384072NCT00675688(SMART 1)Diseño <strong>de</strong>l estudio Prevención secundaria osteoporosisPrevención primariaosteoporosisPrevención secundaria osteoporosisPrevención primariaosteoporosisPrevención primariaosteoporosisTipo <strong>de</strong> estudio Ensayo clínico aleatorizado Ensayo clínico aleatorizado Ensayo clínico aleatorizado Ensayo clínico aleatorizado Ensayo clínico aleatorizadoCegamiento Doble ciego Doble ciego Doble ciego Doble ciego Doble ciegoFase <strong>de</strong> estudio Fase 3 Fase 3 Fase 2 Fase 3 Fase 3Centros participantes206 centros en países <strong>de</strong>l áreaAsia-Pacífico, Canadá, Europa,America Latina, Sudáfrica y EstadosUnidos101 centros en Canadá, Europa yEstados Unidos17 centros en JapónMulticéntrico: China, Corea <strong>de</strong>lSur y Taiwan94 centros en Estados Unidos,Europa y BrasilDuración <strong>de</strong>l estudio 3 años 2 años 2 años 6 meses 2 añosGrupos <strong>de</strong> tratamiento1. BZD 20 mg2. BZD 40 mg3. Raloxifeno 60 mg4. Placebo1. BZD 10 mg2. BZD 20 mg3. BZD 40 mg4. Raloxifeno 60 mg5. Placebo1. BZD 20 mg2. BZD 40 mg3. Placebo1. BZD 20 mg2. Placebo1. BZD 10 mg/EC 0,625 mg2. BZD 10 mg/EC 0,45 mg3. BZD 20 mg/EC 0,625 mg4. BZD 20 mg/EC 0,45 mg5. BZD 40 mg/EC 0,625 mg6. BZD 40 mg/EC 0,45 mg7. Raloxifeno 60 mg8. PlaceboObjetivo principalNuevas fracturas vertebralesradiológicas (D4 a L4)Cambios en DMO en columnalumbarCambios en DMO en columnalumbar (L1-L4)Cambios en DMO en columnalumbarCambios en DMO en columna lumbarObjetivos secundariosFracturas vertebrales sintomáticas.Fracturas no vertebrales.Cambios en DMO encolumnalumbar, cuello femoral y ca<strong>de</strong>ra.Cambios en MRO.Cambios en DMO en cuellofemoral, trocánter y ca<strong>de</strong>ra.Cambios en MRO.Variaciones en lípidos.Cambios en DMO en cuellofemoral, trocánter y ca<strong>de</strong>ra.Cambios en MRO.Variaciones en lípidos.Fracturas vertebrales o no.Cambios en DMO en cuellofemoral, trocánter y ca<strong>de</strong>ra.Cambios en MRO.Variaciones en lípidos.Cambios en DMO en ca<strong>de</strong>ra.Cambios en MRO.[Referencia]publicación[Referencia]Estudios adicionales10Resultados fracturas.19Datos seguridad.27Prolongación a 5 años, datos seguridad.28Prolongación a 5 años, resultadosfracturas.24Análisis post hoc subgrupo <strong>de</strong> altoriesgo.25Análisis post hoc datos DMO yriesgo <strong>de</strong> fractura.21Subestudio seguridad tracto reproductivo.16Resultados DMO.20 Datos tracto reproductivo. 15Resultados DMO 17Resultados DMO26Subanálisis mujeresafroamericanas18Resultados DMO.22Datos tracto reproductivo.23Síntomas menopausia.No publicados No publicados No publicadosBZD: Bazedoxifeno; DMO: Densidad <strong>Mineral</strong> Ósea; EC: Estrógenos Conjugados; MRO: Marcadores <strong>de</strong> Recambio Óseo; SMART: Selective estrogen Menopause And Response to Therapy.


10Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-16En la figura 2 se muestra la valoración crítica <strong>de</strong>los ensayos clínicos según la metodología propuestaen el manual <strong>de</strong> la colaboración Cochrane. Elítem más penalizado fue el correspondiente al riesgo<strong>de</strong> sesgo <strong>de</strong> <strong>de</strong>sgaste o pérdida. Esto se <strong>de</strong>be aque la tasa <strong>de</strong> abandono era muy elevada (en tornoal 30% en los estudios a 2 y 3 años), con diferenciassignificativas en los motivos <strong>de</strong>l abandono entre losdistintos grupos en alguno <strong>de</strong> los estudios 10,15 .FracturasDos estudios analizaron el número <strong>de</strong> nuevas fracturasen pacientes con OP 10,15 . En el estudio <strong>de</strong>referencia a tres años 10 , el número <strong>de</strong> nuevas fracturasvertebrales <strong>de</strong>tectadas en el seguimientoradiológico a los 3 años fue inferior en los pacientesque recibieron BZD 20 mg (NNT, 56; IC 95%,34-146 pacientes) o BZD 40 mg (NNT, 63; IC 95%,37-231 pacientes) que en los pacientes que recibieronplacebo. No hubo diferencias con el grupoque recibió raloxifeno 60 mg (NNT, 56 pacientescon relación a placebo; IC 95%, 35-158 pacientes).No hubo diferencias entre los cuatro grupos en elnúmero <strong>de</strong> fracturas vertebrales sintomáticas. Losresultados fueron similares en la prolongación a 5años <strong>de</strong>l estudio original 28 . En el estudio <strong>de</strong>sarrolladoen Japón 15 las diferencias entre la tasa <strong>de</strong>nuevas fracturas vertebrales <strong>de</strong>tectadas en elseguimiento radiológico a 2 años no alcanzó significaciónestadística. El meta-análisis <strong>de</strong> ambosestudios muestra una reducción <strong>de</strong>l riesgo <strong>de</strong> fracturasvertebrales radiológicas para los grupos <strong>de</strong>tratamiento con BZD (figura 3).No hubo diferencias estadísticamente significativasen ninguno <strong>de</strong> los dos estudios cuando secomparó el número <strong>de</strong> fracturas no vertebrales(figura 4).Se realizaron estudios post hoc <strong>de</strong>l estudio <strong>de</strong>referencia a tres años 10 para tratar <strong>de</strong> <strong>de</strong>finir subgruposen los que el tratamiento con BZD fuera máseficiente para la prevención <strong>de</strong> nuevas fracturas. Enel propio artículo original 10 se realiza un subestudio(24% <strong>de</strong> las pacientes aleatorizadas inicialmente)seleccionando <strong>de</strong> forma no aleatorizada a laspacientes <strong>de</strong>finidas como <strong>de</strong> alto riesgo (T-scorefemoral ≤ -3 o la presencia <strong>de</strong> al menos una fracturavertebral mo<strong>de</strong>rada o grave o múltiples <strong>de</strong>menor gravedad al inicio <strong>de</strong>l estudio). En este subgrupose mostraba una reducción <strong>de</strong> las fracturasno vertebrales en el grupo <strong>de</strong> BZD frente a raloxifeno(NNT, 37; IC 95%, >16 pacientes) o placebo(NNT, 29; IC 95%, >15 pacientes). Los mismos autores,en la prolongación a 5 años <strong>de</strong>l estudio original28 realizada en un subgrupo <strong>de</strong> 4.216 pacientes yeliminando la rama tratada con raloxifeno, no obtuvieronreducción significativa en la aparición <strong>de</strong>nuevas fracturas no vertebrales en las pacientes <strong>de</strong>alto riesgo tratadas con BDZ 20 mg (37%; p=0,06).Al combinar los datos <strong>de</strong> ambas dosis, 20 y 40 mg,observaron una reducción <strong>de</strong>l 34% (p


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-1611Tabla 2. Características <strong>de</strong> los pacientes incluidos en los estudiosNº registro (Denominación) NCT00205777 NCT00481169 NCT00238745 NCT00384072 NCT00675688 (SMART 1)Criterios <strong>de</strong> inclusiónMujeres postmenopáusicas <strong>de</strong>55 a 85 años.T-score DMO <strong>de</strong> -2,5 a -4 opacientes con fracturas yT-score 45 años postmenopáusicas(>1 año).T-score DMO <strong>de</strong> -1 a -2,5 y ≥1factor <strong>de</strong> riesgo para osteoporosis.Mujeres postmenopáusicas 5 años men.Subestudio 2; 1-5 años men.Criterios <strong>de</strong> exclusiónEnfermeda<strong>de</strong>s óseas que alterenel metabolismo óseo.Alteraciones que afecten con lamedición <strong>de</strong> la DMO, fracturasvertebrales patológicas o enfermeda<strong>de</strong>sgraves. Mujeres conenfermedad tromboembólica.Haber recibido tratamiento enlos 6 meses previos con andrógenos,estrógenos, progesterona,bifosfonatos, PTH, MSRE, calcitoninao colecalciferol.Enfermeda<strong>de</strong>s óseas que alterenel metabolismo <strong>de</strong>l calcio.Alteraciones que afecten con lamedición <strong>de</strong> la DMO, al menosuna fractura osteoporótica, cáncer<strong>de</strong> mama, enfermedad tromboembólica,IMC >32 kg/m 2 ,hiperplasia endometrial.Haber recibido tratamiento enentre 6 meses y 2 años previoscon bifosfonatos, PTH, MSRE,calcitonina o corticoi<strong>de</strong>s.Enfermeda<strong>de</strong>s que puedancausar osteoporosis secundaria,enfermeda<strong>de</strong>s óseas.Alteraciones que afecten con lamedición <strong>de</strong> la DMO. ≥6 fracturasvertebrales o ≥2 fracturaslumbares. Hiperplasia endometrial.Enfermeda<strong>de</strong>s encdocrina,tromboembólica, alteraciones <strong>de</strong>laboratorio. Haber recibido tratamientoprevio con vitamina D,vitamina K, bifosfonatos, PTH,MSRE, calcitonina o corticoi<strong>de</strong>s.Enfermeda<strong>de</strong>s óseas que alterenel metabolismo <strong>de</strong>l calcio.Alteraciones que afecten con lamedición <strong>de</strong> la DMO, al menosuna fractura osteoporótica, cáncer<strong>de</strong> mama, enfermedad tromboembólica,IMC >32kg/m 2 ,hiperplasia endometrial.Historia o presencia <strong>de</strong> neoplasiaestrógeno <strong>de</strong>pendiente,enfermedad tromboembólica,EVC, CIsq, algunos tipos <strong>de</strong>neoplasiasNúmero <strong>de</strong> participantesExaminados: 26.749Aleatorizados: 7.492Examinados: No figuraAleatorizados: 1.583Examinados: 808Aleatorizados: 429Examinados: 950Aleatorizados: 495Examinados: 10.511Aleatorizados: 3.544Subestudio 1: 1.454Subestudio 2: 861AbandonosBZD 20 mg: 34%BZD 40 mg: 34%Raloxifeno 60 mg: 32%Placebo: 33%BZD 10 mg: 32%BZD 20 mg: 30%BZD 40 mg: 30%Raloxifeno 60 mg: 28%Placebo: 27%BZD 20 mg: 27%BZD 40 mg: 23%Placebo: 31%BZD 20 mg: 7,7%Placebo: 7,5%No figuran en el artículoBZD: Bazedoxifeno; CIsq: Cardiopatía Isquémica; DMO: Densidad <strong>Mineral</strong> Ósea; EVC: Enfermedad Vascular Cerebral; IMC: Índice <strong>de</strong> Masa Corporal; men: menopausia; MSRE: Modulador Selectivo <strong>de</strong> los Receptoresestrogénicos; PTH: Paratohormona; SMART: Selective estrogen Menopause And Response to Therapy.


12Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-16Tabla 3. Cambios en la <strong>de</strong>nsidad mineral ósea. Ensayos que utilizan bazedoxifeno (BZD)Referencia [10] ¡ [16] ¡¡ [15] ¡ [17] ¡Años <strong>de</strong>seguimiento3 años 2 años 2 años 6 mesesGrupos <strong>de</strong>tratamientoBZD20 mgBZD40 mgRalox60 mg Placebo BZD10 mgBZD20 mgBZD40 mgRalox60 mg Placebo BZD20 mgBZD40 mg Placebo BZD20 mg PlaceboL1-L4 (%) 2,21 ‡ 2,38 ‡ 2,96 ‡ 0,88 1,08 ‡ 1,41 ‡ 1,49 ‡ 1,49 ‡ 0 2,43 ‡ 2,74 ‡ -0,65 0,41 ‡ -0,32Ca<strong>de</strong>ra total (%) 0,27 ‡ 0,50 ‡ 0,90 ‡† -0,83 1,29 ‡ 1,75 ‡ 1,60 ‡ nd 0 1,10 ‡ 0,93 ‡ -0,97 -0,03 ‡ -0,77Cuello femoral (%) - - - - nd nd nd nd nd 1,73 ‡ 1,16 ‡ -1,14 -0,08 ‡ -0,69Trocánter (%) - - - - nd nd nd nd nd 1,73 ‡ 1,58 ‡ -1,14 0,50 ‡ -0,23nd: No disponible en el texto <strong>de</strong>l artículo original; Ralox: Raloxifeno; ¡: Se muestran los cambios con respecto a los valores al comienzo <strong>de</strong>lestudio; ¡¡: Se muestran los cambios con respecto a los valores <strong>de</strong>l grupo placebo; ‡: Diferencias estadísticamente significativas en la comparacióncon placebo; †: Diferencias estadísticamente significativas en la comparación entre BZD y raloxifeno.Tabla 4. Cambios en la <strong>de</strong>nsidad mineral ósea en región lumbar L1-L4 (%). Ensayos que utilizan BZD/ECReferenciaAños <strong>de</strong> seguimiento2 añosGrupos <strong>de</strong> tratamiento EC 0,625 mg EC 0,625 mg EC 0,625 mg EC 0,45 mg EC 0,625 mg EC 0,625 mgGrupos <strong>de</strong> tratamiento BZD 10 mg BZD 20 mg BZD 40 mg BZD 10 mg BZD 20 mg BZD 40 mg Ralox 60 mg Placebo>5 años <strong>de</strong> menopausia 1,49 ‡† 1,04 ‡ 0,57 ‡ 1,59 ‡† 0,94 ‡ 0,51 ‡ 0,79 -1,081-5 años menopausia 1,60 ‡† 0,55 ‡ 0,77 ‡† 1,13 ‡† 1,01 ‡† 0,62 ‡ -0,07 -1,41‡: Diferencias estadísticamente significativas en la comparación con placebo; †: Diferencias estadísticamente significativas en la comparaciónentre BZD/EC y raloxifeno; BZD: Bazedoxifeno; EC: Estrógenos conjugados.con el uso <strong>de</strong> BZD en el estudio con mayor número<strong>de</strong> pacientes incluidos y mayor periodo <strong>de</strong>seguimiento 10 , pero que no se confirmó en el resto<strong>de</strong> estudios ni en el meta-análisis (figura 5). Lacombinación BZD/EC no tuvo una mayor frecuencia<strong>de</strong> episodios <strong>de</strong> TVP 23 ; b) La presencia <strong>de</strong> vasodilatación/rubor(figura 6); y c) los calambres enpiernas (figura 7). Los dos últimos presentaban unriesgo <strong>de</strong> aparición superior en el grupo <strong>de</strong> tratamientocon BZD frente a placebo en el meta-análisis.La comparación <strong>de</strong> los tres efectos adversoscon el grupo <strong>de</strong> raloxifeno no tuvo diferencias significativas10 . En el caso <strong>de</strong> la vasodilatación/ruborla combinación <strong>de</strong> BZD y EC reducía el número <strong>de</strong>episodios comparado con placebo 23 .Se monitorizaron otros efectos secundarios enel área cardiovascular (infarto <strong>de</strong> miocardio, trombosisvenosa retiniana o enfermedad vascularcerebral), que no mostraron diferencias entre BZDy placebo.En cuanto a los datos <strong>de</strong> seguridad sobre el sistemareproductivo femenino, no se observó unareducción <strong>de</strong> la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> cáncer <strong>de</strong> mama, oun aumento <strong>de</strong>l cáncer <strong>de</strong> endometrio o <strong>de</strong> lahiperplasia endometrial con el tratamiento conBZD frente a placebo 15,17,19,20 . La inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong>l diagnóstico<strong>de</strong> mama fibroquística fue significativamentemayor en el grupo <strong>de</strong> raloxifeno que en el<strong>de</strong> BZD en el estudio <strong>de</strong> Christiansen et al. 10,19 . Lacombinación <strong>de</strong> BZD y EC no <strong>de</strong>sarrolló hiperplasiaendometrial. Sobre el estudio <strong>de</strong> referencia a 3años <strong>de</strong> prevención secundaria <strong>de</strong> OP, se registróun segundo ensayo clínico con una muestra <strong>de</strong> laspacientes a las que se realizó ecografía transvaginal.En dicho trabajó se <strong>de</strong>mostró que el tratamientocon BZD no afectaba a los cambios en elgrosor <strong>de</strong>l endometrio, a la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> hiperplasiao carcinoma endometrial, a la presencia <strong>de</strong>quistes o carcinoma ovárico ni al número <strong>de</strong> episodios<strong>de</strong> hemorragia uterina o vaginal.


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-1613Figura 3. Meta-análisis sobre fracturas vertebrales radiológicasBZD 20/40 mg Placebo Risk RatioStudy or Subgroup Events Total Events Total Weight M-H, Random, 95% CIItabashi 2011 8 283 6 142 7.7% 0.67 (0.24, 1.89)Silverman 2008 90 3758 77 1885 92.3% 0.59 (0.43, 0.79)Total (95% CI) 4041 2027 100.0% 0.59 (0.44, 0.79)Total events 98 83Heterogeneity: Tau 2 =0.00; Chi 2 =0.06, df=1 (P=0.81); I 2 =0%Test for overall effect: Z=3.57 (P=0.0004)Risk RatioM-H, Random, 95% CIn♦0.01 0.1 1 10 100Mayor riesgo con placebo Mayor riesgo con BZDFigura 4. Meta-análisis sobre fracturas no vertebralesBZD 20/40 mg Placebo Odds RatioStudy or Subgroup Events Total Events Total Weight M-H, Random, 95% CIItabashi 2011 8 283 4 142 4.0% 1.00 (0.31, 3.28)Silverman 2008 174 3758 99 1885 96.0% 0.88 (0.69, 1.12)Total (95% CI) 4041 2027 100.0% 0.89 (0.70, 1.12)Total events 182 103Heterogeneity: Tau 2 =0.00; Chi 2 =0.04, df=1 (P=0.83); I 2 =0%Test for overall effect: Z=1.01 (P=0.31)Odds RatioM-H, Random, 95% CI0.01 0.1 1 10 100Mayor riesgo con placebo Mayor riesgo con BZDn♦Figura 5. Meta-análisis sobre trombosis venosa profundaBZD 20/40 mg Placebo Risk RatioStudy or Subgroup Events Total Events Total Weight M-H, Random, 95% CIItabashi 2011 0 283 0 142 Not estimableMiller 2008 2 633 1 310 45.7% 0.98 (0.09, 10.76)Silverman 2008 17 3758 1 1885 54.3% 8.53 (1.14, 64.03)Xu 2011 0 248 0 239 Not estimableTotal (95% CI) 4922 2576 100.0% 3.17 (0.35, 28.63)Total events 19 2Heterogeneity: Tau 2 =1.26; Chi 2 =1.99, df=1 (P=0.16); I 2 =50%Test for overall effect: Z=1.03 (P=0.30)Risk RatioM-H, Random, 95% CI0.01 0.1 1 10 100Mayor riesgo con placebo Mayor riesgo con BZDFigura 6. Meta-análisis sobre vasodilatación/ruborBZD 20/40 mg Placebo Risk RatioStudy or Subgroup Events Total Events Total Weight M-H, Random, 95% CIItabashi 2011 6 283 2 142 1.0% 1.51 (0.31, 7.36)Miller 2008 144 633 44 310 26.9% 1.60 (1.18, 2.18)Silverman 2008 482 3758 119 1885 69.1% 2.03 (1.68, 2,46)Xu 2011 11 248 7 239 3.0% 1.51 (0.60 3.84)Total (95% CI) 4922 2576 100.0% 1.88 (1.60, 2.21)Total events 643 172Heterogeneity: Tau 2 =0.00; Chi 2 =1.94, df=3 (P=0.59); I 2 =0%Test for overall effect: Z=7.74 (P=0.00001)Risk RatioM-H, Random, 95% CI0.01 0.1 1 10 100Mayor riesgo con placebo Mayor riesgo con BZDnn♦Figura 7. Meta-análisis sobre calambres muscularesBZD 20/40 mg Placebo Odds RatioStudy or Subgroup Events Total Events Total Weight M-H, Random, 95% CIItabashi 2011 13 283 2 142 1.8% 3.26 (0.75, 14.26)Miller 2008 77 633 36 310 24.7% 1.05 (0.72, 1.52)Silverman 2008 412 3758 156 1885 72.7% 1.32 (1.11, 1.58)Xu 2011 3 248 1 239 0.8% 2.89 (0.30, 27.60)Total (95% CI) 4922 2576 100.0% 1.28 (1.05, 1.56)Total events 505 195Heterogeneity: Tau 2 =0.01; Chi 2 =3.32, df=3 (P=0.35); I 2 =10%Test for overall effect: Z=2.40 (P=0.002)Odds RatioM-H, Random, 95% CI0.01 0.1 1 10 100Menor riesgo con placebo Mayor riesgo con BZD♦nn


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-1615<strong>de</strong> fractura <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra (OP sólo en columna sinfracturas previas) 44 , se <strong>de</strong>be consi<strong>de</strong>rar a bazedoxifenoen la misma posición en el algoritmo terapéutico.El posible aumento en la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> trombosisvenosa profunda no está bien establecido.Implicaciones para la investigaciónRespecto a la reducción <strong>de</strong> la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> fracturasno vertebrales, es necesaria la realización <strong>de</strong>nuevos ensayos clínicos cuyo objetivo principalsea las fracturas no vertebrales para tener resultadosmás concluyentes. A<strong>de</strong>más, sería convenientela realización <strong>de</strong> nuevos estudios que comparen eluso <strong>de</strong> BZD frente a la combinación <strong>de</strong> BZD conEC para conocer cual <strong>de</strong> las dos presentacionespodría ser más útil en el tratamiento <strong>de</strong> la OP ycual tiene un mejor perfil <strong>de</strong> seguridad.Bibliografía1. <strong>Osteoporosis</strong> prevention, diagnosis, and therapy.JAMA 2001;285:785-95.2. Love RR, Mazess RB, Bar<strong>de</strong>n HS, Epstein S, NewcombPA, Jordan VC, et al. Effects of tamoxifen on bonemineral <strong>de</strong>nsity in postmenopausal women with breastcancer. N Engl J Med 1992;326:852-6.3. Vestergaard P, Rejnmark L, Mosekil<strong>de</strong> L. Effect of tamoxifenand aromatase inhibitors on the risk of fracturesin women with breast cancer. Calcif Tissue Int2002;82:334-40.4. Ettinger B, Black DM, Mitlak BH, Knickerbocker RK,Nickelsen T, Genant HK, et al. Reduction of vertebralfracture risk in postmenopausal women with osteoporosistreated with raloxifene: results from a 3-year randomizedclinical trial. Multiple Outcomes of RaloxifeneEvaluation (MORE) Investigators. JAMA 1999;282:637-45.5. Cranney A, Tugwell P, Zytaruk N, Robinson V, WeaverB, Adachi J, et al. Meta-analyses of therapies for postmenopausalosteoporosis. IV. Meta-analysis of raloxifenefor the prevention and treatment of postmenopausalosteoporosis. Endocr Rev 2002;23:524-8.6. Nelson HD, Fu R, Griffin JC, Nygren P, Smith ME,Humphrey L. Systematic review: comparative effectivenessof medications to reduce risk for primary breastcancer. Ann Intern Med 2009;151:703-15.7. Delmas PD, Bjarnason NH, Mitlak BH, Ravoux AC,Shah AS, Huster WJ, et al. Effects of raloxifene onbone mineral <strong>de</strong>nsity, serum cholesterol concentrations,and uterine endometrium in postmenopausalwomen. N Engl J Med 1997;337:1641-7.8. Delmas PD, Ensrud KE, Adachi JD, Harper KD, SarkarS, Gennari C, et al. Efficacy of raloxifene on vertebralfracture risk reduction in postmenopausal women withosteoporosis: four-year results from a randomized clinicaltrial. J Clin Endocrinol Metab 2002;87:3609-17.9. Barrett-Connor E, Mosca L, Collins P, Geiger MJ, GradyD, Kornitzer M, et al. Effects of raloxifene on cardiovascularevents and breast cancer in postmenopausalwomen. N Engl J Med 2006;355:125-37.10. Silverman SL, Christiansen S, Genant HK, Vukicevic S,Zanchetta JR, <strong>de</strong>-Villiers TJ, et al. Efficacy of bazedoxifenein reducing new vertebral fracture risk in postmenopausalwomen with osteoporosis: results from a 3-year, randomized, placebo-, and active-controlled clinicaltrial. J Bone Miner Res 2008;23:1923-34.11. Cummings SR, Ensrud K, Delmas PD, LaCroix AZ,Vukicevic S, Reid DM, et al. Lasofoxifene in postmenopausalwomen with osteoporosis. N Engl J Med2010;362:686-96.12. Moher D, Liberati A, Tetzlaff J, Altman DG. Preferredreporting items for systematic reviews and meta-analyses:the PRISMA statement. BMJ 2009;339:b2535.13. The Cochrane Collaboration. Cochrane Handbook forSystematic Reviews of Interventions Version 5.1.0(updated March 2011). Higgins JPT and Green S.www.cochrane-handbook.org. 2011. Ref Type:Electronic Citation.14. Altman DG. Confi<strong>de</strong>nce intervals for the number nee<strong>de</strong>dto treat. BMJ 1998;317:1309-12.15. Itabashi A, Yoh K, Chines AA, Miki T, Takada M, SatoH, et al. Effects of bazedoxifene on bone mineral <strong>de</strong>nsity,bone turnover, and safety in postmenopausalJapanese women with osteoporosis. J Bone Miner Res2011;26:519-29.16. Miller PD, Chines AA, Christiansen C, Hoeck HC,Kendler DL, Lewiecki EM, et al. Effects of bazedoxifeneon BMD and bone turnover in postmenopausalwomen: 2-yr results of a randomized, double-blind,placebo-, and active-controlled study. J Bone MinerRes 2008;23:525-35.17. Xu L, Tsai KS, Kim GS, Wu Y, Vincendon P, Chines AA,et al. Efficacy and safety of bazedoxifene in postmenopausalAsian women. Osteoporos Int 2011;22:559-65.18. Lindsay R, Gallagher JC, Kagan R, Pickar JH,Constantine G. Efficacy of tissue-selective estrogencomplex of bazedoxifene/conjugated estrogens forosteoporosis prevention in at-risk postmenopausalwomen. Fertil Steril 2009;92:1045-52.19. Christiansen C, Chesnut CH, Adachi JD, Brown JP,Fernan<strong>de</strong>s CE, Kung AW, et al. Safety of bazedoxifenein a randomized, double-blind, placebo- and activecontrolledPhase 3 study of postmenopausal womenwith osteoporosis. BMC. Musculoskelet Disord2010;11:130.20. Pinkerton JV, Archer DF, Utian WH, Menegoci JC,Levine AB, Chines AA, et al. Bazedoxifene effects onthe reproductive tract in postmenopausal women atrisk for osteoporosis. Menopause 2009;16:1102-8.21. Archer DF, Pinkerton JV, Utian WH, Menegoci JC, <strong>de</strong>-Villiers TJ, Yuen CK, et al. Bazedoxifene, a selectiveestrogen receptor modulator: effects on the endometrium,ovaries, and breast from a randomized controlledtrial in osteoporotic postmenopausal women.Menopause 2009;16:1109-15.22. Pickar JH, Yeh IT, Bachmann G, Speroff L. Endometrialeffects of a tissue selective estrogen complex containingbazedoxifene/conjugated estrogens as a menopausaltherapy. Fertil Steril 2009;92:1018-24.23. Lobo RA, Pinkerton JV, Gass ML, Dorin MH, Ronkin,Pickar JH, et al. Evaluation of bazedoxifene/conjugate<strong>de</strong>strogens for the treatment of menopausalsymptoms and effects on metabolic parameters andoverall safety profile. Fertil Steril 2009;92:1025-38.24. Kanis JA, Johansson H, O<strong>de</strong>n A, McCloskey EV.Bazedoxifene reduces vertebral and clinical fracturesin postmenopausal women at high risk assessed withFRAX. Bone 2009;44:1049-54.25. Bruyere O, Detilleux J, Chines A, Reginster JY.Relationships between changes in bone mineral <strong>de</strong>nsityor bone turnover markers and vertebral fracturesinci<strong>de</strong>nce in patients treated with bazedoxifene.Osteoporos Int 2011;23 Suppl 1. Ref Type: Abstract.26. Levine AB, Ciesielska M, Chines A. Efficacy and Safetyof Bazedoxifene in Postmenopausal African AmericanWomen. J Bone Miner Res 2010;25 Suppl 1. Ref Type:Abstract.27. De Villiers TJ, Chines AA, Palacios S, Lips P, SawickiAZ, Levine AB, et al. Safety and tolerability of bazedoxifenein postmenopausal women with osteoporosis:results of a 5-year, randomized, placebo-controlledphase 3 trial. Osteoporos Int 2011;22:567-76.28. Silverman SL, Chines AA, Kendler DL, Kung AW,Teglbjaerg CS, Felsenberg D, et al. Sustained efficacyand safety of bazedoxifene in preventing fractures inpostmenopausal women with osteoporosis: results ofa 5-year, randomized, placebo-controlled study.Osteoporos Int 2011; Jul 21 [Epub ahead of print].29. Civitelli R, Armamento-Villareal R, Napoli N. Bone turnovermarkers: un<strong>de</strong>rstanding their value in clinical trialsand clinical practice. Osteoporos Int 2009;20:843-51.


16Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S5-1630. Watts NB, Geusens P, Barton IP, Felsenberg D.Relationship between changes in BMD and nonvertebralfracture inci<strong>de</strong>nce associated with risedronate:reduction in risk of nonvertebral fracture is not relatedto change in BMD. J Bone Miner Res 2005;20:2097-104.31. Watts NB, Cooper C, Lindsay R, Eastell R, Manhart MD,Barton IP, et al. Relationship between changes in bonemineral <strong>de</strong>nsity and vertebral fracture risk associatedwith risedronate: greater increases in bone mineral<strong>de</strong>nsity do not relate to greater <strong>de</strong>creases in fracturerisk. J Clin Densitom 2004;7:255-61.32. Arboleya L, Díaz-Curiel M, Del Río L, Blanch J, Díez-Pérez A, Guañabens N, et al. Prevalence of vertebralfracture in postmenopausal women with lumbar osteopeniausing MorphoXpress ® (OSTEOXPRESS Study).Aging Clin Exp Res 2010;22:419-26.33. National Institute for Health and Clinical Excellence(NICE). Alendronate, etidronate, risedronate, raloxifene,strontium ranelate and teriparati<strong>de</strong> for the secondaryprevention of osteoporotic fragility fractures inpostmenopausal women. NHS evi<strong>de</strong>nce. http://guidance.nice.org.uk/TA161.2011. 8-9-2011. Ref Type:Electronic Citation.34. Cranney A, Wells G, Willan A, Griffith L, Zytaruk N,Robinson V, et al. Meta-analyses of therapies for postmenopausalosteoporosis. II. Meta-analysis of alendronatefor the treatment of postmenopausal women.Endocr Rev 2002;23:508-16.35. Cranney A, Tugwell P, Adachi J, Weaver B, Zytaruk N,Papaioannou A, et al. Meta-analyses of therapies forpostmenopausal osteoporosis. III. Meta-analysis ofrisedronate for the treatment of postmenopausal osteoporosis.Endocr Rev 2002;23:517-23.36. Black DM, Delmas PD, Eastell R, Reid R, Boonen S,Cauley JA, et al. Once-yearly zoledronic acid for treatmentof postmenopausal osteoporosis. N Engl J Med2007;356:1809-22.37. Reginster JY, Seeman E, De Vernejoul MC, Adami S,Compston J, Phenekos C, et al. Strontium ranelatereduces the risk of nonvertebral fractures in postmenopausalwomen with osteoporosis: Treatment ofPeripheral <strong>Osteoporosis</strong> (TROPOS) study. J ClinEndocrinol Metab 2005;90:2816-22.38. Meunier PJ, Roux C, Seeman E, Ortolani S, Badurski JE,Spector TD, et al. The effects of strontium ranelate onthe risk of vertebral fracture in women with postmenopausalosteoporosis. N Engl J Med 2004;350:459-68.39. Neer RM, Arnaud CD, Zanchetta JR, Prince R, GaichGA, Reginster JY, et al. Effect of parathyroid hormone(1-34) on fractures and bone mineral <strong>de</strong>nsity in postmenopausalwomen with osteoporosis. N Engl J Med2001;344:1434-41.40. Rothwell PM. Treating individuals 2. Subgroup analysisin randomised controlled trials: importance, indications,and interpretation. Lancet 2005;65:176-86.41. Vestergaard P, Thomsen S. Treating postmenopausalosteoporosis in women at increased risk of fracturecriticalappraisal of bazedoxifene: a review. Int JWomens Health 2009;1:97-103.42. Palacios S, <strong>de</strong> Villiers TJ, Nardone FC, Levine A, WilliamsR, Hines T, et al. Reproductive safety of bazedoxifene inpostmenopausal women with osteoporosis: Results of a7-year, randomized, placebo-controlled, phase 3 Study.22th Annual Meating of North American MenopauseSociety. Washington, 21-24 september 2011. Abstract.43. Palacios S, Silverman S, Levine AB, Kaufman JM,Brown JP, <strong>de</strong> Cicco Nardone F, et al. Long-termEfficacy and safety of bazedoxifene in postmenopausalwomen with osteoporosis: Results of a 7-year, randomized,placebo-controlled Study. 22th AnnualMeating of North American Menopause Society.Washington, 21-24 september 2011. Abstract.44. González Macías J, Guañabens Gay N, Gómez AlonsoC, <strong>de</strong>l Río Barquero L, Muñoz Torres M, Delgado M, etal. Guías <strong>de</strong> práctica clínica en la osteoporosis postmenopáusica,glucocorticoi<strong>de</strong>a y <strong>de</strong>l varón. SociedadEspañola <strong>de</strong> Investigación Ósea y <strong>de</strong>l <strong>Metabolismo</strong><strong>Mineral</strong>. Rev Clin Esp 2008;208 Suppl 1:1-24.


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): 17-2117Del Pino Montes JServicio <strong>de</strong> Reumatología - Hospital Universitario <strong>de</strong> Salamanca - Universidad <strong>de</strong> Salamanca - RETICEFCoste <strong>de</strong> la osteoporosis postmenopáusicaCorrespon<strong>de</strong>ncia: Javier <strong>de</strong>l Pino Montes - Servicio <strong>de</strong> Reumatología - Hospital Universitario <strong>de</strong> Salamanca -Pº San Vicente, 48-183 - 37007 SalamancaCorreo electrónico: jpino@usal.esIntroducciónLa osteoporosis (OP) es una enfermedad frecuente,responsable <strong>de</strong> la gran parte <strong>de</strong> las fracturasque se producen en personas mayores <strong>de</strong> 50 años.Por diversos mecanismos patogénicos se produceuna disminución <strong>de</strong> la masa ósea, lo que se acompaña<strong>de</strong> un aumento <strong>de</strong> la fragilidad ósea. Lasfracturas osteoporóticas vertebrales, <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra, <strong>de</strong>antebrazo y <strong>de</strong> húmero, son las más frecuentes.Suponen un problema sanitario <strong>de</strong> gran magnitudpor la repercusión, no sólo en la salud y calidad<strong>de</strong> vida <strong>de</strong> los pacientes, sino por el coste económicoy social que supone su tratamiento y sussecuelas.Des<strong>de</strong> un punto <strong>de</strong> vista conceptual, hay quedistinguir la OP como entidad clínica y la OP <strong>de</strong>nsitométrica.Respecto a la primera, se trata <strong>de</strong> untrastorno sistémico óseo caracterizado por unaresistencia ósea <strong>de</strong>teriorada que predispone a lafractura, teniendo en cuenta que la resistencia óseaes el resultado <strong>de</strong> la integración <strong>de</strong> la <strong>de</strong>nsidad yla calidad óseas 1 . La causa pue<strong>de</strong> influir sobre lapérdida <strong>de</strong> la masa ósea o sobre otros elementos,como la microarquitectura, <strong>de</strong> los que <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> lacalidad <strong>de</strong>l tejido. Por otro lado, existe una <strong>de</strong>finiciónoperativa propuesta por el grupo <strong>de</strong> trabajo<strong>de</strong> la Organización Mundial <strong>de</strong> la Salud (OMS) reunidoen 1992 2 . Se tuvieron en cuenta unos niveleso puntos <strong>de</strong> corte <strong>de</strong> la <strong>de</strong>nsidad mineral ósea(DMO) para mujeres postmenopáusicas <strong>de</strong> razablanca. Así, se consi<strong>de</strong>ran normales valores <strong>de</strong>DMO superiores a -1 <strong>de</strong>sviación estándar (DE) enrelación a la media <strong>de</strong> adultos jóvenes (T-score ><strong>de</strong> -1); osteopenia valores <strong>de</strong> DMO entre -1 y -2,5DE (T-score entre -1 y -2,5); OP valores <strong>de</strong> DMOinferiores a -2,5 DE (T-score inferior a -2,5); y OPestablecida cuando junto a las condiciones previasse asocia una o más fracturas osteoporóticas 2 . Esta<strong>de</strong>finición tiene utilidad principalmente como criterio<strong>de</strong> clasificación epi<strong>de</strong>miológica y diagnóstica,pero no <strong>de</strong>be ser consi<strong>de</strong>rada <strong>de</strong> modo aislado,sino teniendo en cuenta otras circunstancias talescomo la edad, la rapi<strong>de</strong>z <strong>de</strong> la pérdida ósea o lafrecuencia <strong>de</strong> caídas 2 , ya que la DMO sólo explicaun 70% <strong>de</strong> la fragilidad ósea 3 .El impacto <strong>de</strong> la OP <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> su complicaciónmás importante, las fracturas. Por ello, convieneconsi<strong>de</strong>rar no sólo el diagnóstico <strong>de</strong> la existencia<strong>de</strong> una DMO disminuida, sino también evaluarel riesgo <strong>de</strong> fractura. Se han <strong>de</strong>sarrollado unaserie <strong>de</strong> índices con este objetivo, <strong>de</strong> entre los que<strong>de</strong>staca por su popularidad el propuesto por elgrupo <strong>de</strong> estudio <strong>de</strong> la OMS, <strong>de</strong>nominado FRAX,que incluye una serie <strong>de</strong> parámetros clínicos a<strong>de</strong>más<strong>de</strong> la DMO para la evaluación <strong>de</strong>l riesgo <strong>de</strong>fractura 4 . Estos parámetros son in<strong>de</strong>pendientes <strong>de</strong>la DMO, entre los que se incluyen la historia previa<strong>de</strong> fracturas por fragilidad, la historia familiar<strong>de</strong> fracturas osteoporóticas, la <strong>de</strong>lga<strong>de</strong>z y el hábitotabáquico activo, el consumo <strong>de</strong> alcohol y elaumento <strong>de</strong>l recambio óseo 5 . No es sorpren<strong>de</strong>nteque la frecuencia <strong>de</strong> caídas se asocie también a unmayor riesgo <strong>de</strong> fractura 6 .Importancia e impacto <strong>de</strong> la OPLa OP tiene un gran impacto en la salud y la economía<strong>de</strong> los países <strong>de</strong>sarrollados. Las fracturasosteoporóticas suponen una carga <strong>de</strong> notablemagnitud <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista socioeconómico.Aunque se han propuesto medidas para reducirel problema, la OP sigue estando infradiagnosticada,y muchos pacientes, incluso con fracturasreconocibles como osteoporóticas, permanecensin tratamiento. Las medidas sociales y políticasson aún insuficientes para abordar la prevención<strong>de</strong> este grave problema socio-sanitario.


18Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): 17-21Es una enfermedad muy frecuente que afecta a150-200 millones <strong>de</strong> personas en el mundo.Aproximadamente la mitad <strong>de</strong> estos pacientes pertenecena países <strong>de</strong>sarrollados <strong>de</strong> América <strong>de</strong>lNorte, Europa y Japón. En líneas generales, seestima que en torno al 33% <strong>de</strong> las mujeres mayores<strong>de</strong> 50 años tienen OP. La prevalencia en lamujer aumenta con la edad <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el 15% para elintervalo entre 50 y 59 años, hasta más <strong>de</strong>l 80% eneda<strong>de</strong>s superiores a 80 años 7 . En los varones laprevalencia <strong>de</strong> la OP es menor, 8% según datos<strong>de</strong>l estudio NHANES 8 .En España, cerca <strong>de</strong> <strong>de</strong> 2 millones <strong>de</strong> mujeresy 800.000 varones tienen OP. La prevalencia <strong>de</strong>OP <strong>de</strong>nsitométrica es <strong>de</strong>l 26,07% (IC95%, 22,57-29,57%) en mujeres mayores <strong>de</strong> 50 años 9 , muchomayor que la observada en los varones, 8,1% enmayores <strong>de</strong> 50 años 10 y 11,3% en mayores <strong>de</strong> 70años 11 . Las fracturas osteoporóticas son responsables<strong>de</strong> las graves consecuencias clínicas y socioeconómicas<strong>de</strong> la OP. La discapacidad producidapor la OP en Europa supera al impacto <strong>de</strong> muchoscánceres y otras enfermeda<strong>de</strong>s crónicas como laartritis reumatoi<strong>de</strong>, el asma o la repercusión cardiaca<strong>de</strong> la hipertensión 12 .La fractura osteoporótica, calculada en datosrelativos al año 2000 en todo el mundo, alcanzó lacifra <strong>de</strong> 9 millones <strong>de</strong> fracturas, <strong>de</strong> las que más <strong>de</strong>la mitad correspondieron a Europa y EstadosUnidos (EEUU), con la siguiente distribución: enca<strong>de</strong>ra, 1,6 millones; en antebrazo 1,7 millones; yvertebrales clínicas (sintomáticas) 1,4 millones 12 .Se han proyectado hacia el futuro los datos actuales,y se estima que las fracturas irán en aumentoen las próximas décadas 13 . No hay datos globalesdirectos sobre el número <strong>de</strong> fracturas en España,pero se supone que pue<strong>de</strong>n llegar a 100.000 fracturaspor año, con unos costes directos superioresa 126 millones <strong>de</strong> euros, e indirectos <strong>de</strong> más <strong>de</strong>420 millones <strong>de</strong> euros.La prevalencia <strong>de</strong> fractura vertebral es difícil <strong>de</strong>cuantificar. Más <strong>de</strong> dos tercios son asintomáticas ysólo pue<strong>de</strong>n ser diagnosticadas por métodos <strong>de</strong>imagen, generalmente radiografía lateral <strong>de</strong>columna lumbar y dorsal 14,15 . La presencia <strong>de</strong> fracturaprevalente en una mujer por encima <strong>de</strong> los 65años multiplica por 7-10 veces el riesgo <strong>de</strong> sufrirotra nueva fractura en los próximos 5 años 16 .También aumenta la probabilidad <strong>de</strong> sufrir fracturasno vertebrales, que se estima en un cociente<strong>de</strong> riesgo <strong>de</strong> 2,8-4,5, y éste aumenta con el número<strong>de</strong> <strong>de</strong>formida<strong>de</strong>s vertebrales.Las fracturas vertebrales son infrecuentes antes<strong>de</strong> los 50 años y, como el resto <strong>de</strong> las fracturas,aumenta con la edad. Diversos estudios señalanque su prevalencia en mujeres mayores <strong>de</strong> 50años está entre un 18 y 28% 17 . En Europa los datos<strong>de</strong> prevalencia proce<strong>de</strong>n principalmente <strong>de</strong>l“European Vertebral <strong>Osteoporosis</strong> Study” (EVOS),don<strong>de</strong> se ha observado una prevalencia <strong>de</strong>l 12,2%para los varones y <strong>de</strong>l 12% para entre los 50 y 79años <strong>de</strong> edad 18 . Los individuos <strong>de</strong> este estudio seincluyeron posteriormente en un estudio prospectivo“European Prospective <strong>Osteoporosis</strong> Study”(EPOS) 19 . La inci<strong>de</strong>ncia anual se consi<strong>de</strong>ra <strong>de</strong>l 1%en mujeres <strong>de</strong> 65 años, el 2% en las <strong>de</strong> 75 años yel 3% en las mayores <strong>de</strong> 85 años. En varonesmayores <strong>de</strong> 50 años es <strong>de</strong> 5,7 a 6,8/1.000 personas/año,lo que equivale aproximadamente a lamitad <strong>de</strong>l observado para mujeres 20 . Datos másrecientes españoles proce<strong>de</strong>ntes <strong>de</strong>l estudio“Fractura vertebral osteoporótica y factores <strong>de</strong>riesgo asociados” (FRAVOS) en una población <strong>de</strong>Valencia, señalan que la prevalencia <strong>de</strong> la fracturavertebral en la mujer por encima <strong>de</strong> los 50 años es<strong>de</strong> 21,4%, que se incrementa hasta el 46,3% en lasmayores <strong>de</strong> 75 años 21 .Las fracturas no-vertebrales, excluyendo lasfracturas craneales y cervicales, son más numerosasque las vertebrales en la población con OPpostmenopáusica, y superan con mucho la suma<strong>de</strong> las <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra y muñeca 22 . Su localización esmuy diversa y la frecuencia <strong>de</strong> cada localizaciónes muy pequeña, con excepción <strong>de</strong> las <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ray muñeca. Como hemos señalado, <strong>de</strong>stacan lasfracturas <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra por su alta morbi-mortalidad.Son fracturas frecuentes, afectan al 1% <strong>de</strong> lapoblación. Las fracturas <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra suponen el 10%<strong>de</strong> todas las fracturas no-vertebrales, pero su porcentajeaumenta con la edad, llegando al 40% <strong>de</strong>spués<strong>de</strong> los 80 años.Las fracturas <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra se consi<strong>de</strong>ran, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> elpunto <strong>de</strong> vista <strong>de</strong>l pronóstico, la más grave por sualta morbi-mortalidad. Menos <strong>de</strong> la mitad <strong>de</strong> lospacientes recuperarán su situación anterior, yaque el 25% necesitará cuidados en su domicilio yun 20% permanecerá en situación <strong>de</strong> <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>nciacontinúa. La inci<strong>de</strong>ncia aumenta exponencialmentecon la edad, y es el doble en la mujer que enel varón 23 . La mayoría ocurre tras una caída <strong>de</strong>s<strong>de</strong>una altura igual o inferior a la propia talla. El riesgoglobal <strong>de</strong> fractura <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra a partir <strong>de</strong> los 50años en el Reino Unido es <strong>de</strong>l 11,4% y 3,1% paramujeres y varones, respectivamente. La inci<strong>de</strong>nciavaría sustancialmente <strong>de</strong> una población a otra, ysuele ser más alta en individuos caucásicos blancos.En Europa, la proporción <strong>de</strong> fracturas <strong>de</strong>ca<strong>de</strong>ra varía hasta en 7 veces entre diferentes países.España es consi<strong>de</strong>rada zona <strong>de</strong> mo<strong>de</strong>radainci<strong>de</strong>ncia 24 , mientras que en Noruega, Suecia,Islandia, Dinamarca y EE.UU. la inci<strong>de</strong>ncia es elevada25 . En nuestro país la inci<strong>de</strong>ncia anual es muyvariable, y oscila entre 301/100.000 y 897/100.000pacientes mayores 65 años 26 .La fractura distal <strong>de</strong> cúbito y radio, o <strong>de</strong> Colles,tienen un perfil <strong>de</strong> presentación diferente a lasanteriores. Los datos son más escasos que para lasfracturas vertebrales o <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra. La mayor parte<strong>de</strong> los datos <strong>de</strong> inci<strong>de</strong>ncia proce<strong>de</strong>n <strong>de</strong>l hemisferionorte, principalmente <strong>de</strong> los países escandinavos,Reino Unido y EE.UU. Hay un aumento <strong>de</strong> la inci<strong>de</strong>nciaen las mujeres caucásicas entre los 40 y 65años, seguido <strong>de</strong> una meseta que se mantiene enaños posteriores 17 , lo que se ha relacionado conuna alteración <strong>de</strong> los reflejos neuromusculares causadospor el envejecimiento, y por una ten<strong>de</strong>nciaa sufrir caídas cuyo impacto se preten<strong>de</strong> amortiguar<strong>de</strong> un modo automático con los brazos exten-


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): 17-2119didos. Este tipo <strong>de</strong> fractura aparece principalmenteen mujeres y, la mayor parte, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> los 65años <strong>de</strong> edad. En el Reino Unido el riesgo <strong>de</strong> fracturaa lo largo <strong>de</strong> la vida en mujeres <strong>de</strong> 50 años es<strong>de</strong>l 16,6%, mientras que a los 70 años ese riesgocae al 10,4%. La inci<strong>de</strong>ncia en varones es significativamentemás baja y no se altera excesivamentecon la edad (riesgo durante el resto <strong>de</strong> la vida <strong>de</strong>l2,9% a los 50 años y <strong>de</strong>l 1,4% a los 70) 27 .Costes <strong>de</strong> la OP y las fracturas osteoporóticasA<strong>de</strong>más <strong>de</strong> las repercusiones personales por sualta morbi-mortalidad, la OP genera costes socioeconómicosmuy notables y el análisis <strong>de</strong> estos costesconlleva una gran incertidumbre, puesto que elcálculo es difícil y sesgado. La información disponiblees incompleta 28 , tanto en relación con la prevalencia<strong>de</strong> las fracturas como con los datos <strong>de</strong> loscostes relacionados. Los datos más ajustados proce<strong>de</strong>n<strong>de</strong>l análisis <strong>de</strong> las fracturas <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra, <strong>de</strong> lasque es fácil conocer la inci<strong>de</strong>ncia y los costesdirectos hospitalarios. El análisis más frecuente <strong>de</strong>costes son estudios <strong>de</strong>l coste-efectividad <strong>de</strong> lasintervenciones farmacológicas. Muchos <strong>de</strong> los cálculos<strong>de</strong> los estudios <strong>de</strong> coste se hacen sobremo<strong>de</strong>los teóricos que parten <strong>de</strong> los datos epi<strong>de</strong>miológicosconocidos. Los resultados se expresanen unida<strong>de</strong>s monetarias o sobre la base <strong>de</strong> la pérdida<strong>de</strong> años <strong>de</strong> vida ajustados por su calidad(“Quality-adjusted life-year” o QALY) 28 .El cálculo es complejo y se <strong>de</strong>ben incluir lasconsecuencias <strong>de</strong>l impacto individual (entre otros,la posibilidad <strong>de</strong> morir a causa <strong>de</strong> las enfermeda<strong>de</strong>sóseas) y el impacto sobre el estado emocional.Los costes socioeconómicos se divi<strong>de</strong>n en costesdirectos e indirectos. Entre los primeros están los<strong>de</strong>rivados <strong>de</strong> hospitalización, cuidados ambulatoriosy farmacéuticos. Éstos pue<strong>de</strong>n tener relacióncon los cuidados agudo, social y hospitalario,tanto a corto como a largo plazo, y los fármacos.En los costes directos no médicos se incluyen loscuidados sociales y los cuidados informales. Entrelos cuidados sociales se incluyen arreglos para laadaptación <strong>de</strong> la casa, cuidados sanitarios recibidosen el domicilio, ayuda domiciliaria, transportes.Por último, los costes indirectos incluyen principalmentela pérdida <strong>de</strong> producción <strong>de</strong>l pacienteo <strong>de</strong> los familiares que los atien<strong>de</strong>n.Los costes <strong>de</strong> hospitalización se ven influidospor la duración <strong>de</strong> la hospitalización. Entre loscuidados ambulatorios se incluyen las visitas alcirujano ortopeda, visitas a otros médicos incluidoel <strong>de</strong> cabecera, las visitas <strong>de</strong> enfermería, la fisioterapia,la terapia ocupacional y la ayuda telefónica.Uno <strong>de</strong> los problemas <strong>de</strong>rivados <strong>de</strong> las fracturases la discapacidad. Algunos mo<strong>de</strong>los <strong>de</strong> estudiosocioeconómicos utilizan este enfoque en elque los costes se calculan en pérdida <strong>de</strong> años <strong>de</strong>vida ajustados por su discapacidad (“Disabilityadjusted life year” o DALY) 12 . A<strong>de</strong>más <strong>de</strong>l importantecoste económico, las fracturas tienen unimpacto social que, aunque influye en el coste,<strong>de</strong>be consi<strong>de</strong>rarse in<strong>de</strong>pendientemente como esla mortalidad y la morbilidad.Gran parte <strong>de</strong> los estudios económicos proce<strong>de</strong>n<strong>de</strong> Suecia o el Reino Unido. La pérdida anualrelacionada con las fracturas en Suecia es <strong>de</strong>15.930 QALY 29 . Al estratificarlo por riesgo, es <strong>de</strong>cirpor edad, el valor <strong>de</strong> la pérdida <strong>de</strong> un QALY enReino Unido referido a 2002, es 103.572 £ a los 50años, 149.2267 £ a los 60, 186.818 £ a los 70 añosy 488.050 £ a los 80 años 28 .Por otro lado, la disminución <strong>de</strong> la calidad <strong>de</strong>vida relacionada con la salud tiene un importantecoste social individual en las fracturas. En unreciente estudio realizado en la cohorte“Canadian Database of <strong>Osteoporosis</strong> andOsteopenia” (CANDOO), la calidad <strong>de</strong> vida estánotablemente disminuida a pesar <strong>de</strong>l tratamientocuando se aplicó el Mini-<strong>Osteoporosis</strong> Quality ofLife Questionnaire 30 .Coste <strong>de</strong> la fractura <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>raEl coste <strong>de</strong> las fracturas <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra es variablesegún el país que se consi<strong>de</strong>re. En el informe <strong>de</strong>la “<strong>Osteoporosis</strong> International Foundation” (IOF)<strong>de</strong> 2008 se observa la variabilidad en los días <strong>de</strong>estancia hospitalaria por fractura <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra entrelos diferentes países europeos, lo que indudablementese refleja en coste 31 . Probablemente estoscostes aumentarán en los próximos años. Segúndatos españoles, la frecuencia <strong>de</strong> la fractura <strong>de</strong>ca<strong>de</strong>ra parece aumentar <strong>de</strong> modo in<strong>de</strong>pendiente<strong>de</strong> la edad 26 , hecho que se observa también enotros países <strong>de</strong> nuestro entorno y, según informe<strong>de</strong> la IOF, se espera un notable aumento en laspróximas décadas hasta duplicarse en 2050.Entre las circunstancias que contribuyen algasto por las fracturas <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra están, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong>los costes directos, la mortalidad, la discapacidady la necesidad <strong>de</strong> institucionalización. La causa <strong>de</strong>muerte en muchas ocasiones no está relacionadadirectamente con la fractura. Su patrón <strong>de</strong> frecuenciaes bifásico, con un pico inicial en las primeras4 semanas y otro incremento posterior,entre 6-12 meses. Posteriormente <strong>de</strong>crece, aunquese mantiene por encima <strong>de</strong> lo esperado en losaños siguientes 32 . La mortalidad es <strong>de</strong>l 20-30% enel primer año, lo que significa que el riesgo <strong>de</strong>muerte aumenta <strong>de</strong> 2 a 10 veces por encima <strong>de</strong> loesperado en la población <strong>de</strong> similares características17 . El exceso <strong>de</strong> mortalidad se estima en un riesgo<strong>de</strong> 3,35 (95% CI, 1,50-7,47) comparado con elriesgo posterior <strong>de</strong> 1,30 (95% CI, 0,85-1,98) 33 .Otro <strong>de</strong> los costes sociales es la <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>nciaen la que quedan más <strong>de</strong> la mitad <strong>de</strong> los pacientesque sobreviven <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> una fractura <strong>de</strong>ca<strong>de</strong>ra. En el conjunto <strong>de</strong> discapacidad atribuiblea las fracturas osteoporóticas, la fractura <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>rasupone el mayor coste. El 40% <strong>de</strong> los DALY perdidospor OP se <strong>de</strong>be a la fractura <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra 12 .Debido a la situación <strong>de</strong> <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia muchospacientes tienen que ser institucionalizados parapo<strong>de</strong>r ser atendidos, generalmente en una resi<strong>de</strong>ncia<strong>de</strong> ancianos. Esto representa un gastoimportante no siempre contabilizado. La informaciónmás clara proce<strong>de</strong> <strong>de</strong>l análisis <strong>de</strong> costes enReino Unido. El porcentaje <strong>de</strong> pacientes institucio-


20Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): 17-21nalizados varía con la edad, entre el 4% a los 60-79, el 12% a los 80-89 años y el 17% por encima<strong>de</strong> 90 años 33 .El coste mundial <strong>de</strong> las fracturas <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra secifraba en 34.800 millones <strong>de</strong> dólares en 1990 yesta cifra va en aumento, calculándose que alcanzarálos 131.500 millones <strong>de</strong> dólares en 2050 17 . EnEE.UU. el coste <strong>de</strong> fracturas <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra se estimaen 19.300 dólares durante el primer año en mujeresmayores <strong>de</strong> 65 años, y <strong>de</strong> 21.700 dólares parael rango <strong>de</strong> edad <strong>de</strong> 50 a 65 años. El mayor costelo representan las estancias hospitalarias, con un50% <strong>de</strong>l coste total. Los costes directos varían <strong>de</strong>ntro<strong>de</strong> los países europeos. En Suecia varía entre9.397 euros en los pacientes <strong>de</strong> 50–64 años y25.253 euros en mayores <strong>de</strong> 85 años. En Bélgicase calcula en 16.624 euros, mientras que enEspaña se estima un coste inferior al <strong>de</strong> Suecia,6.759 euros 34 .Otro <strong>de</strong> los costes a consi<strong>de</strong>rar son los <strong>de</strong>rivados<strong>de</strong> la atención <strong>de</strong> los pacientes una vez quehan superado el periodo agudo <strong>de</strong> la fractura. EnReino Unido tienen en cuenta para su cálculodiversos parámetros relacionados con los posibles<strong>de</strong>senlaces <strong>de</strong> la fractura <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra: el primero ymás favorable es el alta y regreso a su domicilio;el segundo, más <strong>de</strong>sfavorable, en el que el pacientese encuentra discapacitado y es instalado enuna resi<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> ancianos u hospital <strong>de</strong> crónicos;por último el peor <strong>de</strong>senlace es la muerte en elprimer año <strong>de</strong> fractura. Estos costes referidos alaños 2002, suponen un gasto social global anualestimado en más <strong>de</strong> 30 millones <strong>de</strong> libras esterlinas.En él se incluirían los pacientes que van aldomicilio (45%), y supondría 1.750 £ por paciente;los que mueren el primer año (30%), unos2.964 £ por persona; y los pacientes que requierenatención institucionalizada a largo plazo (25%),cuyo gasto se eleva a 22.218 £. El coste total porvisitas al médico <strong>de</strong> Atención Primaria en el primeraño se estima en 8.5 millones <strong>de</strong> £.En los siguientes años los costes varían entreaquéllos que se van a su casa y los que precisaninstitucionalización. Teniendo esto en cuenta, loscostes totales son <strong>de</strong> 6.635 £ en los pacientes endomicilio, los institucionalizados 27.228 £, y porúltimo, los que mueren, 7.772 £. Sin embargo, enmuchos estudios no se suelen estimar los añosposteriores, que sería coste 0 para los que mueren.Se asumen que los que van a su domicilio(fractura no complicada) tendrían también ungasto escaso; sin embargo, cuando se remiten aresi<strong>de</strong>ncias privadas hay un coste adicional <strong>de</strong>18.900 £ por año (precios 1996) 35 .El coste en precios <strong>de</strong> 2002 <strong>de</strong> la fractura <strong>de</strong> unapaciente que va a su domicilio es diferente segúnsu edad. El coste sería <strong>de</strong> 4.880 £ a los 50 años yaumenta a 8.800 £ para los mayores <strong>de</strong> 80 años. Delmismo modo, las pacientes más jóvenes que se vana una resi<strong>de</strong>ncia tiene un coste <strong>de</strong> 29.620 £, mientrasque ascen<strong>de</strong>ría a 32.795 en el grupo <strong>de</strong> los 80años. En los años siguientes, el coste <strong>de</strong> aquellaspersonas que permanecen en resi<strong>de</strong>ncias privadasse mantiene estable en 27.290 £ anuales 28 .En Canadá, los costes directos <strong>de</strong>l tratamiento<strong>de</strong> la fractura <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra se estiman en 28.297 dólares,y los costes directos médicos en 17.961 dólares.Los gastos relacionados con la atención alpaciente durante el resto <strong>de</strong>l primer año supondrían10.336 dólares. Los cuidados adicionales durantelos años sucesivos serían <strong>de</strong> 7.302 dólares. Loscostes indirectos aumentaría a 4.218 dólares en lospacientes <strong>de</strong> 65-69 años mientras que sería <strong>de</strong>1.158 los mayores <strong>de</strong> 75 años 36 .En Suecia, el coste <strong>de</strong>l tratamiento la fractura<strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra oscila entre 115.994 coronas suecas enel grupo entre 50-64 años y 166.232 coronas suecasen el grupo <strong>de</strong> más <strong>de</strong> 85 años, según precios<strong>de</strong> 2005 29 . Los costes que se presentan entre los 12y 18 meses <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la fractura <strong>de</strong> ca<strong>de</strong>ra alcanzanlos 14.360 €. El coste también varía muchoentre grupos <strong>de</strong> edad, entre los 527 € en el grupo<strong>de</strong> 50–64 años y los 4.000 € en los mayores <strong>de</strong> 85.En todas las eda<strong>de</strong>s el coste es mayor en los varonesque en las mujeres 37 .Según el <strong>de</strong>senlace, existen lógicamente diferencias.Entre los que mueren en los 4 primerosmeses y aquéllos que fallecen entre los 5 y los 18meses y los que sobreviven a partir <strong>de</strong> ese tiempo.En aquéllos que fallecen en los primerosmeses el coste es <strong>de</strong> 14.115 € mientras que en losque sobreviven más <strong>de</strong> 18 meses el coste es <strong>de</strong>11.350 € 37 .Bibliografía1. NIH Consensus Development Panel on <strong>Osteoporosis</strong>Prevention D, and Therapy. <strong>Osteoporosis</strong> prevention,diagnosis, and therapy. JAMA 2001;285:785-95.2. WHO. Assessment of fracture risk and its applicationto screening for postmenopausal osteoporosis. Reportof a WHO Study Group. World Health Organ Tech RepSer 1994;843:1-129.3. Johnell O, O'Neill T, Felsenberg D, Kanis J, Cooper C,Silman AJ. Anthropometric measurements and vertebral<strong>de</strong>formities. European Vertebral <strong>Osteoporosis</strong>Study (EVOS) Group. Am J Epi<strong>de</strong>miol 1997;146:287-93.4. Kanis JA, Johnell O, O<strong>de</strong>n A, Johansson H, McCloskeyE. FRAX and the assessment of fracture probability inmen and women from the UK. Osteoporos Int2008;19:385-97.5. National <strong>Osteoporosis</strong> Foundation (NOF). Risk assessment.Physician´s Gui<strong>de</strong> for the prevention and treatmentof osteoporosis. 2003.6. Barrett-Connor E, Weiss TW, McHorney CA, Miller PD,Siris ES. Predictors of falls among postmenopausalwomen: results from the National <strong>Osteoporosis</strong> RiskAssessment (NORA). Osteoporos Int 2009;20:715-22.7. Rosen CJ. Clinical practice. Postmenopausal osteoporosis.N Engl J Med 2005;353:595-603.8. Looker AC, Orwoll ES, Johnston CC, Jr., Lindsay RL,Wahner HW, Dunn WL, et al. Prevalence of low femoralbone <strong>de</strong>nsity in ol<strong>de</strong>r U.S. adults from NHANES III.J Bone Miner Res 1997;12:1761-8.9. Díaz Curiel M, García JJ, Carrasco JL, Honorato J, PérezCano R, Rapado A, et al. Prevalencia <strong>de</strong> la osteoporosis<strong>de</strong>terminada por <strong>de</strong>nsitometría en la poblaciónfemenina española. Med Clin (Barc) 2001;116:86-8.10. Naves M, Díaz-López JB, Gómez C, Rodríguez-RebollarA, Serrano-Arias M, Cannata-Andía JB. Prevalence ofosteoporosis in men and <strong>de</strong>terminants of changes inbone mass in a non-selected Spanish population.Osteoporos Int 2005;16:603-9.11. Díaz Curiel M, Carrasco <strong>de</strong> la Pena JL, Honorato Pérez


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): 17-2121J, Pérez Cano R, Rapado A, Ruíz Martínez I. Study ofbone mineral <strong>de</strong>nsity in lumbar spine and femoralneck in a Spanish population. Multicentre ResearchProject on <strong>Osteoporosis</strong>. Osteoporos Int 1997;7:59-64.12. Johnell O, Kanis JA. An estimate of the worldwi<strong>de</strong> prevalenceand disability associated with osteoporoticfractures. Osteoporos Int 2006;17:1726-33.13. Gullberg B, Johnell O, Kanis JA. World-wi<strong>de</strong> projectionsfor hip fracture. Osteoporos Int 1997;7:407-13.14. Cooper C, O'Neill T, Silman A. The epi<strong>de</strong>miology ofvertebral fractures. European Vertebral <strong>Osteoporosis</strong>Study Group. Bone 1993;14 Suppl 1:S89-97.15. Gehlbach SH, Bigelow C, Heimisdottir M, May S, WalkerM, Kirkwood JR. Recognition of vertebral fracture in aclinical setting. Osteoporos Int 2000;11:577-82.16. Kaptoge S, Armbrecht G, Felsenberg D, Lunt M,O'Neill TW, Silman AJ, et al. When should the doctoror<strong>de</strong>r a spine X-ray? I<strong>de</strong>ntifying vertebral fractures forosteoporosis care: results from the EuropeanProspective <strong>Osteoporosis</strong> Study (EPOS). J Bone MinerRes 2004;19:1982-93.17. Johnell O, Kanis J. Epi<strong>de</strong>miology of osteoporotic fractures.Osteoporos Int 2005;16 Suppl 2:S3-7.18. O'Neill TW, Cooper C, Cannata JB, Diaz Lopez JB,Hoszowski K, Johnell O, et al. Reproducibility of aquestionnaire on risk factors for osteoporosis in a multicentreprevalence survey: the European Vertebral<strong>Osteoporosis</strong> Study. Int J Epi<strong>de</strong>miol 1994;23:559-65.19. Ismail AA, O'Neill TW, Cooper C, Finn JD, Bhalla AK,Cannata JB, et al. Mortality associated with vertebral<strong>de</strong>formity in men and women: results from theEuropean Prospective <strong>Osteoporosis</strong> Study (EPOS).Osteoporos Int 1998;8:291-7.20. Inci<strong>de</strong>nce of vertebral fracture in europe: results fromthe European Prospective <strong>Osteoporosis</strong> Study (EPOS).J Bone Miner Res 2002;17:716-24.21. Sanfélix-Genovés J, Reig-Molla B, Sanfélix-Gimeno G,Peiro S, Graells-Ferrer M, Vega-Martínez M, et al. Thepopulation-based prevalence of osteoporotic vertebralfracture and <strong>de</strong>nsitometric osteoporosis in postmenopausalwomen over 50 in Valencia, Spain (the FRAVOstudy). Bone 2010;47:610-6.22. Ettinger B, Black DM, Mitlak BH, Knickerbocker RK,Nickelsen T, Genant HK, et al. Reduction of vertebralfracture risk in postmenopausal women with osteoporosistreated with raloxifene: results from a 3-year randomizedclinical trial. Multiple Outcomes of RaloxifeneEvaluation (MORE) Investigators. JAMA 1999;282:637-45.23. Cooper C, Campion G, Melton LJ, 3rd. Hip fractures inthe el<strong>de</strong>rly: a world-wi<strong>de</strong> projection. Osteoporos Int1992;2:285-9.24. Johnell O, Gullberg B, Allan<strong>de</strong>r E, Kanis JA. The apparentinci<strong>de</strong>nce of hip fracture in Europe: a study ofnational register sources. MEDOS Study Group.Osteoporos Int 1992;2:298-302.25. Kanis JA, Johnell O, De Laet C, Jonsson B, O<strong>de</strong>n A,Ogelsby AK. International variations in hip fractureprobabilities: implications for risk assessment. J BoneMiner Res 2002;17:1237-44.26. Blanco JF, Díaz-Álvarez A, Pedro JAD, Borrego D, PinoJD, Cortés J. Inci<strong>de</strong>nce of hip fractures in Salamanca,Spain. Period: 1994-2002. Arch <strong>Osteoporosis</strong> 2006;1:7-12.27. Van Staa TP, Dennison EM, Leufkens HG, Cooper C.Epi<strong>de</strong>miology of fractures in England and Wales. Bone2001;29:517-22.28. Stevenson M, Jones ML, De Nigris E, Brewer N, DavisS, Oakley J. A systematic review and economic evaluationof alendronate, etidronate, risedronate, raloxifeneand teriparati<strong>de</strong> for the prevention and treatment ofpostmenopausal osteoporosis. Health Technol Assess2005;9:1-160.29. Borgstrom F, Sobocki P, Strom O, Jonsson B. Thesocietal bur<strong>de</strong>n of osteoporosis in Swe<strong>de</strong>n. Bone2007;40:1602-9.30. Adachi JD, Ioannidis G, Olszynski WP, Brown JP,Hanley DA, Sebaldt RJ, et al. The impact of inci<strong>de</strong>ntvertebral and non-vertebral fractures on health relatedquality of life in postmenopausal women. BMCMusculoskelet Disord 2002;3:11.31. <strong>Osteoporosis</strong> in the European Union in 2008: Tenyears of progress and ongoing challenges. IOF, 2008.32. Parker MJ, Anand JK. What is the true mortality of hipfractures? Public Health 1991;105:443-6.33. Kanis JA, Brazier JE, Stevenson M, Calvert NW, LloydJones M. Treatment of established osteoporosis: asystematic review and cost-utility analysis. HealthTechnol Assess 2002;6:1-146.34. Borgstrom F, Carlsson A, Sintonen H, Boonen S,Haentjens P, Burge R, et al. The cost-effectiveness ofrisedronate in the treatment of osteoporosis: an internationalperspective. Osteoporos Int 2006;17:996-1007.35. Dolan P, Torgerson DJ. The cost of treating osteoporoticfractures in the United Kingdom female population.Osteoporos Int 1998;8:611-7.36. Schousboe JT, Taylor BC, Fink HA, Kane RL,Cummings SR, Orwoll ES, et al. Cost-effectiveness ofbone <strong>de</strong>nsitometry followed by treatment of osteoporosisin ol<strong>de</strong>r men. JAMA 2007;298:629-37.37. Strom O, Borgstrom F, Zethraeus N, Johnell O, LidgrenL, Ponzer S, et al. Long-term cost and effect on qualityof life of osteoporosis-related fractures in Swe<strong>de</strong>n.Acta Orthop 2008;79:269-80.


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S23-2723Sosa Henríquez M 1 , Cancelo Hidalgo MJ 21 Universidad <strong>de</strong> La Palmas <strong>de</strong> Gran Canaria - Grupo <strong>de</strong> investigación en osteoporosis y metabolismo mineral - Hospital Universitario Insular - Servicio<strong>de</strong> Medicina Interna - Unidad Metabólica Ósea2 Universidad <strong>de</strong> Alcalá - Servicio <strong>de</strong> Ginecología y Obstetricia - Hospital Universitario <strong>de</strong> GuadalajaraPapel <strong>de</strong>l bazedoxifeno en el tratamiento<strong>de</strong> la osteoporosis postmenopáusicaCorrespon<strong>de</strong>ncia: Manuel Sosa Henríquez - c/Espronceda, 2 - 35005 Las Palmas <strong>de</strong> Gran CanariaCorreo electrónico: msosa@ono.comIntroducción. La osteoporosis. Su importanciaLa osteoporosis es una enfermedad para la que notenemos una <strong>de</strong>finición totalmente satisfactoria 1 .Des<strong>de</strong> los años 50 en los que Fuller Albright la <strong>de</strong>finiócomo “<strong>de</strong>masiado poco hueso” 2 , concepto quees incompleto, pues sólo recoge el aspecto cuantitativo<strong>de</strong> la enfermedad y no los cualitativos, se hansucedido las <strong>de</strong>finiciones, como en 1988 la <strong>de</strong>lInstituto Nacional <strong>de</strong> Salud Americano (NIH) en laque se refería a la osteoporosis como “una condiciónen la que la masa ósea disminuye incrementandola susceptibilidad <strong>de</strong> los huesos a sufrir fracturas”2,3 , o la tomada por Consenso en Hong-Kongen 1993 4 . A pesar <strong>de</strong> que la <strong>de</strong>finición no es <strong>de</strong>ltodo satisfactoria, hoy en día aceptamos la publicadapor la NIH en el año 2001, actualización <strong>de</strong> laprevia <strong>de</strong> 1988, que la consi<strong>de</strong>ra “una enfermedad<strong>de</strong> todo el esqueleto caracterizada por una masaósea baja y una alteración <strong>de</strong> la microarquitecturaósea que condiciona un hueso frágil en el que consecuentementeincrementa el riesgo <strong>de</strong> fracturas" 5 .Si bien la <strong>de</strong>finición actual inci<strong>de</strong> en el problemafundamental en la osteoporosis (la existencia<strong>de</strong> una mayor fragilidad ósea que condiciona unincremento en el riesgo <strong>de</strong> sufrir fracturas), e integrala pérdida <strong>de</strong> la cantidad (masa ósea), con lasalteraciones en la calidad <strong>de</strong>l hueso (las alteracionesmicroestructurales), esta <strong>de</strong>finición no tieneuna aplicación clínica directa, porque con ella nopo<strong>de</strong>mos i<strong>de</strong>ntificar a los pacientes que la sufren.Por ello, en el día a día asistencial, la <strong>de</strong>finición <strong>de</strong>osteoporosis más utilizada es la que se <strong>de</strong>riva <strong>de</strong>la obtención en una <strong>de</strong>nsitometría <strong>de</strong> una puntuaciónT inferior a -2,5, aunque tiene la limitación <strong>de</strong>basarse exclusivamente en criterios cuantitativos 6 .Situaciones clínicas en la que está indicadoel uso <strong>de</strong>l bazedoxifenoTeniendo en cuenta la premisa <strong>de</strong> que el bazedoxifenoestá indicado en el tratamiento <strong>de</strong> la mujerpostmenopáusica con osteoporosis, po<strong>de</strong>mos perfilarmás específicamente a aquéllas en las que elfármaco podría tener una indicación más precisa.a. La paciente con osteoporosis <strong>de</strong>nsitométricaDado que la osteoporosis no da síntomas por símisma, y que la clínica se produce como consecuencia<strong>de</strong> su complicación, las fracturas 1,7 , esnecesario i<strong>de</strong>ntificar y tratar la enfermedad antes<strong>de</strong> que aparezcan las fracturas. De momento, sólodisponemos <strong>de</strong> la <strong>de</strong>nsitometría, que valora exclusivamenteel componente cuantitativo <strong>de</strong>l hueso yno el cualitativo. De acuerdo con la OrganizaciónMundial <strong>de</strong> la Salud (OMS), existe osteoporosis<strong>de</strong>nsitométrica cuando el paciente tiene un valor<strong>de</strong> T menor <strong>de</strong> -2,5 en cualquier localización anatómicadon<strong>de</strong> se haya efectuado la medición 6,8,9 .Existe una clara relación entre el <strong>de</strong>scenso <strong>de</strong>la <strong>de</strong>nsidad mineral ósea y el aumento <strong>de</strong>l riesgo<strong>de</strong> fractura, <strong>de</strong> tal manera que se acepta, globalmente,que por cada disminución <strong>de</strong> la <strong>de</strong>sviacióntípica se duplica el riesgo <strong>de</strong> fractura 10 . Por lotanto, en una mujer en la que se haya establecidoel diagnóstico <strong>de</strong> osteoporosis por <strong>de</strong>nsitometría,se pue<strong>de</strong> iniciar el tratamiento con bazedoxifeno.


24Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S23-27b. La paciente con elevado riesgo <strong>de</strong> fractura,según la herramienta FRAX ®En los últimos años se ha publicado la herramientaFRAX ® , auspiciada por la OMS, que es una utilidada la que se pue<strong>de</strong> acce<strong>de</strong>r gratuitamente porInternet. A partir <strong>de</strong> una serie <strong>de</strong> datos clínicos,que incluye varios factores <strong>de</strong> riesgo, se establecetanto en varones como en mujeres el riesgo absoluto<strong>de</strong> sufrir una fractura por fragilidad en lospróximos 10 años 11,12 .Como toda nueva herramienta, tiene sus ventajasy limitaciones 13 . Una <strong>de</strong> las ventajas es que permiteestimar el riesgo <strong>de</strong> fractura sin la <strong>de</strong>nsitometría,pero por otra parte, no se ha establecido conclaridad, cual es el punto <strong>de</strong> corte, en el riesgo <strong>de</strong>fractura, en el que sea coste-beneficioso iniciar eltratamiento <strong>de</strong> los pacientes. En el Reino Unido seha realizado un cálculo con pacientes británicas ycon el coste <strong>de</strong>l alendronato genérico, que estableceel nivel <strong>de</strong>l 20% para el riesgo <strong>de</strong> cualquierfractura o <strong>de</strong>l 3% para el riesgo <strong>de</strong> fractura <strong>de</strong>ca<strong>de</strong>ra como a<strong>de</strong>cuado para iniciar el tratamiento11 . Esto no se ha <strong>de</strong>mostrado en España ni enmuchos otros países, pero como ha ocurrido contantas otras cosas, estos puntos <strong>de</strong> corte, por inerciao por comodidad, se terminarán aceptando entoda la comunidad científica.En un estudio realizado por Kanis y cols. 12observaron que, comparado con el placebo, elbazedoxifeno producía un <strong>de</strong>scenso global <strong>de</strong>l39% <strong>de</strong>l riesgo <strong>de</strong> fractura vertebral morfométricasinci<strong>de</strong>ntes, sin observarse diferencias estadísticamentesignificativas en la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> todas lasfracturas. Sin embargo, cuando se estudió específicamentea un subgrupo que tenía un riesgo a 10años igual o superior al 16% según el FRAX ® (quese correspondió con el percentil 80% <strong>de</strong> la población<strong>de</strong>l estudio), se observó una reducción <strong>de</strong>lriesgo <strong>de</strong> todas las fracturas. En este estudio se<strong>de</strong>mostró que el efecto beneficioso <strong>de</strong> bazedoxifenoes mayor cuanto más riesgo <strong>de</strong> fractura tengala paciente. Así, por ejemplo, en mujeres queestán en el percentil 41, que equivale a un riesgoa 10 años <strong>de</strong>l 6,9% para todas las fracturas, elbazedoxifeno redujo solamente el riesgo <strong>de</strong> fracturamorfométrica vertebral, mientras que enaquellas mujeres que estaban en el percentil 90, seobservó una reducción <strong>de</strong> las fracturas vertebralesy <strong>de</strong> todas las fracturas. Aplicando la misma herramientaFRAX, se obtuvo que el bazedoxifeno eracosto-efectivo en el tratamiento <strong>de</strong> la osteoporosispostmenopáusica, siendo el prototipo <strong>de</strong>mujer en la que se obtenía un mayor beneficioaquélla con 70 años <strong>de</strong> edad, un valor <strong>de</strong>nsitométrico<strong>de</strong> osteoporosis (T


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S23-2725una flexibilidad en su administración, que pue<strong>de</strong>nadaptar a sus activida<strong>de</strong>s y horarios, si bien paraevitar olvidos <strong>de</strong>be recomendarse tomarlo diariamentea la misma hora. En caso <strong>de</strong> olvido <strong>de</strong> algunadosis, ésta <strong>de</strong>be administrarse lo antes posible,para continuar con el horario habitual, evitandodosis dobles o extras 27 .Esta facilidad para su administración favoreceel cumplimiento terapéutico <strong>de</strong>l bazedoxifeno, locual se ha <strong>de</strong>mostrado en los distintos ensayos clínicos,en los que las tasas <strong>de</strong> abandonos son similaresa las <strong>de</strong> placebo 23 .Como el resto <strong>de</strong> fármacos empleados para eltratamiento <strong>de</strong> la osteoporosis, bazedoxifeno <strong>de</strong>beser asociado a suplementos <strong>de</strong> calcio y vitaminaD, ya que su eficacia se <strong>de</strong>mostró en los ensayosclínicos con dicha asociación 12,20-23 . La toma <strong>de</strong>l fármacocon los suplementos pue<strong>de</strong> ser conjunta, nointerfiriendo en su absorción.Efectos adversosEn general, bazedoxifeno es un fármaco bien tolerado.Los efectos adversos más frecuentes observadosen los ensayos clínicos fueron sofocos yespasmos musculares, especialmente calambresen las piernas. Menos frecuentes pero <strong>de</strong> más gravedadson los episodios tromboembólicos 20 .Otros efectos adversos comunicados fueronboca seca, reacciones alérgicas, aumento <strong>de</strong> triglicéridos,e<strong>de</strong>ma periférico y somnolencia, y unaumento <strong>de</strong> transaminasas, aunque la frecuenciafue similar a la producida con placebo 20,22,27 .¿A quién no <strong>de</strong>be prescribírsele bazedoxifeno?Bazedoxifeno está indicado sólo en el tratamiento<strong>de</strong> la mujer postmenopáusica. No tiene indicación<strong>de</strong> uso en la paciente premenopáusica. Otras contraindicacionesson 27 :- Historia personal <strong>de</strong> tromboembolismo venosoo con riesgo aumentado <strong>de</strong> presentar esta patología.- Alergia a bazedoxifeno o alguno <strong>de</strong> los excipientes.- La seguridad en mujeres con cáncer <strong>de</strong> endometrioy <strong>de</strong> mama no se ha estudiado <strong>de</strong> formaa<strong>de</strong>cuada. No hay datos sobre el uso concomitantecon otros tratamientos utilizados en el cáncer <strong>de</strong>mama. No está recomendada su utilización para laprevención <strong>de</strong>l cáncer <strong>de</strong> mama.- No se ha establecido la seguridad en pacientescon insuficiencia renal severa y hepática.- En aquellas mujeres con síntomas vasomotoresmo<strong>de</strong>rados o intensos <strong>de</strong>be tenerse en cuentaque bazedoxifeno no actúa sobre ellos, por lo que<strong>de</strong>ben tratarse, a<strong>de</strong>más, con otros fármacos específicosasociados (por ejemplo, estrógenos).La paciente con elevado riesgo <strong>de</strong> cáncer<strong>de</strong> mamaEn los estudios clínicos bazedoxifeno no se haasociado a un aumento tensión o dolor mamario,patología mamaria benigna, o maligna, y su presenciaes similar a la administración <strong>de</strong> placebo 28 .Estos resultados se mantienen tras el tratamiento alargo plazo durante 7 años 34 .Un estudio con mamografía digital en mujerestratadas durante 2 años con bazedoxifeno ha señaladoque el tratamiento no afecta a la <strong>de</strong>nsidadmamaria y, por tanto, no modifica la interpretacióndiagnóstica <strong>de</strong> la mamografía 29 .En líneas celulares <strong>de</strong> cáncer <strong>de</strong> mama, bazedoxifenomuestra un patrón diferenciado <strong>de</strong>expresión génica respecto a raloxifeno y lasofoxifenopara antagonizar <strong>de</strong> manera más potente elefecto estimulador <strong>de</strong> los estrógenos 30 .En los estudios fase III la presencia <strong>de</strong> cáncer<strong>de</strong> mama fueron similares para bazedoxifeno,raloxifeno y placebo, y la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> cáncer <strong>de</strong>mama resultó baja y sin potencia suficiente paraevaluar a<strong>de</strong>cuadamente este aspecto 31,32 .Bazedoxifeno y aparato reproductorEl tratamiento con bazedoxifeno durante 5 años nose ha asociado a cambios en el espesor endometrial,frecuencia <strong>de</strong> sangrado uterino anormal, aumento<strong>de</strong> patología benigna endometrial como pólipos,hiperplasia endometrial o patología maligna.Tampoco interfirió en los resultados <strong>de</strong> las citologíascervicovaginales 27,29,33 . En una prolongación a 7años <strong>de</strong>l estudio <strong>de</strong> referencia, el grupo tratado conbazedoxifeno mostró un grosor endometrial similaral placebo y una menor inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> carcinoma <strong>de</strong>endometrio que el grupo placebo (p


26Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S23-27osteoporosis (edad media 65,9 años) 27 . Por ello, unamujer con hipercolesterolemia pue<strong>de</strong> ser candidataal tratamiento 20 , y se espera en ella un efecto beneficiosoañadido <strong>de</strong> mejora en el perfil lipídico.La hipertensión arterial es otro <strong>de</strong> los marcadoressubrogados <strong>de</strong> riesgo cardiovascular relevantes.El tratamiento durante 5 años con bazedoxifenose ha mostrado similar al placebo en el efectosobre la presión arterial. Por ello, las mujereshipertensas podrían utilizar bazedoxifeno ya que,a<strong>de</strong>más, no presenta interacción con fármacosantihipertensivos.En el seguimiento a 5 años <strong>de</strong> tratamiento conbazedoxifeno tampoco se ha <strong>de</strong>scrito influencia enel perfil glucémico. Las mujeres en tratamiento <strong>de</strong>anticoagulación, y una vez valorada la indicación<strong>de</strong> ésta, podrían ser tratadas con bazedoxifeno, yaque no presenta interacción medicamentosa confármacos anticoagulantes como la warfarina.Una nueva orientación en el tratamiento<strong>de</strong> la osteoporosis. La terapia secuencialUno <strong>de</strong> los problemas con que nos encontramosen la actualidad en el tratamiento <strong>de</strong> la osteoporosises saber cuánto tiempo <strong>de</strong>bemos mantenerlo.Debe tenerse en cuenta que el tratamiento <strong>de</strong>la osteoporosis no “cura” la enfermedad, sino quedisminuye el riesgo <strong>de</strong> aparición <strong>de</strong> las fracturas.La mayor parte <strong>de</strong> los estudios <strong>de</strong> referencia diseñadospara <strong>de</strong>mostrar la efectividad <strong>de</strong> los fármacosen este sentido se prolonga durante 3-5 años.A partir <strong>de</strong> este momento, los datos <strong>de</strong> que disponemosson observacionales, habitualmente <strong>de</strong> unnúmero muy inferior <strong>de</strong> pacientes que participaronen el estudio, y que no mantienen el rigormetodológico que se observó durante la realización<strong>de</strong>l ensayo clínico aleatorizado. Por lo tanto,para estar razonablemente seguros y legalmenteprotegidos, estamos autorizados a mantener el tratamientoen los pacientes, el mismo tiempo queduró el ensayo clínico.Sin embargo, ¿qué hacemos habitualmente conlos pacientes cuando cumplen los 3-5 años? Nosplanteamos si seguir con el tratamiento o bien suspen<strong>de</strong>rlo,lo cual ocurre en un paciente afecto <strong>de</strong>osteoporosis en el que persiste el riesgo elevado<strong>de</strong> fractura por fragilidad y que, al tener 3-5 añosmás <strong>de</strong> edad, este riesgo incluso es más elevado.Hasta ahora, hemos adoptado posturas individualizadas,<strong>de</strong> acuerdo con el paciente, y en muchasocasiones el tratamiento se ha mantenido por períodossuperiores a los realizados durante el ensayoclínico, <strong>de</strong>bido, por una parte, a la buena toleranciaen general <strong>de</strong> los fármacos, y, por otra, a laausencia <strong>de</strong> informes <strong>de</strong> efectos secundarios ocomplicaciones importantes. Esto hasta hace relativamentepoco tiempo, en que ha comenzado a<strong>de</strong>scribirse la presencia <strong>de</strong> fracturas femorales diafisariasatípicas, en pacientes en los que el tratamiento,habitualmente con bifosfonatos, se habíamantenido un tiempo prolongado 37 . El riesgo <strong>de</strong>fractura por 100 pacientes y año en estos pacientesha sido establecido por unos autores en 1,46(IC 95%: 1,11-1,88) 38 , y por otros en valores tanelevados como 37,4 (IC 95%: 12,9-119, p


Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S23-27275. <strong>Osteoporosis</strong> prevention, diagnosis, and therapy.JAMA 2001;285:785-95.6. Blake GM, Fogelman I. Role of dual-energy X-rayabsorptiometry in the diagnosis and treatment of osteoporosis.J Clin Densitom 2007;10:102-10.7. Del Pino Montes J. <strong>Osteoporosis</strong>: Concepto e importancia.Cuadro clínico Rev Osteoporos Metab Miner2010;2 Suppl 4:S15-S20.8. Kanis JA, McCloskey EV, Johansson H, O<strong>de</strong>n A, MeltonLJ, 3rd, Khaltaev N. A reference standard for the <strong>de</strong>scriptionof osteoporosis. Bone 2008;42:467-75.9. WHO. Report of a WHO Study Group. Assessment offracture risk and its application to screening for postmenopausalosteoporosis. World Health Organ TechRep Ser 1994;843:1-129.10. Cummings SR, Black DM, Nevitt MC, Browner W, CauleyJ, Ensrud K, et al. Bone <strong>de</strong>nsity at various sites for predictionof hip fractures. The Study of OsteoporoticFractures Research Group. Lancet 1993;341:72-5.11. Kanis JA, Johnell O, O<strong>de</strong>n A, Johansson H, McCloskeyE. FRAX and the assessment of fracture probability inmen and women from the UK. Osteoporos Int2008;19:385-97.12. Kanis JA, Johansson H, O<strong>de</strong>n A, McCloskey EV.Bazedoxifene reduces vertebral and clinical fracturesin postmenopausal women at high risk assessed withFRAX. Bone 2009;44:1049-54.13. Díez Pérez A. El <strong>de</strong>bate sobre la escala FRAX. RevOsteoporos Metab Miner 2010;2:5-6.14. Strom O, Borgstrom F, Kleman M, McCloskey E, O<strong>de</strong>nA, Johansson H, et al. FRAX and its applications inhealth economics-cost-effectiveness and interventionthresholds using bazedoxifene in a Swedish setting asan example. Bone 2010;47:430-7.15. Cooper C, O'Neill T, Silman A. The epi<strong>de</strong>miology ofvertebral fractures. European Vertebral <strong>Osteoporosis</strong>Study Group. Bone 1993;14 Suppl 1:S89-97.16. Genant HK, Wu CY, van Kuijk C, Nevitt MC. Vertebralfracture assessment using a semiquantitative technique.J Bone Miner Res 1993;8:1137-48.17. Sosa Henriquez M. La fractura vertebral: una entidad enbusca <strong>de</strong> <strong>de</strong>finición. Med Clin (Barc) 2000;115:661-2.18. Lindsay R, Silverman SL, Cooper C, Hanley DA, BartonI, Broy SB, et al. Risk of new vertebral fracture in theyear following a fracture. JAMA 2001;285:320-3.19. Melton LJ, 3rd. Does high-trauma fracture increase therisk of subsequent osteoporotic fracture? Nat Clin PractEndocrinol Metab 2008;4:316-7.20. Silverman SL, Christiansen C, Genant HK, Vukicevic S,Zanchetta JR, <strong>de</strong> Villiers TJ, et al. Efficacy of bazedoxifenein reducing new vertebral fracture risk in postmenopausalwomen with osteoporosis: results from a 3-year, randomized, placebo-, and active-controlled clinicaltrial. J Bone Miner Res 2008;23:1923-34.21. Silverman SL. New therapies for osteoporosis: zoledronicacid, bazedoxifene, and <strong>de</strong>nosumab. CurrOsteoporos Rep 2009;7:91-5.22. Silverman SL, Chines AA, Kendler DL, Kung AW,Teglbjaerg CS, Felsenberg D, et al. Sustained efficacyand safety of bazedoxifene in preventing fractures inpostmenopausal women with osteoporosis: results ofa 5-year, randomized, placebo-controlled study.Osteoporos Int 2011;21 July [Epub ahe-ad of print]).23. Borgstrom F, Strom O, Kleman M, McCloskey E,Johansson H, O<strong>de</strong>n A, et al. Cost-effectiveness of bazedoxifeneincorporating the FRAX ® algorithm in aEuropean perspective. Osteoporos Int 2011;22:955-65.24. Cheng CK, McDonald-Blumer H, Boire G, Pope JE,Haraoui B, Hitchon CA, et al. Care gap in patients withearly inflammatory arthritis with a high fracture riski<strong>de</strong>ntified using FRAX ® . J Rheumatol 2010;37:2221-5.25. Hippisley-Cox J, Coupland C. Predicting risk of osteoporoticfracture in men and women in England andWales: prospective <strong>de</strong>rivation and validation ofQFracture Scores. BMJ 2009;339:b4229.26. Casado E, Caamaño M, Sanchez-Burson J, Salas E,Malouf J, Rentero ML, et al. Manejo <strong>de</strong>l paciente conalto riesgo <strong>de</strong> fractura en la practica clinica. Resultados<strong>de</strong> una encuesta a 174 reumatologos españoles (proyectoOSTEOPAR). Reumatol Clin 2011;7:305-13.27. Cancelo Hidalgo MJ. Posicionamiento <strong>de</strong>l bazedoxifenoen la práctica clínica. Prog Obstet Ginecol 2010;53Suppl 1:23-32.28. Miller PD, Chines AA, Christiansen C, Hoeck HC, KendlerDL, Lewiecki EM, et al. Effects of bazedoxifene on BMDand bone turnover in postmenopausal women: 2-yrresults of a randomized, double-blind, placebo-, and active-controlledstudy. J Bone Miner Res 2008;23:525-35.29. Harvey JA, Holm MK, Ranganath R, Guse PA, Trott EA,Helzner E. The effects of bazedoxifene on mammographicbreast <strong>de</strong>nsity in postmenopausal women withosteoporosis. Menopause 2009;16:1193-6.30. Chang KC, Wang Y, Bodine PV, Nagpal S, Komm BS.Gene expression profiling studies of three SERMs andtheir conjugated estrogen combinations in human breastcancer cells: insights into the unique antagonisticeffects of bazedoxifene on conjugated estrogens. JSteroid Biochem Mol Biol 2010;118:117-24.31. De Villiers TJ, Chines AA, Palacios S, Lips P, SawickiAZ, Levine AB, et al. Safety and tolerability of bazedoxifenein postmenopausal women with osteoporosis:results of a 5-year, randomized, placebo-controlledphase 3 trial. Osteoporos Int 2011;22:567-76.32. De Villiers TJ. Bazedoxifene: a novel selective estrogenreceptor modulator for postmenopausal osteoporosis.Climacteric 2010;13:210-8.33. Archer DF, Pinkerton JV, Utian WH, Menegoci JC, <strong>de</strong>Villiers TJ, Yuen CK, et al. Bazedoxifene, a selectiveestrogen receptor modulator: effects on the endometrium,ovaries, and breast from a randomized controlledtrial in osteoporotic postmenopausal women.Menopause 2009;16:1109-15.34. Palacios S, <strong>de</strong> Villiers TJ, Nardone FC, Levine A,Williams R, Hines T, et al. Reproductive Safety ofBazedoxifene in Postmenopausal Women With Os-teoporosis:Results of a 7-year, Randomized, Placebo-controlled,Phase 3 Stu-dy. 22th Annual Meating of NorthAmerican Menopause Society. Washington, 21-24 september2011. Abstract.35. Pinkerton JV, Goldstein SR. Endometrial safety: a keyhurdle for selective estrogen receptor modulators in<strong>de</strong>velopment. Menopause 2010;17:642-53.36. Pickar JH, Yeh IT, Bachmann G, Speroff L. Endometrialeffects of a tissue selective estrogen complex containingbazedoxifene/conjugated estrogens as a menopausaltherapy. Fertil Steril 2009;92:1018-24.37. Shane E, Burr D, Ebeling PR, Abrahamsen B, Adler RA,Brown TD, Cheung AM, et al. Atypical subtrochantericand diaphyseal femoral fractures: report of a task forceof the American Society for Bone and <strong>Mineral</strong>Research. J Bone Miner Res 2010;25:2267-94.38. Kim SY, Schneeweiss S, Katz JN, Levin R, Solomon DH.Oral bisphosp-honates and risk of subtrochanteric ordiaphyseal femur fractures in a popula-tion-basedcohort. J Bone Miner Res 2011;26:993-1001.39. Girgis CM, Seibel MJ. Guilt by association? Examiningthe role of bisp-hosphonate therapy in the <strong>de</strong>velopmentof atypical femur fractures. Bone 2011;48:963-5.


28NORMAS DE PUBLICACIÓN / Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S28-30<strong>Revista</strong> <strong>de</strong> <strong>Osteoporosis</strong> y <strong>Metabolismo</strong> <strong>Mineral</strong>Normas <strong>de</strong> publicaciónInformación para los autores1) Información general. Política editorialLa <strong>Revista</strong> <strong>de</strong> <strong>Osteoporosis</strong> y <strong>Metabolismo</strong> <strong>Mineral</strong> (RevOsteoporos Metab Miner; www.revista<strong>de</strong>osteoporosisymetabolismomineral.es)es el órgano oficial <strong>de</strong> expresión científica<strong>de</strong> la Sociedad Española <strong>de</strong> Investigación Ósea y <strong>de</strong>l<strong>Metabolismo</strong> <strong>Mineral</strong> (SEIOMM). Su periodicidad es trimestral(4 números al año: invierno, primavera, verano y otoño), conun número variable <strong>de</strong> monografías extraordinarias. El tercernúmero <strong>de</strong>l año, verano, está <strong>de</strong>stinado a la publicación <strong>de</strong> lascomunicaciones <strong>de</strong>l Congreso anual <strong>de</strong> la SEIOMM.La <strong>Revista</strong> <strong>de</strong> <strong>Osteoporosis</strong> y <strong>Metabolismo</strong> <strong>Mineral</strong> publica trabajosen español, que serán traducidos al inglés en su formatoelectrónico, y se ofrece libre y gratuitamente por medio <strong>de</strong>su página Web. El acceso es completo a todos los artículos, enambos idiomas, sin período <strong>de</strong> carencia o embargo y sin necesidad<strong>de</strong> registro. La versión en papel se publica exclusivamenteen español, y se distribuye por correo a los socios <strong>de</strong>la SEIOMM y a los suscriptores <strong>de</strong> la revista.Los manuscritos serán consi<strong>de</strong>rados por el Comité <strong>de</strong>Dirección <strong>de</strong> la <strong>Revista</strong>. Todos los originales serán evaluadospor al menos dos revisores, expertos en esta materia, que realizaránsu valoración <strong>de</strong> forma ciega.El Comité <strong>de</strong> Expertos lo constituye un grupo <strong>de</strong> colaboradoresespecializados en diferentes campos <strong>de</strong>l metabolismomineral óseo y que realizan la valoración <strong>de</strong> los manuscritosa solicitud <strong>de</strong>l Comité <strong>de</strong> Dirección <strong>de</strong> la <strong>Revista</strong>. En la páginaWeb <strong>de</strong> la <strong>Revista</strong> y en todos los números <strong>de</strong> la <strong>Revista</strong> sepublica la relación <strong>de</strong> colaboradores que forman el Comité <strong>de</strong>Expertos. Asimismo, en el primer número <strong>de</strong> cada año sepublican los nombres <strong>de</strong> los revisores que han colaboradoactivamente con la <strong>Revista</strong> en el año finalizado.Los autores, si lo <strong>de</strong>sean, podrán proponer al menos 3 posiblesrevisores externos, <strong>de</strong> quienes, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong>l nombre yapellidos, se <strong>de</strong>berá incluir su correo electrónico y las razonespor la que consi<strong>de</strong>ran que pue<strong>de</strong>n evaluar objetivamente elartículo. También podrán indicar aquellos revisores que no<strong>de</strong>seen que evalúen el manuscrito, <strong>de</strong>biendo justificar tambiéneste dato, si bien su manejo será absolutamente confi<strong>de</strong>ncialpor parte <strong>de</strong>l equipo directivo <strong>de</strong> la <strong>Revista</strong>.Los juicios y opiniones expresados en los artículos publicadosen la <strong>Revista</strong> <strong>de</strong> <strong>Osteoporosis</strong> y <strong>Metabolismo</strong> <strong>Mineral</strong> son <strong>de</strong>lautor o autores, y no necesariamente <strong>de</strong>l Comité <strong>de</strong> Dirección.Tanto el Comité <strong>de</strong> Dirección como la SEIOMM <strong>de</strong>clinan cualquierresponsabilidad al respecto. Ni el Comité <strong>de</strong> Direcciónni la SEIOMM garantizan o apoyan ningún producto que seanuncie en la <strong>Revista</strong>, ni garantizan las afirmaciones realizadaspor el fabricante sobre dicho producto o servicio.2) Elaboración y envío <strong>de</strong> los manuscritosLos manuscritos <strong>de</strong>ben elaborarse siguiendo las recomendaciones<strong>de</strong>l Comité Internacional <strong>de</strong> Directores <strong>de</strong> <strong>Revista</strong>sMédicas, disponibles en: http://www.icmje.org, y enviarse porcorreo electrónico a la dirección revista<strong>de</strong>osteoporosisymetabolismomineral@ibanezyplaza.com.La Editorial <strong>de</strong> la <strong>Revista</strong> dará acuse <strong>de</strong> recibo inmediatamente,también por correo electrónico, y la Redacción iniciará elproceso <strong>de</strong> revisión, que habitualmente se completa en menos<strong>de</strong> 3 meses.2. 1. Carta <strong>de</strong> presentaciónTodos los manuscritos <strong>de</strong>ben ir acompañados necesariamente<strong>de</strong> una carta <strong>de</strong> presentación que indique: 1) la sección <strong>de</strong> larevista en la que se <strong>de</strong>sea publicar; 2) una breve explicación<strong>de</strong> cuál es la aportación original y la relevancia <strong>de</strong>l trabajo enel campo <strong>de</strong> la patología metabólica ósea; 3) la <strong>de</strong>claración <strong>de</strong>que el manuscrito es original y no se ha remitido simultáneamentepara evaluación a ninguna otra revista; y 4) que se hanobservado las presentes “instrucciones para los autores”.2.2. ManuscritosEl texto completo <strong>de</strong>l manuscrito, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la página <strong>de</strong>l título hastalas referencias, <strong>de</strong>be incluirse en un archivo escrito en Word, conletra tipo Arial <strong>de</strong> tamaño 12, interlineado a 1,5 líneas y justificadoa la izquierda. Se numerarán las páginas correlativamente enel margen superior <strong>de</strong>recha y se <strong>de</strong>berá <strong>de</strong>jar un margen <strong>de</strong> 3 cmen los 4 bor<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la página (que será tamaño A4).Se <strong>de</strong>ben utilizar únicamente abreviaturas comunes en el campo<strong>de</strong> la Medicina y evitarse el uso <strong>de</strong> abreviaturas en el título y enel resumen <strong>de</strong>l trabajo. La primera vez que aparezca una abreviatura<strong>de</strong>berá estar precedida por el término completo al que serefiere, excepto en el caso <strong>de</strong> unida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> medidas comunes,que se expresarán en Unida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l Sistema Internacional.Los trabajos <strong>de</strong>berán incluir la información requerida a continuación,or<strong>de</strong>nándose las secciones <strong>de</strong> la siguiente manera:página <strong>de</strong>l título y autores, página <strong>de</strong>l resumen y palabrasclave, texto principal (introducción, material y método, resultados,discusión y bibliografía), tablas y figuras. Si es necesario,se podrán incluir las tablas y figuras en otro archivo adjunto,con sus respectivos títulos y numeración.2.3. Apartados <strong>de</strong> los manuscritos2.3.1. Página <strong>de</strong>l título y autores:Constará <strong>de</strong> la siguiente información:- El título, que <strong>de</strong>be <strong>de</strong>scribir a<strong>de</strong>cuadamente el contenido <strong>de</strong>ltrabajo. Debe ser breve, claro e informativo. Se <strong>de</strong>be incluir elnombre completo y el primer apellido <strong>de</strong> los autores, o los dosapellidos separados o unidos mediante guión, <strong>de</strong>pendiendo <strong>de</strong>cómo prefieran los autores que aparezcan en las publicaciones.- El nombre <strong>de</strong>l (los) <strong>de</strong>partamento(s) o servicio(s) y la(s) institución(es)a los que el trabajo <strong>de</strong>be ser atribuido. No esnecesario incluir el cargo académico o profesional <strong>de</strong> los autores.Constará el reconocimiento <strong>de</strong> cualquier beca o ayudaeconómica, así como la <strong>de</strong>claración <strong>de</strong> la existencia o no <strong>de</strong>conflictos <strong>de</strong> intereses <strong>de</strong> cada uno <strong>de</strong> los autores.Aparte se incluirá el nombre completo, el correo electrónico(si se dispone) y la dirección postal completa <strong>de</strong>l autor al quese dirija la correspon<strong>de</strong>ncia, que será el responsable <strong>de</strong> lacorrección <strong>de</strong> las pruebas.


NORMAS DE PUBLICACIÓN / Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S28-30292.3.2. Resumen y palabras claveEl resumen estructurado <strong>de</strong>berá aparecer en la segunda página<strong>de</strong>l manuscrito y tendrá un máximo <strong>de</strong> 250 palabras en elcaso <strong>de</strong> los originales y <strong>de</strong> 150 en las notas clínicas.Contará con los siguientes encabezamientos: Objetivos, señalandoel propósito fundamental <strong>de</strong>l trabajo; Material y métodos,explicando el diseño <strong>de</strong>l estudio, los criterios <strong>de</strong> valoración <strong>de</strong>las pruebas diagnósticas y la dirección temporal (retrospectivo oprospectivo). Se mencionará el procedimiento <strong>de</strong> selección <strong>de</strong>los pacientes, los criterios <strong>de</strong> inclusión y/o exclusión, y el número<strong>de</strong> los pacientes que comienzan y terminan el estudio. Si esun trabajo experimental, se indicará el número y tipo <strong>de</strong> animalesutilizados; Resultados, don<strong>de</strong> se hará constar los resultadosmás relevantes y significativos <strong>de</strong>l estudio, así como su valoraciónestadística; y Conclusiones, don<strong>de</strong> se mencionarán las quese sustentan directamente en los datos, junto con su aplicabilidadclínica. Habrá que otorgar el mismo énfasis a los hallazgospositivos y a los negativos con similar interés científico.A continuación <strong>de</strong>l resumen se incluirán las palabras clave, <strong>de</strong>3 a 10 en total, con el objetivo <strong>de</strong> complementar la informacióncontenida en el título y ayudar a i<strong>de</strong>ntificar el trabajo enlas bases <strong>de</strong> datos bibliográficas. Para las palabras clave se<strong>de</strong>ben emplear términos equivalentes a los obtenidos <strong>de</strong> lalista <strong>de</strong> <strong>de</strong>scriptores en Ciencias <strong>de</strong> la Salud (Medical SubjectsHeadings, MeSH) <strong>de</strong>l In<strong>de</strong>x Medicus (disponibles en:www.nlm.nih.gov/mesh/meshhome.html).Importante: No es necesario enviar el resumen ni las palabrasclave en inglés. Esto será realizado por el traductor <strong>de</strong> la<strong>Revista</strong>.2.3.3. IntroducciónDeben mencionarse claramente los objetivos <strong>de</strong>l trabajo yresumir el fundamento <strong>de</strong>l mismo, sin revisar extensamente eltema y eliminando recuerdos históricos. Citar sólo aquellasreferencias estrictamente necesarias.2.3.4. Material y métodosEn este apartado se ha <strong>de</strong> especificar el lugar, el tiempo y lapoblación <strong>de</strong>l estudio. Los autores <strong>de</strong>ben incluir informaciónsobre cómo se realizó el diseño, cómo fueron los sujetosseleccionados; sobre todas la técnicas, <strong>de</strong>terminaciones analíticasy otras pruebas o mediciones realizadas. Todo ello consuficiente <strong>de</strong>talle como para que otros investigadores puedanreproducir el estudio sin dificulta<strong>de</strong>s.Al final <strong>de</strong> este apartado, se <strong>de</strong>be indicar cuál ha sido el tipo<strong>de</strong> análisis estadístico utilizado, precisando el intervalo <strong>de</strong>confianza. Los estudios contarán con los correspondientesexperimentos o grupos control; en caso contrario, se explicaránlas medidas utilizadas para evitar los sesgos y se comentarásu posible efecto sobre las conclusiones <strong>de</strong>l estudio. Si setrata <strong>de</strong> una metodología original, se explicarán las razonesque han conducido a su empleo y se <strong>de</strong>scribirán sus posibleslimitaciones.No <strong>de</strong>ben mostrarse los nombres <strong>de</strong> los pacientes ni incluirningún dato que pueda conducir a su i<strong>de</strong>ntificación. Con respectoa los fármacos, se utilizará el nombre genérico <strong>de</strong> losfármacos utilizados en el estudio evitando sus nombrescomerciales, y <strong>de</strong>tallando al máximo la dosis prescrita, la vía<strong>de</strong> administración y el tiempo <strong>de</strong> administración.Asimismo, se indicarán las normas éticas seguidas por losinvestigadores, tanto en estudios en seres humanos como enanimales. Los estudios en seres humanos <strong>de</strong>ben contar con laaprobación expresa <strong>de</strong>l Comité Local <strong>de</strong> Ética y <strong>de</strong> EnsayosClínicos. Los autores <strong>de</strong>ben mencionar que los procedimientosutilizados en los pacientes y controles han sido realizadostras obtención <strong>de</strong> un consentimiento informado.2.3.5. ResultadosSe <strong>de</strong>ben presentar los resultados siguiendo una secuencialógica y concordante en el texto y en las tablas y figuras. Losdatos se pue<strong>de</strong>n mostrar en tablas o figuras, pero no simultáneamenteen ambas. En el texto se <strong>de</strong>ben <strong>de</strong>stacar las observacionesimportantes, sin repetir todos los datos que se presentenen las tablas o figuras. No se <strong>de</strong>be mezclar la presentación<strong>de</strong> los resultados con su discusión.2.3.6. DiscusiónSe trata <strong>de</strong> una discusión <strong>de</strong> los resultados obtenidos en estetrabajo y no <strong>de</strong> una revisión <strong>de</strong>l tema en general. Los autores<strong>de</strong>ben <strong>de</strong>stacar los aspectos nuevos e importantes que aportasu trabajo y las conclusiones que se propone a partir <strong>de</strong> ellos.No se <strong>de</strong>be repetir <strong>de</strong>talladamente datos que aparecen en elapartado <strong>de</strong> resultados. En la discusión, los autores <strong>de</strong>ben incidiren las concordancias o discordancias <strong>de</strong> sus hallazgos y suslimitaciones, comparándolas con otros estudios relevantes,i<strong>de</strong>ntificados mediante las referencias bibliográficas respectivas.Al final, se <strong>de</strong>be relacionar las conclusiones obtenidas con el olos objetivos <strong>de</strong>l estudio, tal y como se recogió en la introducción.Se <strong>de</strong>be evitar formular conclusiones que no estén respaldadaspor los hallazgos, así como apoyar estas conclusiones enotros trabajos aún no terminados. Si es necesario, los autorespue<strong>de</strong>n plantear nuevas hipótesis, pero éstas <strong>de</strong>ben ser claramentei<strong>de</strong>ntificadas como tales. Cuando sea apropiado, losautores pue<strong>de</strong>n proponer sus recomendaciones.2.3.7. BibliografíaSe incluirán únicamente aquellas citas que se consi<strong>de</strong>renimportantes y hayan sido leídas por los autores. Todas lasreferencias <strong>de</strong>ben estar citadas en el texto <strong>de</strong> forma consecutivasegún el or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> aparición, e i<strong>de</strong>ntificadas mediante llamadaen números arábigos en superíndice. Las referenciasque se citan solamente en las tablas o leyendas <strong>de</strong>ben sernumeradas <strong>de</strong> acuerdo con la secuencia establecida por la primerai<strong>de</strong>ntificación en el texto <strong>de</strong> las tablas o figuras.Al indicar las páginas inicial y final <strong>de</strong> una cita se <strong>de</strong>ben mostraren la página final sólo los dígitos que difieran <strong>de</strong> la páginainicial (ejemplos: 23-9, y no 23-29; 247-51. y no 247-251).En todo momento <strong>de</strong>ben seguirse las normas <strong>de</strong> los“Requerimientos Uniformes para Manuscritos Remitidos a<strong>Revista</strong>s Biomédicas”, que pue<strong>de</strong>n obtenerse en el NewEngland Journal of Medicine (N Engl J Med 1997;336:309-15)y que también están disponibles en http://www.icmje.org/.Las abreviaturas <strong>de</strong> los títulos <strong>de</strong> revistas se obtendrán <strong>de</strong> los formatosempleados por la Biblioteca Nacional <strong>de</strong> Medicina <strong>de</strong> losEstados Unidos <strong>de</strong> Norteamérica, en el In<strong>de</strong>x Medicus (disponibleen: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/entrez/jrbrowser.cgi).Deben evitarse las referencias <strong>de</strong>l estilo: ‘‘observaciones nopublicadas’’, ‘‘comunicación personal’’ o similares. Los originalesaceptados y no publicados en el momento <strong>de</strong> ser citadospue<strong>de</strong>n incluirse como citas ‘‘En prensa’’.2.3.8. TablasSe numerarán con números arábigos <strong>de</strong> manera correlativa enel mismo or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> aparición en el texto, y se incluirán en elmanuscrito, al final <strong>de</strong>l mismo, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la bibliografía. Seprepararán a espacio y medio, como el resto <strong>de</strong>l manuscrito,y no <strong>de</strong>be cambiarse el tipo <strong>de</strong> letra. Se i<strong>de</strong>ntificarán con lanumeración correspondiente y un título breve pero suficientementeexplicativo en su parte superior. La leyenda <strong>de</strong> la tabla<strong>de</strong>be permitir compren<strong>de</strong>r su contenido, sin que el lectortenga que acudir al texto para su comprensión. Cada columna<strong>de</strong> la tabla ha <strong>de</strong> contener un breve encabezado. Se <strong>de</strong>benincluir las necesarias notas explicativas a pie <strong>de</strong> tabla y utilizarllamadas en forma <strong>de</strong> letras minúsculas en superíndice yen or<strong>de</strong>n alfabético (a, b, c).


30NORMAS DE PUBLICACIÓN / Rev Osteoporos Metab Miner 2012; 4 (Supl 1): S28-30En las tablas se <strong>de</strong>ben incluir las medidas estadísticas <strong>de</strong> variación,como la <strong>de</strong>sviación estándar y el error estándar <strong>de</strong> lamedia. Solo se emplearán los <strong>de</strong>cimales con significado clínico;por ejemplo, la glucemia <strong>de</strong> 89,67 <strong>de</strong>berá expresarse como 89,7.2.3.9. FigurasTodos los gráficos, fotografías y dibujos se consi<strong>de</strong>ran figuras.Las figuras se i<strong>de</strong>ntificarán con números arábigos que coincidancon su or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> aparición en el texto. Los pies <strong>de</strong> lasfiguras se prepararán a espacio y medio en páginas separadas.Las leyendas y los pies <strong>de</strong> las figuras <strong>de</strong>berán contener informaciónsuficiente para po<strong>de</strong>r interpretar los datos presentadossin necesidad <strong>de</strong> recurrir al texto. Para las notas explicativas apie <strong>de</strong> figura se utilizarán llamadas en forma <strong>de</strong> letras minúsculasen superíndice, tal y como se indicó anteriormente enlas tablas. En las fotografías <strong>de</strong> preparaciones histológicas<strong>de</strong>berá figurar el tipo <strong>de</strong> tinción y el aumento. La resoluciónmínima <strong>de</strong> las imágenes <strong>de</strong>berá ser <strong>de</strong> 300 ppp (puntos porpulgada).3. Normas específicas <strong>de</strong> cada sección3.1.OriginalesSe consi<strong>de</strong>rarán originales aquellos trabajos clínicos o experimentales<strong>de</strong> cualquier tipo relacionados con el metabolismomineral óseo.Deberán estructurarse en Introducción, Material y método,Resultados, Discusión y Bibliografía. Tendrán una extensiónmáxima <strong>de</strong> 16 páginas, y se admitirán hasta 5 tablas o figuras. No<strong>de</strong>berán sobrepasar las 40 citas bibliográficas. Incluirán un resumenestructurado <strong>de</strong> 250 palabras como máximo. Dicho resumenserá organizado en los siguientes apartados: Fundamentos,Objetivos, Material y Método, Resultados y Conclusiones.3.2. Notas clínicasDescripción <strong>de</strong> uno o más casos clínicos <strong>de</strong> excepcionalobservación que supongan una aportación importante alconocimiento <strong>de</strong>l metabolismo mineral óseo. Deberán acompañarse<strong>de</strong> un resumen y una introducción breves (máximo,150 palabras cada uno) y previos a la <strong>de</strong>scripción <strong>de</strong>l caso. Laextensión máxima <strong>de</strong>l texto ser <strong>de</strong> 5 páginas (1.750 palabras,10.650 caracteres con espacios). Se admitirán hasta dos figurasy dos tablas. Es aconsejable que el número <strong>de</strong> firmantesno sea superior a seis y que no se incluya más <strong>de</strong> 20 referenciasbibliográficas.3.3. Cartas al EditorEn esta sección se publicarán aquellas cartas que hagan referenciaa trabajos publicados en la revista anteriormente yaquéllas que aporten opiniones, observaciones o experienciasque por sus características puedan ser resumidas en un brevetexto. La extensión máxima será <strong>de</strong> 60 líneas y se admitiránuna figura o una tabla y diez referencias bibliográficas comomáximo. El número <strong>de</strong> firmantes no <strong>de</strong>be exce<strong>de</strong>r <strong>de</strong> cuatro.3.4. Otras seccionesLa <strong>Revista</strong> incluye otras secciones (Editoriales, Revisiones yDocumentos o Artículos Especiales), las cuales serán encargadaspor el Comité <strong>de</strong> Redacción. Los autores que espontáneamente<strong>de</strong>seen colaborar en alguna <strong>de</strong> estas secciones <strong>de</strong>beránconsultar previamente al Director <strong>de</strong> la <strong>Revista</strong>.3.4.1. RevisionesSe presentarán con una extensión <strong>de</strong> 12 páginas (4.200 palabras,25.560 caracteres con espacios) y un máximo <strong>de</strong> 60 citas.Se admitirán un máximo <strong>de</strong> 4 figuras y 5 tablas que <strong>de</strong>beráncontribuir <strong>de</strong> manera evi<strong>de</strong>nte a la mejor comprensión <strong>de</strong>ltexto. Las revisiones se acompañarán <strong>de</strong> un resumen en españoly tendrán un último apartado <strong>de</strong> conclusiones <strong>de</strong> aproximadamenteun folio <strong>de</strong> extensión.3.4.2. EditorialesTendrán una extensión máxima <strong>de</strong> 4 páginas (2.100 palabras,12.780 caracteres con espacios), sin tablas ni figuras, y unmáximo <strong>de</strong> 30 citas bibliográficas.3.4.3. Documentos especialesSe incluirá en este apartado todos aquellos documentos y artículosque pudieran realizar alguna aportación científica alcampo <strong>de</strong>l metabolismo mineral óseo y que posea unas característicasque no permitan su inclusión en alguno <strong>de</strong> los apartadosanteriores <strong>de</strong> la revista. El Comité Editorial <strong>de</strong>cidirá lamanera <strong>de</strong> publicar estos documentos, y se reserva el <strong>de</strong>recho<strong>de</strong> modificarlos para a<strong>de</strong>cuarlos al formato <strong>de</strong> la <strong>Revista</strong>.4. Transmisión <strong>de</strong> los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> autor4.1. Garantías <strong>de</strong>l autor y responsabilidadAl enviar el trabajo por correo electrónico, el autor garantizaque todo el material que remite a la <strong>Revista</strong> <strong>de</strong> <strong>Osteoporosis</strong>y <strong>Metabolismo</strong> <strong>Mineral</strong> para su publicación es original, y queel mismo no ha sido publicado con anterioridad ni remitidosimultáneamente a ninguna otra <strong>Revista</strong> para su publicación.Asimismo, el autor garantiza que el trabajo que remite cumplela Ley <strong>de</strong> Protección <strong>de</strong> Datos y que ha obtenido el consentimientoprevio y escrito <strong>de</strong> los pacientes o sus familiares parasu publicación.4.2. Cesión <strong>de</strong> <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> explotaciónEl autor ce<strong>de</strong> en exclusiva a la SEIOMM, con facultad <strong>de</strong>cesión a terceros, todos los <strong>de</strong>rechos <strong>de</strong> explotación que <strong>de</strong>riven<strong>de</strong> los manuscritos que sean seleccionados para su publicaciónen la <strong>Revista</strong>, y en particular los <strong>de</strong> reproducción, distribucióny comunicación pública en todas sus formas.El autor no podrá publicar ni difundir los trabajos que seanseleccionados para su publicación en <strong>Revista</strong> <strong>de</strong> <strong>Osteoporosis</strong>y <strong>Metabolismo</strong> <strong>Mineral</strong> ni total ni parcialmente, ni tampocoautorizar su publicación a terceros, sin la preceptiva previaautorización expresa, otorgada por escrito, <strong>de</strong> la SEIOMM.


ONESP 11/11 CON 67CONB2096HONCH 3OH

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!