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EL OÍDO MELANCÓLICO - Cortijo deEl Fraile

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[fig.25]Giorgione, Doble retrato, h.1510. Museo del Palacio de Venecia, Romael que los han forzado a posar. No son pocos, además de Durero, losque defienden que el momento propio de la melancolía es el del ocaso,el de la puesta de Sol, el de la muerte del día, el de la invitaciónal sueño nocturno y a sus pesadillas. Giorgio de Chirico unas vecespropugnó que la hora a la que se despertaba la melancolía y comenzabaa ejercer su tiranía era a las 13:25 [fig.24], y otras veces, en estasocasiones no ya por medio de sus relojes con las agujas detenidas enese punto sino con algunos de sus enigmas otoñales, que la hora dela melancolía era la coincidente con la decadencia de la tarde, la de laenrojecida luz rasante, la de las pronunciadas sombras occidentales:Melancolía de un día hermoso, 1913; Misterio y melancolía de una calle, 1914y El enigma de una tarde de otoño, 1920, entre otras pinturas habitadaspor siluetas, se ocupan de ello. El pintor metafísico, del que en elMuseo Metropolitano de Nueva York hay un autorretrato de perfilen posición acúfeno-melancólica, fechado en 1911 (pintado cuandotenía veintitrés años), dijo, confirmando su objetivo de darle nuevasformas a la melancolía (formas que no fueran antropomórficas, formasalusivas), que con su obra pretendía establecer y descifrar “lossignos herméticos de la nueva melancolía”.Acaso la melancolía, como lo era el hogar para Le Corbusier, esuna franja horaria: tal vez la melancolía varíe según los lugares, se modifiquede acuerdo a las estaciones y se trastorne con los días; tal vez sesea o no se sea melancólico de acuerdo a cuál es la hora de la jornadadiurna. Para algunos de los que no eligen el crepúsculo es el mediodía lahora de la auténtica melancolía (W. Benjamin, G. Bataille, P. Cezane, A.Huxley, quien habla del «daemon meridianus»); para otros su tiempo másproclive es el dedicado a la siesta (H. Matisse, A. Savinio). Las horas dela melancolía son las horas laxas, las horas asexuadas, así estén situadasa mediodía o a medianoche: las horas intermedias, las faltas de energía,64 65

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