FinanciaciónFernando Relaño Crespo, Administrador de Relcres Intermediación S.L.Solvencia y RentabilidadEl pasado día 18 de Octubre, tuve elprivilegio de ser invitado por el Presidentede una de las Asociacionesmadrileñas integrantes de CONAE,a un acto sobre Política Económicade la Comunidad de Madrid, que organizabadicha Asociación junto conel Ayuntamiento de la localidad (muchasgracias, Adolfo, por acordarte denuestra empresa).La primera toma de palabra fue unaradiografía exacta de lo que estáocurriendo en las Administracioneslocales. Según el Excelentísimo SeñorAlcalde del Municipio, habíanconseguido reducir la deuda con lasEntidades Financieras de una maneranotable y para el próximo ejercicio,pretendían reducir la deuda con proveedores.Y se quedó tan tranquilo.La <strong>Revista</strong>24coNaeEsto quiere decir, que su máxima preocupaciónno eran las empresas; porcierto, muchas de ellas PYMES de lazona, sino los Bancos. Eso sí, dabalas gracias a los proveedores por lapaciencia que estaban teniendo conel Ayuntamiento. Madre mía. Pero,¿por qué primero las Entidades Financieras?;muy fácil: éstas cobranintereses, puesto que tienen fecha depago y los proveedores, las PYMES,cobran cuando pueden (o no cobran,puesto que desaparecen) y más, nohaciendo las Entidades locales “tomade razón” (reconocimiento real dedeuda) sobre las facturas de pequeñoimporte, siendo la toma de razónlo único que le sirve a la PYME parael anticipo de la factura en los Bancos(y ya, no en todos).Resumiendo: se lució el señor Alcalde,porque digo yo, que si hubieraempleado el dinero destinado a losbancos para el pago a las empresas,no hubiera hecho un mayor biensocial a la Comunidad y ésta habríaentendido el pago de más intereses alas Entidades financieras por el apoyoa las PYMES locales.Por último, tomó la palabra el DirectorGeneral de Economía, Estadística eInnovación Tecnológica de la Comunidadde Madrid (pedazo título, lesprometo que me siento incapaz deaprendérmelo). Empezó bien; sí, sí,de verdad. Comenzó diciendo que“… la austeridad es la base de laprosperidad.”. Las PYMES (las quequedamos) ya nos lo hemos aprendidodespués de dos años de sufrimiento,pero el señor inició bien su intervención.Después de unos minutosde monólogo quiso dar un rayo de esperanza,un acuerdo al que acababade llegar la Comunidad de Madrid conlas distintas Entidades, la creación de“…una nueva línea de financiación de20.000.000.0000€ adicionales paralas PYMES..” y añadió: “solventes”.Nos faltó exclamar a los asistentes:Ahhhh!En términos financieros, el concepto“solvente” quiere decir que disponede dinero o de recursos económicospara pagar sus deudas; o que estálibre de deudas. No confundir con“rentable”. Un negocio puede ser rentable,pero por distintas circunstanciasno ser solvente en un momentodado. Ahí está la trampa. ¿CuántasPYMES son rentables y sin embargoactualmente no son solventes? ¿Nosería mejor mirar a la hora de concederla financiación, ser más severosen la rentabilidad y ayudar a la sol-
Financiaciónvencia? Pues no, en España lo quese mira es que se pueda devolver eldinero y no el dar dinero para circulantey, que al fluir el dinero no resterentabilidad y provocar la solvencia ypor consiguiente el pago a nuestroscompromisos.Unos datos: este mismo mes, hasalido un informe, resultado de unaencuesta realizada por las distintasCámaras de Comercio a un espectrode 1,5 millones de PYMES, donde seindica que el 85,8% de las mismastienen restricción de crédito.Esto quiere decir, que casi 86 empresasde cada 100 no consiguen lafinanciación que necesitan, o toda laque necesitan. No me creo que eneste país 86 empresarios de cada100 seamos tontos y trabajemos ennegocios que no sean rentables.Pero hay más. Además, se revela enel estudio, aunque esto ya lo habíamossufrido previamente al mismo,que al problema de concesión decrédito, se ha unido la exigencia porparte de las Entidades Financieras demayores garantías. Vamos a ver, queme he debido de perder algo.Los pequeños empresarios en estesanto país llevamos dos años hipotecandonuestros bienes para intentarsolventar los problemas de solvencia,pagando las deudas que nos handejado las grandes Compañías (yacomentado en el artículo anterior),pagando unos intereses que rozanla usura y aportando como garantíaadicional hasta a nuestras mascotas(en mi caso, un perro), puesto que nosólo ya nos han pedido más garantías,sino que éstas, han sido devaluadasde media un 25% sobre el precio a lasque lo habíamos comprado; y ahoranos piden más.Hay algo que no me encaja y lo queaparentemente no encaja es que condatos de este mismo mes, la morosidadse situó en julio en el 5,4%.100.000.000.000€ (cien mil millonesde euros) son créditos dudosos. Pero¿por qué?Según el mismo estudio, el 91% delas empresas ha sufrido un retrasomedio en el cobro de sus facturas de4,5 meses entre ellas y de 5 mesescon las Administraciones Públicas (algunosson afortunados). Este retrasosupone falta de solvencia para hacerfrente a nuestras obligaciones y provocalas incidencias de las mismascon las Entidades financieras, el pagode más intereses y una disminuciónen la rentabilidad. Pero bajo ningúnconcepto el negocio no es rentable, lafalta de solvencia es la que provoca ladisminución de rentabilidad. Esperemosque lo aprendan. O ya lo sabeny no les interesa.La <strong>Revista</strong>25coNae