Revista nº 5 - Conae

los españoles (en general): vivienda,educación, sanidad, libre tránsito, entreotros.Hago la especial salvedad de que elEstado está obligado en especial aotorgarles a las personas que contribuyenestos derechos, pues sonlos contribuyentes los que con susimpuestos permiten la supervivenciadel Estado y, de esta forma, puedaredistribuir parte de estos impuestosa los que no contribuyen, pero sí tienenderechos.El colmo del absurdo es la situaciónhacia la que cada día la ineptitud denuestros gobernantes y acólitos nosestán dirigiendo, y es que los contribuyentespaguen impuestos, perono tengan derechos, con las consecuenciasque en una época de crisis,como la actual, supone.Pues bien, en este ansia recaudatoriade nuestro Gobierno se va a daruna vuelta de tuerca más a nuestraConstitución, en la línea antes indicada,confiscando a los contribuyentes,puesto que se les niega el derecho auna vivienda digna, después de contribuira las cargas del Estado (imposibilidadpor la relación de renta neta-ingresos, menos gastos, menos impuestos-,coste vivienda, falta financiación,etcétera), y aparte se les quitala deducción, que les compensabapor ese exceso de tributación, a loscompradores de vivienda.Ya que aquellos contribuyentes conrentas superiores a 24.170 euros(24.170 : 14 = 1726,43 € mes) queadquieran una casa a partir del primerode enero de 2011, ya no podránacogerse a la bonificación por vivienda.Curiosamente, si observamos estasituación desde una perspectiva nopartidista, llegaremos al absurdo deque el Estado está matando expresamentesu gallina de los huevos deoro, el contribuyente, con el único finde mantener sus mecanismos obsoletose inconsistentes.Todo lo anterior me lleva a una reflexión,y es que el Estado español,de motu-propii (impuestos, trabasadministrativas, obligaciones de información,sanciones, ley prevenciónriesgos, ley protección datos, etcétera),y a través de sus acólitos sindicatos(no tienen posibilidad de manipularla microempresa, protecciónfuera de lugar, exigencias igualespara microempresas que para grandesempresas, etcétera), intenta quedesaparezca nuestra economía talcomo la conocemos (93% de microempresas).La RevistacoNae23