continente africano” 16 , “la creación <strong>de</strong> un arsenal e infraestructura para el ataque a aeronavescomerciales judías en Europa” 17 y el “asalto <strong>de</strong> un comando suicida a la mezquita <strong>de</strong> laAscensión”. Era obvio que este último proyecto terrorista sólo podía estar inspirado en unaexacta información <strong>de</strong> lo que USA e Israel llevaban entre manos en relación con el Big Bird.Tan graves acontecimientos -ajenos por completo a nuestra verda<strong>de</strong>ra misión-sólo vinieron aenturbiar los corazones <strong>de</strong>l equipo, que se entregó hasta el límite <strong>de</strong> su capacidad a la <strong>de</strong>licadaoperación <strong>de</strong> “limpieza” <strong>de</strong> los barracones.Dos días <strong>de</strong>spués -el sábado, 17 <strong>de</strong> febrero-, con algo más <strong>de</strong> veinticuatro horas <strong>de</strong> a<strong>de</strong>lantosobre lo previsto, la “cuna” había sido <strong>de</strong>smontada y puesta a buen recaudo en trescontenedores blindados.Al coincidir con el día sagrado <strong>de</strong> los judíos, Curtiss, astutamente, se apresuró a comunicarlesque podían franquear el recinto <strong>de</strong> la mezquita. Pero, como era <strong>de</strong> esperar, <strong>de</strong>clinaron elofrecimiento, <strong>de</strong>morando su participación en los postreros trabajos <strong>de</strong> evacuación hasta lapuesta <strong>de</strong> sol. Aquella provi<strong>de</strong>ncial coinci<strong>de</strong>ncia nos proporcionaría un precioso margen <strong>de</strong> casiseis horas en el que la casi totalidad <strong>de</strong> las consolas y equipos electrónicos <strong>de</strong> la estaciónpropiamente dicha fueron “echados abajo” y mezclados y confundidos con los cajonesmetálicos que contenían el módulo y <strong>de</strong>más instrumentos auxiliares.Minutos <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l ocaso -hacia las 17.45 horas-, los técnicos y oficiales israelíes entrabanen la plazoleta, iluminada ya por potentes reflectores, colaborando con nuestros hombres en el<strong>de</strong>smantelamiento final.Al alba, la operación había concluido. Todo se hallaba dispuesto para el traslado. Pero¿adón<strong>de</strong>? ¿Cuál era el punto elegido?Por elementales razones <strong>de</strong> pru<strong>de</strong>ncia -y siguiendo las ór<strong>de</strong>nes <strong>de</strong>l general <strong>de</strong> brigada AriéShalev, jefe <strong>de</strong>l Departamento <strong>de</strong> Investigación <strong>de</strong>l Servicio <strong>de</strong> Inteligencia israelí-, losarqueólogos (o supuestos “arqueólogos”) <strong>de</strong>berían permanecer en el interior <strong>de</strong> la capilla <strong>de</strong> laAscensión hasta cuarenta y ocho horas <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la <strong>de</strong>finitiva salida <strong>de</strong>l material. Los árabes,propietarios y custodios <strong>de</strong>l santuario, atentos a todos nuestros movimientos, podrían habersospechado algo si los mencionados “expertos" <strong>de</strong> la Universidad <strong>de</strong> Jerusalén, <strong>de</strong> la EscuelaBíblica y Arqueológica Francesa <strong>de</strong> la Ciudad Santa y <strong>de</strong>l Museo <strong>de</strong> Antigüeda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> Ammán -integrantes <strong>de</strong> la “división especial” encargada por el Gobierno <strong>de</strong> Golda Meir <strong>de</strong> lasexcavaciones y reparación <strong>de</strong> los cimientos <strong>de</strong> la cara este <strong>de</strong> la inolvidable mezquita,supuestamente dañados por el simulacro <strong>de</strong> atentado protagonizado por los agentes <strong>de</strong> Davánhubieranevacuado la zona al mismo tiempo que la carga. Esta, según las escasasinformaciones que llegaron hasta nosotros en aquellos días, <strong>de</strong>saparecería <strong>de</strong>l.lugar durante lanoche y <strong>de</strong> forma gradual, con el fin <strong>de</strong> levantar un mínimo <strong>de</strong> sospechas. La gran preguntaque nos hicimos en tan tensas jornadas, y que Curtiss no pudo o no supo clarificar, encerrabauna <strong>de</strong>cisiva importancia en el planeamiento <strong>de</strong> la primera fase <strong>de</strong> la aventura que nos16 Las informaciones <strong>de</strong> la Inteligencia jordana e israelí eran correctas. Semanas más tar<strong>de</strong> -el1 marzo-, guerrilleros <strong>de</strong> Septiembre Negro tomaban rehenes en la embajada <strong>de</strong> ArabiaSaudita en Jartum (Sudán). Entre las peticiones <strong>de</strong> los asaltantes figuraban la liberación <strong>de</strong> 40guerrilleras palestinas encarceladas en Israel y <strong>de</strong> otro medio centenar <strong>de</strong> guerrilleros,prisioneros en Alemania Occi<strong>de</strong>ntal, Jordania e Israel, así como <strong>de</strong>l asesino <strong>de</strong>l presi<strong>de</strong>nteRobert Kennedy, Sirhan Bishara Sirham. Con gran <strong>de</strong>sconcierto por nuestra parte -ysuponemos que <strong>de</strong> los servicios <strong>de</strong> espionaje judíos y jordanos, que en aquellas fechas noconsiguieron una información más <strong>de</strong>tallada-, los ocho guerrilleros <strong>de</strong> Septiembre Negro daríanmuerte a tres <strong>de</strong> los diplomáticosretenidos en la embajada: Aleo A. Nock, nuestro embajador en Sudán; Guy Eid, funcionariobelga, y Curtiss Moore, también diplomático norteamericano. (N. <strong>de</strong>l m.)17 Este arsenal sería <strong>de</strong>scubierto por la Policía italiana el 5 <strong>de</strong> septiembre <strong>de</strong> ese mismo año <strong>de</strong>1973, en Ostia, cerca <strong>de</strong> Roma. En la casa se alojaban nueve palestinos, miembros <strong>de</strong> ungrupo terrorista.Entre las numerosas armas fueron encontrados dos lanza-cohetes Strela, <strong>de</strong> fabricación rusa,que podían haber sido utilizados para el <strong>de</strong>rribo <strong>de</strong> aviones comerciales en vuelo. Los temiblesStrela constan <strong>de</strong> un tubo <strong>de</strong> 1,35 metros, con un peso <strong>de</strong> 13 kilos, pudiendo ser disparadoscomo un fusil; es <strong>de</strong>cir, apoyándolos en un hombro y apuntando con un teleobjetivo <strong>de</strong>reducidas dimensiones. Alcanza fácilmente el motor <strong>de</strong> un avión, gracias al sistema <strong>de</strong> guía porrayos infrarrojos. (N. Del m.)
aguardaba: “¿Cuál era el asentamiento elegido para la estación receptora <strong>de</strong>l Big Bird 18 ?”Como ya hice alusión anteriormente ese nuevo y ansiado <strong>de</strong>spegue <strong>de</strong>l módulo y quizá buenaparte <strong>de</strong> la segunda exploración estaban sujetos al exhaustivo conocimiento <strong>de</strong>l punto don<strong>de</strong><strong>de</strong>bería ser levantada la estación receptora. Lógicamente, al abandonar el monte <strong>de</strong> los Olivos,ese misterioso emplazamiento tenía que estar ubicado lejos <strong>de</strong>l que, en principio, ya constituíapara nosotros el “punto <strong>de</strong> contacto”.<strong>de</strong> la nave: la referida cumbre <strong>de</strong>l monte que ahoraestábamos a punto <strong>de</strong> <strong>de</strong>jar. Para salvar este inconveniente, los directores <strong>de</strong>l proyecto -reunidos con Eliseo y conmigo durante todo el domingo, con el fin <strong>de</strong> planificar al máximo lospormenores <strong>de</strong>l segundo “gran salto”- establecieron dos únicas soluciones.Si la distancia entre el nuevo asentamiento y el monte <strong>de</strong> las Aceitunas era consi<strong>de</strong>rable, unavez efectuado el <strong>de</strong>spegue y la inmediata inversión <strong>de</strong> masa, la “cuna” <strong>de</strong>bería salvar esasmillas en un vuelo horizontal. Esto complicaba aún más las cosas. Entre otras razones, por ellógico consumo extra <strong>de</strong> combustible. Un peróxido <strong>de</strong> hidrógeno, por cierto, que <strong>de</strong>bía llegar, ysecretamente, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los Estados Unidos...Si los kilómetros que nos separaban <strong>de</strong>l “punto <strong>de</strong> contacto “, por el contrario, no eran muchos,quizá lo más pru<strong>de</strong>nte fuera variar la zona <strong>de</strong> <strong>de</strong>scenso, cubriendo a pie el camino hastaJerusalén. En este caso, dado el indudable riesgo que suponía una marcha <strong>de</strong> estascaracterísticas, la estrategia <strong>de</strong>bería ser variada sustancialmente.Por expreso <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> Curtiss, a quien prácticamente no vimos hasta el martes, 20 <strong>de</strong> febrero,el reducido equipo que dirigía <strong>Caballo</strong> <strong>de</strong> <strong>Troya</strong> vivió aquellos días única y exclusivamente parala segunda gran aventura.En nuestro afán por calibrar hasta el último <strong>de</strong>talle <strong>de</strong> tan apasionante y -¿por qué negarlo?-peligrosa misión, contemplamos incluso, en los primeros momentos, la posibilidad <strong>de</strong> que losaltos <strong>de</strong>l Golán o los macizos <strong>de</strong>l Sinaí pudieran ser reconsi<strong>de</strong>rados por el Gobierno israelícomo una <strong>de</strong> las plataformas para la <strong>de</strong>finitiva instalación <strong>de</strong> la estación. El general nos habíaadvertido que, dada la situación en Oriente Medio, ambos emplazamientos habían sido<strong>de</strong>sechados por el Estado Mayor judío. Y no tuvimos más remedio que rendirnos a la evi<strong>de</strong>nciacuando, en esos días, la prensa <strong>de</strong> Jerusalén publicó dos noticias registradas el jueves último yjustamente en las áreas en litigio. En el golfo <strong>de</strong> Suez, muy próximo al Sinaí, un avión egipcio yotro judío habían sido alcanzados en un duelo aéreo entre reactores <strong>de</strong> ambos países. Encuanto a las alturas <strong>de</strong>l Golán, tropas sirias habían <strong>de</strong>struido dos carros blindados y unaexcavadora israelitas cuando éstos cruzaron la línea <strong>de</strong> alto el fuego con el fin <strong>de</strong> construir unacarretera en la zona <strong>de</strong>smilitarizada.La tensión entre Israel y sus vecinos árabes seguía incrementándose <strong>de</strong> forma alarmante,amenazando incluso nuestros objetivos. Pero las horas más amargas estaban aún por llegar...En la mañana <strong>de</strong>l lunes, 19 <strong>de</strong> febrero, aprovechando una obligada interrupción en nuestrassesiones <strong>de</strong> trabajo, y casi sin quererlo, mis pasos me condujeron a un lugar que había evitado18 Aunque fue <strong>de</strong>tallado en mi anterior libro -<strong>Caballo</strong> <strong>de</strong> <strong>Troya</strong>-, quizá sea conveniente recordarla naturaleza <strong>de</strong> este tipo <strong>de</strong> satélites artificiales, que jugaron un papel <strong>de</strong>cisivo en lasdramáticas fechas previas a la guerra <strong>de</strong>l Yom Kippur, en octubre <strong>de</strong> 1973. “La serie <strong>de</strong>satélites Big Bird o Gran Pájaro -reza una <strong>de</strong> las notas <strong>de</strong>l mayor-, y en especial el prototipo KIlII, pue<strong>de</strong> volar a una velocidad <strong>de</strong> 25 000 kilómetros por hora, necesitando un total <strong>de</strong> 90minutos para dar una vuelta completa al planeta. Como ésta oscila ligeramente durante eselapso <strong>de</strong> tiempo (22 grados, 30 minutos), el Big Bird sobrevuela durante la vuelta siguiente unabanda diferente <strong>de</strong> la Tierra y vuelve a su trayectoria original al cabo <strong>de</strong> 24 horas. Si elPentágono <strong>de</strong>scubre algo <strong>de</strong> interés, el satélite pue<strong>de</strong> modificar su órbita, alargando el tiempo<strong>de</strong> revolución durante algunos minutos y haciéndolo <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>r a órbitas hasta 120 kilómetros<strong>de</strong> altitud. Una diferencia <strong>de</strong> un grado y treinta minutos, por ejemplo, cada día, permite cubrircada diez días una zona conflictiva, sobrevolar todas sus ciuda<strong>de</strong>s y zonas <strong>de</strong> 'interés militar .Posteriormente, el Big Bird es impulsado hasta una órbita superior.” Con la instalación en Israel<strong>de</strong> una <strong>de</strong> estas sofisticadas estaciones receptoras <strong>de</strong> imágenes -amén <strong>de</strong> materializar lospropósitos <strong>de</strong> la operación <strong>Caballo</strong> <strong>de</strong> <strong>Troya</strong>-, los judíos disponían <strong>de</strong> un rápido y fiel sistema<strong>de</strong> control <strong>de</strong> sus enemigos y USA <strong>de</strong> una estratégica estación, que ahorraba tiempo y buenaparte <strong>de</strong> la siempre engorrosa maniobra <strong>de</strong> recuperación <strong>de</strong> las ocho cápsulas <strong>de</strong>sechablesque portaba cada satélite y que eran rescatadas cada 15 días en las cercanías <strong>de</strong> Hawai.Al menos, la operación resultaba <strong>de</strong> gran interés para USA, que podía así fotografiar a placerfranjas tan “inestables” como las fronteras <strong>de</strong> la URSS con Irán y Afganistán, Pakistán y golfoPérsico, recibiendo resultados <strong>de</strong> negativos a los tres minutos <strong>de</strong> haber sobrevolado dichasáreas. (Nota <strong>de</strong> J. J. Benítez.)