de búfalos y cucarachas: vasconcelos, oscar zeta - Estudios ...

ESTUDIOS. Revista de Investigaciones Literarias y Culturales. Año 9, N' 17. Cuacas, ene-jun, 2001, pp. 175 - l9lDE BÚFALOS Y CUCARACHAS: VASCONCELOS, OSCAR ZETAACOSTA Y EL MESTIZATE EN ESTADOS UNIDOSSvr-vll SpnmDarmouth CollegeTextos de José de Vaconcelos y Oscar Zeta Acosta sirven a Sylvia Spitta para reflexionar sobre lascontradicciones de referirse a los conceptos de mestizaje e hibridación desde una perspectiva teóricaorientada por la concepción europea de raza. Spitta analiza cómo el movimiento chicano de losEstados Unidos asumió los textos de José de Vasconcelos, consiguiendo con ellos una forma decohesión identitaria, la cual sirvió como vehícuio para lograr reconocimiento social. Al mismotiempo, muestra cómo sus teorías produjeron una auto-asunción del concepto de inferioridad de lapropia "raza", una idea que aparece en los textos de Zeta Acosta. De ello surgió también una actitudparadójica entre los propios chicanos: mientras asumían la superioridad de los blancos, rechazaban aotros grupos étnicos e, incluso, a muchos imigrantes mexicanos.Palabras clave: José de Vasconcelos, Oscar Zeta Acosta, movimiento chicano, raza e identidad,mestizaje.OF BUFFALOES AND COCKROACHES: VASCONCELOS' OSCAR ZETA ACOSTAAND MESTIZAJE IN THE UNITED STATESTexts by José de Vasconcelos and Oscar Zeta Acosta are used by Sylvia Spitta to reflect on theimplicit contradictions of talking about concepts of mestizaje and hybridization from a theoreticalperspective that is oriented by a European conception of race. Spitta shows how José de Vasconcelos'texts were used by the Chicano movement in the United States to obtain a form of cohesion based onidentity that was used as a means for demanding social recognition. At the same time, however, theyproduced a self-assumption of the conception of their own race as inferior, an idea that is present inOscar Zeta Acosta's texts. This also brought a paradoxical attitude among Chicanos themselves: theywould assume the superiority of whites, whiie rejecting other ethnic groups, and even many Mexicanimmigrants.Key Words: José de Vasconcelos, Oscar Zeta Acosta, Chicano movement, race and idenrity, mestizaje.Nos hallamos entonces en una de esas épocas depalingenesia, y en el centro del maelstreón universal.José Vasconcelos, "La raza cósmica" (50)Acuñando neologismos tales como "universalópolis" para referirse a la capital utópicade un nuevo mundo situada a las orillas del Amazonas; resucitando teorías cadur75

cas sobre la Atlántida como civilización ubérrima, punto de origen de la raza "roja"de América; asumiendo sin cuestionamiento aiguno la división europea decimonónicade las razas en cuatro: una blanca y las otras roja, negra y mogol; inventando de acuerdoal romanticismo alemán un Egipto blanco; suplantando una eugenesia degenerativapor un mestizaje superlativo; formulando una misteriosa eugenesia "del gusto estético"donde los cuerpos pobres, feos, que siempre se conesponden a los que no sonblancos -cuerposmonstruosos (él los llama monstruosos) deformados por la ignoranciay la pobreza se volverán conscientes de su propia fealdad y optaran por desaparecerdelafaz de la tierra (42)-;y lleno de otras propuestas igualmente excéntricas y contradictorias,el ensayo "Laraza cósmica" de 1925 se lee más como ciencia ficción que comoel manifiesto americano y mestizo que Vasconcelos se propone.José Joaquín Blanco, en su magnífica biografía de Vasconcelos, rastrea su trayectoriapolítica de progresista a partidario nazi; desde su primera autocaracterización enIndología (1926) como mestizo hasta sus declaraciones, diez años más tarde, de ser"hispánico" y criollo puro en el Ulises criollo (Blanco,ll977l1983:. l7). Blanco sitúa loscambios en el pensamiento de Vasconcelos-quelo llevan del progresismo al nazismoy de lo cósmico a lo cómico- bajo el signo de lo contradictorio y lo disonante (Blanco,U9'7ll1983:9). Yo creo que debe ser leído al revés disonante y lo contradictorio no-locomo excusa de una falta de rigor académico y crítico, o de alguna suerte de lapsusmental- y que en cambio debemos leer "La raza cósmica" como uno de los documentosmás elocuentes sobre la dificultad y virtual imposibilidad de Vasconcelos (así comode tantos otros pensadores latinoamericanos) de liberarse de las imposiciones coloniales.Vasconcelos es radical al señalar 1o evidente: que en ningún otro continente comoen América se han encontrado y mezclado las razas blanca, la negra, la asiática o-lamogol, como la llama, y la indígena o roja- y que han sido los blancos, con susrespectivos imperios (principalmente el británico, el español y el portugués), los quehan servido de puente y los que han facilitado el vertiginoso mestizaje americano.Como parte del discurso que opone latinidad y sajonismo -característicode su épocay vinculado a la guerra del '98- surge la obsesión por tratar de explicar el contrasteentre el progreso del Norte y el relativo atraso de Latinoamérica. La respuesta la halla enla eugenesia y en el legado de dos políticas coloniales muy diferentes. Mientras que enEstados Unidos los sajones exterminaron a las poblaciones nativas y marginaron a losnegros, en Latinoamérica ha habido una mezcla entre razas demasiado diferentes, quelleva a un mestizaje degenerativo. Escribe: "Sucede que el mestizaje de factores muydisímiles tarda mucho tiempo en plasmar" (Vasconcelos U94811992: ll).El traslapamiento del concepto de raza al de cultura, especialmente en lo que conciernea cuestiones de colonización, es preponderante; aunque Vasconcelos esté conscientede su impacto, le es imposible liberarse de é1. Así, critica las teorías racialeseuropeas decimonónicas de la siguiente manera:t76

Nosotros nos hemos educado bajo la influencia humillante de una filosofíaideada por nuestros enemigos, si se quiere de una manera sincera, pero con elpropósito de exaltar sus propios fines y anular los nuestros. De esta suertenosotros mismos hemos llegado a creer en la inferioridad del mestizo, en lairredención del indio, en la condenación del negro, en la decadencia irreparabledel oriental (Vasconcelos ll948l 1992:45).Para contrarrestar la manipulación colonizadora de estos conceptos raciales-porla cual servirían para subordinar a las poblaciones hispanas-, no le queda otra aVasconcelos que postular lo opuesto: el mestizaje ya no va a ser un mestizaje degenerativosino superlativo.El melting pol norteamericano es criticado por su política de exterminioy de marginación y, en contraste, el mestizaje es visto como un proceso vital plenode futuro, ya que en comparación con la repulsión que siente el sajón por "el otro", elmestizaje está arraigado en sentimientos de simpatía hacia la alteridad.Entiende así su "La raza cósmica" como un ensayo de reconstituir "nuestra ideologíay organizar conforme a una nueva doctrina étnica toda nuestra vida continental"(46). Es decir, incorpora una postura esencialmente anti-colonial. Eso por un lado.Por otro, al no lograr crear conceptos nuevos para explicar las culturas latinoamericanasdecir, al no teorizar a partir de la mezcla y el mestizaje sino al remitirse siempre-esa culturas originarias (la española, la afiicana, etc.)- Vasconcelos se ve forzado meramentea invertir los términos y a darle una carga positiva a conceptos raciales cargadosde negatividad, con lo cual al fin y al cabo no evade el racismo inherente a tales teorías.Sin embargo, y a pesar de su oscilación vertiginosa entre lo cósmico y lo cómico, entresu plataforma liberadora y su adhesión problemática a postulados provenientes de lapseudociencia de la eugenesia, "la raza cósmica" no sólo se ha convertido, para decirloa lo Doris Sommer, en un concepto fundacional en México y en toda Latinoamérica, sinoque también ha sido adoptado por el pensamiento chicano al norle del río Grande.En "El plan de Santa Barbara", manifiesto nacionalista chicano de los años 60 quepropone una reforma universitaria a través del establecimiento de coaliciones universitarias,la utopía de Vasconcelos figura prominentemente. Su política universitaria, propuestaen México en los años 20, es adoptada como grito radical chicano: "No venimosa trabajar para la universidad sino a pedir que la universidad trabaje para nuestropueblo". Este programa político de radicalización de las universidades termina con ellema vasconceliano: "Por la rczahabla el espíritu"l. Hay que recordar que el cruce delpensamiento vasconceliano a los Estados Unidos es facilitado por la vida bicultural deéste mismo: hijo de un empleado aduanal creció en ciudades fronterizas (Sásabe, Sonora,Piedras Negras, Coahuila), expuesto. como lo describe José Joaquín Blanco, "a dos1 "El Plan de Santa Bárbara (compiled)". El sexto sol de MeCHA Library. http://www.hiline.net/'Juancv/library.htrn. 1996.111

lililenemigos esenciales: los asaltos terribles de los apaches y la eficaz voracidad de losEstados Unidos" (Blanco, |971) 1983:13). Asistió a colegios estadounidenses dondese le prohibió hablar español y donde padeció el mismo tipo de discriminación cultural,lingüística y racial que siguen padeciendo los chicanos en EEUU aún hoy en día. Engran medida, entonces, "La raza cósmica" se puede leer como un ensayo, muy de suépoca, de establecer un diálogo y una comparación entre la América Sajona y la AméricaLatina, el cual por ende se presta a ser adoptado por los chicanos, para quienes "LaRaza" a lo Vasconcelos es definida como identidad, comunidad, hermandad y uniónpolítica y racial, con objeto de combatir los efectos aculturadores, materialistas ynegadores de la diferencia cultural del melting pr¡l estadounidense2.Otro manifiesto fundacional del Movimiento Chicano elaborado en Denver, Colorado,en 1969,llamado "El plan espiritual de Aztlán", sustituye la Atlántida de Vasconcelospor un Aztlán en el sudoeste de los Estados Unidos que les sirve a los chicanos parafabricar un mito de orígenes y de retorno alarcí2. A través de este mito, los chicanosrecuperan una tierra por extensión, una cultura- perdida en 1848 con el Tratado de-yGuadalupe Hidalgo. De allí en adelante pondrán de cabezalatdeología norteamericana:el "invasor" será el "gabacho" y no el mexicano, la frontera será una frontera abierta yno el nuevo muro de Berlín barrera rígida e impasable que Washington D.C. se-laempeña en construir a lo largo de más de 3000 millas, ignorando por completo la historiay realidad fluidas de la región fronteriza. En "El plan espiritual de Aztlán" los chicanosasumen la ideología del mestizaje, le dan la espalda a los Estados Unidos y se unen alresto de Latinoamérica como otra nación mestiza:Con el corazón en las manos y las manos en la tierra, Nosotros Declaramos laIndependencia de nuestras Naciones Mestizas. Somos la Raza de Bronce conuna Cultura de Bronce. Frente al mundo, frente a toda América del Norte, frentea nuestros hermanos del Continente de Bronce, Somos una Nación, Somos unaUnión de pueblos libres, Somos Aztlán3.Desvíandose de la supuesta inclusividad de la raza cósmica vasconceliana, estostempranos manifiestos de reivindicación chicana establecen una dicotomía bastantemaniquea entre blancos y mestizos. Mientras que los sajones son caracterizados comomaterialistas, faltos de humanidad, agresivos, racistas, arrogantes explotadores eindividualistas, los latinos a la Vasconcelos, en cambio, son humanistas, solidarios,unidos por fuertes lazos a sus familias, a su comunidad, y a la tierraa. Este maniqueísmo34"El Plan de Santa Bárbara (compiled)". E/ s¿¡¡o sol de MeCHA Librarl-.bttp:llwww.hiline.net/Juancv/library.htrn. 1996."El plan espiritual de Aztlán" (Valdez y Steiner, eds. 1972:403).El Aríel de Rodó y "Nuestra América" de Martí, así como las obras de ensayistas como Sarmientoy el propio Vasconcelos, serían antecedentes literarios de esta clase de caracterización maniqueade las diferencias entre anglosajones y latinos.178

también se vuelca sobre sí mismo y crea una serie de divisiones dentro de la mismaRaza. Margina a aquellos chicanos que no son solidarios, que no tienen un compromisopolítico con los campesinos y que en muchos casos, por ser de clase media, son consideradosunos vendidos y aculturados. Esta es la razón por la que muchos de ellosviolentamente rechazan el término chicano a favor de mexicano-americano.En el poema filosófico "Pensamiento serpentino: A Chicano Approach to the Theatreof Reality" Luis Valdez trata de superar la dicotomía inicial del programa político chicanoy escribe:To be CHICANO is not (NOT)to hate the gabacho or thegachupín or even the pobrevendido...To be CHICANO is to love yourselfyour culture, yourskin, your language (Valdez, 1990: 175).[SeTCHICANO no significa (NO)odiar al gabacho o algachupín o al pobrevendido...Ser CHICANO es amarse a sí mismoa tu cultura, tupiel, tu lengualEl problema con este planteamiento no radica en su afán de superar un maniqueísmoque prolifera en divisiones interpersonales, sino en la imposibilidad de definir lo que esel "your culture" del poema de Valdez, cuando se trata de una culfura desarraigada ydesteritorializada no sólo física sino también económica y políticamente, como lo hasido la cultura chicana. Por eso Valdez, como muchos chicanos antes y después de é1,le da la espalda a la historia estadounidense y adopta una postura indigenista, cuandoreinventa y reinterpreta un glorioso pasado precolombino. En este caso, para estableceruna continuidad entre las culturas precolombinas y la chicana, adopta el conceptodel "can" de los mayas como sinónimo de raza cósmica:Para el hombre cósmicoCAN de los rnayas antiguosla muerte no existetl9

Racial distinctionsno existenlímites materialesno existen,nation, wealth, fashions,hatreds, envidias, greed,The lust tbr Powerno existen.not even the lust forCHICANOPOWERComo los curanderosabusadosElhombreCAN(consciencia cósmica)se vuelve pájaroo animal o pescadoy se mete al río a descansar.He can be everYthingbecause he LOVES everYthing(menos el diablo)he identifies with TODOSo he IS todoAnd that, carnalesis truly beingChi-CAN-oMexico, after all, meansfeathered serpent,or if you are mathematicallYtrucha, it meansE=MC2 (Valdez, 1990: 179- I 8 1)La importancia de la adopción del pensamiento vasconceliano por parte de loslatinos de los Estados Unidos radica en que al cruzar el río Grande , "la raza cósmica"180

impone un pensamiento racial diferente al que predomina en los Estados Unidos. Elconcepto de mestizaje (por problemático que sea) se opone a la dicotomía blanco/negroque domina el imaginario norteamericano y opera una crítica del melting pot comomodelo cultural aculturativo a la cultura y raza sajonas. Es decir, que sólo los blancospueden aculturarse mientras que los otros (es decir: los racialmente otros) quedansiempre excluidos. Lógica que también vuelve "extranjeros" a los mexicanos en lo queera su propia tierra. En este sentido, el hecho de introducir a la cultura estadounidenseotro modelo cultural, como es el de mestizaje, es radical y de extremas consecuenciaspara el auto entendimiento de 1o que es la "identidad" estadounidense. En el poema deValdez, como en los de muchos mexicano-americanos, la mezcla de idiomas ----el empleodel "spanglish"- es otro modo más de establecer la fluidez de la frontera y de cuestionarel constructo de la "identidad" estadounidense, que como todo imaginario nacionalse basa en el ideal de una lengua, una cultura, rtna faza5 .No obstante, no hay que olvidar que la utopía de Vasconcelos es extremadamenteproblemática y que en su desplazamiento hacia el Norte y hacia otro contexto culturalno se supera parte de la carga negativa que conlleva. Formulada en los años 20, la ideadelarazacósmica está endeudada con las teorías raciales europeas decimonónicas, laciencia de la eugenesia, la afición de Vasconcelos por el intuicionismo, el irracionalismoy su apego al romanticismo alemán de allí que el Egipto de Vasconcelos sea blanco--(Bernal, 1987). Las fuentes eugenésicas en las que se basa el pensamiento vasconcelianono se pierden en la transculturación de su ideología del mestizaje a los Estados Unidos.Insisto en las fuentes eugenésicas de su pensamiento, pero hay que recordar que ya en1563-1565, como parle de una política colonial discriminatoria en contra de los mestizosen las "Cartas del licenciado Jerónimo Valderrama" y otros documentos sobre su visitaal gobierno de Nueva España, éste se queja de que "la tierra está llena de mestizos, quees una maldita gente" (Boyd-Bowman, 1971:585). Esta larga historia da lugar a que sereproduzcan en EEUU las mismas contradicciones que ac¿urea la ideología del mestizajey que ya he elaborado en otras ocasiones para el caso José María Arguedas: por unlado mestizaje y raza cósmica como proyecto latinoamericano emancipatorio y por otrolado representación del mestizo como sujeto abyecto (Sandoval, 1998: 359).Así por ejemplo la chicana Gloria Anzaldúa, habiendo heredado las mismas contradiccionesque Vasconcelos, insiste una y otra vez en su libro Borderlands/Lafrontera:The New Mestiza Writes -:unode los textos fundacionales del chicanismo de fin desiglo- que los mestizos sonlarazacósmica y que la única manera de supervivencia esa través de la alianza de todas las personas "de color" o del tercer mundo en y fuera delos Estados Unidos. Propone que el futuro es la hibridez, las mezclas de todo tipo (degénero sexual, literario, lingüístico, cultural, etc.). A la misma vez, sin percatarse de supostura contradictoria ni de su derrota ideológica, y asumiendo toda la carga negativa5 Por esto Martin Lienhard preflerc hablal de diglosia que de mestizaje o hibridez.ltSl

que conlleva el término mestizo, escribe que cuando ella se mira en el espejo loúnico que ve es "pena .Shame" (Anzaldúa, 1987). Se avergüenza de ser mestiza. Otracrítica chicana, Norma Alarcón, ha dado en el clavo cuando escribe que la sobrevaloraciónde lo europeo y la subalternización de la madre y de los oígenes indígenas han llevadoa que en México se haya desarrollado la ideología del mestizaje como contraparte de lanotoria ideología del melting pol estadounidense (Alarcón, 1998: 37'7).No conozco ningún texto chicano que mejor elabore estas contradicciones entreideología del mestizaje-como-liberación y mestizos abyectos que las dos biografíasnoveladas de Oscar Teta Acasta. Abogado y activista en el Movimiento Chicano delos años 60, escribe sobre sí mismo en su The Autobiography of a Brown BuJfalo : "I amthe nigger after all" (después de todo yo soy El Negro; 1912:95).Un Bildungsromanchicano, Autobiography hace eco del programático On the Road de Jack Kerouac de1957-manifiestode la llamada Generación Beat que describe la desestabilizacióndeuna sociedad y su puesta en marcha por todos los caminos, autopistas, trenes y demásvías de comunicación que caracterizan nuestra modernidad. Sitúa al narrador "en camino"por así decirlo: entre su niñez en El Paso, su adolescencia en un pueblo agrario delValle de San Joaquín en California, sus años de estudiante (de literatura, música, matemáticas),sus años en Panamá como evangelizador, su trabajo como abogado en SanFrancisco, y su arribo a una conciencia chicana. Rememora su niñez a lo largo de unviaje en busca de sus raíces ---el clásico "road trip" kerouquiano- que lo lleva deIdaho (la frontera norte de los Estados Unidos con Canadá) al sur a El Paso (lugar de sunacimiento donde no se reconoce) y después a hárez (lugar de nacimiento de sumadre). Al pasar la frontera de EEUU a México y luego de regreso, se da cuenta de queni es un mexicano en México ni un americano en los Estados Unidos. Asume comosímbolos de esta posición intermedia primero la del búfalo americano (animal caracterizadosimultáneamente por su fuerza e increíble fragilidad, símbolo por excelencia de lasituación indígena en Estados Unidos) y después el de la cucaracha. Este insecto,según Acosta, es el que mejor representa la posición de los chicanos, ya que al serconsiderado abyecto es perseguido implacablemente. A partir de esa concientizaciónsobre su posición inevitablemente intermedia, intersticial y por ende abyecta, viaja aLos Ángeles (la ciudad norteamericana que contiene el mayor número de mexicanosfuera del D.F.) y asume el chicanismo radical de los años 60 y del movimiento de derechosciviles. Inspirado por la película de 1921 The Mark of Z,ono, con Douglas Fairbanks,cambia de nombre y se llama Buffalo Zeta Brown. Esta película, como lo ha señalado tanacertadamente Ilan Stavan, es problemática como fuente de inspiración, ya que "zorro"se enfrenta a un canalla mexicano en una lucha para re-establecer el poder AngloAmericano y, además, la película representa al pueblo como chusmocracia ("a mestizomobocracy"). También se inspira en la película de Costa Gavras Zy enlapelíctúa LaCucaracha, donde el protagonista es el General Zeta, una mezcla de Zapata con PanchoVilla (Stavans, 1995: 59-60). Se transforma en otro "Zorro"; un Robin Hood chicano,182

eportero "gonzo" y abogado defensor de los derechos de los estudiantes chicanos,experiencias revolucionarias que recuenta en la novela The Revolt of the CockroachPeople (La rebelión de la Pueblo-Cucaracha) de 19'73.De lo que se trata, en el fondo, en la vida y obra de Oscar Zeta Acosta, es de laidentidad como una identidad inestable, sobre la marcha; como una serie interminablede viajes, de transfbrmaciones, de metamorfosis, y muchas veces de no-identidad yabyección. Este extremo desarraigo, descrito triunfalísticamente por Vasconcelos, es lacara opuesta, la consecuencia, del desplazamiento de gentes que empezó en 1492 y queprefigura lo que hoy en día llamamos globalización. Nos recuerda también uno de lospasajes más elocuentes de Kerouac sobre este proceso de las identidades puestas enmarcha, donde el protagonista despierta una tarde en un hotelucho frente a la estaciónde trenes y a diferencia de la experiencia que hemos tenido todos alguna vez, al despertaren hoteles o en casas de amigos y por un momento sentirnos desorientados y nosaber dónde nos hallamos, aquí el protagonista sabe dónde está pero no se acuerda dequién es. Describe Kerouac este instante de la siguiente manera:Me desperté cuando el rojo sol se ponía; y fue ése un momento sobresaliente enmi vida, uno de los momentos más extraños de mi vida, cuando sabía quién era.Me hallaba lejos de mi hogar, obsecado por y cansado de tanto viaje, en un hotelde mala muerte que no había visto nunca, oía el silbido del vapor afuera, y elcrujido de la antigua madera del hotel, pasos en la habitación superior, y otrostristes ruidos, y miré el techo alto y agrietado y realmente no supe quién era porunos quince extraños segundos. No tuve miedo; solamente era otra persona,algún extraño, y toda mi vida había sido una vida fantasmal, la vida de unfantasma. Me encontraba en el centro de los Estados Unidos a mitad de caminoentre el Este de mi adolescencia y el Oeste de mi futuro y por eso quizás esto mepasó allí y en ese momento, durante ese rojo atardecer.[I woke up as the sun was reddening; and that was the one distinct time in mywas far awaylife, the strangest moment of all, when I didn't know who I was-Ifrom home, haunted and tired with travel, in a cheap hotel room I'd never seen,hearing the hiss of steam outside, and the creak of the old wood of the hotel, andfootsteps upstairs, and all the sad sounds, and I looked up at the cracked highceiling and really didn't know who I was for about fifteen strange seconds. Iwasn't scared; I was just somebody else, some stranger, and my whole life wasa haunted life, the life of a ghost. I was halfway across America, at the dividingline between the East of my youth and the West of my future, and maybe that'swhy it happened right there and then, that strange red afternoon.l (Kerouac,1991 11).r83

Kerouac, como Zeta Acosta, es hijo de inmigrantes; ambos aprendieron el inglésen las escuelas públicas y ambos se prueban diferentes identidades a lo largode sus vidas ambos optan, finalmente, por la de escritor. No en el sentido deescritor arrellanado -peroen su butaca sino como escritores-viajeros que escriben a partirde la experiencia, de la aventura urbana, y que usan la palabra como un camino ycomo único "documento" de identidad. Zeta Acosta asume su exotismo en la culturaestadounidense pasando por samoano (ya que por su estatura muy grande y por el ascensosocial que le da la profesión en derecho rompe con el estereotipo del mexicanopobre, trabajador de campo); a veces escribe que es un indio (como hijo de un indio deDurango, sin embargo, recordándonos un indianismo latinoamericano temprano, se remitea una tradición pasada y heroica y, alavez, apela a la tradición estadounidense del"heroico y vencido indio al borde de la extinción", el último de los Mohicanos) y diceser el último hijo de Moctezuma. Otras veces se llama búfalo mestizo, chicano y finalmentecucaracha. Este proceso de cambio de identidades va de lo mítico (el búfalo, elúltimo azteca) al punto de mayor abyección (la cucaracha). Esta trayectoria identificatoriasigue la de sus viajes, que no son sólo los viajes mitificados y convertidos en una tradiciónamericanas por Kerouac, sino también viajes inmigratorios (de México a California),de ascenso social (de potencial trabajador agrario migrante a abogado, reportero "gonzo"y escritor) y psicodélicos o "bad trips", cuando toma demasiadas drogas y se pasa devueltas. Dentro de todas estas trayectorias, migraciones, dentro de todo este"maelstreón" (como 1o diría Vasconcelos), 1o único estable es su deseo muy tempranode ser escritor y de definirse a partir de la escritura. Así, en la frontera, deregreso a California de Juárez, habiendo perdido todos sus papeles, le dice al agentede la migra: "No llevo ningún documento que pruebe quién soy... sólo Ie puedodar mi palabra." ("I've got nothing on me to prove who I am... just my word";Autobiography: 195). La palabra entonces sirve como único signo de identidad.Palabra-camino que se actualiza en el cruce de fronteras de toda índole: psicológicas,políticas, sociales, étnicas y geográficas.Riverbank (el pequeño pueblo californiano de menos de 4000 habitantes dondevivió a partir de los seis años), más allá San Francisco (donde estudió y practicó elderecho), y aún más allá los Estados Unidos y México, forman una serie de círculosconcéntricos que Se expanden hacia afuera, pero que meramente reproducen en unaescala más amplia y hasta internacional las divisiones sociales, políticas, de clase yde etnia que prevalecían en el pueblo. Riverbank se halla dividido en tres partes: elbarrio mexicano, Okie Town-elbarrio donde viven los migrantes internos de clasemedia baja que llegaron a California de Oklahoma y otros estados, en lo que fue unagran migración interna durante los años 30- y finalmente el barrio donde viven los..americanos"-losque por su clase y raza encafían el American Dream, los únicosinmigrantes que por ser europeos se les ha permitido asimilarse a la noción de lo"americano". Los demás viven sin servicios públicos, pobres, marginados, discrimit84

nados y transformados en "extranjeros"-losmexicanos, claro está, un poco másque los Okies-, se les niega pleno acceso a los derechos de la ciudadanía, aunqueson ciudadanos.Riverbank, pueblo minúsculo, es una plaza de toros donde el niño inmigrante deEl Paso se tiene que pelear todos los días: o con los mexicanos que se hanamericanizado y que no hablan español, para los que él es un extranjero porque nohabla inglés -pochoslos llama y a veces hasta "gringos"-. o con los Okies y conlos "americanos" que lo ven negro y lo atacan. La única vez cuando los mexicanosse alían entre sí, cuando el barrio se vuelve una querencia, un hogar, es cuando sonatacados por los okies o por los americanos. Generalmente, sin embargo, paraZetaAcosta Riverbank diferencia de los pueblos descritos por otros escritores-achicanos. para quienes el barrio es un lugar seguro al margen del acecho, la violenciay la vigilancia policiaca- no llega nunca a ser un hogar, un punto de origen y dearraigo, ya que el ferrocarril (y toda una política de segregación urbanísticaaftavésde autopistas y vías ferroviarias en California) que separa a los blancos de losmexicanos es la línea que divide a la sociedad en dos polos: el polo positivo conformadopor los americanos blancos y ciudadanos que viven de este lado de las víasferroviarias, y el polo negativo conformado por los negros, los "de color", los nociudadanoso los ciudadanos a quienes se les niega el pleno derecho a la ciudadanía yque viven "del otro lado" ("the wrong side of the tracks"). Así, Acosta de niño le escupea la bandera americana -símbolopor excelencia que se propone "unificar" estos dospolos geográficos y de casta en una idea de nación- y escribe que durante la SegundaGuerra Mundial, cuando practicaban drills de emergencia en su escuela, él sentía queFrank Delano Roosevelt era su enemigo, mucho más que los japoneses, porque habíasido él quien decretó que el padre de Acosta fuera a Okinawa. La guerra 1o traumatizóde por vida y traumalizó a Zera Acosta de una manera secundaria, ya que el padre seempecinó en educarlos aély a su hermano de una manera rnilitar. Zeta Acosta atribuyela ciudadanía que recibió el padre gracias a su servicio militar en Okinawa a una compensaciónpor el trauma sufrido. La ciudadanía entonces, a 1o largo de la obra de ZetaAcosta, es una ciudadanía-trauma, descrita y vivida como pesadilla.Dentro de la lógica que proponen sus novelas, Oscar Zeta Acosta siempre es elextranjero, el otro, el negro, el hombre que colre peligro de ser exterminado, el hombrebúfaloque viaja en un auto-búfalo y finalmente el hombre-cucaracha. Como símbolo deesta abyección. a lo largo de su vida las viviendas en donde vive y trabaja siempre seencuentran en las partes más pobres y sucias de la ciudad (los StidRows de California);los hoteles en los que se queda son siempre hoteluchos de mala muerte o prostíbulosfronterizos. Oscar Zeta Acosta es quien mejor incorpora las palabras de Madan Sarup,para quien el inmigrante, el forastero, el extranjero, ha reemplazado hoy en día en losimaginarios nacionales al que antaño era considerado aberrante (el loco, el excéntrico,el perverso, etc.) (Sarup, 1996: l2).185

Lo radical en Oscar Zeta Acosta es que en vez de dejarse nombrar como objeto ycomo ser abyecto, él toma la palabra y se autodenomina abyecto, no sólo a sí mismosino a todas las otras identidades (excepto la de los "americanos"). Así dentro de suimaginario escatolégico describe a todos de manera absolutamente peyorativa y, apelandoa los peores epítetos racistas y homofóbicos, insulta a todo el mundo por parejo.Aunque se sospecha que él mismo era homosexual escribe que los homosexuales sonmaricas que tienen "culos caprichosos" ("fancy assed fags") y los ojos demasiadopegados. Los chinos son "Chinks", losjaponeses son ojaponeses ricos ojaponesestraicioneros ("rich Japs" o "sneaky Japs"), los judíos son hijos de puta ("bastards"),los negros "niggers", etc. La misma dicotomía entre identidades abyectas e identidades"puras" ya se da en "La raza cósmica", donde Vasconcelos escribe que a los chinos seles debe prohibir la inmigración a Latinoamérica ya que vienen a "degradar la condiciónhumana", pues se "multiplican como ratones" (29) porque aún no han logrado regular"los bajos instintos zoológicos"; los negros y amarillos tienen "su tufo"; los negrosson "ávidos de dicha sensual, ebrios de danzas y desenfrenadas lujurias" (3 I ). En otracita que por cómica no puedo dejar de lado, escribe que: "el mogol con el misterio de suojo oblicuo, ...toda cosa la mira conforme a un ángulo extraño (y) descubre no sé quépliegues y dimensiones nuevas" (3 I ). También habla de la melancolía y enfermiza sensualidadmusulmana y de estrías judaicas. No se salva nadie, excepto los blancossajones que poseen "la mente clara, ...parecida a su tez" e "ideales superiores" (35), ylos latinos que 6(poseen mayor facilidad de simpatía con los extraños" (26) y menorgrado de repulsión que los sajones a gente con sangre extraña (29)6.En Oscar Zeta Acosta esta dicotomía entre lo latino y lo sajón se da en su desmesuradaadulación de lo "americano" y de la mujer sajona por un lado, y en momentos decrisis existencial, cansancio con la hibridez y nostalgia por cierta unidad y "pweza"racial y cultural. En una carla a su primera mujer le escribe que desea ser español puroal describirle la experiencia que tuvo en un club flamenco en San Francisco. Cito estacarta extensamente porque es uno de los documentos más elocuentes sobre la dificultadde ser y no ser, ser de y no ser de un país. Es decir, de la angustia que acompaña elgesto imperial de desarraigar a un pueblo a través de la ley y de la imposición de otranorma cultural, como lo hizo EEUU en el sudoeste a partir de 1848. Escribe Zeta Acosta:En el club por cada no español había nueve españoles. Yo me sentía a gustoporque aunque no soy 1007o latino mi gran deseo es llegar a serlo. Creo que éseha sido uno de mis más grandes problemas. No quiero exagerar, pero creo queme he sentido tan perdido porque no he tenido un país ni un pueblo con los queme he podido identificar. No sé lo que daría por poder vivir en España o por lomenos ver si es que allí al fin hago las paces con la sociedad.6 Mi colega Raúl Bueno habla de un "genocidio literario" en Vasconcelos. Ilan Stavan s, ed., I 99ó:72.186

[At the opera, like at club, there were nine Spanish people for every non-Spanish.I liked it, although I am not really a full-blooded Latin, my one great wish is tobecome one. I think that has been one of my great troubles. Not to overdo it,but I believe that because I have not had a country or a people with which I canidentify myself, I have been so lost. More than anyhting else in the world, I thinkthat I want to live in Spain, or at least try it and see if it is the place where I canfind my peace with society.l (Stavans, 1996: ll4).Claro está que la nostalgia de un origen "puro" no le permite ni siquiera plantearsela probabilidad de que si no fue aceptado en México sería aún menos aceptado enEspaña. No llega jamás a España pero sí se casa con una bailarina de flamenco.En sus autobiografías, al igual que Vasconcelos, quien "sentía asco de su cuerpofeo y deserotizado" (Blanco,ll9'771 1983 :5 I ), Oscar Zeta Acosta se describe iracundo,gordo, barrigón, de pechos colgantes, lampiño, el vomitón más grande del mundo(gracias a una "úlcera sangrante"). y haciendo parodia de su machismo exagerado sedescribe como el macho rnás grande del mundo con el pene más chico del mundo (82).Pene que denomina también despectivamente "la cosa" ("the thing") (46), "mi panamuerta" ("my dead vine") (46), "mi lirio abandonado" ("my abandoned lily") (52), y queno Ie permite consumar el acto sexual más que con prostitutas y en las circunstancias demayor abyección. Las gringas con las que se trata de acostar tratan su semen con ascoy le dicen que no les meta "esa cosa sucia dentro de ellas" ("Don't get that dirty stuffinside of me, ok?") (l5a). Por su parte él las objetiviza y las llama "Miss It". Recuerdaque en una ocasión los padres de una enamorada suya llaman a la policía para "convencer"a Oscar de que deje de ver a su hija. "Savvy?" le dice la policía queriendodecir "sabe" o "comprende" pero el error inadvertidamente demuestra que le estántratando de enseñar "su" lugar. En otra ocasión, cuando se quita la camisa en elcolegio una chica gringa de la que é1 está enamorado se queja de que "apesta"-esdecir que tiene el tufo de los negros al que aludía Vasconcelos. Lo único que le faltaes la mítica mancha mongólica a través de la cual se creía popularmente que se podíaidentificar al negro (en una ocasión, habiéndole pintado sus amigos "muerte al Papa"en su camiseta, cuando Oscar se percata de que todos lo está mirando escandalizado,pregunta qué pasa y le contestan que su mancha mongólica está a la vista; racistaslos llama). Escribe que en Estados Unidos los mestizos como él no tienen un lugar. Elpaís está divido categóricamente en dos polos: el negro y el blanco y é1, por su apariencia,inevitablemente es considerado negro. Escribe: "Toda América se halla dividida entres paftes: la blanca, la negra. la amarilla... ¿.Y yo qué?" ("All America is divided intothree parts, white, black, and yellow... How about me?") (Stavans, 1996: I l4). "Yo soy ElNegro después de todo" ("I am the nigger, after a1l...") concluye después de que sumadre lo ha acusado de preferir a las gringas y no querer relacionarse con las chicasmexicanas del barrio:r87

No soy nada más que un indio dc cuerpo sudoroso y tetas que le cuelgan cuandoven a una de esas chicas de o.jos azules. No lograré jamás desnudarme frentea una mujer; no jugaré jamás al basketbol por miedo a que algún día mearranquen la camiseta frente a rniles de chicas de América de ojos azules y colade caballo.I am nothing but an Indian with a sweaty body and faltering tits that sags at thesight of a young girl's blue eyes. I shall never be able to undress in front of awoman's stare; I shall refuse to play basketball for fear that some day I mighthave my jersey ripped from me in front of those thousands of pigtailed, blueeyedgirls from Americal (95).A pesar de todas las contradicciones y fracasos personales que atraviesan la obray vida de Oscar Zefa Acosta y a pesar de lo difícil que se nos hace leerlo hoy en día, sinembargo hay un momento, una iluminación política a la que llega en Juárez y que meparece importante rescatar. Es cuando decide identificarse como chicano y aliarse alMovimiento Chicano, y ensaya en su imaginación un discurso donde pide laalianzadetodos los búfalos7. La charla la da finalmente cuando habla como candidato al puestode Sheriff de Los Angeles y la repite durante otras manifestaciones de los años 60. Perolo más importante de esta iluminación es que se transforma en acción política cuando enun caso legal logra descalificar por racistas a más de cien jueces, argumentando que loschicanos, quienes hasta ese entonces por no ser considerados ni negros ni blancoshabían carecido de clasificación (por ejemplo en los censos marcaban "blanco" encuanto alaraza cuando eran de clase media y alta, y "negro" cuando eran de clasetrabajadora) (Gutiérrez-Jones, 1995); ahora debían ser considerados como una minoríamestiza aparte y por ende sujeta a formas sistémicas de discriminación (Sandoval,1998). Sin embargo, las contradicciones del mestizaje que atraviesan el pensamientoy la vida de Oscar Zeta Acosta, la epidermali zaciín del racismo (como diría Fanon)son tan fuertes, que lo deja todo para escribir sus dos novelas y después, en unúltimo gesto autodestructivo, desaparece en Mazatlán sin dejar rastro. No se suponunca lo que le pasó.A pesar de que éste y otros juicios ganados por abogados latinos en EstadosUnidos han permitido que en los censos haya cada vez modos más precisos de clasificara la población americana y de que hoy en día muchas feministas latinas esténabogando a favor de un mestizaje político (como alianza de mujeres mestizas dentroy fuera de Estados Unidos), los ejemplos de Vasconcelos y de Zeta Acosta nos re-7 La dramaturga Dolores Prida hace eco de esta iluminación acostiana cuando en su obra "Botánica"hace que el loco grite por las calles de un barrio latino de Nueva York: "No me naten a misbúfalos".188

cuerdan que no existen posiciones exteriores al racisrno. La chicana Cherrie Moragaarticula la preponderancia de nuestro imaginario racista en un brutal poema titulado"Half-breed", denominación que como la peyorativa de "cholo" servía para categorizara los indígenas de EE.UU. nacidos de uniones de blancos e indígenas. Moraga escribe8:Half-breedla diferencia entre tú y yoes que mientras me inclinabasobre los inodoros de personas extrañasla cara que me miraba iracundamenteen esas aguas sedentariasno era la mía, sino la cabeza de mi mamámarrón flotando en un pozode aguas cristalinasfue ella quien me enseñó a limpiaraanodillarmey fregar, no mendigarfue ella quien me enseñó a limpiar,a vivir en este cuerpoentre mi reflejo y yo siernpre ha habidodisyuntiva.IHalf-breedthe difference between you and meis as I bentover strangers' toilet bowls,the face that glared back at mein those sedentary waterswas not my own, but my mother'sbrown hcad floating in a poolof' crystllline whitenes8 ChenieMorlgr."llirll lrlet'tl.('hitir¡rll.cshians: TheGirlsOurMothersWar¡edUsAbout".(Trujillo,1998:95 r.I tt9

she taught me how to clcanto get down on my hands and kneesand scrub, not begshe taught me how to clean,not live in this bodymy reflection has always beenonce removed.]El poema de Moraga es simplemente una prueba más de que hoy en día el racismo esun sistema mundial y todos, "negros", "blancos", "mestizos" y demás funcionamosdentro de este sistema, y así somos todos racistas en mayor o menor medida (es decir,con mayor o menor grado de concientización). No hay posiciones exteriores a estesistema. Apelar a categorías como la de mestizaje, entonces, sea al norte o al sur del RíoBravo, es apelar a categorías raciales y racistas que inevitablemente subvierten el programaliberatorio del mestizaje.BIBIIOGRAIIÍAAlarcón, Norma (1998). "Chicana Feminism: In the Tracks of 'The' Native Woman", enTrujillo, Carla (ed.): 1995.Anzaldúa, Gloria (1987). Borderlands/La frontera: The New Mestiza Writes. SanFranscisco: Aun Lute.Bernal, Martin (1987). BlackAthena: The Afroasiatic Roots of Classical Civílization.Volunte l: The Fabricatiott o.f Arrcient Greece 1785-1985 . New Brunswick: RutgersUniversity Press.Blanco, José Joaquín (tI917l 1983). Se llamqba Vasconcelos: Una evocaciótt crítica.México: Fondo de Cultura Económica.Boyd-Bowman, Peter (1971). Lérico hispanoamericono del siglo XVl. London: TamesisBooks.Gutiérrez-Jones, Carl (1995). Rethinkíng the Borclerlqnds. Berkeley: University ofCalifornia Press.Kerouac. Jack (1991). On the Road.New York: Penguin.Sandoval,Chela (1998). "Mestizaje as Method: Feminists-of-Color Challenge the Canon",en Trujillo, Clara (ed.): 1995.Sarup, Madan (1996). Identity, Culture and the Postmodern World. Athens: TheUniversity of Georgia Press.190

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