CEONOVAS 23

P Á G I N A 2 7Eligio Rodríguez y Peregrina LorenzoEligio Rodríguez, continuador de los Cid, en una imagen de épocaLas primerasgeneracionesTambién es ésta una historia marcadapor las anécdotas, los acontecimientosy las fechas, pues son muchos los añosque permanece abierto el negocio origende la empresa actual, Joyería Cid,posiblemente el establecimientodel ramo más antiguo de Galicia,pues data su primera apertura de 1863.Transcurre entonces la segunda mitaddel siglo XIX y España vive, con la últimaetapa del reinado de Isabel II, unode sus períodos más agitados, que culminacon el destronamiento de la Reinatras la Revolución Gloriosa. Constituyeésta una época de profundos cambiospolíticos, en la que se consolidan transformacionessocioeconómicas que vandando paso a la sociedad y economíacontemporáneas.Mientras tanto, Galicia tiene ese mismoaño una fecha clave: el 17 de mayo, díade la publicación de la obra cumbre deRosalía de Castro: Cantares Gallegos,con la que se inicia el Rexurdimento,movimiento cultural y político que colocalos cimientos de la identidad colectivade Galicia.Es en ese año, y en el marco del contextosociopolítico descrito, cuandodon Valentín se decide a abrir la joyeríaque llevará, y conserva todavíacasi siglo y medio después, el apellidode la familia. Don Valentín monta el negocioinicialmente en la calle Juan deAustria, en un local cercano al que ocupaactualmente. Tendrá que pasar pocomás de medio siglo para que sea su hi-jo, don Manuel Cid, el que amplíe el negociode joyería para colocarse en el patín de cuanto constituye actualmente una casa dedotar a su nuevo establecimiento de todola catedral.primer orden en este artículo. (La Región,10 de abril de 1919)Corre el mes de abril de 1919, y la fama yaprecede a esta familia de excelentes joyeros Cuando esto ocurre, hacía ya una décaday orfebres, dedicados desde los inicios a artículosde platería, pilas benditeras, cuber-el que será continuador de la saga, donque el otro protagonista de esta historia, yterías... es tal el reconocimiento y prestigio Eligio Rodríguez González (1895 -1981)del que gozan los Cid en la ciudad, que la entraba a trabajar en el taller de los Cid. Loscrónica del periódico local de la época, ya comienzos como aprendiz y empleado desembocarán,con el paso de los años, enreflejaba esta ampliación del negocio:una entrega total y absoluta a la profesión,El joyero orensano don Manuel Cid, acabade inaugurar un nuevo estableci-convirtiéndose en jefe de taller. Algunosaños más tarde, don Eligio compra la joyeríay continúa así al frente de la que, enmiento de platería y objetos de arte en laplanta baja de la catedral, después de haberaquel entonces, ya constituye un emblemáticoy tradicional establecimiento, como re-realizado importantes obras que han cambiadopor completo el vetusto aspecto decoge, nuevamente el periódico local:aquellos locales, convirtiéndose en local deelegante aspecto. El señor Cid ha sabido Se ha hecho cargo del establecimiento dejoyería de don Manuel Cid, de la calle JuanEligio Rodríguez –primero por la derecha- posa en la boda de su hijo Antonio. Aparecen a continuación,Peregrina, Mary Stella, Esteban y la pequeña María Stella