Nº 23, Enero 2008 - Centro de Estudios Garrigues

EL CENTRO POR DENTROIN MEMORIAM“En recuerdo de Diego Aguinaga”Diego Aguinaga Churruca fallecióen Biarritz (Francia) el 2 denoviembre del 2007.Diego desarrolló la mayor parte de suvida profesional en Arthur Andersen,donde llegó a ser socio encargado dela auditoria de importantes entidadesfinancieras así como socio responsablede la puesta en marcha de otrosimportantes proyectos profesionalesque contribuyeron de manera significativaa que la firma fuera y sea (hoyDeloitte) lo que es.También, entre otras actividades y responsabilidades,fue profesor del Centrode Estudios Garrigues dondeimpartía clases en el Máster de DerechoEmpresarial.Si su perfil profesional era de gran nively no discutido, su perfil personal, sicabe, le superaba. Efectivamente, sepuede decir sin riesgo de equívocoalguno que su dimensión humana esun ejemplo a imitar.En muchas ocasiones se dice que“uno se da cuenta de lo que tienecuando lo pierde”. Con la ausencia deDiego, este sentimiento, esta percepción,se acentúa más que en otrassituaciones, porque sí éramos conscientesde quién teníamos entre nosotros.En los tiempos actuales se emplea lapalabra amigo con excesiva frecuenciay, en muchas ocasiones, sin motivo.Lo que a veces es un simple conocimiento(incluso cuando alguien esun simple saludable) se eleva a la categoríade sentimiento.Bien se ha dicho que, después de lasangre, la amistad es lo que más unea los humanos.Pues bien, si Diego fue gran amigo detodos sus amigos, y abundantes pruebasy evidencias de ello hemos vistoen estos días, en mi caso puedo decirque fue más que un gran amigo o quemi mejor amigo; fue “El Amigo”.Su marcha nos provoca un muy fríovacío que será imposible de sustituir ymuy, muy difícil de amortiguar. Todoslos que le conocimos y tuvimos elhonor, la suerte y la dicha de contarcon su amistad y confianza solo podemosy debemos dar gracias por ello.Los que no te conocieron pero oyeronhablar de ti (y son muchos, ya losabes) tendrán un referente claro de loque es el bien hacer profesional y laintegridad personal y profesional.GRACIASSi tuviera que destacar alguna nota dela personalidad de Diego diría sin vacilación:la integridad. Diego era unapersona esencialmente íntegra. Y desu manera de ser y de vivir aprendimostodos los que disfrutamos de su contactoy, también, seguro, los que oiganhablar de él.Sus convicciones y su rectitud de pensamientoy de hacer le dieron algunosdisgustos pero el tiempo le recompensó,con creces, dándole la razón.Diego era enemigo de la simulación.Era auténtico. Auténticos son los queparecen ser lo que realmente son y a lavez son lo que aparentan ser.La gran familia que tiene se la merecíaigual que ellos a él. Sin duda, todosinvirtieron mucho en que así fuera ypor ello han obtenido grandes dividendosde felicidad y deben estar agradecidos.Estas cosas suelen ser mutuasy como muchas veces comentábamos“cuanto más entrenas más suertetienes”. En su caso lo que su familiay él se representan mutuamente no escasual o fortuito, es consecuenciamerecida y directa de su manera deactuar y pensar.Por todo, ahí va Diego, amigo irrepetible,todo el afecto del que soy capaz.Rafael Nebreda VillasanteNoviembre, 200716