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Cuatro generaciones, un mismo apellido. Su nieto Franco; Diego, otro de sus hijos, Pedro y su padreal término de un triatlón realizado en Claromecó a fines del verano pasado.¿Qué fue lo que más le gustó de esta experiencia? ¿Ylo que menos disfrutó?Lo que más me gustó fue ver la inmensidad del océanoy apuntarle a un objetivo lejano e invisible, nadaren aguas transparentes y profundas, y ver acercarsela costa marroquí con sus detalles, auras y casas enla montaña.Lo que menos me gustó fue la sensación de estar apunto de no lograrlo, la sed, las náuseas, el agotamiento,el no haber podido mantener el ritmo de Martínhasta el final.¿Tiene planeado cruzar algún otro canal en el futuro?Por ahora no. En un futuro más lejano, me gustaríavolver a realizarlo, esta vez con mi nieto y mis hijos,Martín y Diego. Pero es algo que depende de muchosfactores, es casi un sueño.El Colegio felicita a Pedro y desde ya le desea muchoséxitos en su próxima travesía.+ UN MUNDO DE SENSACIONES¿Podría describir las diferentes impresionesque vivió a lo largo de todo el cruce?Al salir, sentimos el agua muy fría, ya quetiene 18 grados en esa época. Pero el díaera soleado, y el mar estaba calmo. La costamarroquí no se veía, pero notaba quenos alejábamos a buen ritmo de España.Luego, el mar se empezó a mover cada vezmás, y el capitán de la embarcación queseguíamos, nos empezó a apurar, ya quela corriente que entraba desde el Atlánticonos llevaba de costado al Mediterráneo.Allí fue que nuestro amigo Roberto nopudo acelerar y debió abandonar. A partirde entonces, se terminó lo agradable. Condos horas de natación empezamos a nadara un ritmo mayor, y a partir de la tercerahora, había dudas si podríamos lograrel objetivo. Martín aceleró aun más, y nopude seguirlo, por lo que nos separamosquedando a unos 1500 metros atrás de él.Allí empecé a sentir gran cansancio, doloren los hombros, y algo de depresión, yaque la embarcación con la bebida se mehabía ido.16 |
La Brucelosis en laPcia. de Buenos AiresDesde hace varios años, y luego de la frustrada implementaciónde la Resolución 115 del SENASA en 2000y 2001, la lucha por el control y posterior erradicaciónde la Brucelosis Bovina en la Provincia quedóparalizada.Las pocas medidas de control en los traslados y comercializaciónde reproductores que el SENASA implementó,se han discontinuado o se esquivan sinmucho esfuerzo y con la complicidad de todos. Pareceríaque a nadie le interesa modificar este estatus de“tengo poca”; “no me afecta”; “no es problema mío”;asumiéndolo como premisas válidas e indiscutibles.Por supuesto, que en toda esta cuestión, hay muchatela para cortar.En principio debemos tipificar correctamente el problema.El “tengo poca” sería tolerable en un rodeo decría, pero es absolutamente inaceptable en el tambo.El “no me afecta” en las vacas díganselo a losempleados del campo que atienden los partos, a sushijos que consumen leche recién ordeñada o al veterinarioque le hace la cesárea o el tacto.Y así podemos seguir mencionando los riesgos deesta zoonosis, su incidencia en la salud del sector yde la población en general y en qué grado afecta a laproducción pecuaria. Las aristas son varias y de distintotenor. El problema es cómo las valorizamos paraencarar las soluciones. Y por dónde, cómo y cuándoiniciamos el trabajo.Demás está decir que en tambos y cabañas la exigenciadebería ser la de implementar el sangrado totaly la eliminación de los reaccionantes positivos, tendientesal control y erradicación, acción que ha sidoel punto más crítico para la efectiva aplicación de legislacionespreexistentes.LA POLÍTICA A SEGUIRCreemos imprescindible, por las épocas que corren,la implementación de un subsidio estatal para facilitarla eliminación de reaccionantes. Este deberá tenerun valor variable de acuerdo al tipo de animal, sealechera, vaca de cría o pedigri; y con un mecanismode implementación auditable, que nos aleje de lastrampas y atajos que tan bien sabemos encontrar enestos casos.Son las principales ideas en cuanto a una política aaplicar en el tema, a la que debemos agregar las normastécnicas, todo absolutamente discutible para suimplementación. Lo que no es discutible es que comoProvincia responsable y poseedora del mayor porcentajedel rodeo nacional no podemos permanecer mástiempo distraídos. El problema existe y otras provinciasya están trabajando. Asumamos la responsabilidadque nos cabe. No perdamos más el tiempo.Dr. Mario Humberto CarpiopiniónEL SANGRADONos parece buena la práctica del sangrado de todaslas ventas de machos y hembras con capacidad dereproductores, como requisito previo para cualquiertipo de negocio, sea este particular, en feria o a travésde consignatarios.Asimismo, se debería agregar la obligatoriedad delre-sangrado de las vaquillonas de reposición o entore,así como el sangrado de las vacas rechazadas anualmente,lo que nos daría el diagnóstico de la presenciade la enfermedad en el campo y nos permitiría exigirla iniciación de las tareas de control de la enfermedaden ese rodeo de riesgo. Por supuesto, que nosestamos refiriendo a un rodeo de cría.SU OPINIÓN NOS INTERESASi quiere participar de esta sección yaportar su opinión sobre algún tema referidoa la labor de los veterinarios, escríbanosa revista@cvpba.org.| 17
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La Brucelosis en <strong>la</strong>Pcia. <strong>de</strong> <strong>Buenos</strong> <strong>Aires</strong>Des<strong>de</strong> hace varios años, y luego <strong>de</strong> <strong>la</strong> frustrada implementación<strong>de</strong> <strong>la</strong> Resolución 115 <strong>de</strong>l SENASA en 2000y 2001, <strong>la</strong> lucha por el control y posterior erradicación<strong>de</strong> <strong>la</strong> Brucelosis Bovina en <strong>la</strong> <strong>Provincia</strong> quedóparalizada.Las pocas medidas <strong>de</strong> control en los tras<strong>la</strong>dos y comercialización<strong>de</strong> reproductores que el SENASA implementó,se han discontinuado o se esquivan sinmucho esfuerzo y con <strong>la</strong> complicidad <strong>de</strong> todos. Pareceríaque a nadie le interesa modificar este estatus <strong>de</strong>“tengo poca”; “no me afecta”; “no es problema mío”;asumiéndolo como premisas válidas e indiscutibles.Por supuesto, que en toda esta cuestión, hay muchate<strong>la</strong> para cortar.En principio <strong>de</strong>bemos tipificar correctamente el problema.El “tengo poca” sería tolerable en un ro<strong>de</strong>o <strong>de</strong>cría, pero es absolutamente inaceptable en el tambo.El “no me afecta” en <strong>la</strong>s vacas díganselo a losempleados <strong>de</strong>l campo que atien<strong>de</strong>n los partos, a sushijos que consumen leche recién or<strong>de</strong>ñada o al veterinarioque le hace <strong>la</strong> cesárea o el tacto.Y así po<strong>de</strong>mos seguir mencionando los riesgos <strong>de</strong>esta zoonosis, su inci<strong>de</strong>ncia en <strong>la</strong> salud <strong>de</strong>l sector y<strong>de</strong> <strong>la</strong> pob<strong>la</strong>ción en general y en qué grado afecta a <strong>la</strong>producción pecuaria. Las aristas son varias y <strong>de</strong> distintotenor. El problema es cómo <strong>la</strong>s valorizamos paraencarar <strong>la</strong>s soluciones. Y por dón<strong>de</strong>, cómo y cuándoiniciamos el trabajo.Demás está <strong>de</strong>cir que en tambos y cabañas <strong>la</strong> exigencia<strong>de</strong>bería ser <strong>la</strong> <strong>de</strong> implementar el sangrado totaly <strong>la</strong> eliminación <strong>de</strong> los reaccionantes positivos, tendientesal control y erradicación, acción que ha sidoel punto más crítico para <strong>la</strong> efectiva aplicación <strong>de</strong> legis<strong>la</strong>cionespreexistentes.LA POLÍTICA A SEGUIRCreemos imprescindible, por <strong>la</strong>s épocas que corren,<strong>la</strong> implementación <strong>de</strong> un subsidio estatal para facilitar<strong>la</strong> eliminación <strong>de</strong> reaccionantes. Este <strong>de</strong>berá tenerun valor variable <strong>de</strong> acuerdo al tipo <strong>de</strong> animal, sealechera, vaca <strong>de</strong> cría o pedigri; y con un mecanismo<strong>de</strong> implementación auditable, que nos aleje <strong>de</strong> <strong>la</strong>strampas y atajos que tan bien sabemos encontrar enestos casos.Son <strong>la</strong>s principales i<strong>de</strong>as en cuanto a una política aaplicar en el tema, a <strong>la</strong> que <strong>de</strong>bemos agregar <strong>la</strong>s normastécnicas, todo absolutamente discutible para suimplementación. Lo que no es discutible es que como<strong>Provincia</strong> responsable y poseedora <strong>de</strong>l mayor porcentaje<strong>de</strong>l ro<strong>de</strong>o nacional no po<strong>de</strong>mos permanecer mástiempo distraídos. El problema existe y otras provinciasya están trabajando. Asumamos <strong>la</strong> responsabilidadque nos cabe. No perdamos más el tiempo.Dr. Mario Humberto CarpiopiniónEL SANGRADONos parece buena <strong>la</strong> práctica <strong>de</strong>l sangrado <strong>de</strong> todas<strong>la</strong>s ventas <strong>de</strong> machos y hembras con capacidad <strong>de</strong>reproductores, como requisito previo para cualquiertipo <strong>de</strong> negocio, sea este particu<strong>la</strong>r, en feria o a través<strong>de</strong> consignatarios.Asimismo, se <strong>de</strong>bería agregar <strong>la</strong> obligatoriedad <strong>de</strong>lre-sangrado <strong>de</strong> <strong>la</strong>s vaquillonas <strong>de</strong> reposición o entore,así como el sangrado <strong>de</strong> <strong>la</strong>s vacas rechazadas anualmente,lo que nos daría el diagnóstico <strong>de</strong> <strong>la</strong> presencia<strong>de</strong> <strong>la</strong> enfermedad en el campo y nos permitiría exigir<strong>la</strong> iniciación <strong>de</strong> <strong>la</strong>s tareas <strong>de</strong> control <strong>de</strong> <strong>la</strong> enfermeda<strong>de</strong>n ese ro<strong>de</strong>o <strong>de</strong> riesgo. Por supuesto, que nosestamos refiriendo a un ro<strong>de</strong>o <strong>de</strong> cría.SU OPINIÓN NOS INTERESASi quiere participar <strong>de</strong> esta sección yaportar su opinión sobre algún tema referidoa <strong>la</strong> <strong>la</strong>bor <strong>de</strong> los veterinarios, escríbanosa revista@cvpba.org.| 17