Pulse aquà para ver el número completo en formato PDF
Pulse aquà para ver el número completo en formato PDF
Pulse aquà para ver el número completo en formato PDF
- No tags were found...
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
La influ<strong>en</strong>cia de las radios y t<strong>el</strong>evisiones comunitarias <strong>en</strong> la construcción de la ciudadaníatérmino es como han d<strong>en</strong>ominado algunos autores (Heg<strong>el</strong>, 1975) al sustrato humanoque ti<strong>en</strong>e como objeto organizar <strong>el</strong> Estado occid<strong>en</strong>tal. Las transformaciones políticasy sociales sufridas <strong>en</strong> los últimos tiempos han supuesto una reestructuración <strong>en</strong> laconstante comunicación mant<strong>en</strong>ida <strong>en</strong>tre las instancias públicas y dicha ciudadanía.En esta conexión han cobrado una especial importancia los medios de comunicacióny de información, pues este flujo de conocimi<strong>en</strong>tos es pl<strong>en</strong>am<strong>en</strong>te <strong>en</strong>dóg<strong>en</strong>o. Seproduce una retroalim<strong>en</strong>tación comunicativa, tal y como lo <strong>en</strong>ti<strong>en</strong>de <strong>el</strong> sistema político1 de David Easton (1969: 221), <strong>en</strong>tre los demandantes y sus repres<strong>en</strong>tantes políticos.Desde este proceso, <strong>el</strong> resultado que comi<strong>en</strong>za por la base y asci<strong>en</strong>de hastala cima vu<strong>el</strong>ve a confluir hasta dicho punto inicial, dando como resultado una respuestad<strong>el</strong> Estado a la consulta o petición planteada. Así, la sociedad civil <strong>en</strong>t<strong>en</strong>dida<strong>en</strong> esta perspectiva comunicativa plantea una serie de retos <strong>en</strong> <strong>el</strong> s<strong>en</strong>tido de <strong>en</strong>contrarun equilibrio <strong>en</strong>tre la gobernación de sus miembros y la garantía de ofrecerlesla participación <strong>en</strong> la res pública a la mayoría de éstos. La necesidad de losmedios de comunicación los convierte <strong>en</strong> receptáculos ideales de este m<strong>en</strong>saje quese despr<strong>en</strong>de de la sociedad civil hasta sus repres<strong>en</strong>tantes políticos.La sociedad civil también presupone una división que utiliza como criterio difer<strong>en</strong>ciadorla propiedad de un objeto que sólo admite dos únicos propietarios. Y <strong>en</strong>este s<strong>en</strong>tido, la misma ciudadanía que no participa <strong>en</strong> estos sectores queda excluida,sin reconocimi<strong>en</strong>to. Además, es imposible establecer una se<strong>para</strong>ción exacta de losmiembros de una sociedad <strong>en</strong> función de su pap<strong>el</strong> como propietarios, sobre todo <strong>en</strong>las actuales democracias occid<strong>en</strong>tales (Rodríguez Prieto, 2005: 20-21). Por tanto,<strong>para</strong> hablar de la ciudadanía y d<strong>el</strong> pap<strong>el</strong> que juegan <strong>en</strong> este proceso de diálogo con<strong>el</strong> Estado, sería más apropiado emplear otro concepto. Para <strong>el</strong>lo, hablaremos exactam<strong>en</strong>tede comunidad <strong>para</strong> señalar a este actor d<strong>el</strong> proceso de comunicación querecibe un estímulo d<strong>el</strong> órgano que la gestiona, <strong>el</strong> Estado, según las peticiones queformula.La comunidad <strong>en</strong> este f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o de comunicación ha com<strong>en</strong>zado a experim<strong>en</strong>tar<strong>en</strong> los últimos años las defici<strong>en</strong>cias de las democracias nacionales repres<strong>en</strong>tativas(Soriano, 2002), y <strong>en</strong> contraposición más que <strong>en</strong> complem<strong>en</strong>tación, surg<strong>en</strong> lasiniciativas de democracia participativa o directa. Puesto que <strong>en</strong> <strong>el</strong> ámbito local ya nose hace tan necesario acudir a los repres<strong>en</strong>tantes, sobre todo cuando los mismos individuosestán com<strong>en</strong>zando a diseñar las políticas locales. No falte citar ejemploscomo <strong>el</strong> Comité d<strong>el</strong> Gran Londres o las asambleas ciudadanas que se constituy<strong>en</strong><strong>en</strong> los distritos de los municipios españoles. Por lo tanto, esta comunicación jerárquicapropia d<strong>el</strong> sistema político ti<strong>en</strong>de a vol<strong>ver</strong>se horizontal <strong>en</strong> <strong>el</strong> ámbito local. Eneste proyecto de autogobierno, empleamos <strong>el</strong> término de demoarquía (RodríguezPrieto, 2005: 73) <strong>para</strong> definir estas iniciativas llevadas a cabo desde la comunidad<strong>para</strong> establecer su gestión autónoma <strong>en</strong> su <strong>en</strong>torno local y con un carácter igualitario<strong>en</strong>tre sus miembros con respecto a <strong>el</strong>iminar su dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia de una comunicaciónjerárquica con <strong>el</strong> Estado <strong>en</strong> dichos asuntos de interés cercano.1 El concepto de sistema político ha supuesto un instrum<strong>en</strong>to recurr<strong>en</strong>te de la politología contemporánea<strong>para</strong> explicar los f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>os dinámicos de comunicación <strong>en</strong> las democracias contemporáneas. Este esquemade comunicación manifiesta un proceso jerárquico y circular, por <strong>el</strong> que los ciudadanos planteanuna demanda a sus gobernantes <strong>para</strong> posteriorm<strong>en</strong>te recibir una respuesta, fruto d<strong>el</strong> proceso de d<strong>el</strong>iberaciónpolítica. Esto responde claram<strong>en</strong>te al funcionami<strong>en</strong>to de la democracia repres<strong>en</strong>tativa.210