10.07.2015 Views

unlibrorojo

unlibrorojo

unlibrorojo

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

del imperialismo”, por el otro. Ahora bien, cuando decimos y aceptamos que el pensamiento deLenin, en su conjunto, es un legado revolucionario decisivo para la humanidad, cuando afirmamosque no existen dos o más Lenin peleando entre sí, no depnemos nuestra necesidad de poner énfasisen los aspectos del pensamiento leninista que más nos interesan en esta etapa del procesorevolucionario latinoamericano. Por eso resaltamos el marxismo-leninismo-maotsetunguismohochiminismo-guevarismo-fidelismo,que es el leninismo contemporáneo para la toma del poder,en las condiciones en que la vía de la revolución es la de la lucha armada frente al conjunto defuerza oligárquico-imperialista y en ausencia de situaciones excepcionales (derrota del fascismo enla Segunda Guerra Mundial, presencia del Ejército Rojo, etc.) que hacen tan específicas las tomasdel poder en los países de Europa del Este. No se trata, pues, del izamiento de una bandera gratuitapara ser opuesta, por ejemplo al “marxismo-leninismo-stalinismo-jruchovismo-gonlulkismokadarismo-titismo-novotnismo-brezhnevismo-kosiguinismo-etc.Aunque también hay que decir queel leninismo de la construcción socialista sólo pudo nacer, en propiedad, en los escasos siete añosque Lenin vivió después de la toma del poder, la mayor parte de ellos en condiciones de trabajopráctico que reducían muchísimo la posibilidad de teorizar, en condiciones de salud que llegaron aser de postración después del atentado contra su vida, etc. Con todo, en el poema no se excluye anadie del campo de la revolución. Y no por bondad franciscana o espíritu conciliatorio. Tengo unfinísimo sentido del ridículo y además hay uno o dos poetas en América Latina que me hanenseñado lo feas que se ven las voces poéticas expulsando gente del campo de los elegidos delSeñor, precisamente del cielo al que fueron admitidas por un pelo y para cuya construcción noaportaron más que mohines y suspiros. Como fuerza consolidada, el mundo socialista, sinexclusiones basadas en las discrepancias mutuas, es la fuerza económica y militar fundamental quese puede oponer al imperialismo agresor. Esto es, asimismo, elemental. Sólo que en mi país, paraacercar a la revolución a las capas radicales urbanas (clase obrera incluida) y a la masa ruralmayoritaria, para enfrentarnos a la guerra contrarrevolucionaria que silenciosamente en lofundamental, sin grandes y perennes bramidos de cañones y paseos de tanques, (auque sí, cada díamás frecuentemente, ráfagas de metralletas y fusiles G-3 y zumbido de helicópteros sobre ciudadesy aldeas) llevan a cabo los explotadores contra nuestro pueblo, nos interesa muchísimo más el Leninde la toma de Petrogrado y el Lenin que nos llega a través del Che Guevara y el general Giap, que elLenin (genial, sin duda) de la NEP o el Lenin que nos llega a través del informe sobre los éxitos dela última cosecha de trigo en Ucrania.Es un problema de prioridades, históricamente momentáneas. En ningún momento hehablado, por otra parte, de “revisar” a Lenin. En la esfera del pensamiento revolucionario, la formatotalizante de existencia del leninismo hace muchas veces que la “revisión de izquierda” (entiéndasebien: “el despojamiento de la almendra revolucionaria al leninismo desde posiciones supuestamentemás revolucionarias”) termine en la extrema derecha, en la peripecia de la serpiente que se muerdela cola.Lo que si es conveniente es leer a Lenin, actividad tan poco común en extensos sectores derevolucionarios contemporáneos. O tan insuficientemente cumplida, en los mejores casos. Ahorabien, leer a Lenin no es comprar a Lenin, adquirirlo en propiedad exclusiva, hacerlo tambor secretode nuestra iglesia, cuyos sonidos sólo a nosotros nos cabe descifrar, ponerlo a prueba de todacomprensión o interpretación ajena. Leí a Lenin, luego Lenin es mío y nadie más tiene derecho a él,acceso a él sino a través mío, a través de su nuevo y definitivo Mahoma. Por el contrario, Lenin estáabierto a la vida más que nunca. Lo que no es una simple frase al viento, sino una experienciapracticable por todos. ¿Qué sólo la lucha armada es leninista? No caigamos en la trampa de lasgeneralizaciones abstractas. En ese terreno casi todo es falso: se sabe que incluso la frase “todas lasgeneralizaciones son falsas”, expresa una falsedad. En este poema se habla de la lucha armada parala toma del poder político en América Latina. Hay una realidad concreta que señala una estrategiadefinida en cuanto a la vía de la revolución en el continente. Las concepciones de esa estrategiacoinciden con las concepciones de Lenin acerca de la solución violenta al problema del poder, yconstituyen la continuidad real en nuestra historia de la totalidad de experiencias concretas derealización de la revolución socialista que se han dado hasta hoy. Cuando usted tenga el ejemplo dela primera revolución socialista hecha por la “vía pacífica”, le ruego que me llame por teléfono. Si

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!