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Lynn Margulis - La Opinión

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Saberes 6<strong>La</strong> Opinión A CoruñaSábado, 29 de marzo de 2008entrevista<strong>Lynn</strong> <strong>Margulis</strong> / Bióloga“Hay un tribalismocientífico que dificultael progreso del saber”“Lo único quese valora esla novedad,lo que no es nuevono es ciencia”ANDRÉS MONTES<strong>La</strong> trayectoria científica de <strong>Lynn</strong> <strong>Margulis</strong>es la de una heterodoxa. Su visiónsobre el modo en que se desarrolla la evoluciónconfronta con el neodarwinismo, lacorriente más fuerte en la actualización dela teoría darwiniana. Pero además es unagran crítica del sistema de ciencia actual.–¿Usted se siente como una resistentede la ciencia, después de llevar másde cuarenta años defendiendo una teoríaque encuentra cierta oposición enla comunidad científica?–No. Lo mejor que puede tener una sonlos críticos que saben, los que utilizan argumentossolventes. <strong>La</strong> crítica basada en elconocimiento relevante resulta muy buenapara un científico porque la ciencia es autocorrección.Sin embargo, al principio algunosde los críticos con lo que yo sostengoconsiguieron impedir mis publicaciones,algo que ya no es posible. Pero en lo quemás me ha afectado es en el bloqueo aldinero para investigación. Hace quinceaños frustraron mi acceso a fondos de laNasa, por ejemplo, y eso me causa problemas.Pero también puedo pensar, con elpaso del tiempo, que quizá fuera una buenacosa porque puedo dedicarme en exclusivaa lo que de verdad me interesa.–¿El hecho de ser mujer ha supuestoalguna dificultad añadida en ese jugar ala contra de la ciencia aceptada?–No, nunca. Tengo tres hermanas y mecrié siempre en un entorno muy femenino,en el que siempre tuve que trabajar. En laprofesión predominan los hombres sobrelas mujeres, pero eso nunca fue un problemapara mí, aunque reconozco que existen.Durante un periodo que estuve en el Caltech(Instituto Tecnológico de California,uno de los centros punteros en el mundo eninvestigación) escuché a las mujeres reunidasuna noche historias horribles sobre susituación, pero no puedo decir que a mí mehaya sucedido. Considero que el problemano es entre sexos, sino entre personas queno saben nada más allá de su campo. Es loque James Lovelock llama el apartheid académico.–Entonces el conocimiento está cadavez más fragmentado, más divido enparcelas inconexas…–<strong>La</strong> única forma de superar esa sensaciónes conocer la historia de la ciencia.Aunque los científicos lo nieguen, tienenuna filosofía. Ahora lo único que se valoraes la novedad. Lo que no es nuevo no esciencia. Eso es un tontería enorme y consideroque, en general, la ciencia de ahora espeor que la de antes. <strong>La</strong> proximidad entrecampos científicos como la biología moleculary la bioquímica crea, por ejemplo, unefecto parecido al del Oriente Medio: selevantan enormes fronteras entre doscampos que casi estudian la misma cosa.Existe un cierto tribalismo científico quehace que unos no comprendan lo que dicenlos otros y dificulta el progreso del saber.Los científicos están encerrados en sudominio y no perciben lo que ocurre fuerade él.“No estoy de acuerdocon Lovelock; pese anuestra presunción,no creo que podamossalvar el planeta”–Usted cuestiona el lenguaje al queestamos acostumbrados cuando sehabla de evolución: competición,lucha, dominio del más fuerte…–Lo que sostengo es que ese tipo decosas no puede medirse. <strong>La</strong> naturaleza noes un partido de baloncesto en el que lacompetencia se evalúa por los puntos queobtiene cada equipo. Por eso, cuandohablamos de evolución, se recurre a unaterminología más propia de la sociología,que se ha impuesto en la biología. Rechazola idea de que la acumulación de las mutacionesgenéticas, que más del 99% sonmalignas para el individuo, provoquen elcambio de especies. Soy darwinista, perono neodarwinista. Considero que la genéticade poblaciones es trivial, hay muchoscientíficos concentrados en algo que esmenos importante que la simbiogénesisA. M. F.como fuente de innovación biológica.–¿Cómo definiría usted la simbiogénesis?–Cambios evolutivos a través del tiempoen comportamiento, morfología o metabolismoque proceden de la simbiosis. ¿Qué esla simbiosis? Organismos de distintas especiesque viven asociados físicamente, esuna relación ecológica. Ocurre que la idea(Pasa a la página siguiente)El peso de la cienciaSuperados los setenta, <strong>Lynn</strong> <strong>Margulis</strong>podría ser una abuela satisfecha con losnumerosos nietos que le han dado sus cuatrohijos. Por el contrario, sigue en primeralínea de la ciencia y volcada en su trabajo conuna vitalidad que desborda. Hace poco, enuna universidad española, ante un aula deBiológicas abarrotada de alumnos y profesores,expuso su teoría de la simbiogénesis enun castellano fluido, resultado de su trabajoen la baja California y de la colaboración quedesde mediados de los años setenta del siglopasado mantiene con investigadores catalanes.Profesora del departamento de Geocienciasde la Universidad de Massachussetts,es miembro de las academias de Cienciasamericana y rusa. En 2000 recibió lamedalla nacional de la Ciencia de mano delpresidente Clinton. Si se la hubiera entregadoBush no habría ido a recogerla, segúnmanifestó entre los aplausos del auditorio ensu conferencia de la Facultad de Biológicas.Escribe sus libros a medias con su hijoDorion Sagan, filósofo de la ciencia, fruto desu matrimonio con ese gran divulgador quefue Carl Sagan. El hijo aporta la claridadexpositiva y la madre el peso de la ciencia.Pero eso no es simbiosis sino complementariedad;porque, como ella se encarga derecordar de continuo, la simbiosis requierecomo condición dos individuos de distintaespecie.

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