07.07.2015 Views

Serapis, Isis y los dioses acompañantes en Emporion: una nueva ...

Serapis, Isis y los dioses acompañantes en Emporion: una nueva ...

Serapis, Isis y los dioses acompañantes en Emporion: una nueva ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

El perirrhanterion y el agua lustralEl primero de <strong>los</strong> hallazgos <strong>en</strong> el interior del temploM, después de la excavación de la gran cisternadelantera donde apareció el busto marmóreo de lagran estatua masculina, correspondió a <strong>una</strong> piezalabrada <strong>en</strong> piedra caliza local, trabajada como unpequeño pedestal estriado coronado por un ord<strong>en</strong>jónico, y que apareció apar<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te in situ, todavía<strong>en</strong> posición vertical <strong>en</strong> el ángulo izquierdo del pronaos.Como hemos explicado anteriorm<strong>en</strong>te la piezafue publicada por Puig i Cadafalch (1912, 8 y fig.5) como un altar, aportando como ilustración <strong>una</strong>vista lateral de la misma. Pero <strong>una</strong> vez localizadade nuevo la pieza vemos que esta muestra sobresu plataforma plana superior <strong>una</strong> profunda cavidadc<strong>en</strong>tral de perfil cónico y 20 cm de profundidad querevela su carácter como un perirrhanterion, <strong>una</strong> pilade abluciones tratada todavía de <strong>una</strong> forma antigua,con la cavidad tallada <strong>en</strong> la misma pieza. En la partesuperior, la pieza muestra un rebaje <strong>en</strong> ángulo rectocubierto por <strong>una</strong> colada de plomo lo que prueba elañadido de un elem<strong>en</strong>to decorativo que no podemosdefinir con precisión (¿un pequeño baldaquino, <strong>una</strong>pequeña imag<strong>en</strong> adosada?).El paralelo con <strong>los</strong> sagrados perirrhanteria marmóreosdel ágora at<strong>en</strong>i<strong>en</strong>se resulta muy apropiado,tanto <strong>en</strong> el tratami<strong>en</strong>to de la cavidad cónica superiorcomo <strong>en</strong> la interpretación funcional de la pieza. En elágora at<strong>en</strong>i<strong>en</strong>se, <strong>los</strong> perirrantheria aparec<strong>en</strong> labrados<strong>en</strong> forma de pequeños pilares de planta cuadrada conreceptácu<strong>los</strong> superiores de forma cónica análogos a<strong>los</strong> que pres<strong>en</strong>ta la pieza emporitana, estaban destinadosa cont<strong>en</strong>er el agua sagrada de las lustracionesy para ello se situaban <strong>en</strong> las <strong>en</strong>tradas de la granplaza pública y señalando <strong>los</strong> límites de <strong>los</strong> recintossagrados (LANG 1968, pl. 45).La lustración, la purificación mediante el lavadode manos y pies con el agua sagrada que permite aldevoto <strong>en</strong>trar <strong>en</strong> contacto con el lugar sagrado es unelem<strong>en</strong>to imprescindible <strong>en</strong> las prácticas cultuales deun bu<strong>en</strong> número de religiones y prácticas sacras. En<strong>los</strong> ritos curativos de raigambre helénica practicados<strong>en</strong> todos <strong>los</strong> Asklepieia el agua adquiría además unpapel “medicinal” tanto por su consumo como portécnicas que hoy sabemos de hidroterapia <strong>en</strong> bañerasy piscinas. Hasta ahora nosotros habíamos valorado<strong>en</strong> este s<strong>en</strong>tido las importantes instalaciones dedicadasal agua que el santuario emporitano ti<strong>en</strong>e <strong>en</strong> suúltima fase. Se trata de la pres<strong>en</strong>cia del pozo quequizás estuvo <strong>en</strong> <strong>los</strong> orig<strong>en</strong>es mismos del santuarioy que más tarde, al construirse sobre el mismo eltemplo P, fue reconvertido <strong>en</strong> <strong>una</strong> pequeña cisterna;la cisterna de dos departam<strong>en</strong>tos vecina al santuario,la <strong>en</strong>orme cisterna delantera de cuatro departam<strong>en</strong>tossituada ante <strong>los</strong> temp<strong>los</strong> M y P directam<strong>en</strong>te comunicadamediante un pequeño canal con <strong>una</strong> fu<strong>en</strong>teque recibía a <strong>los</strong> viajeros junto a la puerta de laNeápolis y <strong>en</strong> último lugar con un curioso y rústicoreceptáculo compuesto por ánforas púnicas Mañá Dclavadas juntas verticalm<strong>en</strong>te, que hemos int<strong>en</strong>tadointerpretar como un baño ritual adjunto a la cisternade dos departam<strong>en</strong>tos (RUIZ DE ARBULO 1995).Pero también hemos de señalar que <strong>los</strong> ritos deablución eran de nuevo característicos de <strong>los</strong> santuariosegipcios y de las atribuciones de <strong>Serapis</strong> comodivinidad terapéutica y curativa. En este caso, lapres<strong>en</strong>cia del agua se relacionaba directam<strong>en</strong>te con<strong>los</strong> “nilómetros”, pequeñas instalaciones simbólicasque reflejaban <strong>los</strong> medidores del nivel de las aguas deNilo que <strong>en</strong> sus oscilaciones señalaban <strong>en</strong> Egipto elcomi<strong>en</strong>zo y final de las inundaciones que marcabanel año agrario. Inspirados <strong>en</strong> estos rituales mil<strong>en</strong>arios,<strong>los</strong> santuarios alejandrinos se dotaban siemprede criptas, depósitos subterráneos, fu<strong>en</strong>tes decoradascon estatuas fluviales y <strong>en</strong> la medida de lo posibleFig. 61. Perirrantherion labrado <strong>en</strong> piedra ar<strong>en</strong>isca localcomo un fuste jónico de volutas diagonales aparecido in situ<strong>en</strong> el pronaos del templo M.Fig. 62. Museu d’Arqueologia de Catalunya. Perirrantheriondel templo M. Vista superior de la cazoleta c<strong>en</strong>tral para lasabluciones (prof. 20 cm).124

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!