Serapis, Isis y los dioses acompañantes en Emporion: una nueva ...

El dios Serapis nunca recibió culto de forma aislada.Su propia “invención” como nueva divinidadtutelar de la dinastía helénica de los Lágidas dominadorade Egipto a partir del 323 aC precisaba deuna asociación simbólica de importancia dentro dela compleja mitología egipcia, ritualizada en extremo.Ese fue el papel otorgado a la diosa Isis cuyo mitomilenario explicaba las andanzas de la reina viudadesesperada ayudada por el fiel Anubis, el dios concabeza de chacal, por recobrar los pedazos de sumarido Osiris asesinado y desmembrado por Seth alo largo del río Nilo (la inventio Osiridis), su mágicorenacimiento en forma de milano y el engendramientodel hijo Horus que más tarde vengaría a su padre elcual regresaría al mundo de los muertos para reinarsobre ellos. En el nuevo marco cultural y mitológicoimpulsado por los Lágidas, gracias a los buenos oficiosdel sacerdote Timoteo hecho venir desde Eleusis y elegipcio Manetón del templo de Isis en Sebennytos losrituales mistéricos egipcios y helénicos se fusionaríanen una nueva pareja de dioses monarcas dotados depoderes taumatúrgicos. Junto a la reina Isis, Serapissustituiría a Osiris como el monarca benefactor delmás allá mientras que su hijo Horus pasó a convertirseen Harpócrates, transcripción helénica delegipcio Har-pe-chrad, el niño Horus (cf. LAFAYE 1884;STAMBAUGH 1973; DUNAND 1973; MERCKELBACH 1995;breves síntesis en MAR y RUIZ DE ARBULO 2001 y RUIZDE ARBULO 2006).Sunnaoi Theoi, los diosesacompañantesEl desarrollo de los rituales de Serapis e Isis contóasí con la presencia de nuevos númenes benefactoresque fueron denominados en los epígrafes como losSunnaoi Theoi, los dioses acompañantes (TRAN TAMTINH 1984). Éstos fueron en primer lugar Anubis,el acompañante de la diosa Isis en la búsquedade los restos de Osiris y el niño Horus convertidocomo decimos en el griego Harpócrates. Junto alos ya citados Anubis y Harpócrates encontramostambién a las serpientes sagradas de Alejandría, elAgathos Daimon y la Agathé Tyché, genios tutelaresde las viviendas ciudadanas incorporados a los ritualesmistéricos. Pero además, las ofrendas votivasconcretas podían incluir también imágenes de noimporta qué divinidades éuteménioi “que compartenel mismo témenos”, respecto a la divinidad veneradaen el santuario. Los sincretismos permitían que unainvocación solicitando por ejemplo salud o protecciónfuera lógicamente más eficaz si se dirigía a todaslas divinidades susceptibles de otorgarla, ya fueranSerapis e Isis, Herakles, Asklepios e Hygea, Demetery Koré, Zeus con distintos epítetos, Plutón, Hermes,Dionisos, Afrodita, Artemis/Hekate, los Dioscuros, Men,la Magna Mater, Atenea o Pan. Todos ellos aparecenmencionados en altares y bases de estatuas en elSerapeo C de Delos sin ningún tipo de limitación(ROUSSEL 1916, 279; BRUNEAU 1970, 457-479).Como veremos a continuación, es posible interpretardesde esta óptica el resto de fragmentos escultóricosaparecidos en el templo M emporitano.Un pequeño Apolo y una cornucopia:Apolloniskos / Harpócrates (?)En las dedicatorias de los santuarios egipcios deDelos fue sobre todo Anubis quien acompañó a Serapise Isis como tercer miembro de la trilogía sagrada(ROUSSEL 1916, 276). Las dedicatorias del SerapieionA se refieren a las tres divinidades y los inventariosdelios citan que el naos del Serapieion oficial de laisla (el Serapieion C) contenía junto a la imagende culto del dios imágenes broncíneas de Isis y deAnubis. Otros dos Anubis de plata constaban allítambién junto a una amplia serie de ofrendas votivas(ID 1417, col. II, 1, 141-164, PRETRE et al. 2002, 221).Fragmentos de una estatuilla hallada en el SerapeoA muestran su cabeza de chacal en mármol doradocon pan de oro a la egipcia (MARCADÉ 1969, 433) ysabemos por un dintel epigráfico que Anubis tenía supropio templo en el Serapieion C, que fue renovadoy dedicado por los atenienses en el 130/129 aC (ID2043; cf. BRUNEAU 1970).El niño Harpócrates aparece en Delos en unmomento más tardío, ya en el siglo II aC avanzado,y lo hace con muy escasas dedicatorias (solo unaen cada uno de los tres Serapeos, cf. ROUSSEL 1916,278, nota 1). Su imagen no acompaña a los grandesdioses en el naos principal del Serapeo C (quizásestuviera en brazos de su madre Isis), aunque sí loharía en el templo de Isis del mismo santuario. Enlas dedicatorias compartidas en Delos, Harpócrateses mencionado como la cuarta divinidad del cortejosacro, pero en Pompeya, dos siglos más tarde, habríaya sustituido al servidor Anubis como principaldios acompañante de la pareja divina. La plaquitade bronce que hemos mencionado anteriormenteprocedente de una villa en el entorno pompeyano(fig. 32) muestra la imagen de Harpócrates sobre unacolumna o altar cilíndrico, entre Isis y Serapis, enuna explícita imagen de tríada isíaca, con el dedoen los labios, llevando la cornucopia y apoyándose enun tronco en torno al cual se enrolla una serpiente(TRAN TAM TINH 1983, 107, n. IB 2, fig. 30; TRANTAM TINH 1990=LIMC, V, s.v. Isis, n. 167; TRAN TAMTINH et al. 1988=LIMC, IV, s.v. Harpokrates n. 379;MERKELBACH 1995, fig. 68). Otro tanto ocurre en laedícula pintada en la pared del viridarium de la casade las Amazonas (VI, 2, 14) mostrando a Serapis eIsis con el niño Harpócrates entre ambos (TRAN TAMTINH 1983, 157, n. III.16).En los orígenes de la expansión de los cultos egipcios,los epígrafes delios muestran la búsqueda iconográficaentre diferentes mitos griegos para interpretar la imagendel niño Horus egipcio. En la medida en que Isis fueconsiderada Afrodita, Harpócrates sería un Eros perotambién un Herakliskos, un Hércules niño. Pero sobretodo, la asimilación que parece finalmente fue la másaceptada consistió en considerarlo un Apolloniskos,un “pequeño Apolo”, cuyas imágenes (junto tambiéna las de “niños” indeterminados) citan los inventariostanto en el Serapieion C como en el vecino dromos(la avenida con esfinges) del Isieion (ID 1417; PRETREet al. 2002, 221-223; ROUSSEL 1916, 278; cf. para lasimágenes MARCADÉ 1993 b). Una dedicatoria delia serealizó explícitamente a Serapis, Isis, Anubis y Apolo113