Bitácora Rumbo y Travesía - Scouts del Perú

Participo en las celebraciones
y actividades de mi religión
En el año 1924 se desarrollaban en París los Juegos
Olímpicos. Eric Liddell, apodado “el escocés volador”,
era el favorito para la competencia de los 100 m,
para la cual se había preparado durante largo tiempo,
la que se realizaba en día domingo.
Al enterarse, Eric se negó a correr argumentando que ese era, según su fe,
el día dedicado al Señor.
Las carreras de 100 y 200 metros eran la especialidad de Eric, había
logrado marcas mundiales en 1920 y había ganado esas carreras en 1921
y 1923. Por eso se había convertido en el atleta
más popular y amado de Escocia. Por lo tanto, su
decisión de no correr no fue fácil. Las autoridades
de su país lo llamaron traidor a su patria. Sin
embargo, Eric se mantuvo firme en su decisión y se
inscribió en los 400 metros, aun cuando no era su
especialidad.
El domingo de la competencia de los 100 metros,
Eric lo dedicó como hacía regularmente a
participar del servicio religioso de su iglesia. Siguió
preparándose para competir, se entrenó muy duro
para los 400 metros y los ganó, batiendo el record
mundial para la prueba. La prensa calificó este
hecho como el acontecimiento más grande de esos
Juegos Olímpicos.
¿Qué te parece la decisión de Eric Liddell?
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