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38 JUAN F. CONZALEZ
tituye prueba la sentencia con autoridad de cosa juzgada
(arts. 406 y 407).
Para el Código de los Paises Bajos, el difamador sólo
puede probar la verdad de la imputación en los casos en que
el juez estime que la investigación de la verdad es necesaria,
cuando se ha obrado en un interés público o en su defensa;
y también cuando la víctima resulta un funcionario
público y la imputación se refiera a un hecho cometido en
el ejercicio de sus funciones. Probada en estos casos la
verdad de la imputación desaparece la responsabilidad criminal.
El requisito de la falsedad para su existencia, trae como
lógica consecuencia la necesidad de la prueba, que como
veremos luego es amplia y no está supeditada a la
resolución de una sentencia judicial pasada en autoridad
de cosa juzgada.
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Diversos sistemas de considerar el delito. - No podemos
afirmar que nuestro sistema sea de los más modernos,
desde que inspirado en el Proyecto de 1891, sigue la orientación
de la vieja legislación española; ya que la doctrina
actual tiende a la supresión de esta figura y atendiendo más
a la objetividad ideológica del delito, desaparece la calumnia
para tomar el nuevo molde de la difamación y de la
injuria. Pero vamos a estudiar los tres sistemas a la luz de
los cuales en nuestro derecho se ha considerado este delito, .,
así llegaremos mejor a la exacta comprensión del precepto.
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Primer sistema. - Para el Proyecto del Dr. Tejedor,
para el de los Dres. Villegas, U garriza y García, y para el
Código de 1886, consistía la calumnia en la imputación falsa
de un delito que tenga la obligación de acusar el Ministerio
Público, o de delitos cometidos por un empleado público
en el ejercicio de sus funciones.
Este sistema hacía un distingo entre el particular y el