Untitled - Biblioteca Digital

EL CODIGO PENAL y LA JURISPRUDENCIA 291
En realidad no ha estado acertado nuestro legislador
al suprimir la finalidad del matrimonio como causal del delito.
Pero aunque sea criticable el sistema adoptado, en
nuestro derecho positivo el rapto puede configurarlo únicamente
la sustracción o retención de la mujer con propósitos
deshonestos, de modo que no mediando esta finalidad
no podemos clasificar el atentado como tal.
* * *
Delito continuo. - El delito de rapto, de acuerdo
a la disposición legal que lo especifica tiene todo el carácter
de un delito continuo, pues si la ley establece expresamente
que la acción delictuosa consiste en retener, mientras
dure esta retención el delito se prolonga, porque el
delito consiste precisamente en esa acción.
Esta no es una simple distinción académica, sino que
tiene su gran importancia en la práctica, pues nos indica
el momento de la consumación que nos sirve de base para
principiar a contar la prescripción.
En esta clase de delitos, sabemos que mientras dure
el cautiverio de la mujer, el delito se prolonga; entonces la
prescripción debe principiar a correr desde el momento que
la mujer recobra su libertad y cesa la retención de la misma.
* * *
De la tentativa. - Del hecho de que no sea necesaria
la satisfacción de los propósitos deshonestos para la
consumación del delito, no se infiere de aquí que sea una
infracción formal de aquellas que no admiten la figura de
la tentativa.
El rapto constituye un delito real que consiste en la
privación de la libertad personal con fines deshonestos; de
modo que el hecho de la sustracción o la retención individual
perfila las características del delito. La realización de
la objetividad ideológica no interesa a la consumación porque
ella implica u per se ", un delito distinto que también
ha estudiado el legislador.