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EL CODlGO PENAL y LA JURISPRUDENCIA 151
de la víctima, no juega ningún rol en el desarrollo de los hechos;
basta sólo el requisito de la edad, para que el hecho
se considere una violación por imposición expresa de la
ley.
En el campo de la doctrina esta clase de violencia se la
conoce con el nombre de ee ope legis ", es decir que tiene su
origen en una imposición legal. El fundamento de esta imposición
la encontramos en la falta de capacidad de la víctima
para realizar el acto sexual y es por eso que el legislador
prescinde de su voluntad.
Algunos tratadistas equiparan la violencia presunta con
la violencia u ope legis ", sosteniendo que ambas obedecen
a una presunción legal. Sin embargo, en mi entender, existe
una diferencia notable entre ambas clases de violencia,
que resulta interesante diferenciar aunque sea teóricamente.
Ambas se pueden considerar como una presunción
legal, pero resultan presunciones que se derivan de diferentes
conceptos y en consecuencia son susceptibles de diferenciarse.
El legislador para imponer el concepto de la violencia
u ope legis " ha tenido en cuenta únicamente la edad
de la víctima y la incapacidad orgánica para realizar el acto.
El menor de doce años no está en condiciones normales
por su desarrollo para realiz~r el coito. La mujer cientificamente
no puede concebir antes de los doce años y en esto
se ha fundado también el legislador para prohibirle la celebración
del matrimonio; luego si la menor no está en condiciones
físicas para realizar el coito, cualquier acceso carnal
que soporte va sin duda alguna contra su propia naturaleza
y el acto anormal adquiere el carácter de una violencia
indiscutible. Esta es la razón fundamental del porqué
se prescinde de la voluntad de la propia víctima.
En cambio en la violencia presunta se llega puede decirse
al mismo punto por otros conceptos. Tiene en cuenta
en esta situación el estado mental y físico, el factor social
y el moral; sustituyendo la ausencia de voluntad por la
presunción legal de la resistencia.
No hay un criterio uniforme puede decirse para fijar
la edad que debe señalar la violencia u ope legis ", como así