08.05.2015 Views

o_19koohlu11ggm1joh6p01pp51fe93b.pdf

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

234 Echarán Fuera Demonios<br />

Cada pecador está, tanto por hecho como por naturaleza, en rebelión<br />

contra Dios. No estamos cualificados para recibir las bendiciones de Dios<br />

hasta que hayamos renunciado a nuestra rebelión y nos hayamos alejado de<br />

ella por completo. Esta es la naturaleza esencial del arrepentimiento: renunciar<br />

a nuestra rebelión con Dios. Pregúntate a ti mismo: ¿Estoy sometido<br />

sin reservas a la autoridad de Jesucristo en mi vida? Si no puedes contestar<br />

con un sí, aún te encuentras en una actitud de rebelión. Sólo hay un remedio:<br />

el arrepentimiento.<br />

Arrepentidos, nos sometemos por un acto de nuestra voluntad al<br />

Señorío de Cristo en nuestras vidas. Nuestro arrepentimiento se demuestra<br />

genuino cuando procedemos a estudiar y obedecer las enseñanzas de<br />

Jesús.<br />

Las personas frecuentemente buscan la liberación porque quieren ser<br />

libres de las consecuencias desagradables de la opresión demoníaca. Pero<br />

esta no es razón suficiente. Si no te comprometes a seguir adelante tras la<br />

liberación y servir al Señor, o bien no recibirás ninguna liberación, o entonces<br />

si la recibes, no será permanente.<br />

2. Falta de desesperación<br />

Cuando estamos buscando la liberación de las ataduras de Satanás, necesitamos<br />

reconocer la realidad de nuestra situación. Hemos sido llevados<br />

cautivos por un déspota cruel que nos odia con un odio total y hará todo<br />

lo que pueda para hacernos daño y, si es posible, destruirnos. Cuando nos<br />

volvemos a Cristo para recibir liberación, debe ser con el reconocimiento de<br />

que Él es el Único que nos puede ayudar.<br />

Tenemos que estar tan desesperados como lo estaba Pedro cuando se<br />

hundía en las aguas de Galilea y clamó a Jesús: "¡Señor, sálvame!" (Mateo<br />

14:30). Se dio cuenta de que, un momento más, y las aguas se cerrarían<br />

sobre su boca y ya no sería capaz de gritar por ayuda.<br />

Varias veces, cuando una persona se ha acercado a mí buscando liberación,<br />

he dicho: "La liberación es para los desesperados. No siento que estés<br />

desesperado aún. Vuelve cuando lo estés". A veces sugiero que la persona<br />

ayune durante 24 horas antes de buscar liberación.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!