06.05.2015 Views

21. La Gestalt en un contexto integrativo - Claudio Naranjo

21. La Gestalt en un contexto integrativo - Claudio Naranjo

21. La Gestalt en un contexto integrativo - Claudio Naranjo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>21.</strong> <strong>La</strong> <strong>Gestalt</strong> <strong>en</strong> <strong>un</strong> <strong>contexto</strong> <strong>integrativo</strong><br />

Un curriculum no tradicional, viv<strong>en</strong>cial<br />

e interdisciplinar para la formación de gestaltistas<br />

Me dice Paco Peñarrubia que fue <strong>en</strong> el año 1982 que nos conocimos, cuando<br />

acudió él j<strong>un</strong>to con otros gestaltistas españoles (<strong>en</strong>tre ellos Juanjo Albert y<br />

Antonio Asín) a <strong>un</strong> taller que organizó para mí Paco Cheloz <strong>en</strong> Val<strong>en</strong>cia. No sé<br />

hasta qué p<strong>un</strong>to el doctor Cheloz, que había sido discípulo de <strong>La</strong>can y mant<strong>en</strong>ía<br />

<strong>un</strong> contacto estrecho con Emilio Rodrigué—<strong>un</strong>o de los más distinguidos<br />

psicoanalistas arg<strong>en</strong>tinos—compartía la idea de su célebre colega de que yo<br />

pudiese ser el Don Juan de Castaneda, pero es obvio que la idea estaba ya <strong>en</strong><br />

circulación <strong>en</strong> España por aquel <strong>en</strong>tonces, y seguram<strong>en</strong>te contribuyó a mi<br />

bi<strong>en</strong>v<strong>en</strong>ida.<br />

Imagino que no lo hice mal <strong>en</strong> aquel primer taller, puesto que el Dr. Cheloz<br />

continuó invitándome, y com<strong>en</strong>zaron las invitaciones <strong>en</strong> otros lugares,<br />

principalm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> El Paular, <strong>en</strong> los alrededores de Madrid, por iniciativa de<br />

CIPARH, luego <strong>en</strong> el IPTG, de Antonio Asín, <strong>en</strong> Bilbao.<br />

Ocurría esto <strong>en</strong> los años que siguieron a <strong>un</strong> período invernal <strong>en</strong> mi propio<br />

desarrollo, cuando después de <strong>un</strong>a int<strong>en</strong>sa primavera espiritual, que siguió a mi<br />

apr<strong>en</strong>dizaje con Oscar Izacho y a <strong>un</strong> caluroso verano, (trabajando con grupos <strong>en</strong><br />

Chile y Berkeley, de los que nació el actual Instituto SAT) había caído<br />

gradualm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> <strong>un</strong> período otoñal, durante el cual empecé a delegar mi trabajo<br />

de aquellos tiempos hasta que por último, llegué a abandonarlo.<br />

Siguió a esta temporada <strong>un</strong>a de prolongada hibernación <strong>en</strong> que, pese a contactos<br />

ocasionales con el m<strong>un</strong>do a través de Congresos Profesionales y algún artículo<br />

que otro me aislé considerablem<strong>en</strong>te. Este invierno interior fue <strong>un</strong> período de<br />

int<strong>en</strong>sa práctica espiritual, algo así como <strong>un</strong> retiro de meditación espontáneo <strong>en</strong><br />

casa (al cual se refirió <strong>un</strong>a vez <strong>en</strong> <strong>un</strong>a de sus apariciones públicas Swami<br />

Muktananda, a propósito de la posibilidad de ser <strong>un</strong> yogui <strong>en</strong> el m<strong>un</strong>do de la<br />

América contemporánea secular).<br />

Tras la Confer<strong>en</strong>cia Anual de la AHP celebrada <strong>en</strong> Berkeley <strong>en</strong> el año 1980, <strong>en</strong> la<br />

que hablé acerca del emerger de <strong>un</strong>a nueva forma de chamanismo que proponía<br />

llamar “new age shamanism” o “neo-chamanismo” –y <strong>en</strong> la que pres<strong>en</strong>té como<br />

ejemplo de neo chamanismo a mi amigo chil<strong>en</strong>o Ze Miranda– fuimos ambos<br />

invitados a Z<strong>en</strong>trum Coloman por su director, Dieter Mittelst<strong>en</strong> Scheid y con ello<br />

empezaron mis viajes anuales a Europa.<br />

A través de ellos buscaba yo resarcirme de alg<strong>un</strong>a manera del alejami<strong>en</strong>to del<br />

m<strong>un</strong>do, a través del contacto con g<strong>en</strong>te diversa y la exploración de la nueva<br />

literatura <strong>en</strong> la librerías de M<strong>un</strong>ich, Paris, Amsterdam, Roma y otros lugares.<br />

Algún día mi amigo Manuel García Barroso—psicoanalista canario que reside<br />

desde hace mucho tiempo <strong>en</strong> Paris—con qui<strong>en</strong> había <strong>en</strong>tablado amistad desde su


paso por <strong>un</strong>o de mis talleres <strong>en</strong> Francia, me ofreció ponerme <strong>en</strong> contacto con<br />

Paco Cheloz y ya he explicado cómo Val<strong>en</strong>cia resultó para mi <strong>un</strong>a puerta de<br />

<strong>en</strong>trada a España. Ya no recuerdo quién había predicho que haría mi trabajo más<br />

significativo <strong>en</strong> España, y años antes, <strong>un</strong>a misteriosa mujer, Antonia Ramos,<br />

(matemática y futuróloga), aún <strong>en</strong> tiempos de Franco, me había propuesto <strong>un</strong> rol<br />

de transmisor de la cultura californiana a la España post franquista a través de<br />

<strong>un</strong>a organización, LATINOP IBERICA; pero posteriorm<strong>en</strong>te tuve dificultades con<br />

ella y me retiré de la organización m<strong>en</strong>cionada. Sólo que no puedo dejar de s<strong>en</strong>tir<br />

que la propuesta de Antonia me empezó a ori<strong>en</strong>tar hacia lo que resultó <strong>un</strong>a tarea<br />

verdadera.<br />

Tal vez por haber sido mi padre <strong>un</strong> <strong>Naranjo</strong> y proceder los <strong>Naranjo</strong>s de España,<br />

tal vez también por la simpatía hacia varios españoles republicanos <strong>en</strong> el<br />

destierro durante mi infancia, creo que el gusto por lo español y los españoles<br />

contribuyó al éxito de mis años aquí. Y se agregó a mi gusto por los españoles y su<br />

l<strong>en</strong>gua mi propio placer de volver a hablar el castellano, después de haberlo<br />

t<strong>en</strong>ido <strong>en</strong> <strong>un</strong> relativo olvido mi<strong>en</strong>tras vivía <strong>en</strong> California. (Algún mexicano me lo<br />

hizo notar cuando acudí a <strong>un</strong> ev<strong>en</strong>to organizado por el doctor Roquet, que me<br />

había <strong>en</strong>com<strong>en</strong>dado hablar sobre la muerte <strong>en</strong> las culturas indíg<strong>en</strong>as<br />

americanas). Después de años de expresarme <strong>en</strong> inglés, volver a mi l<strong>en</strong>gua<br />

materna me resultó como quitarme <strong>un</strong>as ropas que me quedaban estrechas y a<br />

cuya limitación me había acostumbrado tanto como para que no me molestase.<br />

<strong>La</strong> vuelta a mi l<strong>en</strong>gua materna no sólo me daba mayor capacidad expresiva, sino<br />

acceso a innumerables proverbios y citas de la poesía conocida durante mi<br />

juv<strong>en</strong>tud.<br />

En el período de viajes que siguió a mi tiempo de hibernación me dediqué a<br />

cultivar separadam<strong>en</strong>te mis varias especialidades. Alg<strong>un</strong>as veces ofrecía talleres<br />

de <strong>Gestalt</strong>; otras, talleres acerca del lugar de la meditación y la música <strong>en</strong> la<br />

psicoterapia; otras sobre la geografía del viaje interior y sus testimonios<br />

literarios, y otras acerca de esa caracterología del Cuarto Camino que Oscar<br />

Ichazo llamó Protoanálisis, y a partir del cual había desarrollado la Psicología de<br />

los Eneatipos.<br />

Con el paso de los años me fui conc<strong>en</strong>trando <strong>en</strong> Bilbao, donde Antonio Asín<br />

<strong>en</strong>señaba a sus seguidores no sólo <strong>Gestalt</strong> y Bionergética, sino también Zaz<strong>en</strong>, y<br />

<strong>en</strong> donde rápidam<strong>en</strong>te me convertí <strong>en</strong> algo así como el gurú del país vasco. Pero<br />

siguieron <strong>en</strong> contacto conmigo los colegas de otras regiones del país,<br />

particularm<strong>en</strong>te del m<strong>un</strong>do de la <strong>Gestalt</strong>, y por primera vez <strong>en</strong> Bilbao empecé a<br />

re<strong>un</strong>ir mis diversas especialidades, no porque las pres<strong>en</strong>tase como parte de <strong>un</strong><br />

programa integral, sino porque poco a poco fui comparti<strong>en</strong>do con ellos las<br />

distintas experi<strong>en</strong>cias e ideas con <strong>un</strong> mismo grupo de personas.<br />

Tal fue el preludio natural a <strong>un</strong> programa, el Programa o Proceso SAT, que<br />

conj<strong>un</strong>tam<strong>en</strong>te Antonio Asín y Guillermo Borja me propusieron realizar, con su<br />

apoyo y organización, <strong>en</strong> Almería. Decidimos llamarlo SAT <strong>en</strong> Babia, <strong>en</strong><br />

refer<strong>en</strong>cia al “Reino de Babia” al que acudían los reyes <strong>en</strong> sus mom<strong>en</strong>tos de<br />

reclusión y cuyo nombre casi mítico daba Ignacio Martin Poyo a <strong>un</strong>a finca<br />

reci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te adquirida <strong>en</strong> las cercanías de Mojácar.<br />

Conocí a Ignacio <strong>en</strong> El Paular y mi cálida relación con Ada López, asist<strong>en</strong>te a los<br />

primeros grupos <strong>en</strong> Val<strong>en</strong>cia así como la estrecha amistad <strong>en</strong>tre ellos, facilitó


nuestro <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tro. Antes de que terminase aquel taller, Ignacio me habló de <strong>un</strong>a<br />

tierra que había adquirido <strong>en</strong> Almería y que le gustaría que yo fuese a ver, y de<br />

inmediato le prometí que lo haría. Cuando algún tiempo después Guillermo<br />

(Memo) Borja y Antonio Asín, con el apoyo de Paco Peñarrubia y Juanjo Albert,<br />

me invitaron a realizar <strong>un</strong> programa de verano, que contaría de tres módulos de<br />

<strong>un</strong> mes de duración, Ignacio me invitó a hacerlo <strong>en</strong> su finca y me prometió que<br />

haría lo necesario para que ésta pudiera acomodar a treinta personas.<br />

Fue <strong>un</strong>a sorpresa que el grupo resultara ser mayor de ses<strong>en</strong>ta, y que todos<br />

pudieran ser fácilm<strong>en</strong>te acomodados <strong>en</strong> el castillo-monasterio que Ignacio, <strong>en</strong> el<br />

curso de <strong>un</strong> año, había construido para nosotros <strong>en</strong> el desierto.<br />

Poco más de <strong>un</strong> año antes, Ignacio me había consultado sobre si aceptar o no el<br />

ofrecimi<strong>en</strong>to de ciertos fondos del gobierno para construir <strong>un</strong> C<strong>en</strong>tro de<br />

Crecimi<strong>en</strong>to. Su reparo era que el ofrecimi<strong>en</strong>to no fuera completam<strong>en</strong>te gratuito,<br />

sino que se esperase <strong>un</strong> desembolso de cierto porc<strong>en</strong>taje de ese dinero al<br />

mediador. Le expresé mi parecer de que, pese a este elem<strong>en</strong>to de corrupción, la<br />

empresa valdría la p<strong>en</strong>a, y que seguram<strong>en</strong>te el futuro de lo que él construyese<br />

sería lo sufici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te importante como para justificar el gesto. Por fin, sin<br />

embargo, y con quijotesca incorruptibilidad, Ignacio decidió recurrir a sus<br />

propios ahorros: después de años de éxito con <strong>un</strong>a empresa de Marketing, (años<br />

durante los cuales había abandonado esa querida <strong>Gestalt</strong> que apr<strong>en</strong>diera <strong>en</strong> Paris<br />

y trajese a CIPARH y a España) le parecía que le correspondía ser filantrópico.<br />

Dado que gran parte de este primer grupo SAT <strong>en</strong> España estaba compuesto por<br />

gestaltistas o apr<strong>en</strong>dices de <strong>Gestalt</strong> <strong>en</strong> diversos c<strong>en</strong>tros de España, me resultaba<br />

implícito que estaría llevando a cabo ese ideal de <strong>un</strong>a <strong>Gestalt</strong> integrativa e<br />

integrada que había propuesto <strong>en</strong> la Seg<strong>un</strong>da Confer<strong>en</strong>cia Anual de la Asociación<br />

de <strong>Gestalt</strong>istas norteamericanos <strong>en</strong> Baltimore.<br />

Posteriorm<strong>en</strong>te habría de describir más ampliam<strong>en</strong>te mi concepción <strong>en</strong> <strong>un</strong><br />

articulo intitulado “Mejor que Utopía: En algún lugar de España”, concebido al<br />

no poder concurrir al Congreso <strong>La</strong>tinoamericano de <strong>Gestalt</strong> que organizó <strong>en</strong><br />

México el doctor Hector Salama poco después del tercer congreso m<strong>un</strong>dial, y<br />

escrito ante su suger<strong>en</strong>cia de que <strong>en</strong>viase algo para ser leído <strong>en</strong> la ocasión. Con<br />

ese título quería decir que mi apar<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te utópico ideal de <strong>un</strong>a <strong>Gestalt</strong><br />

<strong>en</strong>riquecida por la meditación, por la contribución de la g<strong>en</strong>te de teatro, por<br />

conocimi<strong>en</strong>to agudo y claro del carácter, aportado por la Psicología de los<br />

Eneatipos, por el Proceso Fisher Hoffman y <strong>un</strong>a cultura terapéutica g<strong>en</strong>eral, lejos<br />

de continuar si<strong>en</strong>do <strong>un</strong> sueño mío, estaba si<strong>en</strong>do llevado a la práctica ya a través<br />

de años.<br />

Ya que el trabajo terminó no si<strong>en</strong>do leído <strong>en</strong> su oport<strong>un</strong>idad y tampoco fue<br />

publicado por aquel <strong>en</strong>tonces, se lo ofrecí a la revista de la AETG <strong>en</strong> respuesta a<br />

su pedido de algo para su vigésimo aniversario, y lo incluyo ahora <strong>en</strong> este libro.<br />

Se ha dicho que el programa SAT, del que tratan estas páginas y que es lo que he<br />

estado haci<strong>en</strong>do <strong>en</strong> España desde fines de los 80, ha contribuido al<br />

<strong>en</strong>riquecimi<strong>en</strong>to, efectividad, reputación y éxito de la <strong>Gestalt</strong> <strong>en</strong> España. Hoy <strong>en</strong><br />

día, no sólo ha servido a miles de personas <strong>en</strong> países desde Sudamérica a<br />

Australia, sino que comi<strong>en</strong>za a interesar a los educadores como <strong>un</strong>a influ<strong>en</strong>cia<br />

humanizante necesaria <strong>en</strong> <strong>un</strong> m<strong>un</strong>do creci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te tecnológico.


Un curriculum no tradicional<br />

Cuando me preg<strong>un</strong>té qué título darle a este artículo, el primer p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>to que<br />

cruzó mi m<strong>en</strong>te fue el de “Un <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to ideal para gestaltistas”- pero el<br />

término “ideal” sólo habría sido apropiado alg<strong>un</strong>os años atrás, como<br />

<strong>en</strong>cabezami<strong>en</strong>to a la descripción de <strong>un</strong> sueño, <strong>un</strong> proyecto. Pero ya que con el<br />

paso del tiempo el sueño se ha hecho realidad, seguir llamando al programa que<br />

he v<strong>en</strong>ido implem<strong>en</strong>tando <strong>en</strong> años reci<strong>en</strong>tes “ideal” sólo podría t<strong>en</strong>er <strong>un</strong> s<strong>en</strong>tido<br />

auto-propagandístico. No puedo dejar de p<strong>en</strong>sar, sin embargo, que <strong>un</strong> sueño<br />

realizado es más “ideal” que <strong>un</strong> “mero ideal”.<br />

Lo explicaré com<strong>en</strong>zando por hacer algo de historia.<br />

Hace <strong>un</strong>os veinte años más o m<strong>en</strong>os, cuando después de recorrer por muchos<br />

apr<strong>en</strong>dizajes decidí j<strong>un</strong>tar todo lo que había apr<strong>en</strong>dido y regrese a los E.E.U.U<br />

después de <strong>un</strong> año de peregrinaje <strong>en</strong> Arica, decidí dejar mi trabajo de corta<br />

duración <strong>en</strong> Esal<strong>en</strong> y otros c<strong>en</strong>tros para conc<strong>en</strong>trar mi tiempo y <strong>en</strong>ergía <strong>en</strong> <strong>un</strong><br />

solo grupo int<strong>en</strong>sivo y continuo <strong>en</strong> Berkeley, (donde he residido desde <strong>en</strong>tonces).<br />

Este grupo g<strong>en</strong>eró <strong>un</strong> seg<strong>un</strong>do, <strong>un</strong> tercero, <strong>un</strong> cuarto, y a medida que acudían<br />

familiares, amigos, y luego amigos de los amigos, mi actividad cristalizó <strong>en</strong> <strong>un</strong>a<br />

institución. Como el Gobierno Americano pedía <strong>un</strong> nombre, le llame SAT, que no<br />

significa principalm<strong>en</strong>te lo que a m<strong>en</strong>udo se repite y se explica <strong>en</strong> los estatutos de<br />

la correspondi<strong>en</strong>te corporación educacional (las siglas de “Seekers After Truth”)<br />

por lo que las letras no llevan p<strong>un</strong>tos de abreviación. Más bi<strong>en</strong> constituy<strong>en</strong> <strong>un</strong><br />

emblema fonético de <strong>un</strong>a triada de principios <strong>un</strong>iversales, a la vez que forman la<br />

palabra sánscrita SAT que d<strong>en</strong>ota verdad y ser. Felizm<strong>en</strong>te las letras evocan,<br />

además, <strong>en</strong> inglés, las iniciales de Time, Space, Awar<strong>en</strong>ess (tiempo, espacio,<br />

conocimi<strong>en</strong>to) dim<strong>en</strong>siones cósmicas que me han interesado mucho y que fueron<br />

poetizados por Fritz Perls al comi<strong>en</strong>zo de su libro autobiográfico.<br />

Mi propósito al empr<strong>en</strong>der esta actividad –como se habrá traslucido de mi<br />

explicación hasta ahora– no fue específicam<strong>en</strong>te de hacer <strong>Gestalt</strong>, ni cosa<br />

determinada alg<strong>un</strong>a. Simplem<strong>en</strong>te me proponía echar mano a la suma de mis<br />

capacidades al abordar la tarea de ayudar <strong>en</strong> su evolución a <strong>un</strong> grupo de personas<br />

(durante <strong>un</strong> tiempo indeterminado). Pero el hecho de ser yo <strong>un</strong> especialista <strong>en</strong> la<br />

<strong>Gestalt</strong> se reflejó naturalm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> mi trabajo. Y cuando después de <strong>un</strong>os 15 años<br />

de maduración, tomó forma <strong>en</strong> España algo que bi<strong>en</strong> podría haberse llamado “Un<br />

programa holístico de <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to <strong>en</strong> psicoterapia integrativa” y se llamó<br />

simplem<strong>en</strong>te “Un programa de formación personal y profesional,” esta<br />

continuación de mi trabajo pudo con igual propiedad haberse an<strong>un</strong>ciado como <strong>un</strong><br />

programa para gestaltistas. Y <strong>en</strong> realidad, han sido gestaltistas, formados o <strong>en</strong><br />

formación, qui<strong>en</strong>es principalm<strong>en</strong>te han pasado por él.<br />

Consistió esta actividad mía <strong>en</strong> <strong>un</strong>a improvisación. Yo atravesaba a comi<strong>en</strong>zos de<br />

los 70 por lo que ahora llamo el “periodo carismático” de mi vida, y an<strong>un</strong>cié desde<br />

el comi<strong>en</strong>zo que no seguiría <strong>un</strong> programa, sino que no sabía yo mismo lo que<br />

haría. A medida que fue surgi<strong>en</strong>do esta improvisación, sin embargo, se perfiló<br />

claram<strong>en</strong>te <strong>un</strong>a estructura, <strong>en</strong> el proceso a través del cual guiaba al grupo; y vi<br />

que era <strong>un</strong> programa que se podría repetir. Como <strong>un</strong>a obra de arte, había t<strong>en</strong>ido


<strong>un</strong>a estructura no “pre-diseñada”. Posteriorm<strong>en</strong>te tuve ocasión de aplicar mi arte<br />

<strong>en</strong> forma de variaciones sobre el tema ya <strong>en</strong><strong>un</strong>ciado.<br />

Los sufíes ti<strong>en</strong><strong>en</strong> varias maneras de aludir al hecho de que el trabajo ti<strong>en</strong>e<br />

diversas facetas y etapas. En esta improvisación yo sabía desde el comi<strong>en</strong>zo,<br />

como el zapatero de Nasrudín, que sólo necesitaba de cuero, hilo, aguja y cola; o<br />

como el panadero, que trabaja con harina, agua, sal, levadura y fuego. Tal vez el<br />

único formato de mi actividad era el patrón con el cual yo me había familiarizado<br />

<strong>en</strong> mi experi<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> los grupos de Gurdjieff (de seg<strong>un</strong>da g<strong>en</strong>eración): <strong>un</strong> nivel de<br />

consci<strong>en</strong>cia corporal <strong>en</strong> la acción, <strong>un</strong> nivel de consci<strong>en</strong>cia emocional y trabajo <strong>en</strong><br />

las relaciones con los demás y consigo mismo, <strong>un</strong> aspecto teórico (lo que<br />

usualm<strong>en</strong>te se llama “<strong>en</strong>señanzas”) y <strong>un</strong> cuarto ingredi<strong>en</strong>te cuya es<strong>en</strong>cia va más<br />

allá de lo activo, emocional e intelectual: <strong>un</strong> trabajo <strong>en</strong> la at<strong>en</strong>ción misma,<br />

<strong>en</strong>caminado a la conci<strong>en</strong>cia de la conci<strong>en</strong>cia. A difer<strong>en</strong>cia del trabajo de Gurdjieff<br />

sin embargo, mi forma de trabajar <strong>en</strong> lo interpersonal ha incorporado todo mi<br />

apr<strong>en</strong>dizaje psicológico y mi experi<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el manejo de grupos (muy <strong>en</strong><br />

particular las her<strong>en</strong>cias psicoanalítica y gestáltica) así como mi familiaridad<br />

(como persona que se integró <strong>en</strong> Esal<strong>en</strong> <strong>en</strong> sus comi<strong>en</strong>zos) con todo el<br />

movimi<strong>en</strong>to de <strong>en</strong>co<strong>un</strong>ter y grupos Norte-Americano. En el nivel intelectual<br />

también me tomé la libertad de integrar <strong>en</strong> mi trabajo las formulaciones<br />

derivadas del Cuarto Camino con las formulaciones que son necesarias como<br />

<strong>contexto</strong> a la meditación budista, es decir, las <strong>en</strong>señanzas budistas <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral.<br />

Mi ciclo de actividad <strong>en</strong> California atravesó varias fases, si<strong>en</strong>do la última de ellas<br />

<strong>un</strong> programa holístico de formación para educadores, <strong>en</strong>dosada por el programa<br />

doctoral de la Gold<strong>en</strong> Gate University. Por último, después de haber susp<strong>en</strong>dido<br />

esa actividad, s<strong>en</strong>tí que había terminado de dar a luz algo, y que era tiempo de<br />

recogerme. Lo hice, y poco a poco me puse a viajar. Gozando de mi libertad, me<br />

di el placer de conocer nuevos países y g<strong>en</strong>tes, y aprecié el estímulo de diversas<br />

atmósferas culturales <strong>en</strong> mi trabajo –que durante estos viajes consistió- como <strong>en</strong><br />

<strong>un</strong> tiempo anterior de mi vida, <strong>en</strong> talleres breves. Fue <strong>un</strong>a ocasión de cond<strong>en</strong>sar y<br />

también refinar diversos ingredi<strong>en</strong>tes de mi trabajo durante los tiempos del SAT:<br />

la <strong>Gestalt</strong>, la meditación, la música, la filosofía espiritual, prácticas del “Cuarto<br />

Camino”, los ejercicios psicológicos, la supervisión e incluso la supervisión de la<br />

supervisión.<br />

Años más tarde, la invitación del Dr. Antonio Asín a realizar <strong>un</strong> programa de<br />

verano de tres años <strong>en</strong> España <strong>en</strong>trañaría la oport<strong>un</strong>idad de re<strong>un</strong>ir <strong>un</strong>a vez más<br />

los elem<strong>en</strong>tos que había v<strong>en</strong>ido elaborando por separado, y así reconstruir –<strong>en</strong><br />

forma cond<strong>en</strong>sada pero int<strong>en</strong>siva– lo que había sido SAT <strong>en</strong> California.<br />

Si doy <strong>un</strong>a mirada retrospectiva, mi actividad se ha desarrollado, paso a paso, de<br />

acuerdo con mi propia ley interior y las provid<strong>en</strong>ciales oport<strong>un</strong>idades. N<strong>un</strong>ca se<br />

me ocurrió que llegaría algún día a hacer de su descripción <strong>un</strong>a propuesta más<br />

<strong>un</strong>iversal. A medida que pasa el tiempo, sin embargo, y va <strong>en</strong>trando la <strong>Gestalt</strong> <strong>en</strong><br />

las <strong>un</strong>iversidades, se plantea más <strong>en</strong>fáticam<strong>en</strong>te que n<strong>un</strong>ca la conv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>cia de<br />

que el gestaltista sea más que <strong>un</strong> mero especialista, y esto lleva automáticam<strong>en</strong>te<br />

a proponer que para el mejor ejercicio de su arte conozca bi<strong>en</strong> cosas tales como la<br />

psicología g<strong>en</strong>eral, teoría de la motivación, psicometría, y otras cosas que<br />

constituy<strong>en</strong> el currículo tradicional de las escuelas de psicología. Pero me parece<br />

tan insatisfactoria la conc<strong>en</strong>tración exclusiva <strong>en</strong> el <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to gestáltico como


el usual collage académico. Pues son otras las capacidades, experi<strong>en</strong>cias y<br />

apr<strong>en</strong>dizajes que me parec<strong>en</strong> más relevantes para el gestaltista; y <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral, me<br />

parece más apropiado <strong>un</strong> <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to con <strong>un</strong>a compon<strong>en</strong>te viv<strong>en</strong>cial más<br />

substancial.<br />

Principalm<strong>en</strong>te me ha interesado redactar el pres<strong>en</strong>te artículo como respuesta a<br />

la petición del Dr. Ricardo Zerbetto de que diese <strong>un</strong>a formulación escrita a mi<br />

concepción de lo que debería ser el <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to de <strong>un</strong> gestaltista y dado que mi<br />

visión de ese ideal corresponde, afort<strong>un</strong>adam<strong>en</strong>te, con lo que la provid<strong>en</strong>cia me<br />

permite estar implem<strong>en</strong>tando, veo que me puedo ahorrar la labor de traducir a<br />

palabras nuevam<strong>en</strong>te cosas ya dichas. Transcribo simplem<strong>en</strong>te, a continuación,<br />

<strong>un</strong> panorama del programa SAT tal como lo he explicado durante la primera<br />

sesión del más reci<strong>en</strong>te curso, <strong>en</strong> el verano del 92.<br />

“Nuestra actividad compr<strong>en</strong>derá niveles desde lo físico hasta lo espiritual.<br />

Especialm<strong>en</strong>te los aspectos espiritual y emocional estarán muy <strong>en</strong>fatizados: ésta<br />

ha sido <strong>un</strong>a constante de mi trabajo desde siempre – casi <strong>un</strong> leitmotiv <strong>en</strong> mi<br />

actividad el <strong>un</strong>ir lo terapéutico con lo que he ido apr<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do al marg<strong>en</strong> de la<br />

profesión, a través del contacto con diversas corri<strong>en</strong>tes espirituales. Mi principal<br />

inspiración <strong>en</strong> lo tocante a la concepción del programa <strong>en</strong> su conj<strong>un</strong>to, ha sido la<br />

de la escuela de Gurdjieff <strong>en</strong> que se usaba mucho la expresión “Cuarto Camino”<br />

para la idea de <strong>un</strong> fusión de la vía de la acción, el camino de la emoción y de la<br />

devoción, y el yoga de la compr<strong>en</strong>sión intelectual, a través de <strong>un</strong> c<strong>en</strong>trami<strong>en</strong>to <strong>en</strong><br />

<strong>un</strong> cuarto factor, el at<strong>en</strong>cional (que se puede decir la es<strong>en</strong>cia de la meditación<br />

propiam<strong>en</strong>te tal, ya sea que se practique formalm<strong>en</strong>te o… como at<strong>en</strong>ción <strong>en</strong> lo<br />

cotidiano). Esta concepción, se puede decir, corresponde a lo que hoy <strong>en</strong> día se<br />

esta llamando “holístico”: la idea de trabajar equilibradam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> todos los<br />

niveles de la persona.<br />

Mi actividad <strong>en</strong> E.E.U.U., a<strong>un</strong>que seminal –<strong>en</strong> cuanto a que se formó <strong>en</strong> ella<br />

mucha g<strong>en</strong>te cuya influ<strong>en</strong>cia fue significativa – fue corta. Hubo <strong>un</strong> primer<br />

período <strong>en</strong> que trabajé personalm<strong>en</strong>te, luego otro período <strong>en</strong> que delegué <strong>en</strong> mis<br />

discípulos y me cupo la oport<strong>un</strong>idad de invitar a varios maestros de distintas<br />

tradiciones. Fue <strong>un</strong> raro experim<strong>en</strong>to el de re<strong>un</strong>ir tantas autoridades <strong>en</strong><br />

tradiciones que usualm<strong>en</strong>te no se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran <strong>en</strong> <strong>un</strong> programa <strong>un</strong>ificado: <strong>un</strong><br />

lama tibetano, <strong>un</strong> maestro taoísta, <strong>un</strong> rabino tántrico hindú y otros. Luego se<br />

cerró el SAT hasta que se formuló <strong>en</strong> España como <strong>un</strong> programa que reúne los<br />

propósitos del desarrollo profesional y personal. Seguram<strong>en</strong>te se puede decir que<br />

la idea de re<strong>un</strong>ir estos dos objetivos no es m<strong>en</strong>os importante que la int<strong>en</strong>ción<br />

holística <strong>en</strong> este programa: porque lo profesional se <strong>en</strong>fría si no pasa por la<br />

persona, y si la g<strong>en</strong>te acudiese por <strong>un</strong>a motivación puram<strong>en</strong>te profesional, se<br />

acartonaría el proceso. Y al revés, si la g<strong>en</strong>te viniese solam<strong>en</strong>te para su b<strong>en</strong>eficio<br />

personal sin poner <strong>en</strong> práctica la capacidad de ayudar terapéuticam<strong>en</strong>te <strong>un</strong>os a<br />

otros, se perdería <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to muy importante, tanto <strong>en</strong> el valor asist<strong>en</strong>cial del<br />

grupo para cada <strong>un</strong>o como <strong>en</strong> el apr<strong>en</strong>dizaje humano que <strong>en</strong>traña para cada cual<br />

el desafío de ayudar a otros.<br />

Cuando empecé a trabajar <strong>en</strong> California, no diseñé la seg<strong>un</strong>da fase de vida de<br />

aquel grupo <strong>en</strong> torno a la idea del servicio mutuo con el ánimo de formar<br />

profesionales, sino <strong>en</strong> conformidad a la visión expuesta por Gurdjieff de que al<br />

trabajo “<strong>en</strong> <strong>un</strong>o mismo” debe seguir <strong>un</strong> trabajo “<strong>en</strong> el m<strong>un</strong>do”. El resultado fue


mi primer int<strong>en</strong>to de hacer de <strong>un</strong> grupo <strong>un</strong> sistema auto-terapizante; y, sin<br />

pret<strong>en</strong>derlo, terminé formando profesionales. Ahora, tal vez sea más bi<strong>en</strong> al<br />

revés: ofreci<strong>en</strong>do formar profesionales, he puesto <strong>en</strong> marcha <strong>un</strong> prof<strong>un</strong>do<br />

proceso de transformación de las personas.<br />

Desde el comi<strong>en</strong>zo de este programa <strong>en</strong> España, gran parte de las personas que<br />

han asistido a él han sido gestaltistas, ya <strong>en</strong> formación o incluso bastante<br />

avezados. Ello es coher<strong>en</strong>te con el hecho de que la actividad que desarrollamos<br />

ti<strong>en</strong>e como eje c<strong>en</strong>tral la <strong>Gestalt</strong>, y bi<strong>en</strong> podría describirse como <strong>un</strong><br />

<strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to Gestáltico amplificado o expandido –<strong>un</strong> nuevo acercami<strong>en</strong>to a la<br />

formación de gestaltistas que, fiel al foco experi<strong>en</strong>cial de la <strong>Gestalt</strong>, incorpora<br />

elem<strong>en</strong>tos hasta ahora descuidados.<br />

<strong>La</strong> <strong>Gestalt</strong> constituyó <strong>un</strong>a notable síntesis cuando todavía el psicoanálisis t<strong>en</strong>ía su<br />

monopolio <strong>en</strong> el m<strong>un</strong>do <strong>un</strong>iversitario y <strong>en</strong> la opinión pública. Sin embargo, esta<br />

gran síntesis que re<strong>un</strong>ía elem<strong>en</strong>tos de diversas fu<strong>en</strong>tes –del teatro, del<br />

psicoanálisis, del budismo z<strong>en</strong>, y aún de la ci<strong>en</strong>ciología, (escuela <strong>un</strong> poco<br />

discutible de la cual Perls fue <strong>un</strong>o de los primeros conocedores), además de<br />

elem<strong>en</strong>tos de la psicología rogeriana, y <strong>un</strong>a cantidad de otras cosas más –se<br />

autodescribió principalm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> términos de negación con respecto a todas<br />

aquellas escuelas <strong>en</strong> las que se había apoyado e inspirado. En respuesta a la<br />

competitividad del m<strong>un</strong>do de esa época, Perls parece haberse s<strong>en</strong>tido inspirado a<br />

responder con <strong>un</strong> “esto es <strong>Gestalt</strong> y no es psicoanálisis”, “esto es <strong>Gestalt</strong> y no es<br />

espiritualidad”, “esto es <strong>Gestalt</strong> y no es psicodrama”, etc. Pero si <strong>un</strong>o lo pi<strong>en</strong>sa<br />

bi<strong>en</strong>, la <strong>Gestalt</strong> es todas esas cosas y además, <strong>un</strong>a notable síntesis.<br />

Ahora que se comi<strong>en</strong>za a p<strong>en</strong>sar que <strong>un</strong> <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to Gestáltico debería<br />

consistir <strong>en</strong> más que la asist<strong>en</strong>cia a grupos terapéuticos y la supervisión, me<br />

parece oport<strong>un</strong>o subrayar cuales son las zonas limítrofes especialm<strong>en</strong>te<br />

pertin<strong>en</strong>tes a la formación de gestaltistas.<br />

Podría decirse que la zona limítrofe más notoria de la <strong>Gestalt</strong> la constituye el<br />

psicoanálisis. En vista de la actitud crítica de Perls hacia el psicoanálisis y de su<br />

actitud creci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te anti-intelectual, quedó excluido su estudio de la<br />

formación de gestaltistas. Es claro, sin embargo, que este gran g<strong>en</strong>io, que tal vez<br />

fuera el más s<strong>en</strong>sacional de los terapeutas, había t<strong>en</strong>ido <strong>un</strong>a sólida formación<br />

psicoanalítica, y (como alg<strong>un</strong>a vez le oí decir) “el diablo más sabe por viejo que<br />

por diablo”. Había visto mucho, había oído a mucha g<strong>en</strong>te y t<strong>en</strong>ía el ojo y el oído<br />

del psicoanalista. El que se haya formado toda <strong>un</strong>a g<strong>en</strong>eración de gestaltistas sin<br />

nada de psicoanálisis, no es de reprochar <strong>en</strong> absoluto, porque hay tal confusión<br />

de l<strong>en</strong>guas <strong>en</strong> el psicoanálisis y tanta especulación estéril que <strong>en</strong> cierto modo ello<br />

constituye <strong>un</strong>a justificación def<strong>en</strong>dible; pero también es cierto que hubiera sido<br />

útil la inyección <strong>en</strong> los programas de algo así como <strong>un</strong>a quinta es<strong>en</strong>cia de la<br />

actitud y percepción psicoanalítica. En respuesta a este s<strong>en</strong>tir he querido<br />

incorporar ciertos elem<strong>en</strong>tos del espíritu psicoanalítico al proceso que Uds van a<br />

atravesar. Especialm<strong>en</strong>te este año se <strong>en</strong>contrarán con tres cosas que no llevan el<br />

nombre “psicoanálisis”, pero que sí son de naturaleza psicoanalítica.<br />

Una de ellas lo constituirá <strong>un</strong>a serie de experi<strong>en</strong>cias con la “asociación libre de<br />

ideas” –ese ejercicio tan f<strong>un</strong>dam<strong>en</strong>tal <strong>en</strong> la historia y el desarrollo del<br />

psicoanálisis que bi<strong>en</strong> podría llamarse, alternativam<strong>en</strong>te, <strong>un</strong> ejercicio de<br />

observación compartida del p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>to– y que ti<strong>en</strong>e mucho que ver con la


meditación. Esta técnica básica del psicoanálisis no quedó incluida del ars<strong>en</strong>al de<br />

recursos de la psicología humanística simplem<strong>en</strong>te porque, histórica y<br />

políticam<strong>en</strong>te, el movimi<strong>en</strong>to humanista se definió por oposición al psicoanálisis<br />

después de nacer casi como <strong>un</strong>a reacción crítica ante éste. Es así como <strong>en</strong> la época<br />

de los años set<strong>en</strong>ta <strong>en</strong> adelante <strong>en</strong> que <strong>en</strong>traron <strong>en</strong> circulación tal ab<strong>un</strong>dancia de<br />

técnicas proced<strong>en</strong>tes de diversas fu<strong>en</strong>tes, y <strong>en</strong> que los psicólogos eclécticos lo<br />

utilizan todo, la única técnica que no se utiliza (excepto <strong>en</strong> la práctica del<br />

psicoanálisis) es la asociación libre. Aquí la usaremos ext<strong>en</strong>sam<strong>en</strong>te, pero <strong>en</strong> <strong>un</strong><br />

<strong>contexto</strong> nuevo. Y <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to de este <strong>contexto</strong> difer<strong>en</strong>te será <strong>un</strong>a forma de<br />

interpretación, no basada <strong>en</strong> los esquemas teóricos del psicoanálisis. No se<br />

tratará aquí de la “interpretación” clásica <strong>en</strong> que <strong>un</strong> experto le dice<br />

implícitam<strong>en</strong>te a <strong>un</strong> supuesto ignorante: “Yo te conozco mejor de lo que te<br />

conoces tú a ti mismo porque yo he leído a Melanie Klein y he estudiado la teoría<br />

de las relaciones objetales”, o qué se yo… Exploraremos, <strong>en</strong> cambio, <strong>un</strong>a situación<br />

de asociación libre como <strong>un</strong> p<strong>un</strong>to de partida para compartir intuiciones. Me<br />

parece que gran parte de lo que ocurre <strong>en</strong> psicoterapia es el compartir<br />

intuiciones, y que se ha estado tratando de formular la psicoterapia demasiado<br />

desde la razón, desoy<strong>en</strong>do el elem<strong>en</strong>to intuitivo que, desde la partida, es el<br />

elem<strong>en</strong>to constitutivo básico de este quehacer (tanto como lo es del arte –donde<br />

también es la intuición y no la razón la que hace posible la verdadera obra<br />

perdurable).<br />

Un seg<strong>un</strong>do elem<strong>en</strong>to relacionado con el psicoanálisis <strong>en</strong> nuestro currículo es<br />

<strong>un</strong>o que no nos vi<strong>en</strong>e de la tradición psicoanalítica. Se trata de algo ya conocido<br />

por alg<strong>un</strong>as personas aquí: el “Protoanálisis”. Este trabajo de auto-conocimi<strong>en</strong>to<br />

a la luz del “Eneagrama” no es de orig<strong>en</strong> académico, pero constituye <strong>un</strong>a refinada<br />

caracterología y <strong>un</strong>a poderosa interpretación cognitivo-dinámica de los diversos<br />

síndromes caracterológicos. Se trata de <strong>un</strong> cuerpo de conocimi<strong>en</strong>tos de orig<strong>en</strong><br />

ori<strong>en</strong>tal, y más específicam<strong>en</strong>te de aquella escuela cristiana asiática y esotérica de<br />

la cual tuvimos noticia décadas atrás <strong>en</strong> occid<strong>en</strong>te por Gurdjieff. Me ha tocado ser<br />

<strong>un</strong> canal de elucidación y pres<strong>en</strong>tación de esta especialidad durante los últimos<br />

veinte años, más o m<strong>en</strong>os, y he podido comprobar que si se pone <strong>en</strong> relación la<br />

información del protoanálisis con la situación de asociación libre -o, <strong>en</strong> forma<br />

g<strong>en</strong>eral, con la situación terapéutica- se ti<strong>en</strong>e <strong>un</strong> recurso muy rico del análisis del<br />

carácter, que va también más allá del trabajo <strong>en</strong> <strong>un</strong>o mismo tradicional.<br />

Tradicionalm<strong>en</strong>te esta teoría constituye <strong>un</strong>a visión de las cosas que, asimilada<br />

por la persona, hace posible <strong>un</strong> auto-estudio. Pero cuando se lo pone <strong>en</strong><br />

movimi<strong>en</strong>to <strong>en</strong> <strong>un</strong>a situación grupal y <strong>en</strong> forma de ejercicios grupales (o, por lo<br />

m<strong>en</strong>os, <strong>en</strong>tre dos personas) el recurso toma otra dim<strong>en</strong>sión: <strong>un</strong>a alternativa a<br />

Freud, Melanie Klein, Fairbairn, y el conj<strong>un</strong>to de interpretaciones <strong>en</strong> circulación<br />

<strong>en</strong> la torre de Babel psicoanalítica. En este mom<strong>en</strong>to está apareci<strong>en</strong>do <strong>en</strong><br />

E.E.U.U. <strong>un</strong> libro mío sobre este tema que estoy llamando “Carácter y Neurosis:<br />

Una Visión Integradora” 1 y planteo <strong>en</strong> él que si <strong>un</strong>o quisiera hacer <strong>un</strong>a<br />

integración del conductismo y la experi<strong>en</strong>cia clínica con los síndromes psíquicos<br />

1 <strong>Naranjo</strong>, <strong>Claudio</strong> Carácter y Neurosis. Una visión integradora, Ediciones <strong>La</strong> Llave D. H. Vitoria, 6ª<br />

edición 2006.


–está todo cont<strong>en</strong>ido allí como por casualidad, <strong>en</strong> esta visión que llamamos el<br />

protoanálisis.<br />

Otro elem<strong>en</strong>to casi-analítico (por cuanto se acerca al psicoanálisis, a<strong>un</strong>que<br />

también nos llega de <strong>un</strong>a fu<strong>en</strong>te diversa) es lo que alg<strong>un</strong>as veces se conoce como<br />

el “Proceso Fisher Hoffman”, y que oficialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> E.E.U.U. se llama ahora<br />

“Proceso de Cuadrinidad”. Mi versión de este programa se an<strong>un</strong>ciaba a veces <strong>en</strong><br />

España (a suger<strong>en</strong>cia del Dr. Asín) como el “Proceso HFN”, sigla que sugiere la<br />

palabra “Hoffman”-el nombre de la persona que trajo al m<strong>un</strong>do este <strong>en</strong>foque<br />

terapéutico- pero <strong>en</strong> el que las tres letras evocan a “Fischer” (al c<strong>en</strong>tro, como el<br />

originador más remoto del <strong>en</strong>foque), a Hoffman y a mí mismo – a qui<strong>en</strong> cupo<br />

originar la adaptación grupal del método. Ahora el “Proceso de Cuadrinidad” ha<br />

corrido mucho por el m<strong>un</strong>do. Está si<strong>en</strong>do muy conocido <strong>en</strong> Alemania y hasta <strong>en</strong><br />

Australia se practica, a<strong>un</strong>que donde más se ha cultivado el método es <strong>en</strong> Brasil,<br />

de donde proced<strong>en</strong> los más conocidos formadores, <strong>en</strong> tanto que <strong>en</strong> el SAT se<br />

incluy<strong>en</strong> nuevas aplicaciones de la inspiración original. Cuando hace más de diez<br />

años com<strong>en</strong>cé a escribir <strong>un</strong> librito sobre el método de Hoffman p<strong>en</strong>sé llamarlo<br />

Psicoanálisis Revisited –<strong>un</strong> poco a la manera de Aldous Huxley que años después<br />

de publicar Brave New World (El M<strong>un</strong>do Feliz) escribió “Brave New Word<br />

Revisited” –“Nueva Visita al M<strong>un</strong>do Feliz”; y usé esa misma expresión,<br />

“revisited”, que literalm<strong>en</strong>te indicaría <strong>un</strong>a nueva visita al psicoanálisis, a<strong>un</strong>que <strong>en</strong><br />

este caso más cabría hablar de <strong>un</strong>a especie de seg<strong>un</strong>da visita del psicoanálisis a<br />

nuestra cultura –a<strong>un</strong>que esta vez desde fuera del círculo psicoanalítico. Como el<br />

psicoanálisis, el proceso de Fischer y Hoffman se propone como tarea <strong>un</strong> bu<strong>en</strong><br />

insight del proceso de la formación del carácter <strong>en</strong> el s<strong>en</strong>o familiar, y <strong>en</strong> poco<br />

tiempo permite <strong>un</strong>a bu<strong>en</strong>a limpieza de toda esa parte de la m<strong>en</strong>te que podemos<br />

llamar a la psiquis infantil del adulto: la psiquis de los introyectos de padre y<br />

madre; que también es la psiquis ambival<strong>en</strong>te del amor y odio a los padres. El<br />

método logra esta “limpieza” de <strong>un</strong>a forma bastante dramática, y <strong>un</strong> recurso<br />

importante <strong>en</strong> él es <strong>un</strong>a catarsis dirigida de la agresión hacia los padres.<br />

Estos elem<strong>en</strong>tos psicoanalíticos, <strong>en</strong> <strong>un</strong> amplio s<strong>en</strong>tido de la expresión, serán<br />

alg<strong>un</strong>os de los ingredi<strong>en</strong>tes de este programa. Otra zona limítrofe de la <strong>Gestalt</strong> es<br />

la meditación. <strong>La</strong> <strong>Gestalt</strong> <strong>en</strong>tró <strong>en</strong> el m<strong>un</strong>do especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> los años cuando<br />

Fritz Perls se vino a vivir a Esal<strong>en</strong>, y no se llamaba terapia <strong>Gestalt</strong> <strong>en</strong> esa época,<br />

sino “<strong>Gestalt</strong> Awar<strong>en</strong>ess Training” –Entr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to Gestáltico de la Conci<strong>en</strong>cia, o<br />

Entr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to Gestáltico de la At<strong>en</strong>ción –desarrollo m<strong>en</strong>tal a través de la<br />

<strong>Gestalt</strong>. Tal expresión puede haber t<strong>en</strong>ido <strong>un</strong> s<strong>en</strong>tido político <strong>en</strong> el m<strong>un</strong>do de las<br />

rivalidades <strong>en</strong>tre las terapias, pero también refleja ambición verdadera de ser <strong>un</strong><br />

aporte humano relevante a lo que es f<strong>un</strong>ción g<strong>en</strong>eral de la meditación. <strong>La</strong><br />

meditación se ori<strong>en</strong>ta a <strong>un</strong> desarrollo de la conci<strong>en</strong>cia, <strong>un</strong> desarrollo de la<br />

capacidad de estar pres<strong>en</strong>te, y lo más c<strong>en</strong>tral de la terapia Gestáltica es esa<br />

capacidad de estar, de recuperar la capacidad de experi<strong>en</strong>cia que es <strong>un</strong>a<br />

capacidad de pres<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> el aquí y ahora y eso se toca mucho con distintas<br />

formas de meditación. <strong>La</strong> ori<strong>en</strong>tación de la terapia gestáltica muy obviam<strong>en</strong>te se<br />

corresponde con la de la meditación budista original, el llamado Vipassana, que<br />

precisam<strong>en</strong>te consiste <strong>en</strong> el cultivo del aquí y el ahora, <strong>un</strong> cultivo de la at<strong>en</strong>ción al<br />

mom<strong>en</strong>to. Pero si <strong>un</strong>o compara la terapia gestáltica con el Vipassana, se<br />

<strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra con que ciertos aspectos del Vipassana van más hondo que la <strong>Gestalt</strong>.


Pret<strong>en</strong>de pues el Vipassana, tradicionalm<strong>en</strong>te, llegar a la conci<strong>en</strong>cia iluminativa<br />

del Buda –<strong>un</strong> despertar que va más allá de la mejoría sintomática. Y eso lo logra a<br />

través de <strong>un</strong> int<strong>en</strong>to de, no sólo tomar conci<strong>en</strong>cia de lo que sucede <strong>en</strong> el m<strong>un</strong>do<br />

exterior, y no sólo at<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do a lo visual, lo auditivo, lo gustativo, y el cuerpo,<br />

sino haciéndolo <strong>en</strong> <strong>un</strong>a actitud particular, de la cual t<strong>en</strong>dremos ya ocasión de<br />

hablar. Así como el Vipassana ti<strong>en</strong>e algo que aportar al gestaltista, lo mismo se<br />

puede decir de la tradición Z<strong>en</strong>. <strong>La</strong> <strong>Gestalt</strong> surgió al m<strong>un</strong>do <strong>en</strong> <strong>un</strong> ambi<strong>en</strong>te Z<strong>en</strong> –<br />

cuando el Z<strong>en</strong> estaba llegando a California a través de Suzuki y Allan Watts—y fue<br />

recibida la <strong>Gestalt</strong> con brazos abiertos por los buscadores que t<strong>en</strong>ían el olor del<br />

Z<strong>en</strong> <strong>en</strong> las narices. Se puede decir que Perls, a<strong>un</strong>que no tuvo <strong>un</strong>a formación<br />

sistemática Z<strong>en</strong>, t<strong>en</strong>ía mucho aprecio al s<strong>en</strong>tir de la actitud Z<strong>en</strong> que conoció ya <strong>en</strong><br />

Nueva York a través de su amigo y discípulo Paul Weiss. Y se tocan los dos<br />

<strong>en</strong>foques especialm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> la invitación a <strong>un</strong>a postura no conceptual ante la vida,<br />

a <strong>un</strong> callar del p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>to y <strong>un</strong> bajar más hacia el vi<strong>en</strong>tre, hacia el contacto<br />

directo de la experi<strong>en</strong>cia y con el cuerpo. De modo que, cuando <strong>un</strong>o se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra<br />

con el m<strong>un</strong>do tradicional del Z<strong>en</strong>, no sólo descubre numerosos p<strong>un</strong>tos de<br />

contacto, sino que puede apreciar que el <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to Z<strong>en</strong> aporta <strong>un</strong><br />

refinami<strong>en</strong>to con respecto a int<strong>en</strong>ciones ya pres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> la actividad de la <strong>Gestalt</strong>.<br />

No <strong>en</strong>traremos <strong>en</strong> este primer año <strong>en</strong> el Z<strong>en</strong> porque el programa de los tres años<br />

con respecto a meditación consiste <strong>en</strong> <strong>un</strong> recorrido de los tres yanas, las tres<br />

formas cronológicam<strong>en</strong>te sucesivas del budismo: el budismo theravada o<br />

budismo antiguo <strong>en</strong> el primer año, el budismo z<strong>en</strong> <strong>en</strong> el seg<strong>un</strong>do, y durante el<br />

tercer año el budismo tántrico tibetano, que es el que ti<strong>en</strong>e las relaciones más<br />

interesantes con la <strong>Gestalt</strong>. Es el budismo tántrico donde se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra más<br />

desarrollado ese aspecto de la meditación <strong>en</strong> que <strong>un</strong>o se vuelve la cosa meditada:<br />

la meditación con objeto, <strong>en</strong> que <strong>un</strong>o medita <strong>en</strong> algo transformándose <strong>en</strong> ello.<br />

Demás está decir que cualquier gestaltista conoce muy bi<strong>en</strong> ese aspecto de la<br />

<strong>Gestalt</strong> que se resume <strong>en</strong> las palabras “vuélvete eso”, “sé eso”, “sé el objeto del<br />

sueño”, “sé el tono de tu voz”; pero también aquí la ejercitación sistemática de la<br />

capacidad absortiva <strong>en</strong>traña <strong>un</strong> complem<strong>en</strong>to obvio.<br />

Esto es algo que se acerca no sólo a la meditación sino al drama, al teatro; y esto<br />

nos lleva a otro aspecto limítrofe de la <strong>Gestalt</strong> –el ámbito expresivo, que alg<strong>un</strong>a<br />

g<strong>en</strong>te ha cultivado expresam<strong>en</strong>te ya desde tiempos de Perls. A mi me tocó estar<br />

<strong>en</strong> varias clases de pintura con Perls. Naturalm<strong>en</strong>te no se trata de <strong>un</strong>a pintura<br />

para pintores (a<strong>un</strong>que él aspiró <strong>en</strong> <strong>un</strong> tiempo a hacerse pintor) sino <strong>un</strong>a pintura<br />

para buscadores: <strong>un</strong>a pintura c<strong>en</strong>trada no tanto <strong>en</strong> el producto artístico sino <strong>en</strong> el<br />

cultivo de la espontaneidad. Importaba dejar que el pincel hiciera “lo suyo”,<br />

dejando a la mano seguir su propio impulso, respondi<strong>en</strong>do a algo más allá del<br />

control cotidiano que ejercemos sobre nuestros actos. <strong>La</strong> actitud expresiva de la<br />

<strong>Gestalt</strong> es ante todo <strong>un</strong>a terapia expresiva. En nuestro programa este elem<strong>en</strong>to<br />

expresivo estará repres<strong>en</strong>tado no sólo <strong>en</strong> el ámbito de lo plástico sino <strong>en</strong> el de la<br />

voz y la improvisación musical y especialm<strong>en</strong>te (esto durante el seg<strong>un</strong>do año) <strong>en</strong><br />

lo dramático. Así, también <strong>en</strong> este caso lo que he querido hacer <strong>en</strong> la formación<br />

de gestaltistas actuales fue acercarlos a la condición de la persona que creó la<br />

<strong>Gestalt</strong> –pues Perls tuvo el <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to de <strong>un</strong> actor. Ello se reflejó<br />

ab<strong>un</strong>dantem<strong>en</strong>te <strong>en</strong> su trabajo, particularm<strong>en</strong>te durante los últimos años, hasta<br />

el p<strong>un</strong>to de que sus antiguos asociados– los de la escuela de Nueva York, que se


volvieron contra él después de su muerte –llegaron a decir que había traicionado<br />

el espíritu de la <strong>Gestalt</strong>, habiéndose transformado <strong>en</strong> <strong>un</strong> director de teatro. Pero<br />

está claro que se puede decir eso de otra manera: fue <strong>en</strong> esta última época de su<br />

vida cuando más integró <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to teatral que estaba <strong>en</strong> su experi<strong>en</strong>cia desde<br />

la época <strong>en</strong> que había trabajado con el célebre Max Reinhart; y es que a veces<br />

pasan muchos años <strong>en</strong> la vida de <strong>un</strong>a persona antes de que converjan todos los<br />

elem<strong>en</strong>tos formativos que durante <strong>un</strong> tiempo de m<strong>en</strong>os madurez permanec<strong>en</strong><br />

como <strong>en</strong> compartim<strong>en</strong>tos separados.<br />

Así pues, vamos a explorar diversos aledaños de la <strong>Gestalt</strong>: el de lo analítico, el de<br />

lo meditativo y el de lo expresivo, como aspectos complem<strong>en</strong>tarios a <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to<br />

c<strong>en</strong>tral que será la <strong>Gestalt</strong> misma. Y la <strong>Gestalt</strong> misma no estará muy pres<strong>en</strong>te <strong>en</strong><br />

este primer año. Sólo durante el seg<strong>un</strong>do módulo del programa lo estará<br />

ab<strong>un</strong>dantem<strong>en</strong>te, y <strong>en</strong> el tercero se pondrá mucha at<strong>en</strong>ción a la supervisión de la<br />

práctica terapéutica.<br />

Otra área limítrofe de la <strong>Gestalt</strong> (y de cualquier terapia que pret<strong>en</strong>da ser holística<br />

o integrativa) es lo corporal. El “m<strong>un</strong>do del cuerpo” es solam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> apari<strong>en</strong>cia<br />

<strong>un</strong> m<strong>un</strong>do del cuerpo. Durante la década del 70 me tocó pres<strong>en</strong>tar a Moshé<br />

Feld<strong>en</strong>kreis cuando, bajo mis auspicios, hizo su primera aparición <strong>en</strong> Berkeley.<br />

Hablando de este notable innovador <strong>en</strong> el ámbito de las “nuevas somatologías”<br />

(f<strong>un</strong>dador de <strong>un</strong>a escuela ahora m<strong>un</strong>dialm<strong>en</strong>te famosa pero <strong>en</strong>tonces conocido<br />

más que nada <strong>en</strong> Israel), lo pres<strong>en</strong>té al público ing<strong>en</strong>uam<strong>en</strong>te como <strong>un</strong>o de los<br />

grandes g<strong>en</strong>ios <strong>en</strong> el campo de la “terapia corporal” (o más precisam<strong>en</strong>te,<br />

hablando inglés, <strong>en</strong> el terr<strong>en</strong>o de lo que comúnm<strong>en</strong>te se designa como “body<br />

work”). Él protestó, dici<strong>en</strong>do: “Yo no me considero <strong>un</strong>o que trabaja con el cuerpo,<br />

sino con la m<strong>en</strong>te”. Y con pl<strong>en</strong>a razón. Además muchos de los que trabajan <strong>en</strong> el<br />

cuerpo <strong>en</strong> realidad están trabajando <strong>en</strong> lo psicológico y <strong>en</strong> el espíritu. Mucho <strong>en</strong><br />

las terapias corporales ti<strong>en</strong>e relación con la at<strong>en</strong>ción, por ejemplo, y puede<br />

considerarse <strong>un</strong>a ext<strong>en</strong>sión de la meditación; y otro tanto ap<strong>un</strong>ta a la<br />

espontaneidad expresiva, y resulta difícilm<strong>en</strong>te separable del quehacer<br />

terapéutico a nivel emocional.<br />

Se incluy<strong>en</strong> actividades del m<strong>un</strong>do de la “terapia corporal” <strong>en</strong> cada <strong>un</strong>o de los tres<br />

niveles de nuestro programa. Encontrarán <strong>en</strong> él la gimnasia expresiva que se<br />

asocia con la escuela de Río Abierto, repres<strong>en</strong>tada por Graciela Figueroa;<br />

<strong>en</strong>contrarán también algo de la educación de la at<strong>en</strong>ción <strong>en</strong> el movimi<strong>en</strong>to<br />

introducida por Feld<strong>en</strong>kreis, y <strong>un</strong> trabajo de conci<strong>en</strong>cia del cuerpo <strong>en</strong> reposo que<br />

deriva de las influ<strong>en</strong>cias combinadas del yoga y de la Eutonía de Gerda<br />

Alexander. Particularm<strong>en</strong>te revelante a lo psicoterapéutico y al ámbito de la<br />

<strong>Gestalt</strong> serán las experi<strong>en</strong>cias que t<strong>en</strong>drán durante el seg<strong>un</strong>do y tercer año a<br />

través del uso de la respiración <strong>en</strong> la inducción de experi<strong>en</strong>cias regresivas<br />

prof<strong>un</strong>das –a través de la síntesis que Cherif Chalakani e Ilse Kretzschmar han<br />

elaborado <strong>en</strong>tre la técnica de r<strong>en</strong>acimi<strong>en</strong>to de Orr y la técnica de respiración<br />

holotrópica de Grof, c<strong>en</strong>trada <strong>en</strong> las “matrices perinatales”.<br />

Aún otra línea de actividad que se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra con la <strong>Gestalt</strong> es <strong>un</strong>a que se podría<br />

considerar parte de la meditación pero no se llama corri<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te “meditación”<br />

(y que, a mi juicio, no está sufici<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te <strong>en</strong>fatizada <strong>en</strong> el m<strong>un</strong>do de la terapia<br />

actual). Me refiero al cultivo de la at<strong>en</strong>ción <strong>en</strong> la vida cotidiana. Cuando se habla<br />

de “trabajar <strong>en</strong> <strong>un</strong>o mismo” día a día, y mom<strong>en</strong>to a mom<strong>en</strong>to, <strong>un</strong>o de los


elem<strong>en</strong>tos más importantes, más allá de lo interpersonal, es el vivir lo más<br />

conci<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te posible, y <strong>en</strong> este afán de estar consci<strong>en</strong>te ti<strong>en</strong>e bastante<br />

importancia –<strong>un</strong>a importancia que <strong>un</strong>o va descubri<strong>en</strong>do con la experi<strong>en</strong>cia- la<br />

at<strong>en</strong>ción a cosas muy de este m<strong>un</strong>do. Com<strong>en</strong>zando con la at<strong>en</strong>ción al cuerpo<br />

mismo. <strong>La</strong> at<strong>en</strong>ción al cuerpo se puede trabajar <strong>en</strong> forma relativam<strong>en</strong>te<br />

especializada <strong>en</strong> trabajos tipo eutonía, gimnasia expresiva, Feld<strong>en</strong>kreis o<br />

bio<strong>en</strong>ergética. Pero hay <strong>un</strong> aspecto que ha sido cultivado tradicionalm<strong>en</strong>te <strong>en</strong> las<br />

escuelas espirituales del pasado –como el Sufismo y el Budismo: aquel que ti<strong>en</strong>e<br />

relación con el “estar pres<strong>en</strong>te” <strong>en</strong> lo cotidiano, y con el desarrollo de <strong>un</strong>a<br />

continuidad <strong>en</strong> la at<strong>en</strong>ción a través de las actividades prácticas de la vida. Me<br />

parece que mi<strong>en</strong>tras más vamos despertando al s<strong>en</strong>tido de la vida, es inevitable<br />

que vayamos apreciando cuán cierto es que –como decían los antiguos- ars l<strong>un</strong>ga,<br />

vita brevis. Y <strong>en</strong> vista de ello nos tornamos apreciativos a la idea de que convi<strong>en</strong>e<br />

aprovechar todas las situaciones de la vida para nuestro progreso evolutivo. En lo<br />

tocante a at<strong>en</strong>ción <strong>en</strong> la vida cotidiana las tareas pued<strong>en</strong> ser múltiples, pero lo<br />

más importante es acostumbrarse a ponerlas <strong>en</strong> práctica. Como Ousp<strong>en</strong>sky<br />

com<strong>en</strong>taba: necesitamos acostumbrarnos a t<strong>en</strong>er “p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>tos largos”; a que el<br />

deseo de hacer <strong>un</strong> trabajo no este solam<strong>en</strong>te activado por la situación de asistir a<br />

<strong>un</strong>a clase o a <strong>un</strong>a situación dirigida, o por la motivación del sufrimi<strong>en</strong>to, sino que<br />

<strong>un</strong>o lleve consigo, ya como seg<strong>un</strong>da naturaleza, el int<strong>en</strong>to de ser testigo de la<br />

propia vida. Y para ser testigo de la propia vida a veces hay que com<strong>en</strong>zar por ser<br />

testigo de los pies, o ser testigo de las manos, o de la expresión de nuestro rostro;<br />

cosas que no son tan sutiles como las emociones y los p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>tos. Un grupo<br />

re<strong>un</strong>ido como éste, <strong>en</strong> <strong>un</strong>a situación resid<strong>en</strong>cial, se presta idealm<strong>en</strong>te para<br />

cultivar –por lo m<strong>en</strong>os experim<strong>en</strong>talm<strong>en</strong>te- <strong>un</strong>a actitud de trabajo int<strong>en</strong>sivo<br />

como describo; de trabajar no solam<strong>en</strong>te durante re<strong>un</strong>iones formales, e int<strong>en</strong>tar<br />

crear el hábito de optimizar la propia conci<strong>en</strong>cia durante todas las horas de<br />

vigilia. Podrá parecer <strong>un</strong> poco ambicioso trabajar durante el sueño, pero aún eso<br />

podrá pret<strong>en</strong>derse más adelante –no olvidarse de la at<strong>en</strong>ción aún <strong>en</strong> el soñar.<br />

Aún me queda por <strong>en</strong>umerar <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to <strong>en</strong> nuestro programa que podrá<br />

designarse como <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to conductista, <strong>en</strong> cuanto <strong>en</strong>traña la exploración<br />

personal de la modificación de la propia conducta y <strong>un</strong>a experim<strong>en</strong>tación con el<br />

cuestionami<strong>en</strong>to sistemático de los propios esquemas refer<strong>en</strong>ciales cognitivos. Se<br />

ha dicho que la <strong>Gestalt</strong> es <strong>un</strong> híbrido de auto-conocimi<strong>en</strong>to y modificación de la<br />

conducta. El trabajo apoyado <strong>en</strong> el <strong>en</strong>eagrama, que irán conoci<strong>en</strong>do, también<br />

conti<strong>en</strong>e esas dos dim<strong>en</strong>siones. Se aplica el conocimi<strong>en</strong>to de los <strong>en</strong>eatipos al<br />

auto-conocimi<strong>en</strong>to, como <strong>un</strong> mapa que sirve de p<strong>un</strong>to de refer<strong>en</strong>cia para la<br />

observación, pero también se utiliza como <strong>un</strong> mapa que sirve de p<strong>un</strong>to de apoyo<br />

al desarrollar conductas alternativas a las habituales. Que no es otra cosa que lo<br />

que se pret<strong>en</strong>de con la modificación de conducta cuando es llevada al nivel de las<br />

conductas más sutiles y g<strong>en</strong>eralizadas que constituy<strong>en</strong> el núcleo cognitivo y<br />

emocional de nuestra personalidad. Así, sin ambicionar <strong>un</strong>a revisión de los<br />

aportes del conductismo, aplicaremos algo de su ars<strong>en</strong>al práctico como<br />

complem<strong>en</strong>to a <strong>un</strong> int<strong>en</strong>to más antiguo y a la luz de <strong>un</strong> esqueleto teórico<br />

alternativo.<br />

¿Y qué más? Hay, por último <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to grupal. Toda terapia integrativa se<br />

apoya fuertem<strong>en</strong>te –por supuesto- <strong>en</strong> <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to de <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tro. Ap<strong>en</strong>as


t<strong>en</strong>dremos actividades formales de <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tro, pero impregnando el conj<strong>un</strong>to de<br />

nuestra actividad estará la idea de <strong>un</strong>a “retribalización sanadora”. Podemos decir<br />

que la neurosis se manti<strong>en</strong>e no sólo a exp<strong>en</strong>sas de oscuridad, de <strong>un</strong> no saber o <strong>un</strong><br />

no querer saber, de <strong>un</strong> esconderse de <strong>un</strong>o mismo; también se perpetúa a través<br />

de <strong>un</strong>a ruptura de la grupalidad, de <strong>un</strong>a ruptura del s<strong>en</strong>tido de com<strong>un</strong>idad, de<br />

<strong>un</strong>a quiebra amorosa y <strong>un</strong>a pérdida del s<strong>en</strong>tido de hermandad con nuestros<br />

semejantes. Los grupos, además de constituir situaciones <strong>en</strong> que muchas<br />

personas trabajan j<strong>un</strong>tas, son implícitam<strong>en</strong>te situaciones <strong>en</strong> que se ti<strong>en</strong>e lo que se<br />

podría llamar <strong>un</strong> “factor de grupo”, o <strong>un</strong>a “<strong>en</strong>ergía de grupo” que le da otra<br />

dim<strong>en</strong>sión a las cosas y <strong>en</strong>traña <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to de contagio. Se puede decir que éste<br />

es <strong>un</strong> factor que los participantes invocan <strong>en</strong> la medida <strong>en</strong> que pon<strong>en</strong> algo de su<br />

parte. Es decir: si <strong>un</strong>o se pone <strong>en</strong> el grupo no como <strong>un</strong> individuo aislado <strong>en</strong> <strong>un</strong>a<br />

relación única con el que <strong>en</strong>seña, sino que adopta <strong>un</strong> cierto espíritu de<br />

com<strong>un</strong>idad, tanto más este factor grupal le responde. ¿Qué es esto de adoptar<br />

<strong>un</strong>a actitud de com<strong>un</strong>idad? Yo creo que se reduce principalm<strong>en</strong>te a dos cosas.<br />

Una, <strong>un</strong>a actitud de transpar<strong>en</strong>cia, <strong>un</strong>a disposición a lo que podía describirse<br />

como <strong>un</strong> desnudarse <strong>en</strong> grupo. Naturalm<strong>en</strong>te esto no puede dejar de ocurrir <strong>en</strong><br />

<strong>un</strong>a sesión de <strong>Gestalt</strong>, pero me refiero más bi<strong>en</strong> a la com<strong>un</strong>icación que se hace <strong>en</strong><br />

otras situaciones –tales como aquellas <strong>en</strong> que se compart<strong>en</strong> experi<strong>en</strong>cias después<br />

de ejercicios <strong>en</strong> pequeños grupos. Cuando <strong>un</strong>a persona esta dispuesta a mant<strong>en</strong>er<br />

la misma aut<strong>en</strong>ticidad <strong>en</strong> la situación grupal que <strong>en</strong> <strong>un</strong>a situación individual, este<br />

acto de desnudami<strong>en</strong>to, de aut<strong>en</strong>ticidad, de riesgo y capacidad de mostrarse (a<br />

pesar de que el grupo <strong>en</strong>trañaría <strong>un</strong>a t<strong>en</strong>tación de <strong>en</strong>mascarami<strong>en</strong>to social) ese<br />

factor de transpar<strong>en</strong>cia grupal, trae como respuesta algo así como <strong>un</strong> efecto de<br />

amplificación de su conci<strong>en</strong>cia. Lo otro es algo así como <strong>un</strong> pacto. Un pacto que<br />

podría describirse dici<strong>en</strong>do que <strong>en</strong> la lucha contra el ego (llamemos así,<br />

simplem<strong>en</strong>te a la pequeña m<strong>en</strong>te limitante contra la cual estamos todos<br />

interesados <strong>en</strong> ir) podemos establecer <strong>un</strong>a alianza provisional para inhibir el<br />

grado de destructividad y manipulación que <strong>un</strong>o ti<strong>en</strong>e normalm<strong>en</strong>te <strong>en</strong>tre la<br />

g<strong>en</strong>te. Nos comportamos como si <strong>en</strong> el m<strong>un</strong>do <strong>un</strong> cierto nivel de manipulación<br />

nos pareciese indisp<strong>en</strong>sable para la vida o para la superviv<strong>en</strong>cia. Puede ser que<br />

haya aquí g<strong>en</strong>te muy cristiana o que, inspirado por <strong>un</strong>a u otra tradición o<br />

ideología, sost<strong>en</strong>ga que hay que ser veraces, que no hay que m<strong>en</strong>tir, que no hay<br />

que dañar, etc. Pero a pesar de los diez mandami<strong>en</strong>tos y otras normas, existe <strong>un</strong><br />

cierto nivel bastante alto de daño y manipulación <strong>en</strong> la sociedad, y sólo <strong>un</strong>a<br />

persona muy comprometida con <strong>un</strong> camino interior rompe la implícita “norma”.<br />

Yo creo que <strong>un</strong> grupo como el nuestro puede b<strong>en</strong>eficiarse explorando <strong>un</strong>a especie<br />

de compromiso de “hermandad” transitoria. Propongo que durante los días del<br />

programa se trate de m<strong>en</strong>tir m<strong>en</strong>os, de manipular m<strong>en</strong>os, de dañar m<strong>en</strong>os a los<br />

compañeros que están <strong>en</strong> esta misma empresa. Creo que <strong>un</strong>a actitud tal sirve<br />

muchísimo; crea algo así como <strong>un</strong> cuerpo psíquico colectivo, a<strong>un</strong>que transitorio,<br />

que pot<strong>en</strong>cia la actividad del individuo.<br />

Resumiré, <strong>en</strong>tonces, dici<strong>en</strong>do que habrá <strong>un</strong> fuerte factor de “dinámica de grupo”<br />

a<strong>un</strong>que no esté d<strong>en</strong>tro del currículo algo que se llame explícitam<strong>en</strong>te “<strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tro”<br />

o dinámica de grupo”. Ello estará, más bi<strong>en</strong>, <strong>en</strong> los intersticios de todo lo demás.<br />

Otro elem<strong>en</strong>to que estará <strong>en</strong> los intersticios, omnipres<strong>en</strong>te, pero <strong>en</strong> dosis<br />

homeopáticas, será <strong>un</strong> elem<strong>en</strong>to teórico de tipo <strong>integrativo</strong>. No habrá aquí ni


teoría de esto, ni teoría de lo otro –a excepción de ciertos elem<strong>en</strong>tos del Budismo<br />

(ya diré oport<strong>un</strong>am<strong>en</strong>te por qué Budismo) que constituy<strong>en</strong> el <strong>contexto</strong> apropiado<br />

para la meditación, así como también ciertos elem<strong>en</strong>tos del Protoanálisis. Pero<br />

también habrá, <strong>en</strong> pequeñas dosis <strong>un</strong> ap<strong>un</strong>tar a “cómo <strong>un</strong>a cosa se toca con otra”.<br />

Me tocó alg<strong>un</strong>a vez ser profesor de religión comparada y he sido <strong>un</strong> buscador<br />

muy sedi<strong>en</strong>to de muchas fu<strong>en</strong>tes, y ambas cosas han contribuido a hacerme <strong>un</strong><br />

integrador. Imagino que se desarrollará, a través de nuestra actividad <strong>un</strong>a<br />

compr<strong>en</strong>sión implícita de cómo converg<strong>en</strong> distintas ideas y técnicas <strong>en</strong> el nivel<br />

viv<strong>en</strong>cial. Creo que también <strong>un</strong>o de los aportes míos más personales suele ser el<br />

saber cond<strong>en</strong>sar <strong>en</strong> pocas palabras –como “de contrabando” <strong>en</strong>tre las grietas de<br />

distintas actividades- intuiciones que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que ver con la integración del<br />

conocimi<strong>en</strong>to psico-espiritual. Entonces, así como no habrá “dinámica de grupo”<br />

<strong>en</strong> el currículo, no habrá teoría de ning<strong>un</strong>a cosa <strong>en</strong> particular, ni siquiera aquella<br />

“metodología comparada de los caminos de desarrollo” que propongo <strong>en</strong> <strong>La</strong><br />

Única Búsqueda, pero sí <strong>un</strong> perfume trans-sistémico y la com<strong>un</strong>icación de <strong>un</strong>a<br />

compr<strong>en</strong>sión sintética con respecto a “cómo es la cosa” <strong>en</strong> el que todos estamos<br />

metidos: nuestra situación humana que toca la psicología por <strong>un</strong>a parte y que<br />

toca por otra parte todas las tradiciones espirituales.<br />

Me queda aún <strong>un</strong>a actividad por m<strong>en</strong>cionar, y <strong>un</strong>a no inconsiderable <strong>en</strong> términos<br />

del tiempo que ha de ocupar: el escribir. Muchas actividades (especialm<strong>en</strong>te el<br />

Proceso Fischer-Hoffman) involucrarán el escribir. Pero además de las cosas que<br />

se especifiqu<strong>en</strong> como recom<strong>en</strong>daciones o tareas de día –tareas de escribir sobre<br />

tal o cual cosa– les recomi<strong>en</strong>do que llev<strong>en</strong> <strong>un</strong> diario, y que pongan at<strong>en</strong>ción a los<br />

sueños. No habrá ning<strong>un</strong>a actividad dirigida a los sueños durante este año, y por<br />

ello quiero recom<strong>en</strong>dar <strong>un</strong> diario de sueños especialm<strong>en</strong>te: será como <strong>un</strong><br />

complem<strong>en</strong>to a todo lo demás. Esta actividad estimulará el soñar. El sólo hecho<br />

de que, sin ánimo de hacer otra cosa con los sueños más allá de tomar nota de<br />

ellos, los escriban simplem<strong>en</strong>te, será <strong>un</strong>a manera de tomar contacto<br />

espontáneam<strong>en</strong>te con lo que los sueños quier<strong>en</strong> decir”.<br />

Por haber sido esta <strong>un</strong>a charla de apertura al primer ciclo del programa SAT no<br />

quise recargar a mi auditorio con detalles concerni<strong>en</strong>tes al programa de<br />

formación de <strong>Gestalt</strong> propiam<strong>en</strong>te tal, y por ello quiero m<strong>en</strong>cionar aquí<br />

brevem<strong>en</strong>te que éste no se limita a proveer las experi<strong>en</strong>cias de participación <strong>en</strong><br />

grupos dirigidos por <strong>un</strong> amplio espectro de terapeutas (seg<strong>un</strong>do año), ni a la<br />

supervisión de sesiones terapéuticas cotidianas <strong>en</strong>tre los participantes (tercer<br />

año), sino que compr<strong>en</strong>de elem<strong>en</strong>tos de formación práctica <strong>en</strong> lo tocante a<br />

capacidades terapéuticas que pudieran llamarse <strong>un</strong>iversales, tales como el saber<br />

escuchar, reflejar, preg<strong>un</strong>tar, interrumpir o no interrumpir, confrontar y ante<br />

todo, estar pres<strong>en</strong>te.<br />

Sin <strong>en</strong>trar <strong>en</strong> mayores detalles <strong>en</strong> este tema que podría ser el objeto de <strong>un</strong>a<br />

pres<strong>en</strong>tación futura, m<strong>en</strong>ciono el as<strong>un</strong>to de <strong>un</strong> desarrollo de tales capacidades<br />

interpersonales para sugerir que aún <strong>en</strong> éste aspecto del <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to de <strong>un</strong><br />

gestaltista se puede p<strong>en</strong>sar <strong>en</strong> <strong>un</strong>a amplificación y <strong>un</strong> <strong>en</strong>riquecimi<strong>en</strong>to de la<br />

situación clásica de apr<strong>en</strong>dizaje.<br />

Terminaré dici<strong>en</strong>do que me complacería mucho (a<strong>un</strong>que no lo había p<strong>en</strong>sado<br />

antes) que estas ideas pudieran ayudar no sólo a qui<strong>en</strong>es ya han ayudado sino<br />

también a otros, a través de <strong>un</strong>a influ<strong>en</strong>cia b<strong>en</strong>éfica sobre los actuales c<strong>en</strong>tros de


<strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>to. Es cierto que muchos factores provid<strong>en</strong>ciales han incidido <strong>en</strong> la<br />

vitalidad del SAT –y <strong>en</strong>tre ellos la conj<strong>un</strong>ción de mis múltiples <strong>en</strong>tr<strong>en</strong>ami<strong>en</strong>tos y<br />

la g<strong>en</strong>erosa colaboración de excel<strong>en</strong>tes colegas, pero no creo que la validez del<br />

currículo esté condicionada por <strong>un</strong> grupo determinado de personas: sólo es<br />

importante la calidad de los doc<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> sus especialidades y su bu<strong>en</strong>a acción<br />

coordinada.<br />

Agregado<br />

Desde que escribí esto a comi<strong>en</strong>zos de los nov<strong>en</strong>ta los programas SAT <strong>en</strong> España<br />

continúan y han com<strong>en</strong>zado a realizarse también <strong>en</strong> otros países. También han<br />

evolucionado, tornándose cada vez más efici<strong>en</strong>tes y breves, llegando ahora a tres<br />

módulos de diez días y <strong>un</strong>o de cinco días. Y a<strong>un</strong>que <strong>en</strong> su conting<strong>en</strong>te continúa<br />

habi<strong>en</strong>do <strong>un</strong>a proporción considerable de gestaltistas, acud<strong>en</strong> también a ellos<br />

muchos profesores y cada vez más he ido abri<strong>en</strong>do las puertas de estos<br />

programas a buscadores, sin mayor interés <strong>en</strong> la formación profesional.<br />

Y no siempre se habla ya del Programa SAT como <strong>un</strong>o destinado específicam<strong>en</strong>te<br />

a la formación de gestaltistas. Muchos <strong>en</strong>tre qui<strong>en</strong>es se gradúan <strong>en</strong> éste, an<strong>un</strong>cian<br />

luego su trabajo, apropiadam<strong>en</strong>te, como “Psicoterapia Integrativa” y durante el<br />

hom<strong>en</strong>aje que me hicieron los psicólogos chil<strong>en</strong>os <strong>en</strong> la Universidad de Chile,<br />

años atrás, lo describí como “<strong>un</strong> programa transpersonal e <strong>integrativo</strong> para la<br />

formación de ag<strong>en</strong>tes de cambio”.<br />

Últimam<strong>en</strong>te empieza a aplicarse el programa a la formación específica de<br />

educadores y, si no me equivoco <strong>en</strong> p<strong>en</strong>sar que el Proceso SAT sea<br />

pot<strong>en</strong>cialm<strong>en</strong>te <strong>un</strong> factor clave para esa transformación radical de la educación<br />

que sería necesaria para la formación de la sociedad, podría decirse que es <strong>en</strong><br />

parte a la <strong>Gestalt</strong> española que lo ha acogido e incubado, a la que deberá<br />

atribuirse el mérito.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!