La crisis mundial y sus impactos polÃticos en América del Sur - CEFIR
La crisis mundial y sus impactos polÃticos en América del Sur - CEFIR
La crisis mundial y sus impactos polÃticos en América del Sur - CEFIR
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
62 Gerardo Caetano<br />
Lo cierto es —según señala el informe— que el apoyo a la democracia supera <strong>en</strong> el año<br />
2009 lo obt<strong>en</strong>ido <strong>en</strong> el año 2006 (58%), alcanzando un 59%. El año 2006 fue el punto<br />
más alto de crecimi<strong>en</strong>to económico que América <strong>La</strong>tina ha t<strong>en</strong>ido <strong>en</strong> los últimos 40<br />
años. En efecto, el apoyo a la democracia que baja a 54% <strong>en</strong> el año 2007, vi<strong>en</strong>e subi<strong>en</strong>do<br />
desde <strong>en</strong>tonces a 57% <strong>en</strong> el 2008 para llegar al 59% <strong>en</strong> el año 2009. Es decir, el apoyo<br />
aum<strong>en</strong>ta más <strong>en</strong> el año de decrecimi<strong>en</strong>to económico, negándose la hipótesis de que el<br />
vaivén de la economía ti<strong>en</strong>e impacto sobre el apoyo a la democracia. […] Los latinoamericanos<br />
muestran con <strong>sus</strong> respuestas que el año 2008 fue m<strong>en</strong>os bu<strong>en</strong>o que el año<br />
2009, al mismo tiempo que acusan la <strong>crisis</strong> d<strong>en</strong>ostando los problemas económicos y las<br />
desigualdades. No se trata <strong>en</strong>tonces de una miopía o de una ilusión, sino más bi<strong>en</strong> de<br />
consideración de otros aspectos <strong>en</strong> la evaluación <strong>del</strong> tipo de régim<strong>en</strong>. 53<br />
Este marco de análisis aparece ratificado <strong>en</strong> otras mediciones: la afirmación acerca<br />
de que «<strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral el sistema económico funciona bi<strong>en</strong>» <strong>en</strong> una democracia aum<strong>en</strong>ta<br />
su nivel de acuerdo de un 50% <strong>en</strong> el 2003 a un 62% <strong>en</strong> el 2009; <strong>en</strong> los únicos<br />
dos países sudamericanos <strong>en</strong> los que creció el PBI <strong>en</strong> el 2009, Perú y Uruguay, se<br />
verifican sin embargo las posiciones más contrastantes <strong>en</strong> cuanto al porc<strong>en</strong>taje de<br />
satisfacción con la democracia, 22 y 79% respectivam<strong>en</strong>te. En otro pasaje <strong>del</strong> informe,<br />
los analistas infier<strong>en</strong> que<br />
los Presid<strong>en</strong>tes son los grandes ganadores de esta <strong>crisis</strong>, ya que no sólo aum<strong>en</strong>ta su valoración<br />
política como gobernantes, sino que también logran mejorar la percepción de<br />
la democracia <strong>en</strong> <strong>sus</strong> países. Esta <strong>crisis</strong> produce, por el contrario de lo esperado, efectos<br />
políticos positivos sobre el régim<strong>en</strong> democrático y los gobiernos. […] No se produce<br />
alternancia de la izquierda a la derecha o viceversa por motivos económicos de la <strong>crisis</strong><br />
como se suponía <strong>en</strong> un principio que podía suceder. Muy por el contrario, los cambios<br />
<strong>en</strong> los gobiernos no han sido por esa causa, sino por otras que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que ver con la<br />
situación (política más que económica) interna de cada país. 54<br />
En su análisis específico titulado «Sinóptica política-electoral: la ola de elecciones<br />
2009-2011», inserto <strong>en</strong> el informe, Daniel Zovatto, al igual que <strong>en</strong> el informe <strong>del</strong> año<br />
anterior, explora acerca de las posibles consecu<strong>en</strong>cias <strong>del</strong> impacto de la <strong>crisis</strong> <strong>en</strong> los<br />
resultados <strong>del</strong> cal<strong>en</strong>dario electoral <strong>del</strong> bi<strong>en</strong>io. Algunas de las principales t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cias<br />
que registra son las sigui<strong>en</strong>tes: reafirma su convicción sobre que el «giro a la izquierda»<br />
<strong>en</strong> la región es más «supuesto» que real; destaca que los <strong>impactos</strong> político electorales<br />
de la <strong>crisis</strong> no resultan homogéneos ni muchas veces previsibles; no advierte «la<br />
posibilidad de una reconfiguración radical <strong>del</strong> esc<strong>en</strong>ario político de la región», ya que<br />
si bi<strong>en</strong> «las <strong>crisis</strong> económicas […] b<strong>en</strong>efician a la oposición, el gobierno puede mant<strong>en</strong>erse<br />
<strong>en</strong> el poder cuando ti<strong>en</strong>e la habilidad y los recursos (sobre todo para llevar a<br />
cabo políticas anticíclicas) y transformar la <strong>crisis</strong> económica <strong>en</strong> oportunidad política»;<br />
finalm<strong>en</strong>te, destaca al reeleccionismo como la «t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia que vi<strong>en</strong>e cobrando cada<br />
vez mayor fuerza», lo que a su juicio no constituye «una bu<strong>en</strong>a noticia para la calidad<br />
de la democracia <strong>en</strong> nuestra región». 55<br />
53 Ibídem, p. 18.<br />
54 Ibídem, p. 83.<br />
55 Ibídem, pp. 58 y 59.