Estrategia de Fomento Forestal - magfor

Propuesta de Estrategia de Fomento Forestal
Esto significa que la existencia del recurso
forestal en el 2001 se ve aumentado
en un 68 y 2.5% en el bosque latifoliado
y de pinar respectivamente, y disminuido
en un 55.5% en el caso del bosque
de manglar, con respecto a lo informado
en el año 2000. A excepción del bosque
de pinar las diferencias en los otros dos
tipos de bosque se pueden considerar
de alta significancia. Con respecto al total
de hectáreas de bosque, en el 2001
hay un aumento del 52.7% en relación
al 2000, lo cual resulta también relativamente
alto. De todas maneras habría
que realizar un análisis de mayor profundidad
para determinar las causas de
semejante discrepancia entre la cantidad
estimada de área con cobertura boscosa
del informe 2000 de INAFOR y el mapa
del año 2001.
Quizás uno de los mayores inconvenientes
en el fomento forestal estribe en la
falta de valoración de acuerdo a su importancia
ecológica y comercial de los
bosques. A nivel mundial los bosques
proporcionan madera para construcciones
pero principalmente de viviendas,
biomasa para leña, pulpa para papel,
medicinas y muchos otros productos con
un valor estimado de más de 300 billones
de dólares americanos por año. En el
caso de los bosques tropicales, su valoración
consiste en que albergan entre un
50-90% de todas las especies del mundo
y de las cuales la mayoría todavía son
desconocidas y mucho menos clasificadas.
El biólogo Edward O. Wilson estima
que para el año 2022 al menos el 20%
de los bosques tropicales desaparecerían
y para el 2042 hasta el 50%, si las
actuales tasas de deforestación y degradación
continúan iguales (es decir, sin
considerar el crecimiento poblacional!).
En el caso de que tales estimaciones
sean correctas, estaríamos ante un caso
de extinción que no ha ocurrido ni siquiera
en los últimos 65 millones de años de
vida terrestre.
Los bosques tropicales suministran la
mitad de la cosecha anual de madera
de todo el mundo, cientos de productos
alimenticios (se incluyen café, té, especias,
nueces, chocolate y frutas tropicales)
y materiales tales como hule natural,
resinas, tintas y aceites esenciales
que pueden ser cosechados de forma
sostenible. En 1988, un estudio científico
demostró que la cosecha sostenible
de tales productos no maderables en el
bosque tropical húmedo del Amazonas,
generaría el doble de las ganancias obtenidas
por la producción maderera y el
triple de las ganancias producidas de la
conversión a pastizales para la producción
ganadera. Las ventas comerciales
de medicinas con ingredientes activos
derivados de bosques del trópico húmedo
se estiman en un total de 100 billones
de dólares americanos por año a nivel
mundial y sólo en los Estados Unidos
significan 15.5 billones de dólares por
año. También se ha estimado que una
hectárea de bosque tropical puede significar
un estimado de producción valorado
en 448.07 dólares americanos por
año distribuidos en 202.95 en productos
maderables y no maderables, 16.1 en
servicios ecológicos, 219.3 en servicios
ambientales y 9.72 en otros productos.
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