29/06/2009. SAN PRUDENCIO HOY Nº 33 verano 09 (2,84 Mb.)

consumo responsable
EL COMPROMISO CON LOS PRODUCTOS RESPONSABLES
El progresivo aumento de población que padece nuestro
planeta choca muchas veces con el limitado acceso a
los recursos que tienen gran parte de los ciudadanos.
En la actualidad, el planeta sufre una población de
aproximadamente 7.000 millones de habitantes de
los que más de 1.500 millones de personas viven en
situación de pobreza extrema con menos de un dólar al
día según el Banco Mundial.
El actual ritmo de vida de los países desarrollados, los
residuos que se generan así como la gran cantidad
de productos útiles que acaban directamente en la
basura son hábitos de consumo contra los que hay
que luchar con el objetivo de conseguir un mundo más
responsable.
Organizaciones como Naciones Unidas cuentan con
programas especiales cuyo objetivo es la promoción
del uso sostenible de los recursos así como la eficiencia
ambiental. Para la eficacia de estos programas se cuenta
con la participación de grandes entidades como el
Banco para el Desarrollo de Asia así como con entidades
locales.
Productos y servicios responsables
Con este panorama son cada vez más las empresas que
se preocupan por mantener una relación satisfactoria no
sólo con la comunidad en la que se ubica sino también
con el medio ambiente. Hace años se entendía la empresa
como aquella entidad que fabricaba sus productos y los
vendía para conseguir el máximo beneficio. Sin embargo,
hoy en día la sociedad ya no está dispuesta a tolerar
algunos comportamientos y ya es patente un progresivo
cambio de valores en las empresas.
El respeto por el medio ambiente, por los derechos
humanos, el compromiso con la sociedad, etc. son ya
valores que los consumidores empiezan a tener en
cuenta a la hora de tomar la decisión de compra. Según
diferentes estudios, más de la mitad de la población
elegiría productos responsables aunque les costara
más dinero. Estas prácticas son muy positivas ya que
al empleado le motiva saber que desempeña su labor
profesional en una empresa socialmente responsable.
Además, de cara a las ventas, los consumidores perciben
estos productos bajo una óptica positiva aunque sean
algo más caros.
Así, los valores que el consumidor tiene cada vez más
en cuenta son:
- ayudas a grupos desfavorecidos.
- mejora en las condiciones de vida en países
del tercer mundo.
- integración de inmigrantes.
- eco-packaging.
- etiquetado “sin trabajo infantil”.
Para saber más: www.consumoresponsable.org
15