aprendiendo-a-promover-la-salud

Comer Es lo Primero
CAPÍTULO
25
La buena salud depende de muchas cosas, pero ante todo de tener suficiente para comer.
Una persona que no consume suficiente de los alimentos que necesita su cuerpo, enflaquece
y se debilita. No puede resistir las infecciones y otras enfermedades. Además, la incapacidad
y la muerte ocasionadas por muchas enfermedades (especialmente diarrea, sarampión
y tuberculosis) son más frecuentes en personas que están mal
alimentadas. La mala alimentación, con sus enfermedades
relacionadas, causa más muertes que ningún otro problema y es
en especial un gran peligro para los niños pequeños.
Los alimentos deben ser la primera preocupación
del trabajo de salud en una comunidad donde la gente
sufre hambre o hay muchos desnutridos.
eL PROBLEMA DE LA MALA ALIMENTACION
Antes de que los promotores inicien determinadas actividades
de nutrición, es importante que estudien en su totalidad los
problemas de alimentación de la gente. Los planificadores y los
expertos han probado muchos enfoques para combatir el hambre
y la desnutrición. Pero a pesar de haberse gastado billones en la
extensión agrícola, en la Revolución Verde, en sistemas de riego,
en proyectos de desarrollo, en suplementos alimenticios y en centros de nutrición,
actualmente hay más niños desnutridos que nunca en la historia humana.
Una razón por la que fallan tantos esfuerzos es que generalmente los han organizado
personas que nunca han sufrido de hambre o de desnutrición. Muchas veces los
planificadores y los científicos se ciegan ante importantes factores sociales que
están dolorosamente claros para los pobres. Como resultado, los nuevos métodos y
tecnologías que intentan reducir la desnutrición, acaban repetidas veces por beneficiar
a los bien alimentados a expensas de los hambrientos. Los promotores que siguen
ciegamente los planes de expertos de fuera pueden cometer errores parecidos
fácilmente.
Así que es importante que los promotores y sus instructores no simplemente acepten
los métodos de normas para tratar con problemas de nutrición.
Necesitan examinar críticamente las sugerencias de fuereños y
utilizar sólo lo que se adapte a las necesidades de la gente de su
propia región.
Cualquier plan de nutrición que utilice un
promotor debe ser elaborado y adaptado con la
ayuda de la gente a la que va destinado a servir.