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PRUEBAS DE FUNCIÓN PANCREÁTICA EXOCRINA

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<strong>PRUEBAS</strong> <strong>DE</strong> FUNCIÓN<br />

PANCREÁTICA <strong>EXOCRINA</strong><br />

Revis Gastroenterol 2000; 4: 167-176<br />

E. Sanz de Villalobos,<br />

F. Carballo Álvarez<br />

Sección de Digestivo y Unidad<br />

de Investigación.<br />

Hospital Universitario de Guadalajara.<br />

INSALUD. Departamento de Medicina.<br />

Universidad de Alcalá<br />

INTRODUCCIÓN<br />

La vertiente exocrina del páncreas es indispensable<br />

para el proceso de absorción intestinal.<br />

No obstante, una disminución leve<br />

o moderada de la producción de enzimas pancreáticas<br />

puede perfectamente ser tolerada sin que<br />

aparezcan manifestaciones clínicas. Dada la gran<br />

capacidad de reserva funcional del páncreas, sólo<br />

cuando la insuficiencia exocrina es muy importante<br />

aparecen las típicas manifestaciones de la mal a b s o r-<br />

ción por maldigestión. En esta fase, en que la esteatorrea<br />

suele ser evidente, las pruebas de<br />

función pancreática exocrina son suficientemente<br />

precisas, aunque útiles sólo para confirmar el origen<br />

de la malabsorción. Una vez confirmada la insuficiencia<br />

exocrina grave, la cuantificación de la<br />

grasa fecal, a pesar de su inespecificidad de órgano,<br />

pasa a ser la prueba de elección para el control<br />

de la respuesta terapéutica.<br />

En ausencia de insuficiencia avanzada, el diagnóstico<br />

funcional exocrino pancreático es mucho<br />

más difícil. En circunstancias de simple hipofunción<br />

las pruebas de que disponemos carecen en<br />

general de la suficiente sensibilidad, y en algunos<br />

de los casos también es notable su carencia de especificidad.<br />

Por ello, cuando se realiza la aproximación<br />

al diagnóstico de insuficiencia exocrina no<br />

grave, es importante saber precisar cuál es el límite<br />

entre hipofunción e insuficiencia exocrina. Además<br />

hay que saber distinguir claramente entre lo que es<br />

diagnóstico de enfermedad y diagnóstico de insuficiencia,<br />

o hipofunción exocrina.<br />

La insuficiencia exocrina pancreática puede definirse<br />

de forma sencilla como aquella alteración de<br />

la producción exocrina pancreática que es capaz<br />

de provocar deterioro de la digestión. O dicho de<br />

otro modo, una hipofunción exocrina que se sigue<br />

de disfunción en la absorción por maldigestión.<br />

Por tanto, de forma tácita, esta definición implica<br />

que puede haber situaciones de hipofunción exocrina<br />

sin insuficiencia.<br />

En concepto, la hipofunción exocrina sin insuficiencia<br />

no puede acompañarse de manifestaciones<br />

clínicas atribuibles directamente a la pérdida<br />

funcional. En caso de insuficiencia sí puede haber<br />

manifestaciones clínicas, aunque no de forma obligada.<br />

En buena lógica, las insuficiencias más leves<br />

son las que pueden presentarse sin clínica, mientras<br />

que las más graves, como se planteaba al inicio<br />

de esta introducción, presentan signos y síntomas<br />

casi siempre inequívocos.<br />

En síntesis, una enfermedad pancreática, o sistémica,<br />

que afecte la función exocrina del órgano,<br />

puede producir alteraciones que van desde la hipofunción<br />

leve sin insuficiencia, hasta la insuficiencia<br />

grave con intensa malabsorción, pasando<br />

por etapas de insuficiencia subclínica (Tabla 1). El<br />

diagnóstico de hipofunción se establece con las<br />

pruebas de función pancreática, que se revisan en<br />

este artículo. El diagnóstico de insuficiencia exocrina<br />

pancreática debe sentarse cuando a la hipofunción<br />

se suma alteración, subclínica o no, de la<br />

absorción intestinal, que puede ser juzgada, en general,<br />

por la prueba de cuantificación de la grasa<br />

fecal.<br />

167


REVIS GASTROENTEROL Vol. 2. Núm. 4. 2000<br />

Hipofunción e insuficiencia exocrina pancreáticas: efecto sobre<br />

las manifestaciones clínicas y estrategia de diagnóstico<br />

CLÍNICA <strong>PRUEBAS</strong> FUNCIÓN PRUEBA <strong>DE</strong> CUANTIFICACIÓN<br />

<strong>EXOCRINA</strong><br />

GRASA FECAL<br />

Hipofunción sin insuficiencia – –/+ –<br />

Insuficiencia leve –/+ –/+ –/+<br />

Insuficiencia moderada + + +<br />

Insuficiencia grave ++ ++ ++<br />

Tabla 1<br />

La causa más frecuente de hipofunción e insuficiencia<br />

exocrina pancreática es, con mucho, la<br />

pancreatitis crónica. En la práctica, el interés clínico<br />

de las pruebas funcionales pancreáticas estriba<br />

en su capacidad para diagnosticar esta enfermedad,<br />

estableciendo al tiempo la intensidad del daño<br />

pancreático. La pancreatitis crónica se caracteriza<br />

por presentar destrucción irreversible de tejido acinar<br />

pancreático, que es sustituido por fibrosis. La<br />

pérdida de tejido implica la de su función. Por ello,<br />

hipofunción-insuficiencia y lesión morfológica son<br />

elementos que siempre deben tenerse en cuenta<br />

en la aproximación diagnóstica de la pancreatitis<br />

crónica. El problema es que, en las etapas no<br />

avanzadas de la enfermedad pancreática crónica<br />

inflamatoria, la correlación morfológico-funcional<br />

no es buena. Cuando se puede establecer con certeza<br />

la existencia de lesión morfológica atribuible a<br />

pancreatitis crónica, el diagnóstico está hecho,<br />

aunque las pruebas de función pancreática no sean<br />

lo suficientemente sensibles para demostrar la hipofunción.<br />

Sin embargo, una hipofunción, sin<br />

d emostración de lesión morfológica típica de pancrea -<br />

titis crónica, sólo sugiere el diagnóstico, aunque<br />

sea fuertemente (Tabla 2).<br />

Las pruebas disponibles para el estudio de la<br />

función pancreática exocrina, que pasamos a revisar,<br />

se dividen en invasivas y no invasivas, según<br />

requieran intubación duodenal o no (Tabla 3). La<br />

intubación duodenal es necesaria para medir la excreción<br />

de enzimas pancreáticas, bicarbonato y líquido<br />

en el aspirado duodenal. La prueba de función<br />

pancreática ideal debe ser sencilla de realizar,<br />

económica y precisa, con una sensibilidad y especificidad<br />

adecuada no sólo en pacientes con insuficiencia<br />

pancreática grave, sino en aquellos con<br />

insuficiencia pancreática leve o moderada. Desgraciadamente,<br />

como se ha apuntado, no disponemos<br />

en la actualidad de una prueba con estas car<br />

a c t e r í s t i c a s .<br />

Correlación entre lesión morfológica, hipofunción e insuficiencia<br />

exocrina en la pancreatitis crónica, según estadio evolutivo<br />

LESIÓN HIPOFUNCIÓN INSUFICIENCIA<br />

MORFOLÓGICA <strong>EXOCRINA</strong> <strong>EXOCRINA</strong><br />

Pancreatitis crónica inicial –/+ –/+ –<br />

Pancreatitis crónica intermedia + + –/+<br />

Pancreatitis crónica avanzada ++ ++ +<br />

Tabla 2<br />

168


<strong>PRUEBAS</strong> <strong>DE</strong> FUNCIÓN PANCREÁTICA <strong>EXOCRINA</strong><br />

E. SANZ <strong>DE</strong> VILLALOBOS ET AL<br />

<strong>PRUEBAS</strong> <strong>DE</strong> FUNCIÓN<br />

PANCREÁTICA <strong>EXOCRINA</strong><br />

INVASIVAS<br />

(Precisan intubación duodenal)<br />

Prueba de secretina<br />

Prueba de Lundh<br />

NO INVASIVAS<br />

<strong>DE</strong>TERMINACIÓN <strong>DE</strong> ENZIMAS EN SUERO<br />

Isoamilasa pancreática<br />

Tripsina inmunorreactiva<br />

<strong>DE</strong>TERMINACIÓN <strong>DE</strong> ENZIMAS EN HECES<br />

Quimotripsina<br />

Elastasa<br />

<strong>DE</strong>TERMINACIÓN <strong>DE</strong> LA ACCIÓN<br />

<strong>DE</strong> LAS ENZIMAS<br />

Prueba de bentiromida (NBT-PABA)<br />

Prueba de pancreolauryl<br />

Prueba del aliento con C 13 o C 14<br />

Tabla 3<br />

<strong>PRUEBAS</strong> <strong>DE</strong> FUNCIÓN<br />

PANCREÁTICA <strong>EXOCRINA</strong><br />

INVASIVAS<br />

PRUEBA <strong>DE</strong> SECRETINA–COLECISTO-<br />

QUININA (PANCREOZIMINA)<br />

O SECRETINA–CERULEÍNA (PSC)<br />

La principal prueba invasiva, la prueba de secretina,<br />

se denomina también directa porque se estimula<br />

la secreción del páncreas mediante la administración<br />

intravenosa de secretina y<br />

colecistoquinina o ceruleína. Es la prueba de elección<br />

para el diagnóstico de pancreatitis crónica en<br />

fase precoz y el "patrón oro" para el diagnóstico de<br />

insuficiencia pancreática como causa de esteatorrea<br />

(1). Sin embargo, es desagradable para los pacientes,<br />

laboriosa de realizar, difícil de interpretar y<br />

cara, por lo que generalmente sólo está disponible<br />

en centros de referencia. Además, existe una gran<br />

variabilidad entre los diferentes laboratorios, por lo<br />

que ha sido imposible una estandarización (2).<br />

Tras una completa aspiración del contenido<br />

gástrico, se introduce una sonda de doble luz hasta<br />

el duodeno. Se estimula la secreción pancreática<br />

mediante la administración intravenosa de secretina<br />

y colecistoquinina (o ceruleína) y posteriormente<br />

se obtienen las muestras de líquido duodenal. La<br />

presencia de una disminución en la concentración<br />

de bicarbonato, o en la producción de enzimas, indica<br />

la existencia de insuficiencia pancreática exocrina.<br />

La concentración de bicarbonato es el criterio<br />

que mejor discrimina entre pacientes con y sin<br />

enfermedad pancreática (3). En función de los resultados<br />

se puede realizar una estadificación por<br />

grados de la insuficiencia pancreática exocrina (Tabla<br />

4) (4).<br />

Es difícil determinar con precisión la sensibilidad<br />

de esta prueba por ser de referencia. La sensibilidad<br />

para el diagnóstico de pancreatitis crónica es<br />

de aproximadamente el 90%, pero no del 100%.<br />

Un 5% de los pacientes con pancreatitis crónica<br />

calcificante tiene una prueba de función normal<br />

(5). Si se realiza adecuadamente, la prueba de secretina<br />

tiene una especificidad del 90% al 100%,<br />

evitando los falsos positivos que pueden darse en<br />

pacientes con esteatorrea no pancreática, hecho<br />

frecuente en las pruebas no invasivas.<br />

Es importante la comparación con la pancreatografía<br />

endoscópica, ya que la colangiopancreatografía<br />

retrógrada endoscópica (CPRE) y la PSC son<br />

las pruebas disponibles en la actualidad más sensibles<br />

y específicas para el diagnóstico de pancreatitis<br />

crónica, especialmente en estadios precoces. En<br />

estadios avanzados, la concordancia entre ambas<br />

pruebas es alta y se acerca al 100%. Sin embargo,<br />

algunos pacientes presentan insuficiencia pancreática<br />

exocrina con ductos normales y viceversa. La<br />

discordancia en formas leves y moderadas está entre<br />

el 15 y el 25% y la mayoría presentan una pancreatografía<br />

alterada con una función secretora<br />

normal, lo que indica que la CPRE tiene mayor<br />

sensibilidad o más falsos positivos. Los pacientes<br />

con un sistema ductal alterado y una función pancreática<br />

normal sólo desarrollan pancreatitis crónica<br />

clínica tras un largo periodo de tiempo. La mayoría<br />

de estos pacientes han presentado<br />

previamente una pancreatitis aguda, por lo que las<br />

alteraciones ductales son realmente cicatrices y no<br />

auténticos signos de enfermedad crónica. En los<br />

pacientes ancianos también pueden existir alteraciones<br />

en la pancreatografía sin significado patoló-<br />

169


REVIS GASTROENTEROL Vol. 2. Núm. 4. 2000<br />

Grados de insuficiencia pancreática exocrina según los resultados<br />

de la prueba de secretina y de la grasa en heces (4)<br />

INSUFICIENCIA PRUEBA <strong>DE</strong> SECRETINA-CCK GRASA EN HECES<br />

PANCREÁTICA SECRECIÓN (“OUTPUT”) CONCENTRACIÓN <strong>DE</strong><br />

<strong>EXOCRINA</strong> <strong>DE</strong> ENZIMAS BICARBONATO<br />

Leve Anormal Normal Normal<br />

Moderada Anormal Anormal Normal<br />

Grave Anormal Anormal Anormal<br />

Tabla 4<br />

gico. Por el contrario, pacientes con pruebas de<br />

función alteradas y un sistema ductal inicialmente<br />

normal, desarrollan posteriormente cambios ductales<br />

y, por tanto, pancreatitis crónica (6-8).<br />

La prueba de secretina es superior a la pancreatografía<br />

en dos áreas problemáticas: pacientes ancianos<br />

y tras un episodio de pancreatitis aguda; en<br />

ambos casos existen pequeñas alteraciones en la<br />

pancreatografía con una función secretora bien<br />

preservada. En cualquier caso, ambas pruebas deben<br />

ser usadas de forma complementaria para el<br />

diagnóstico de pancreatitis crónica.<br />

Para reducir costes y tiempo se han introducido<br />

las pruebas invasivas realizadas con la ayuda del<br />

endoscopio. En la llamada prueba de secretina intraductal,<br />

tras la administración de secretina se miden<br />

durante sólo 10 minutos las concentraciones<br />

de bicarbonato y la producción de enzimas pancreáticas<br />

en la secreción duodenal obtenida mediante<br />

canulación del conducto pancreático principal.<br />

Comparada con la prueba de secretina, existe una<br />

correlación significativa de todos los parámetros<br />

excepto en la producción de lipasa (9).<br />

PRUEBA <strong>DE</strong> LUNDH<br />

En esta prueba la estimulación de la secreción<br />

pancreática se realiza mediante la administración<br />

de una comida estándar (10). El contenido duodenal<br />

se aspira en cuatro ocasiones cada 30 minutos<br />

y se realiza la determinación de enzimas.<br />

En la práctica, esta prueba no se realiza en la<br />

actualidad por sus limitaciones:<br />

1. Puesto que la prueba depende de la liberación<br />

endógena de secretina y colecistoquinina, los<br />

resultados pueden alterarse cuando existe daño<br />

mucoso, como por ejemplo en la enfermedad celíaca.<br />

Por tanto, no puede distinguir entre malabsorción<br />

pancreática y no pancreática (11).<br />

2. La liberación de hormonas depende de la integridad<br />

de la anatomía gastroduodenal y los resultados<br />

pueden verse alterados en pacientes sometidos<br />

a cirugía, como la gastrectomía parcial Billroth<br />

II (12).<br />

3. No se puede determinar la capacidad de secreción<br />

de volumen y bicarbonato (13).<br />

<strong>PRUEBAS</strong> <strong>DE</strong> FUNCIÓN<br />

PANCREÁTICA <strong>EXOCRINA</strong><br />

NO INVASIVAS<br />

ISOAMILASA PANCREÁTICA<br />

Y TRIPSINA INMUNORREACTIVA<br />

EN SUERO<br />

Aunque la determinación de enzimas pancreáticas<br />

en suero (amilasa, lipasa) es esencial para el<br />

diagnóstico de pancreatitis aguda, no es útil en el<br />

diagnóstico de pancreatitis crónica. Si bien unos<br />

niveles bajos de enzimas pancreáticas se han propuesto<br />

como indicativos de insuficiencia pancreática,<br />

su sensibilidad es baja, con valores predictivos<br />

positivos aceptables sólo en grados avanzados de<br />

insuficiencia. Además, unos niveles normales no<br />

170


<strong>PRUEBAS</strong> <strong>DE</strong> FUNCIÓN PANCREÁTICA <strong>EXOCRINA</strong><br />

E. SANZ <strong>DE</strong> VILLALOBOS ET AL<br />

excluyen el diagnóstico. Por tanto, en la insuficiencia<br />

pancreática podemos encontrar unos valores<br />

de enzimas pancreáticas en suero bajos, elevados o<br />

normales (14). En un estudio realizado con 180<br />

pacientes, se comparan estas determinaciones con<br />

la prueba de secretina-CCK. Ambas enzimas<br />

muestran una elevada especificidad en pacientes<br />

con enfermedades no pancreáticas: 98,5% la isoamilasa<br />

pancreática y 96,3% la tripsina inmunorreactiva.<br />

Sin embargo, la sensibilidad para el diagnóstico<br />

de insuficiencia pancreática exocrina es<br />

baja: isoamilasa pancreática 45,1% y tripsina inmunorreactiva<br />

45,1%. Por tanto, la isoamilasa<br />

pancreática no tiene suficiente sensibilidad para ser<br />

utilizada como método de cribado de insuficiencia<br />

pancreática exocrina, pero por su elevada especificidad<br />

puede ser útil para determinar la etiología de<br />

una esteatorrea (15).<br />

ACTIVIDAD <strong>DE</strong> QUIMOTRIPSINA<br />

Y CONCENTRACIÓN <strong>DE</strong> ELASTASA 1<br />

EN HECES<br />

La presencia de niveles bajos de quimotripsina o<br />

elastasa 1 en heces indican la existencia de insuficiencia<br />

pancreática exocrina. La sensibilidad<br />

diagnóstica de la quimotripsina fecal es elevada en<br />

pacientes con insuficiencia pancreática exocrina<br />

grave (16). Inicialmente se emplearon métodos<br />

titrimétricos, los cuales eran difíciles de realizar y<br />

no muy específicos. Se han sustituido por métodos<br />

fotométricos usando un polipéptido sintético,<br />

más específicos (17). Los nuevos sistemas fotométricos<br />

tienen una sensibilidad del 80-90% en la detección<br />

de insuficiencia pancreática exocrina grave<br />

definida mediante la prueba de secretina-CCK<br />

(18,19), y una especificidad de 73-89% (19). Sin<br />

embargo, para la detección de una insuficiencia<br />

pancreática leve-moderada la sensibilidad puede<br />

ser tan baja como del 21% (20). Puede haber además<br />

falsos positivos y falsos negativos (Tabla 5)<br />

(13). Se consideran normales valores por encima<br />

de 3 U/g de peso seco. La alta fiabilidad de esta<br />

prueba en la insuficiencia pancreática grave y la<br />

facilidad para realizar la prueba ha hecho que la<br />

quimotripsina fecal sea particularmente útil en la<br />

valoración de los niños con fibrosis quística<br />

La elastasa 1, al contrario que otras enzimas<br />

pancreáticas, no se degrada durante el tránsito por<br />

intestino y la concentración en heces es 5 a 6 veces<br />

más alta que en el aspirado duodenal (21). La<br />

elastasa en heces se correlaciona con la elastasa<br />

duodenal y con la producción duodenal de enzimas<br />

FALSOS POSITIVOS Y FALSOS NEGATIVOS <strong>DE</strong> LA QUIMOTRIPSINA FECAL (13)<br />

Falsos negativos<br />

Insuficiencia pancreática exocrina leve – moderada<br />

Tratamiento sustitutivo con enzimas pancreáticas orales*<br />

Falsos positivos<br />

Diarrea<br />

Deficiencia de proteínas (deficiencia en la estimulación endógena)<br />

Enfermedad celíaca<br />

Caquexia por enfermedades inflamatorias crónica y tumores<br />

Anorexia nerviosa<br />

Gastrectomía parcial con anastomosis Billroth II<br />

Ictericia obstructiva<br />

* Es necesaria la interrupción del tratamiento al menos durante 72 horas antes antes obtener una muestra de<br />

heces.<br />

Tabla 5<br />

171


REVIS GASTROENTEROL Vol. 2. Núm. 4. 2000<br />

(22-24). La determinación está disponible comercialmente<br />

por técnica ELISA, usando dos anticuerpos<br />

monoclonales específicos. Al detectarse por<br />

anticuerpos monoclonales contra elastasa humana,<br />

los resultados no se ven afectados por los suplementos<br />

orales con enzimas pancreáticas. Se consideran<br />

normales valores por encima de 175-200<br />

µg/g de peso seco.<br />

La fiabilidad de la elastasa fecal no es uniforme<br />

en los estudios realizados. La prueba de referencia<br />

es variable, comparándose con la prueba de<br />

secretina-CCK o con el diagnóstico de pancreatitis<br />

crónica mediante ecografía, TC o CPRE. Son<br />

contradictorios los resultados de los estudios en<br />

los que se ha comparado con la prueba de secretina-CCK.<br />

Lankisch encuentra una sensibilidad<br />

muy baja en pacientes con insuficiencia pancreática<br />

leve o moderada (25), mientras que en el estudio<br />

de Löser la sensibilidad es del 100% en pacientes<br />

con insuficiencia pancreática moderada y<br />

grave (23). Sin embargo, en este último trabajo,<br />

puede haberse infravalorado la gravedad de la insuficiencia<br />

pancreática exocrina, ya que la proporción<br />

de pacientes con diabetes mellitus era alta<br />

en el grupo con insuficiencia pancreática<br />

exocrina leve-moderada, algo que se suele ver en<br />

pacientes con insuficiencia pancreática exocrina<br />

grave. La sensibilidad de la elastasa fecal en la insuficiencia<br />

pancreática exocrina grave (diagnóstico<br />

realizado mediante prueba de secretina-CCK)<br />

o en la pancreatitis crónica grave (diagnóstico realizado<br />

mediante CPRE y TC) es del 82 - 100%.<br />

Sin embargo, en insuficiencia pancreática exocrina<br />

leve o pancreatitis crónica leve la sensibilidad<br />

va del 0 al 47%. Las conclusiones que se pueden<br />

sacar de los artículos publicados hasta la fecha<br />

son (Tabla 6):<br />

1. La sensibilidad diagnóstica de la elastasa fecal<br />

es baja en pacientes con estadios precoces de<br />

insuficiencia pancreática exocrina (25-28). Sin embargo<br />

es buena en pacientes con estadios graves,<br />

con esteatorrea; y sus niveles se correlacionan con<br />

el estadio de la pancreatitis crónica, de forma que<br />

los pacientes con estadios más graves de pancreatitis<br />

crónica presentan los niveles más bajos de<br />

elastasa fecal (26).<br />

2. Comparada con la quimotripsina en el diagnóstico<br />

de insuficiencia pancreática exocrina o<br />

pancreatitis crónica, tiene una sensibilidad mayor y<br />

una especificidad similar (23, 26, 29).<br />

3. Comparada con la prueba de pancreolauryl<br />

en el diagnóstico de insuficiencia pancreática exocrina<br />

o pancreatitis crónica, tiene sensibilidad similar<br />

pero mayor especificidad, al no verse tan influida<br />

por alteraciones gastrointestinales,<br />

principalmente la gastrectomía parcial (26, 27).<br />

4. Los resultados presentan poca variabilidad<br />

entre muestras, incluso menor que la quimotripsina<br />

fecal (22, 23, 28).<br />

5. Ofrece buena estabilidad a temperatura ambiente<br />

durante al menos una semana, lo que evita<br />

falsos resultados durante el procesamiento de las<br />

muestras (23).<br />

6. El principal problema son los falsos positivos<br />

en pacientes con esteatorrea secundaria a enfermedad<br />

del intestino delgado, sobre todo en relación<br />

con sobrecrecimiento bacteriano (consumo<br />

por las bacterias de la elastasa durante su tránsito<br />

intestinal), intestino corto y pacientes con diarrea<br />

acuosa (por dilución de la muestra) (27, 28).<br />

Por tanto, presenta los mismos problemas que<br />

otras pruebas de función pancreática no invasivas<br />

por la baja sensibilidad diagnóstica en formas precoces,<br />

con la ventaja de su mayor sencillez.<br />

ELASTASA FECAL.<br />

VENTAJAS E INCONVENIENTES<br />

INCONVENIENTES<br />

Baja sensibilidad en formas precoces de insuficiencia<br />

pancreática exocrina o pancreatitis<br />

crónica<br />

Falsos positivos en pacientes con enfermedades<br />

intestinales<br />

VENTAJAS<br />

Sencillez<br />

No interferencia con el tratamiento sustitutivo<br />

con enzimas pancreáticas<br />

Poca variabilidad entre las distintas muestras<br />

Estabilidad a temperatura ambiente<br />

Tabla 6<br />

172


<strong>PRUEBAS</strong> <strong>DE</strong> FUNCIÓN PANCREÁTICA <strong>EXOCRINA</strong><br />

E. SANZ <strong>DE</strong> VILLALOBOS ET AL<br />

GRASA EN HECES<br />

En la introducción ya se ha apuntado que la valoración<br />

cuantitativa de grasa en heces (48-72 horas,<br />


REVIS GASTROENTEROL Vol. 2. Núm. 4. 2000<br />

recogida de la orina. Como ya se ha comentado,<br />

la prueba se ha optimizado al obtener los resultados<br />

en suero en lugar de en orina (30). En cualquier<br />

caso, esta prueba no se utiliza en la actualidad<br />

por la imposibilidad de obtener el reactivo.<br />

PRUEBA <strong>DE</strong>L ALIENTO CON C 13 O C 14<br />

Existen varias pruebas del aliento para determinar<br />

la función pancreática de forma indirecta, en<br />

las cuales trioleína, trioctanoína, tripalmitina y colesterol-octanoato<br />

se usan como sustancias marcadas<br />

con C 1 3 o C 1 4 . En 1989, G. Vantrappen y su<br />

grupo desarrollaron una prueba del aliento en la<br />

cual se usaba una nueva sustancia, un triglicérido<br />

sintético "mezclado" (1,3 distearil, 2[carboxil-<br />

C13]octanoil glicerol) (42). La prueba del aliento<br />

con triglicérido mezclado tiene una excelente correlación<br />

con la producción máxima de lipasa tras<br />

la estimulación hormonal, indicando que es una<br />

prueba excelente de determinar de forma indirecta<br />

la actividad de lipasa en el duodeno. Sin embargo,<br />

en el diagnóstico de la insuficiencia pancreática<br />

exocrina, tiene una sensibilidad baja en casos leves<br />

y la elastasa fecal es una prueba más sencilla, más<br />

barata y con mayor sensibilidad y especificidad<br />

(43). Por este motivo, no es una prueba útil en la<br />

práctica clínica diaria y su principal utilidad es monitorizar<br />

el efecto del tratamiento sustitutivo con<br />

enzimas pancreáticas en pacientes con insuficiencia<br />

pancreática exocrina (44). Aunque la evaluación<br />

del régimen óptimo de tratamiento con enzimas<br />

pancreáticas se realiza mediante parámetros<br />

clínicos (ganancia de peso, características de las<br />

heces, etc), la prueba del aliento con triglicérido<br />

marcado puede ser útil para determinar la dosis en<br />

algunos casos difíciles. Por otro lado, esta prueba<br />

se debe estandarizar, ya que existen determinadas<br />

circunstancias externas como el ejercicio, que pueden<br />

influir en los resultados (45).<br />

CONCLUSIONES<br />

No existe en la actualidad una prueba de<br />

función pancreática indirecta que realmente<br />

sea útil para resolver los problemas de la<br />

práctica clínica diaria: el diagnóstico de la insuficiencia<br />

pancreática exocrina de grado leve o moderado<br />

y el diagnóstico diferencial entre diarrea-esteatorrea<br />

pancreatogénica y no pancreátogénica.<br />

En pacientes con dolor abdominal de posible origen<br />

pancreático con TC y CPRE normales, las<br />

pruebas de función pancreática exocrina no invasivas<br />

no son lo suficientemente sensibles y en pacientes<br />

con malabsorción en los que no existe una<br />

causa no pancreática evidente, no son lo suficientemente<br />

específicas por su elevada tasa de falsos<br />

positivos. Por tanto, la prueba de secretina-<br />

CCK sigue siendo necesaria en la práctica clínica<br />

diaria por ser la única con elevada sensibilidad y<br />

especificidad. Por este motivo pensamos que,<br />

mientras no se dispongan de otras pruebas de función<br />

pancreática de tan elevada calidad, se debe<br />

seguir contando con ella en la atención diaria de<br />

nuestros pacientes.<br />

La determinación de enzimas pancreáticas en<br />

sangre, tanto basal como tras estimulación hormonal,<br />

no tiene valor en la práctica clínica diaria<br />

y la única prueba de utilidad es la determinación<br />

de tripsina inmunorreactiva en sangre de cordón<br />

umbilical como cribado neonatal de fibrosis quística.<br />

Los niveles de aminoácidos en sangre tras<br />

estimulación hormonal pueden ser de utilidad,<br />

pero está por demostrar su auténtico valor en<br />

humanos (46,47). La quimotripsina en heces es<br />

sensible y específica en casos de insuficiencia<br />

pancreática exocrina grave. En la población infantil,<br />

la mayor parte de los casos de insuficiencia<br />

pancreática son secundarios a fibrosis quística,<br />

en la que la insuficiencia pancreática habitualmente<br />

es grave (con esteatorrea) y se desarrolla<br />

rápidamente. Por este motivo y porque la determinación<br />

de quimotripsina en heces es barata y<br />

fácil de realizar (sólo requiere una muestra aislada<br />

de heces), es el procedimiento de elección para<br />

determinar la presencia de insuficiencia pancreática<br />

en pediatría.<br />

La elastasa fecal parece ser la prueba de función<br />

pancreática no invasiva más sensible, incluso<br />

desbancando a la prueba de pancreolauryl, pero<br />

deberá demostrarse su utilidad en la práctica clínica<br />

diaria. En cualquier caso, al igual que el resto de<br />

pruebas no invasivas, la sensibilidad diagnóstica de<br />

formas leves sigue siendo baja.<br />

174


<strong>PRUEBAS</strong> <strong>DE</strong> FUNCIÓN PANCREÁTICA <strong>EXOCRINA</strong><br />

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