La Masoneria Cubana y su Contribucion a la Sociedad Civil y a una ...

De como las nuevas asociaciones cumplimentan las dos condiciones esenciales de la
definición de miembro de la SC es debatible. Respecto a la independencia del gobierno,
podemos distinguir en forma general, cuatro tipos. Las que son directamente agencias del
estado (FMC, CDRs). Las instituciones que no son totalmente controladas por el estado,
aunque originalmente si lo fueron –pero se han ido independizando (UNEAC). Las que
son dirigidas privadamente, como la Fundación de Pablo Milanes, artista internacional
que la financia directamente, y que fomenta la cultura. De acuerdo con la Ley, la Pablo
Milanes necesita tener un contraparte estatal, que es aquí el Ministerio de Cultura. Y las
que son totalmente independientes del gobierno, y aún informales, como las disidentes.
Consecuentemente, la voluntariedad de afiliación de sus miembros, y la independencia
del gobierno, son relativas, y difíciles de determinar.
Igualmente, es difícil de determinar el número de sus afiliados. Algunas organizaciones
como las iglesias Católicas, no mantienen un registro de afiliados, sino un registro parcial
que no incluye a todos sus miembros. Y otras, que pueden mantenerlo, tal vez no quieren
por las implicaciones que puede significar la pertenencia a ellas (e.g. disidentes). Solo
conocemos confiablemente, el numero de miembros de la GLC, por haber obtenido esta
información de un alto funcionario de la misma, para realizar un estudio demográfico que
completamos hace ya mas de un año (Romeu y Pardo, 2010).
Importancia de la Masonería en la SC cubana
Las masonerías cubanas (regular, irregular y las asociaciones para-masónicas) han
participado tradicional e intensamente de la vida económica, política, intelectual y social
del país. Las primeras logias conspirativas, datan de los comienzos del siglo XIX (Rayos
y Soles de Bolívar, Cadena Triangular, etc.). Las conspiraciones y expediciones de
Narciso López, fueron organizadas por anexionistas y masones, en las décadas de 1840 y
1850. En 1859, Cassard crea la Gran Logia de Colon. Y en 1860, Vicente A. de Castro
crea el Gran Oriente de Cuba y las Antillas (GOCA), que conspira y organiza la Guerra
de los Diez Años. En 1880, se unifican los masones en la Gran Logia de Colon e Isla de
Cuba, cuyos dirigentes también lo fueron del Partido Liberal Autonomista. Así, durante
el periodo de entre-guerras (1880-95) conocido como “reposo turbulento”, los masones
cubanos ayudaron a preparar el terreno ideológico para la Guerra de Independencia
(1895-98). Por tanto, las masonerías cubanas estuvieron activamente envueltas en los
principales movimientos políticos: autonomistas, anexionistas y separatistas; así como en
la terminación de la trata, primero, y de la esclavitud, más adelante (ver, Miranda, 1933).
En la primera mitad del siglo XX, ya durante la republica, muchos dirigentes de la GLC
desempeñaron importantes papeles en la esfera pública cubana. Por ejemplo, los Grandes
Maestros Regüeiferos, Llansó Simoni, Muñoz Sañudo, Wolter del Río, Iraizoz, Santos
Jiménez y García Pedrosa, fueron destacados dirigentes cívicos, culturales, empresariales
y políticos, profesores universitarios, ministros del gobierno, directores de periódicos, y
militares de alto rango. Además, la GLC sostuvo asilos de niños y ancianos, escuelas, una
universidad, comedores, equipos deportivos infantiles, tropas Scouts, bibliotecas, etc. Y
sus miembros dieron innumerables pláticas sobre asuntos históricos, culturales, de salud,
económicos, etc., tanto dentro de sus logias como en actos públicos.
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