SIN LUZ Electricidad no llega a tres mil comunidades - Prensa Libre
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21<br />
on un polvorín<br />
o se parecen<br />
H I STO R I A<br />
Revolución, dictadura y paz<br />
Los centros para me<strong>no</strong>res<br />
fueron creados en 1951, en<br />
el marco de los gobier<strong>no</strong>s<br />
revolucionarios, que tenían el<br />
objetivo de que fuera una escuela<br />
especial para jóvenes transgresores,<br />
por lo tanto estaban a<br />
cargo del Ministerio de Educación.<br />
En ese entonces, se promovió<br />
la contratación de personal<br />
capacitado, como profesionales<br />
de la educación y la psicología,<br />
para atenderlos.<br />
La caída de Jacobo Arbenz en<br />
1954 dejó paralizado el proyecto,<br />
hasta que en 1969 se aprobó la<br />
primera ley de me<strong>no</strong>res. Un año<br />
después, la <strong>llega</strong>da a la Presidencia<br />
del general Carlos Arana Osorio<br />
la deja sin efecto de nuevo y le<br />
entrega los centros a la Secretaría<br />
de Bienestar Social, que en aquellos<br />
tiempos estaba integrada por<br />
las esposas de los <strong>mil</strong>itares.<br />
Durante el resto de gobier<strong>no</strong>s<br />
<strong>mil</strong>itares, los centros estuvieron<br />
también a cargo del Ministerio de<br />
Gobernación.<br />
En esos tiempos <strong>no</strong> existían los<br />
pandilleros juveniles, así que la<br />
mayoría de los jóvenes estaban<br />
recluidos por cuestiones me<strong>no</strong>s<br />
graves que el asesinato. En la década<br />
de 1970 tampoco existía la<br />
limitación de edad que establece<br />
actualmente la ley, que impide<br />
que me<strong>no</strong>res de 13 años sean retenidos<br />
en estos centros.<br />
Con la <strong>llega</strong>da de la democracia,<br />
los centros siguieron a cargo<br />
de la SBS, pero pasaron de nuevo<br />
a ma<strong>no</strong>s de civiles.<br />
Durante el gobier<strong>no</strong> del FRG<br />
se hizo u<strong>no</strong> de los esfuerzos más<br />
sobresalientes para rehabilitar a<br />
los jóvenes, aplicando por primera<br />
vez los programas de libertad<br />
asistida y poniendo a cargo de la<br />
SBS a personas técnicas y profesionales,<br />
que nada tenían que<br />
ver con el partido de gobier<strong>no</strong>.<br />
Los jóvenes que eran aptos para<br />
este programa residían en libertad<br />
en una vivienda de la SBS,<br />
en la que eran monitoreados, pero<br />
podían ir adaptándose paulatinamente<br />
a la vida real. Además existían<br />
convenios con grandes empresas<br />
para facilitarles la inclusión<br />
laboral.<br />
Foto <strong>Prensa</strong> <strong>Libre</strong>: A RC H I VO<br />
Los agentes de la Policía ingresan en los centros cuando se producen<br />
revueltas, ya que son ellos quienes dan la seguridad perimetral.<br />
INDÍGENAS<br />
INOCENTES<br />
Dos años presos<br />
Dos jóvenes indígenas de 16<br />
años de Nebaj, que <strong>no</strong> hablaban<br />
español, permanecieron dos<br />
años en el Centro de Me<strong>no</strong>res acusados<br />
de homicidio. Por alguna extraña<br />
razón, su juicio en vez de<br />
llevarse a cabo a los dos meses,<br />
como dicta la ley, se retrasó dos<br />
años. Cuando se efectuaron las audiencias,<br />
se estableció que los fiscales<br />
<strong>no</strong> tenían ninguna prueba en<br />
su contra y quedaron libres.<br />
R O BO<br />
<strong>SIN</strong> APOYO<br />
Toda una vida<br />
C<br />
hiquitá Ajú ingresó por primera<br />
vez en un centro de me<strong>no</strong>res a<br />
los 13 años, tras ser acusado de robar<br />
una moto con la que finalmente<br />
tuvo un accidente. Ajú aseguró entonces<br />
que se la habían prestado.<br />
Después de haber pasado por el centro<br />
salió con mayores dotes para delinquir,<br />
así que <strong>no</strong> ha dejado de entrar<br />
y salir de este lugar. Ahora tiene<br />
19 años y ha sido u<strong>no</strong> de los protagonistas<br />
del último motín.<br />
D O M I N I CA L P R E N SA L IBRE : Guatemala, 1 de junio de 20 0 8<br />
Adiós a la rehabilitación<br />
Desde ese momento, las medidas de<br />
seguridad se extremaron y se prohibió<br />
desarrollar talleres en los que tuvieran<br />
que emplear algún tipo de objeto que<br />
pudiera causar lesiones. Se suspendieron<br />
definitivamente los talleres que<br />
eran parte del programa de reinserción,<br />
como el de carpintería, agricultura y panadería,<br />
aunque este último se retomará<br />
en junio. Tanto el centro de San José<br />
Pinula como el de la zona 13 disponen<br />
de 20 monitores, que se reparten el tur<strong>no</strong><br />
de día y de <strong>no</strong>che. La seguridad es<br />
ofrecida por la PNC y el Ejército, pero<br />
solo es perimetral.<br />
“Ahora intentamos que hagan cosas<br />
más modernas, en las que <strong>no</strong> tengan<br />
que emplear ni cuchillos ni martillos,<br />
como talleres de informática o de dibuj<br />
o”, afirmó el subsecretario.<br />
Según Nidia Aguilar, procuradora<br />
del Me<strong>no</strong>r, el problema es que los jóvenes<br />
pasan demasiado tiempo ociosos,<br />
sin descargar energía, y los talleres <strong>no</strong><br />
están adaptados para el dinamismo que<br />
ellos necesitan.<br />
“La Secretaría tiene que tener en<br />
cuenta que la represión los vuelve más<br />
rebeldes, entendemos que tiene que haber<br />
disciplina, porque son jóvenes<br />
transgresores, pero <strong>no</strong> deben reprimirlos<br />
violentamente”, afirmó Aguilar.<br />
La trabajadora social, Marina Molina,<br />
coincide con Aguilar, en que “la disciplina<br />
<strong>mil</strong>itar, es decir, levantarse a un<br />
horario, estar siempre aseados, hacer<br />
ejercicio, sería muy buena para ellos,<br />
porque nunca han tenido que cumplir<br />
con obligaciones, pero la violencia física<br />
y la intimidación <strong>no</strong> les ayuda en nada,<br />
ya que la violencia es con lo que han<br />
convivido desde niños”.<br />
Molina cree que la SBS nunca ha tenido<br />
claro qué quiere hacer con estos<br />
muchachos. “Hay un gran vacío de concepto,<br />
que genera que los programas <strong>no</strong><br />
sean duraderos y que la rehabilitación<br />
<strong>no</strong> se dé”.<br />
Molina asegura que ha co<strong>no</strong>cido jóvenes<br />
que han ingresado con 13 años a<br />
los centros por cuestiones me<strong>no</strong>res, y<br />
que debido a la falta de tratamiento adecuado<br />
<strong>no</strong> han dejado de entrar y salir de<br />
ellos. “Si un pedagogo, psicólogo o funcionario<br />
de la Secretaría ha tenido a su<br />
cargo durante dos o <strong>tres</strong> años a u<strong>no</strong> de<br />
estos jóvenes, que son rehabilitables, y<br />
<strong>no</strong> se ha hecho nada, lo lógico es que al<br />
salir vuelva a delinquir, y eso <strong>no</strong> es solo<br />
responsabilidad del me<strong>no</strong>r”, añadió.<br />
Según el subsecretario, el tratamiento<br />
de readaptación a la sociedad se potencia<br />
durante los últimos seis meses de<br />
estancia en el centro.<br />
De hecho, tanto la SBS como la Defensa<br />
Pública y la PDH coinciden en<br />
afirmar que los jóvenes que cometen<br />
delitos me<strong>no</strong>res, como robo, <strong>no</strong> deberían<br />
ingresar en estos centros, si<strong>no</strong> que<br />
deberían dárseles medidas alternativas,<br />
como ejecutar trabajo comunitario.<br />
Pero los jueces <strong>no</strong> acaban de entender<br />
lo que dicta la Ley PINA, por lo que<br />
hay muchachos que han sido recluidos<br />
por robar una olla de comida o un tambo<br />
de gas. Eso sí, la mayoría de sentenciados<br />
han cometido delitos como asesinato,<br />
secuestro o violación.<br />
Según el estudio del Iccpg, el año pasado<br />
el 65 por ciento estaba detenido<br />
por daños contra la integridad física, el<br />
28 por infracciones contra bienes, 5 por<br />
ciento por otro casos y 2 por ciento por<br />
consumo de drogas. Más del 60 por<br />
ciento había sido remitido por juzgados<br />
de Paz, <strong>no</strong> de Niñez y Adolescencia. Alrededor<br />
de siete <strong>mil</strong> cumplían algún tipo<br />
de sanción durante el 2007, aunque<br />
la gran mayoría disfrutaba de medidas<br />
alternativas a la prisión.<br />
Para mejorar los resultados y evitar<br />
la superpoblación en los centros, la SBS<br />
ha abierto este año ocho sedes departamentales,<br />
que trabajarán en coordinación<br />
con los juzgados.<br />
Unido a esto, la SBS se enfrenta también<br />
al incumplimiento de los plazos<br />
por parte de los jueces, ya que según la<br />
ley los adolescentes <strong>no</strong> pueden pasar<br />
más de dos meses detenidos sin que se<br />
les dicte sentencia, pero hay jóvenes<br />
que pasan en detención provisional<br />
hasta ocho meses para después salir libres<br />
por falta de mérito.<br />
En lo que coinciden sociólogos de todo<br />
el mundo es en que las sociedades<br />
crean a sus propios delincuentes y, sobre<br />
todo, en el caso de que se trate de me<strong>no</strong>res<br />
de edad, la responsabilidad tanto de<br />
sus acciones como de su retor<strong>no</strong> al buen<br />
cami<strong>no</strong> debe ser cosa de todos.