plantas medicinales de costa rica y su folclore - Escuela de Historia ...

marcha, sembrando 'el terror y la ruina en una extensión
bastante apreciable de la provincia de Cartago... Los pastizales,
los sembrados, los caminos, tienen un mínimo de 15
centímetros de espesor de cenizas... La vegetación está
totalmente destruida...".
En el mes de setiembre de 1973, el mismo rotativo (15)
publicó información sobre dos erupciones del volcán Poás; en
julio de ese mismo año insertó (16) una interesante publicación
sobre la tragedia del volcán Arenal en el 1968; Y en el
mes de mayo de 1973 apareció información sobre las
"Hornillas del Miravalles reinician su actividad" (17). En
forma similar otros diarios de Costa Rica han dado interesantes
publicaciones de estos desastres. El 7 de mayo de 1973 el
diario La Prensa Libre (18) informó "Surge nuevo volcán en
el Guanacaste". Publicó una interesante relación de datos,
acompañados igualmente de fotografías sobre la aparición de
este nuevo germen maligno de la naturaleza.
Aparte de los efectos producidos por la erupción de los
numerosos volcanes en Costa Rica, otra clase de desastre que
ha afectado marcadamente el suelo y la vegetación entre
otros efectos deplorables, han sido las inundaciones. La de
Cartago el 27 de octubre de 1891 (8) produjo grandes
estragos de todo género. Del libro publicado por el ex- presidente
de Costa Rica, González Víquez copiamos las
siguientes impresionantes líneas: "Por cinco días consecutivos
no se le había vuelto a ver la cara al sol; el cielo estaba de
plomo y el horizonte oscuro como conciencia de criminal.
Las gentes vecinas al Reventado pasaron la noche en vela,
viendo correr y crecer aquel río enfurecido; a las cinco de la
mañana del 27, emprendieron la fuga, pues el enemigo había
inundado multitud de casas... Luchando con las piedras y
palos de la onda arrasadora se lanzaban hombres atrevidos al
peligro, a pie, y a caballo, y tornaban con las víctimas sobre
los hombros, sobre el anca de las cabalgaduras... Todas las
aguas que nacen a uno y otro lado de la cadena volcánica,
desde Avance, Felipe Díaz y las Huacas, hasta más allá de
Turrialba, se desbordaron simultáneamente, debido al recio y
prolongado temporaL" El libro incluye otros interesantes
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