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el sadomasoquismo como práctica sexual ... - Cuadernos BDSM

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CUADERNOS DE <strong>BDSM</strong> ESPECIAL Nº 01<br />

La des-genitalización d<strong>el</strong> placer.<br />

Otro punto fundamental de las prácticas sadomasoquistas es que se abandona lo genital<br />

<strong>como</strong> lugar esencial o principal de la <strong>sexual</strong>idad, y ésta se ve desplazada a todo <strong>el</strong><br />

cuerpo <strong>como</strong> lugar posible de experimentación de placer.<br />

El <strong>sadomasoquismo</strong> es para Foucault, “un juego que se juega con <strong>el</strong> cuerpo mismo, una<br />

falsificación d<strong>el</strong> placer mediante una serie de instrumentos extraños que lo convierten<br />

en un lugar de producción de placeres polimorfos, en la búsqueda de inventarse a sí<br />

mismo.” [6]<br />

Como señala Foucault, en una de sus últimas entrevistas, concedida a Body Politic, al<br />

referirse a los sadomasoquistas:<br />

[Ellos] Inventan nuevas posibilidades de placer haciendo uso de ciertas partes<br />

inusitadas d<strong>el</strong> cuerpo, erotizándolo. Se trata de una suerte de creación, de<br />

proyecto creativo, una de cuyas notas destacadas es lo que me permito denominar<br />

de <strong>sexual</strong>ización d<strong>el</strong> placer. La creencia de que <strong>el</strong> placer físico procede<br />

simplemente d<strong>el</strong> placer <strong>sexual</strong> y de que <strong>el</strong> placer <strong>sexual</strong> es la base de cualquier<br />

posible placer es de todo punto falsa. Las prácticas sadomasoquistas lo que<br />

prueban es que podemos procurarnos placer a partir de objetos extraños,<br />

haciendo uso de partes inusitadas de nuestro cuerpo, en circunstancias nada<br />

habituales, etc. [7]<br />

La estimulación producida por un flogger en la espalda, corrientazos de <strong>el</strong>ectricidad por<br />

<strong>el</strong> cuerpo, la humillación de una lluvia dorada, todas son actividades capaces de<br />

proporcionar placer <strong>sexual</strong> y en algunos casos pueden hasta producir orgasmos no<br />

genitales.<br />

Javier Saez en su ensayo “El macho vulnerable: pornografía y <strong>sadomasoquismo</strong>”,<br />

señala cómo la pornografía ha servido para recortar <strong>el</strong> cuerpo y señalar <strong>el</strong> sexo,<br />

sirviendo para reforzar los parámetros culturales sobre <strong>el</strong> sexo más que cuestionarlos,<br />

mientras da la apariencia de ser radicalmente subversiva.<br />

El SM supone un desafío a los sistemas de producción de <strong>sexual</strong>idad, dado que propone<br />

un desplazamiento radical: se abandona lo genital <strong>como</strong> lugar esencial o principal de la<br />

<strong>sexual</strong>idad, y ésta se ve desplazada a todo <strong>el</strong> cuerpo <strong>como</strong> lugar posible de<br />

experimentación de placer.<br />

[6] Alberto Pinzón León, “¿Foucault contra Sade o Foucault con Sade”. Op. Cit.<br />

[7] Mich<strong>el</strong> Foucault. “Estética, ética y hermenéutica”. Foucault. Obras esenciales. Volumen III. Paidós.<br />

Básica. 1999.<br />

EL SADOMASOQUISMO COMO PRÁCTICA SEXUAL CONSENSUADA.<br />

LA EXPERIENCIA DE LAS LESBIANAS - Por Liliana Gómez Villa. Pag. 64

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