La ordenanza solar térmica. - Agència d'Energia de Barcelona

La energía solar en Barcelona. La ordenanza solar térmica
Este no es un hecho preocupante,
ni significa que las instalaciones no
vayan a realizarse ni entrar en servicio,
tan solo nos dice que el proceso de
implementación se produce en una
cadencia relativamente larga y que la
solicitud de la licencia no es más que el
primer paso para la realización de las
instalaciones previstas. Si hacemos una
estimación media realista, considerando
unos 2 años y medio el tiempo transcurrido
entre la solicitud de licencia y la plena
ocupación del edifico, a fecha de junio de
2006 podemos considerar que todas las
instalaciones que solicitaron licencia
hasta finales de 2003 ya están funcionando
a pleno rendimiento, lo que supone
una instalación real actual de 18.817
m 2 de captadores solares térmicos. Esta
superficie representara un ahorro energético
estimado de 15.053 MWh/año,
que en términos de emisiones de CO2 eq
estimado serían 2.646 T/año y como ahorro
económico 834.000 euros/año.
Viviendas con instalación solar
Este incremento exponencial de las
instalaciones solares térmicas está comportando
que una ciudad como
Barcelona, que el año 2000 tenía una
superficie instalada por cada 1000 habitantes
de 1,1 m 2 , tuviera a finales de junio
de 2006 una ratio en proceso de instalación
de 24,40 m 2 /1000 habitantes y una
superficie real instalada estimada de
12,4 m 2 /1000 habitantes. Como referencia
de la importancia de este efecto y
considerando que un espacio urbano y
de alta densidad como la ciudad de
Barcelona no puede compararse con
ámbitos territoriales más genéricos, tenemos
los datos de 2003 para la globalidad
del territorio catalán ( 5 m 2 /1000 habitantes),
para el Estado español ( 11 m 2 /1000
habitantes) o la media europea (38 m 2
/1000 habitantes).
4.2 Impacto de la ordenanza
en las realizaciones
La falta de experiencia previa y de
precedentes nacionales o internacionales
a esta Ordenanza, comportó que
algunos aspectos planteados por la
misma no fueran los que hoy podríamos
considerar razonables. Todos estos
aspectos han sido corregidos con la revisión
de la Ordenanza de 2006 sobre la
base de la experiencia obtenida a lo largo
de cinco años de aplicación.
La gestión de la Ordenanza
Inicialmente, los tramites añadidos
a toda licencia de obra con la entrada en
vigor de la Ordenanza solar, esencialmente
la revisión y aprobación de los
proyectos de las instalaciones solares y
el cumplimiento de los puntos establecidos
en la Ordenanza, fue asumido por
los servicios técnicos del Área de
Urbanismo del Ayuntamiento dentro de
sus funciones habituales. Este hecho
comportó dificultades de gestión, debido
a la novedad del tema y a la falta de
recursos humanos conocedores de los
aspectos técnicos que la Ordenanza
comporta. Al poco tiempo se decidió traspasar
la responsabilidad de revisión de
estos aspectos al Área de Servicios
Urbanos y Medio Ambiente que disponía
de profesionales capacitados en esta
materia.
Finalmente, con la creación de
l’Agència de l’Energia de Barcelona en
2002, se consideró que la opción más
razonable era traspasar la responsabilidad
de la gestión técnica de la
Ordenanza a la Agencia. Esta decisión
tenía un objetivo más ambicioso, ya que
permitía al Ayuntamiento centralizar
todas las tareas relacionadas con la
Ordenanza, es decir: la asesoría a los
profesionales, la aprobación, la divulgación
y el seguimiento de las instalaciones
una vez en servicio.
Los trámites municipales para
obtención de licencia se hicieron muy largos
y complejos en algunos casos, a
causa de una dinámica poco clara en la
relación entre los servicios municipales,
el promotor y los técnicos redactores del
proyecto ya que no se daba el seguimiento
pertinente a los déficit de contenidos
del proyecto presentado para su
aprobación. La duración de estos trámites
se extendía entre los 20 días y los 6
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