La ordenanza solar térmica. - Agència d'Energia de Barcelona

1 Contexto, precedentes y dinámicas de los actores
1.1 Estructura política
del estado español
El estado español tiene una organización
territorial descentralizada que incide
de una forma importante en la gestión
energética del país dado el protagonismo
y las competencias que corresponden a
cada nivel de la administración.
En este sentido nos encontramos
con tres niveles: Estatal; Autonómico y
Local. Cada una de estas administraciones
tiene competencias legislativas y operativas
de aplicación en su ámbito territorial.
En el caso de la ciudad de
Barcelona, el Ayuntamiento dispone de
una amplia capacidad de reglamentar e
incentivar políticas y acciones en el ámbito
energético, siempre que no entre en
contradicción con legislación de rango
superior, es decir a escala autonómica o
nacional. Por su parte, la Generalitat de
Catalunya (órgano de gobierno de la
comunidad autónoma catalana) también
dispone de capacidad legislativa para
todo el territorio catalán, sin entrar en contradicción
con la reglamentación española.
El equilibrio de estos niveles competenciales
no resulta siempre suficientemente
claro y es causa de frecuentes conflictos.
De hecho, tanto el Ayuntamiento de
Barcelona como la Generalitat de
Catalunya han sido pioneras en la toma
de medidas respecto a temas medioambientales,
energéticos y en general sostenibilistas.
Es por ello que muchas de las
iniciativas desarrolladas no venían condicionadas
por figuras legales de rango
superior y, a medida que estas han ido
surgiendo, han tenido que adaptarse, si
bien hasta hoy no han entrado en contradicción
con los compromisos políticos
locales y autonómicos.
La existencia de un amplio y fuerte
movimiento asociativo ecologista, que
nació en los años setenta en Barcelona y
que ha alcanzado un gran arraigo popular,
ha impulsado a los partidos hacia el compromiso
medioambiental en el que los
temas de producción y eficiencia energética,
y el desarrollo de las energías renovables
adquieren un papel relevante.
1.2 Organismos responsables de
la política energética española
Vista la organización administrativa
del estado español, presentamos este
apartado desde la triple escala territorial
que la gestiona:
Estado español
Las competencias generales sobre
energía del Estado central corresponden al
Ministerio de Industria, Turismo y
Comercio. Dentro de éste, a la Secretaría
General de Energía, y dentro de la misma
a la Dirección General de Política
Energética y Minas. Ésta asume competencias
en elaboración de normas en materia
energética, y propuestas para la conservación
y ahorro de energía, fomento de
energías renovables y desarrollo de nuevas
tecnologías de carácter energético.
Forman también parte del Ministerio
de Industria, Turismo y Comercio la
Corporación de Reservas Estratégicas
(CORES), como órgano de gestión de
productos petrolíferos, la Comisión
Nacional de Energía y el Instituto para la
Diversificación y Ahorro de la Energía
(IDAE) dedicado al fomento de la eficiencia
energética y de las energías renovables.
La consecución de los objetivos que
marcan el Plan de Acción 2005-2007 de la
Estrategia de Ahorro y Eficiencia
Energética para España y el Plan de
Energías Renovables 2005-2010, constituyen
actualmente los dos grandes ejes
que orientan su actividad. Además el
IDAE realiza acciones de difusión, asesoramiento
técnico, desarrollo y financiación
de proyectos de innovación tecnológica.
La ejecución de campañas de formación y
sensibilización que contribuyan a la construcción
de un nuevo modelo energético
que, garantizando la calidad y la seguridad
de suministro, promueva la competitividad
de las empresas españolas, se base
en la sostenibilidad y respeto medioambiental,
constituye, así mismo, un objetivo
estratégico del IDAE.
Otros ministerios tienen competencias
en temas energéticos. El Ministerio
de Educación y Ciencia dispone del
Centro de Investigaciones Energéticas,
Medioambientales y Tecnológicas (CIE-
MAT), dedicado a la investigación y desarrollo
de nuevas tecnologías energéticas,
La energía solar en Barcelona. La ordenanza solar térmica
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