Fenómenos fundamentales de la existencia ... - cristobal holzapfel
Fenómenos fundamentales de la existencia ... - cristobal holzapfel
Fenómenos fundamentales de la existencia ... - cristobal holzapfel
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Eugen Fink<br />
Fenómenos <strong>fundamentales</strong> <strong>de</strong> <strong>la</strong> <strong>existencia</strong> humana /extracto/<br />
<strong>de</strong> <strong>la</strong> conciencia pública o privada que también podría omitirse. Los fenómenos<br />
<strong>fundamentales</strong> <strong>existencia</strong>les no son sólo modos <strong>de</strong> ser <strong>de</strong> <strong>la</strong> <strong>existencia</strong> humana, son<br />
también modos <strong>de</strong> compren<strong>de</strong>r en los que el hombre se compren<strong>de</strong> como mortal,<br />
trabajador, luchador, amante y jugador, y al mismo tiempo busca interpretar a partir <strong>de</strong><br />
tales horizontes <strong>de</strong> sentido el ser <strong>de</strong> todas <strong>la</strong>s cosas.<br />
¿Qué es, pues, lo característico <strong>de</strong> <strong>la</strong> interpretación cotidiana <strong>de</strong>l juego humano<br />
No otra cosa que el intento <strong>de</strong> reprimir el juego <strong>de</strong>l núcleo esencial <strong>de</strong> <strong>la</strong> <strong>existencia</strong>, <strong>de</strong><br />
<strong>de</strong>s-esencializarlo, <strong>de</strong> concebirlo como un “epifenómeno” <strong>de</strong> nuestra vida, <strong>de</strong> quitarle el<br />
peso <strong>de</strong> una genuina significatividad vital. Si bien se observa lo frecuente <strong>de</strong>l juego, el<br />
gran interés <strong>de</strong> los hombres en él, <strong>la</strong> intensidad con que se lo práctica, el aprecio<br />
ascen<strong>de</strong>nte <strong>de</strong>l juego en conexión con el creciente tiempo libre en una sociedad<br />
tecnificada, no obstante se contemp<strong>la</strong>, en general, el juego ante todo como “recreo”,<br />
como “distensión”, como tiempo <strong>de</strong> esparcimiento y ociosidad alegre, como <strong>la</strong> “pausa”<br />
benefactora que interrumpe el día <strong>la</strong>boral o que es <strong>la</strong> ocupación <strong>de</strong>l día feriado.<br />
Doquiera que interprete el juego a partir <strong>de</strong> una contraposición con el trabajo o, en<br />
general, con <strong>la</strong> realización seria <strong>de</strong> <strong>la</strong> vida, estamos ante <strong>la</strong> concepción <strong>de</strong>l juego más<br />
superficial, que sin embargo domina en <strong>la</strong> cotidianidad. El juego vale, entonces, sólo<br />
como un fenómeno complementario – vale como lo no-serio, no-comprometido, lo<br />
arbitrario-antojadizo. Aunque se quiera conce<strong>de</strong>r que tiene un po<strong>de</strong>r sobre los hombres<br />
y ejerce un estímulo atrayente, sin embargo, no es concebido en su positividad propia, a<br />
saber, es mal interpretado sólo como un juego intermedio, como pausa, como relleno<br />
<strong>de</strong>l tiempo libre entre <strong>la</strong>s activida<strong>de</strong>s vitales serias. Sobre todo para <strong>la</strong> vida <strong>de</strong> los<br />
adultos se tiene a disposición, en <strong>la</strong> cotidianidad, una concepción <strong>de</strong>l juego que lo<br />
bagateliza. Se juega – pero precisamente sólo a medias, en broma, como entretención,<br />
como esparcimiento, como <strong>de</strong>sacop<strong>la</strong>miento provisorio <strong>de</strong> <strong>la</strong> servidumbre <strong>la</strong>boral,<br />
incluso quizá con una finalidad terapéutica – para re<strong>la</strong>jarse, regenerarse, sustraerse <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />
pesada seriedad <strong>de</strong> <strong>la</strong> vida; se hace uso <strong>de</strong>l juego como <strong>de</strong>l sueño. La realidad <strong>de</strong> <strong>la</strong> vida<br />
adulta, dícese, son <strong>la</strong>s <strong>de</strong>cisiones, <strong>la</strong>s <strong>de</strong>cisiones morales, políticas, el esfuerzo <strong>de</strong>l<br />
trabajo, <strong>la</strong> dureza <strong>de</strong> <strong>la</strong> lucha, <strong>la</strong> responsabilidad <strong>de</strong> sí y por los suyos; sólo al niño le<br />
sería permitido todavía vivir en el juego, pasar <strong>la</strong>s horas en alegre <strong>de</strong>spreocupación,<br />
per<strong>de</strong>r el tiempo. La felicidad <strong>de</strong> <strong>la</strong> niñez, su alegría <strong>de</strong> jugar sería breve, sería una<br />
época <strong>de</strong> nuestro tiempo vital en que tenemos tiempo, porque aún no sabemos nada <strong>de</strong>l<br />
tiempo, todavía no vemos en el ahora lo pasado, el ya-no y el aún-no, [sería una época]<br />
222