Fenómenos fundamentales de la existencia ... - cristobal holzapfel
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Eugen Fink Fenómenos fundamentales de la existencia humana /extracto/ 15. Interpretación de lo ente según el modelo de la techne: el mundo técnico moderno y el concepto del trabajo La constitución esencial del trabajo humano está caracterizada por la contratensión de sus fundamentales motivos estáticos y dinámicos, por la polaridad del vuelco necesario de necesidades “naturales” y la acción histórica de la libertad. En la diferencia entre la comprensión antigua y moderna del trabajo se expresa asimismo esta oposición; es la diferencia de techne y técnica; la techne sirve a la satisfacción de necesidades vitales elementales, irremplazables del hombre; en tales necesidades él es dependiente de la naturaleza, es en cierto modo su “esclavo”, le es tributario; no puede alcanzar una plena autarquía contra la naturaleza – pero el hombre antiguo anhela la autarkeia –, la realiza en cierto modo en tanto divide a los hombres: la servidumbre del trabajo la deja para el esclavo o para los estamentos inferiores, banáusicos; el ser humano verdadero, propio, es transpuesto en vida a las ocupaciones estatales, a la arete o a la theoria. Pero esta desviación del trabajo no ha impedido que la interpretación filosófica de lo ente como tal y del cosmos se orientara ampliamente según el modelo de la techne, al menos a la altura de la metafísica griega clásica – y así, al mismo tiempo, haya dado testimonio contra su voluntad del poder existencial del trabajo humano. En la modernidad, con la caída del ordenamiento feudal tradicional y de la interpretación del mundo supranatural, el trabajo se desplaza cada vez con más fuerza al centro vital del hombre y alcanza, en el mundo moderno, técnico, una posición de privilegio tal, que los problemas-de-laexistencia [Existenz] se presentan como problemas-del-trabajo, pareciendo representarse la imagen del hombre en la “figura del trabajador”. El traspasar del trabajo más allá del mero cubrir las necesidades vitales, la potencia del trabajo como manifestación del poder de la libertad y de la fuerza creadora humana, el peligro del trabajo como pérdida de sí del hombre en sus construcciones – todo ello ha traído a superficie nuevos, oprimentes y urgentes problemas, conflictos, tensiones históricomundiales. La discusión sobre la naturaleza del trabajo es hoy conducida con pasión enconada y con el fervor de una guerra religiosa, y separa a la humanidad en dos asentamientos de un ejército. En el tumulto de esta disputa las chances de que, sin partidismo prejuicioso, se desarrolle reflexivamente el concepto de trabajo no son muy elevadas. Al mismo tiempo, es necesario esforzarse por ello. Con miras a la antigua techne se había destacado como momentos esenciales del trabajo: la relación con una materia natural, que permite desde sí una trasformación por 152
Eugen Fink Fenómenos fundamentales de la existencia humana /extracto/ parte del hombre – que es apropiada como materia laboral, utilizable como “material”; luego la relación con la idea, no con aquella que subyace como modelo a todas las cosas naturales, sino con respecto a una que no ha encontrado una realización en la naturaleza, que recién a partir de la obra laboral humana es traída a una realización terrenal; aquí se levanta el difícil problema de si el espacio de juego de la libre “invención” humana, si el campo de las “ocurrencias” creadoras está de antemano delimitado por las ideas, o de si el hombre puede inventar algo que no subsista alguna vez a-priori en el reino de las ideas (este problema alcanza su agudeza en el tránsito de la techne a la técnica); y además es significativo en la tecnhe antiguamente comprendida, que ella no es simplemente una destreza, una capacidad ejercitada, sino una capacidad sapiente, un conocimiento práctico; y finalmente juega un gran rol la conexión de techne y phos, de producción y luminosidad; la productora elaboración es la terminación de un ente por parte de un hombre; él es abandonado en su ser-terminal, como obra es absuelto del obrero y, sobre todo, es puesto a la luz; techne es un modo del productor dejar aparecer las cosas; el hombre como técnico dispone de la extraña capacidad del dejar aparecer – está, como desde la lejanía, emparentado con la naturaleza, con la physis, aunque le esté sometido, en tanto su dejar aparecer está atado a la materia natural que ya ha aparecido anteriormente y está en dependencia de la mirada previa creadora dirigida a la idea. En la construcción más simple de la antigua techne pueden concebirse más fácilmente aspectos fundamentales del trabajo humano que en la configuración estructural compleja del aparataje laboral moderno. Esto vale también para una diferencia interna más amplia que pertenece a la descollante esencia escindida del trabajo humano. A éste debemos ahora intentar fijarlo. Decíamos que, en el trabajo, el hombre deforma las cosas naturales dadas; él no las deja tal como son desde sí, las transforma, modifica la naturaleza, va en contra de lo salvaje. En una naturaleza salvaje el hombre tiene sólo escasas posibilidades de vida – puede vivir de frutos comestibles, de fresas, setas, raíces y demás, que recolecta. Pero recolección, economía de provisiones, ya es una forma primitiva de trabajo. Recién cuando el hombre se agencia de aparatos de cacería, flecha y arco, redes, trampas, fosas, puede matar animales salvajes en la caza, alimentarse mejor, puede también capturar animales que viven en forma salvaje, mantenerlos en manadas, domesticarlos y criarlos. La cultura de recolección, de cacería, de pastoreo, es una forma primitiva, que está ligada al modo de vida sinuoso, nómade. Con el asentamiento comienza el cultivo – y con ello una fase más intensa de la lucha humana con lo salvaje. De un modo más 153
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Fenómenos <strong>fundamentales</strong> <strong>de</strong> <strong>la</strong> <strong>existencia</strong> humana /extracto/<br />
parte <strong>de</strong>l hombre – que es apropiada como materia <strong>la</strong>boral, utilizable como “material”;<br />
luego <strong>la</strong> re<strong>la</strong>ción con <strong>la</strong> i<strong>de</strong>a, no con aquel<strong>la</strong> que subyace como mo<strong>de</strong>lo a todas <strong>la</strong>s cosas<br />
naturales, sino con respecto a una que no ha encontrado una realización en <strong>la</strong> naturaleza,<br />
que recién a partir <strong>de</strong> <strong>la</strong> obra <strong>la</strong>boral humana es traída a una realización terrenal; aquí se<br />
levanta el difícil problema <strong>de</strong> si el espacio <strong>de</strong> juego <strong>de</strong> <strong>la</strong> libre “invención” humana, si el<br />
campo <strong>de</strong> <strong>la</strong>s “ocurrencias” creadoras está <strong>de</strong> antemano <strong>de</strong>limitado por <strong>la</strong>s i<strong>de</strong>as, o <strong>de</strong> si<br />
el hombre pue<strong>de</strong> inventar algo que no subsista alguna vez a-priori en el reino <strong>de</strong> <strong>la</strong>s<br />
i<strong>de</strong>as (este problema alcanza su agu<strong>de</strong>za en el tránsito <strong>de</strong> <strong>la</strong> techne a <strong>la</strong> técnica); y<br />
a<strong>de</strong>más es significativo en <strong>la</strong> tecnhe antiguamente comprendida, que el<strong>la</strong> no es<br />
simplemente una <strong>de</strong>streza, una capacidad ejercitada, sino una capacidad sapiente, un<br />
conocimiento práctico; y finalmente juega un gran rol <strong>la</strong> conexión <strong>de</strong> techne y phos, <strong>de</strong><br />
producción y luminosidad; <strong>la</strong> productora e<strong>la</strong>boración es <strong>la</strong> terminación <strong>de</strong> un ente por<br />
parte <strong>de</strong> un hombre; él es abandonado en su ser-terminal, como obra es absuelto <strong>de</strong>l<br />
obrero y, sobre todo, es puesto a <strong>la</strong> luz; techne es un modo <strong>de</strong>l productor <strong>de</strong>jar aparecer<br />
<strong>la</strong>s cosas; el hombre como técnico dispone <strong>de</strong> <strong>la</strong> extraña capacidad <strong>de</strong>l <strong>de</strong>jar aparecer –<br />
está, como <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>la</strong> lejanía, emparentado con <strong>la</strong> naturaleza, con <strong>la</strong> physis, aunque le esté<br />
sometido, en tanto su <strong>de</strong>jar aparecer está atado a <strong>la</strong> materia natural que ya ha aparecido<br />
anteriormente y está en <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> <strong>la</strong> mirada previa creadora dirigida a <strong>la</strong> i<strong>de</strong>a. En<br />
<strong>la</strong> construcción más simple <strong>de</strong> <strong>la</strong> antigua techne pue<strong>de</strong>n concebirse más fácilmente<br />
aspectos <strong>fundamentales</strong> <strong>de</strong>l trabajo humano que en <strong>la</strong> configuración estructural<br />
compleja <strong>de</strong>l aparataje <strong>la</strong>boral mo<strong>de</strong>rno.<br />
Esto vale también para una diferencia interna más amplia que pertenece a <strong>la</strong><br />
<strong>de</strong>scol<strong>la</strong>nte esencia escindida <strong>de</strong>l trabajo humano. A éste <strong>de</strong>bemos ahora intentar fijarlo.<br />
Decíamos que, en el trabajo, el hombre <strong>de</strong>forma <strong>la</strong>s cosas naturales dadas; él no <strong>la</strong>s <strong>de</strong>ja<br />
tal como son <strong>de</strong>s<strong>de</strong> sí, <strong>la</strong>s transforma, modifica <strong>la</strong> naturaleza, va en contra <strong>de</strong> lo salvaje.<br />
En una naturaleza salvaje el hombre tiene sólo escasas posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> vida – pue<strong>de</strong><br />
vivir <strong>de</strong> frutos comestibles, <strong>de</strong> fresas, setas, raíces y <strong>de</strong>más, que recolecta. Pero<br />
recolección, economía <strong>de</strong> provisiones, ya es una forma primitiva <strong>de</strong> trabajo. Recién<br />
cuando el hombre se agencia <strong>de</strong> aparatos <strong>de</strong> cacería, flecha y arco, re<strong>de</strong>s, trampas, fosas,<br />
pue<strong>de</strong> matar animales salvajes en <strong>la</strong> caza, alimentarse mejor, pue<strong>de</strong> también capturar<br />
animales que viven en forma salvaje, mantenerlos en manadas, domesticarlos y criarlos.<br />
La cultura <strong>de</strong> recolección, <strong>de</strong> cacería, <strong>de</strong> pastoreo, es una forma primitiva, que está<br />
ligada al modo <strong>de</strong> vida sinuoso, nóma<strong>de</strong>. Con el asentamiento comienza el cultivo – y<br />
con ello una fase más intensa <strong>de</strong> <strong>la</strong> lucha humana con lo salvaje. De un modo más<br />
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