Asepeyo - Aguas y Servicios

entrada en vigor del nuevo Real Decreto-ley, el 18 de junio de
2010, es aplicable el citado párrafo primero, considerándose
derogados los apartados “f”, “g” y “h” del artículo 8 del Real
Decreto 216/1999, 5 febrero, sobre disposiciones mínimas de
seguridad y salud en el trabajo en el ámbito de las empresas
de trabajo temporal.
A continuación, el legislador vuelve a incidir en la errónea
interpretación expansiva que venimos criticando a partir de
una también errónea terminología para referirse a los trabajos
y que en la actualidad carece de base legal: nos referimos a la
expresión “actividades”. Hasta la fecha, el Real Decreto
216/1999 determinaba prohibiciones en determinados
sectores en su conjunto (trabajos en plataformas marinas),
en algunas actividades de determinados sectores (actividades
en obras de construcción a los que se refiere el Anexo II del
Real Decreto 1627/1997) o simplemente en trabajos con
exposición a determinados agentes y factores de riesgo
(agentes biológicos de los grupos 3 y 4, etc.). Todo lo que no
estaba incluido en esas actividades (algunos trabajos no
considerados peligrosos por la propia normativa específica de
este sector de la construcción, al no estar incluidos en el
citado Anexo II) podría ser objeto de un Contrato de Puesta a
Disposición.
Con la nueva redacción parece entenderse (”respetando las
limitaciones que, en su caso, hubieran podido establecerse
mediante la negociación colectiva conforme a lo señalado en
el apartado anterior”) que incluso aquellos trabajos antes no
prohibidos pero que estén dentro de las actividades –sectores
debería decir, ya que son del párrafo segundo de la D.A. 2ªexigen
a la ETT los requisitos (apartados “a” y “b” del párrafo
tercero) que ex novo se demandarán de estas Empresas de
Trabajo Temporal. Todo ello sin perjuicio –como no podría
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