Crisis, Juegos Olímpicos de - Atrapalo.com

2º PREMIO
‘MEJOR BLOG’
No iba a ser
sólo un año más
http://ciudadcolmena.blogspot.com/2008/11/1-ao-en-1-post.html
Mientras escuchaba la última campanada masticando la uva que daba comienzo al 2008, una
punzada me hizo sentir que ese no iba a ser sólo un año más.La alegría dio paso a una extraña
incertidumbre.
Al otro lado del globo, el planeta avisaba con la erupción del volcán Llaima.
El año comenzó con buenas
expectativas, aunque poco
dinero y la desafortunada
decisión de abandonar un
trabajo mal pagado para buscar
algo mejor. Lo hice, y el IBEX
se rió de mí con una
estruendosa caída que nos hizo
temblar. Aunque mi optimismo
y yo seguíamos intactos.
Elecciones en el Imperio; el
comunismo se tambalea; y
mientras, España llora otro
asesinato de ETA, condenado
dos días después con una
lección de democracia. El
planeta sigue quejándose con
una nueva erupción en Chile;
ciclones y terremotos que
asolan países lejanos; y jefes,
'ERE' que ERRE, deseando
suerte desde su despacho.
Tremendistas auguran el fin del
mundo provocado por un tal
LHC. Pero para 154 españoles
y sus familiares ya no tiene
importancia, acaban de
estrellarse sus vidas y sus
ilusiones en la pista de
despegue del aeropuerto. Lo
mismo les ocurre a 88 almas
en Rusia.
Millones de personas dejan de
pensar en el sexo por un
momento para ver por la tele
al nuevo presidente de EEUU.
Y el mundo no se acaba, pero
el dinero sí; crece el paro;
disminuyen las posibilidades
de encontrar un empleo
decente; y con ellas, mis
esperanzas. No obstante, tengo
un cajón lleno de buenos
momentos de los que echar
mano.
¿Te gusta la navidad? Siempre
respondo que no, como todos,
aunque creo que en cierto modo
mentimos.
Mientras se me rompe el
corazón y me invade la tristeza
al perder la mitad de mí, mi
musa, pienso con amargura en
lo poco que hace falta para que
todo se torne de un color
oscuro, y deseo que este aciago
año acabe cuanto antes, para
ver si la nueva luz del próximo
me hace sentir de nuevo que
estoy vivo, porque al fin y al
cabo, aún me queda la vida y
la esperanza de que las cosas,
con un poco de ilusión, igual
que bajan, vuelven a subir.