17.01.2015 Views

Fuerzas profundas e identidad. Reflexiones en torno a su impacto ...

Fuerzas profundas e identidad. Reflexiones en torno a su impacto ...

Fuerzas profundas e identidad. Reflexiones en torno a su impacto ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

152<br />

permanec<strong>en</strong> <strong>en</strong> carteras como el Ministerio de Finanzas y el Ministerio de Desarrollo<br />

Económico y Comercio. Otro de las políticas c<strong>en</strong>trales de la administración se c<strong>en</strong>tra <strong>en</strong><br />

una cauta política <strong>en</strong> el fr<strong>en</strong>te financiero internacional. Rusia paga puntualm<strong>en</strong>te los<br />

servicios de la deuda, no ha tomado nuevos préstamos desde el default de 1998 y está<br />

trabajando <strong>en</strong> un programa de reducción de <strong>su</strong> deuda. Un crecimi<strong>en</strong>to sost<strong>en</strong>ido se da <strong>en</strong><br />

los años posteriores a la crisis de 1998 <strong>en</strong> parte gracias a los precios del petróleo. Por<br />

último <strong>en</strong> el ámbito comercial, el país apuesta a una mayor integración con el mundo,<br />

dado que vi<strong>en</strong>e negociando <strong>su</strong> ingreso a la Organización Mundial del Comercio.<br />

II. El nacionalismo y los nacionalismos rusos<br />

Si tomamos el concepto g<strong>en</strong>érico, se <strong>en</strong>ti<strong>en</strong>de por nacionalismo a “un<br />

movimi<strong>en</strong>to ideológico cuyo objetivo manifiesto es lograr y mant<strong>en</strong>er el autogobierno y<br />

la indep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia, <strong>en</strong> favor de un grupo <strong>en</strong> <strong>su</strong> conjunto, como constituy<strong>en</strong>do real o<br />

pot<strong>en</strong>cialm<strong>en</strong>te, una nación como las demás” (Smith, 1976: 13). En este concepto cabe<br />

destacar dos elem<strong>en</strong>tos c<strong>en</strong>trales, el primero es la indisp<strong>en</strong>sable ligazón que lo vincula –<br />

como todo movimi<strong>en</strong>to político– al Estado <strong>en</strong> tanto éste es visto como el medio óptimo<br />

e imprescindible para viabilizar esos ideales. “La única forma práctica de salvaguardar<br />

la individualidad de la nación es mediante el uso del poder y de la política planificada,<br />

cuyo único instrum<strong>en</strong>to, bajo las condiciones modernas, es el Estado” (Smith, 1976:<br />

251). Ya sea a fines de concretar, fortalecer o conservar la autorrealización de la nación<br />

política el Estado se convierte <strong>en</strong> condición sine qua non.<br />

El segundo elem<strong>en</strong>to se refiere al rol de los intelectuales <strong>en</strong> tanto constructores<br />

de la comunidad imaginada. Ellos pued<strong>en</strong> ejercer tanto la función de ideólogos, <strong>en</strong> el<br />

s<strong>en</strong>tido de vincular, definir o precisar aspiraciones inorgánicas o no explicitadas<br />

abiertam<strong>en</strong>te, como también aportar el fortalecimi<strong>en</strong>to o definición de la comunidad<br />

imaginada a través de estudios históricos, literarios, lingüísticos, etc.<br />

Por otra parte es conv<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te precisar que si bi<strong>en</strong> se parte de la difer<strong>en</strong>ciación<br />

<strong>en</strong>tre dirig<strong>en</strong>tes y dirigidos, este último grupo ti<strong>en</strong>e a mi criterio un rol bastante más<br />

activo que el que parece asignarle Smith. El primero <strong>su</strong>st<strong>en</strong>ta <strong>su</strong> ideología y política<br />

nacionalista de forma pl<strong>en</strong>a, lo que se manifiesta <strong>en</strong> el diseño de una estrategia tanto<br />

para el logro de <strong>su</strong>s objetivos políticos como para la obt<strong>en</strong>ción de apoyo del segundo<br />

grupo. En esta conceptualización de nacionalismo se haya implícita la dominación<br />

política, económica, cultural o global, abierta o <strong>su</strong>til de un otro difer<strong>en</strong>te, que puede ser<br />

tanto otra nación, como un sistema político 17 .<br />

La difícil cuestión que se plantea al nacionalismo ruso es que, a difer<strong>en</strong>cia de<br />

nacionalismos de las otras repúblicas pos-soviéticas, no puede claram<strong>en</strong>te mostrar a<br />

Rusia como la víctima. El caso ruso requiere un análisis particular debido a la posición<br />

c<strong>en</strong>tral que esta nación ocupó <strong>en</strong> la estructura del estado soviético. Por <strong>su</strong> relevancia –<br />

poder pot<strong>en</strong>cial, que se mide <strong>en</strong> términos de ext<strong>en</strong>sión territorial, recursos naturales,<br />

importancia demográfica y también por el protagonismo de parte de <strong>su</strong> población <strong>en</strong> la<br />

revolución de 1917– fue la nación sobre la cual el gobierno bolchevique, especialm<strong>en</strong>te<br />

17 El sistema soviético int<strong>en</strong>tó crear una nacionalidad soviética la que aparece como un logro <strong>en</strong> la Constitución de<br />

1997 a través de la m<strong>en</strong>ción al pueblo soviético. Es un tema de interesante reflexión <strong>en</strong> que medida la población de la<br />

URSS se id<strong>en</strong>tificaba como soviética y si esta id<strong>en</strong>tificación no era más natural <strong>en</strong>tre los rusos que <strong>en</strong> las demás<br />

nacionalidades.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!