1 LOS TESTIGOS DE JEHOVÃ: UNA HISTORIA DE FE VIVA Parte 1
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Además, algunas iglesias enseñaban que Cristo regresaría en la carne y que la Tierra sería destruida, pero este grupito<br />
comprendió que Cristo regresaría de manera invisible –en el espíritu– para bendecir a los seres humanos obedientes a<br />
Dios.<br />
Así que no trataban de filosofar, de hacer simples conjeturas, sino que estaban concentrados en hallar la verdad. Y el<br />
hecho de que pusieran por escrito sus conclusiones demuestra que creían que la verdad sí se podía hallar. Solo vemos<br />
luz cuando Jehová desea revelar la luz. Y ese fue el momento en que él comenzó a guiar a su pueblo desde la oscuridad<br />
hasta la luz maravillosa.<br />
<strong>UNA</strong> ALIANZA INCÓMODA<br />
Charles Russell nunca afirmó que estuviera inspirado por Dios. Reconoció la ayuda que había recibido de Jonas Wendell,<br />
de George Storrs y de otro hombre que también fue el causante de una de sus mayores pruebas de fe: Nelson Barbour,<br />
director de la revista El heraldo de la mañana. En un viaje de negocios, Russell obtuvo un ejemplar de esa revista y<br />
quedó sorprendido por lo que leyó. Al igual que Russell, Barbour sostenía que la vuelta de Cristo sería invisible.<br />
Russell concertó una cita con Barbour. El grupo de estudio bíblico de Russell, de unas 30 personas, pronto se unió al de<br />
Barbour, que era más grande. Russell donó fondos para imprimir la revista Herald of the Morning. Para esa época,<br />
Russell comenzó a vender sus negocios para dedicarse de lleno a la predicación. Estaba convencido de que la presencia<br />
del Señor era lo más importante. A la edad de 25 años, fue de ciudad en ciudad para hablar en diversas reuniones<br />
públicas, en las calles y en iglesias protestantes y a sus clérigos.<br />
Él no quería fundar otra iglesia, pues creía que ya había muchas confesiones. Más bien, presentaba a los clérigos<br />
enseñanzas bíblicas importantes y los instaba a estudiarlas con la Biblia y predicar ese mensaje desde el púlpito. Pero<br />
ellos se reían de él y seguían como siempre. Así que se dijo: “Alguien tiene que predicar esto”. Y dedicaba a esa labor su<br />
tiempo y energías.<br />
Uno podría pensar que siendo rico podría haber apoyado a algún otro, que podría haber tomado el camino fácil y<br />
haberle pagado a alguien que hiciera el trabajo. Pero se dedicó por entero a la obra y hasta vendió su negocio. Vemos<br />
claramente la pasión, el amor que sentía por la verdad.<br />
A los dos años de estar colaborando con Nelson Barbour, surgió una disputa que pondría a prueba la lealtad de cada<br />
miembro del grupo de estudio bíblico. Barbour había escrito un artículo en el Herald negando que la muerte de Cristo<br />
sirviera de rescate para los pecadores. Aunque decía creer en el rescate, Barbour escribió que la idea de que la muerte<br />
de Cristo paga los pecados de la humanidad era “antibíblica y contraria a todo sentido de la justicia”.<br />
Russell, su joven codirector, no concordó con eso. En las páginas del Herald, Russell defendió con ardor esta verdad<br />
bíblica: “Aunque me resulta desagradable, tengo que objetar a un artículo de mi hermano sobre este tema. No lo hago<br />
con ánimo de disputa, sino porque creo que la doctrina que él rechaza en ese artículo es una de las más importantes de<br />
la palabra de Dios. Jesucristo, por la gracia de Dios, murió por todos los hombres.” En el Herald, Barbour replicó: “Esa<br />
doctrina teológica es falsa, y esa justicia es una abominación del principio del bien y el mal.”<br />
Consternado por la negativa de Barbour a aceptar esta enseñanza bíblica, Russell le pidió en privado que dimitiera o que<br />
vendiera su parte de la revista. “Aunque lo sigo considerando un hermano en Cristo, los puntos en que diferimos me<br />
parecen tan fundamentales e importantes que la plena colaboración ya no puede existir entre nosotros. Creo que<br />
nuestra relación debe cesar.”<br />
Tras meses de disputas, el grupo de Russell se separó del de Barbour. Y, con el tiempo, Russell cortó todos sus vínculos<br />
con la revista Herald of the Morning.<br />
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<strong>LOS</strong> <strong>TESTIGOS</strong> <strong>DE</strong> JEHOVÁ: <strong>UNA</strong> <strong>HISTORIA</strong> <strong>DE</strong> <strong>FE</strong> <strong>VIVA</strong> <strong>Parte</strong> 1: Salen de la oscuridad